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Una pequeña crítica anarquista sobre las redes sociales en el anarquismo. Sobre ¨Pantube” y similares
30 nov 2023

Una pequeña crítica anarquista sobre las redes sociales en el anarquismo. Sobre ¨Pantube” y similares
“La violencia no consiste tanto en herir y aniquilar como en interrumpir la continuidad de las personas, en hacerles desempeñar papeles en los que ya no se encuentran, en hacerles traicionar, no sólo compromisos, sino su propia sustancia” Emmanuel Levinas, Totalidad e infinito, 1961.
El mundo virtual como forma de “salvación”a la esclerosis que la lucha muestra en el real
Percibimos el presente como una carencia, como que siempre nos falta algo, la velocidad a la que somos obligados a estar y sentir el mundo nos hace estar sumidos en una continua desorientación, que junto a los inestables y cambiantes tiempos en lo que nos encontramos, en esta Gran Transformación, nos hace igualmente estar confundidos, desanimados y perdidos. La falta de referentes y el olvido de luchas pasadas contribuyen a la desazón. La acción anarquica no solamente se ha debilitado por unas condiciones de vida cada vez más duras, el ciudadanismo o la introducción de ciertas corrientes del liberalismo cultural en su seno, sino también por la introducción de las tecnologías digitales en la lucha anarquista que han llevado por un lado a abandonar la calle, a mitificar las luchas virtuales y especialmente a la destrucción de una comunidad y la formación de lazos reales y afines que hagan posible la revuelta, unas redes sociales que nos inducen a replegarnos sobre nosotros mismos tanto física como mentalmente y a percibir que estamos luchando mientras aporreamos sin cesar el teclado, damos a like a videos de ´riot porn´, aislados frente a la pantalla, sin otra percepción del mundo que no sea la virtual. Unas redes sociales donde sólo importan los cálculos racionales y somos reducidos a números, a seres sin cualidades. Reducidos igualmente a simples espectadores de un mundo que se nos escapa a través de la pantalla.
Es necesario comprender lo que significa internet en el aspecto de la lucha revolucionaria. No nos centraremos aquí en las múltiples nocividades que crea en cuerpos y mentes, algo que obviamnente también afecta en la lucha anarquista.
Algunos parecen encontrar una especie de válvula de escape a toda esta desorientación en el mundo virtual, sin comprender que aquello que conforma este mundo: internet, redes sociales etc.. es una herramienta creada por someternos y domesticarnos. El pretendido uso “no neutral”, “revolucionario”, “consciente” que pretenden darle algunos no hace más que perpetuar la dominación, consiguiendo la continuación de la catástrofe en curso. Internet es una herramienta liberticida y ecocida.
Algunos ante la situación de falta de luchas reales (por lo menos en la península Iberia) o la desilusión por luchas pasadas buscan consuelo en el mundo virtual, que les lleva al desahogo verbal en las llamada “redes sociales” o al pataleo infanti en “grupos” de mensajería instantánea, prácticas que sólo se basan en un espontanéismo de palabras solitarias, que no sirven para nada y que generan ganancias gigantescas a una industria dotada de gran habilidad para ofrecernos instrumentos que nos permiten expresar nuestra rabia, obviamente de forma estéril, y que actúan como válvulas de escape catárticas.



Internet moldea nuestros cuerpos y mentes, uno de sus objetivos es evitar que podamos gozar de las condiciones necesarias para propiciar de la revuelta, la insurrección y la destrucción de lo existente en su lugar nos propone la atomización y la servidumbre tecnológica, dando lugar a movimientos mecánicamente planificados y estableciendo códigos estandarizados de expresión y conducta, todo según sus racionales cálculos. Resulta esencial para borrar nuestros cuerpos sustituidos por avatares (transformados aquí en quien nosotros queramos ser),y para negar el tiempo y el espacio necesarios para formarnos como individuos y colectivamente.

Aún así hay quienes se dicen querer transformar el mundo o se llaman “revolucionarios” valiéndose del aparato que garantiza la sumisión a las normas y a todo aquello que viene impuesto por quienes ocupan el poder.
En la presentación de la plataforma ´Pantube´ se definen como un medio ´ecologista´, palabra por otro lado que ha perdido todo el sentido político que tuvo durante la segunda mitad del siglo pasado, ¿de verdad? Pretenden ser ecologistas usando una plataforma que es material ( se habrán creido el cuento de la ´nube´, de que es una red inmaterial como si fuese un fantasma). Una red cuyas infraestructuras devastan la tierra a una enorme velocidad, la necesidad del extractivismo para los minerales necesario para construir los aparatos inteligentes, la ingente cantidad de energía que consume internet (cada vez más), la devastación de zonas donde perduran formas de vida comunitarias, pre industriales, la necesidad de una división del trabajo y jerarquías hacen de internet un proyecto capitalista, liberticida y ecocida, aquellos que pretenden darle un uso revolucionario tienen un cadáver en la boca.
Cuando todos los lazos reales han sido destruidos por las relaciones capitalistas, cuando toda comunidad real ha sido igualmente destruida por los modos de vida capitalista, el mismo capitalismo nos lleva a otra comunidad y a otros lazos esta vez en el mundo virtual. Es una de la lógicas del capitalismo destruirlo todo para luego ofrecértelo en formato mercancía.
Vemos como algunos intentan darle un sentido ´etico´a estas plataformas y comunidades virtuales. Como por ejemplo ´´tinder ético, no alcanzamos a comprender como transformar las relaciones en mercancías y convertir en objetos a las personas pude ser ´etico´ sólo es posible en esta sociedad sin valores y mediada tecnológicamente.

Nos lo quieren vender como algo no neutro . Vendiendonos el concepto de información capitalista, aquel que queda reducido a su mundo racional y de números, porque haciendo desaparecer nuestros cuerpos y el mundo real hacen desparecer formas de conocimiento reales, no mediadas. Entendemos que la formación del conocimiento no es el resultado de una multiplicidad de fuentes de información, sino de una dimensión reflexiva y crítica todo lo contrario que el mundo que propicia intenet: superficial, efímero, mediado etc…Un conocimiento donde el otro no sea abolido, donde formar lazos de afinidad, confrontar, discutir, conocernos siempre cara a cara.
Nosotros no queremos competir en Internet, con la extrema derecha, no queremos tener mejores resultados, “ser más” que los nazis en las redes sociales. Queremos que desaparezcan los nazis y las redes sociales. En nuestras manos está ser un movimiento revolucionario serio, reflexivo y crítico, alejado de cualquier forma de mediación.
Salir de la dominación tecno capitalista, por una lucha que destruya lo existente “sin una banca ética”, ni unas “redes sociales éticas”, no queremos ninguna mercancía que modele nuestra vida . Por la abolición del trabajo asalariado. Por la destrucción de la sociedad tecnologica Por la anarquía.
CHIMPANCES DEL FUTURO, MADRIP, Noviembre 2023

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Comentaris

Re: Una pequeña crítica anarquista sobre las redes sociales en el anarquismo. Sobre ¨Pantube” y similares
01 des 2023
Todo es verdad lo que dicen los chimpances.
Aún así estamos en internet...
Donde está esa salida de la dominación capitalista en la práctica? Porque ese comunicado no se está moviendo únicamente de forma empresa?
Parecen chimpances de la inteligencia artificial jejeje!
Re: Una pequeña crítica anarquista sobre las redes sociales en el anarquismo. Sobre ¨Pantube” y similares
04 des 2023
una respuesta muy elaborada lobo, una crítica muy graciosa y ese jejej final muy maduro!

supongo que si estas contra el trabajo pero trabajas todo bien

supongo que si estas contra el consumo y consumes todo bien

pero ay!! si estas contra la tecnologia y la usas la moral anarquista caerá como un rayo contra tu espalda
Re: Una pequeña crítica anarquista sobre las redes sociales en el anarquismo. Sobre ¨Pantube” y similares
06 des 2023
Los chimpances nos acercan otro de sus grandes lúcidos disparates. El primero que leí, fue algo así como que "el fascismo no era el problema". Ya hemos visto cuánta razón tenían. El fascismo son policía, jueces, fiscales, políticos, empresarios, familias oligárquicas..., es el mismo sistema de jerarquías, democrático, capitalista y patriarcal, pero para los chimpances nada de eso forma parte del "problema", será porque como son "del futuro", en él, el fascismo ha sido erradicado o está tan naturalmente omnipresente que ni se percibe, algo así como cuando se niega el patriarcado que nos mata.

En nuestras vidas, soportamos terribles contradicciones. Algunas conseguimos superarlas y otras nos siguen y seguirán esclavizando de por vida. Internet es un mal tan tremendo, como cualquier otro de este modelo de capitalismo agotador de recursos naturales. Plantearse la revolución a través de internet, puede ser ingenuo, pero es un medio de comunicación, no peor como cualquier otro (móvil, correo, asamblea...) Además es muy paradójico porque estos chimpances tienen la lucidez de reconocer, lo que hace años algunxs veníamos insistentemente denunciando en cuanto a la destrucción de la comunidad. Tal vez ahora se pueda ver mucho más nítidamente, pero no es internet quien la destruye, sino el individualismo de este capitalismo que, quien más o quien menos, hemos abrazado por el imperativo legal de la supervivencia. Se puede estar en contra del trabajo y trabajar para vivir, no al revés (vivir para trabajar). Los procesos emancipatorios son largos cuando tenemos enfrente a un sistema de las dimensiones de este, donde todas las instituciones están impregnadas de él, sea por cuestiones humanitarias, por ciudadanismo, legalidad o por cualquier otra estupidez.

Desde que el uso de internet empezó a extenderse socialmente, pasamos por algunos de sus espejismos, pero al poco tiempo ya vimos lo que suponía esa realidad virtual y que su utilidad debía ser muy concreta, porque no nos servía para analizar la realidad que se desarrolla cotidianamente fuera de las pantallas a pié de calle. Parte de eso que llamamos "movimiento anarquista", no tiene demasiadas conexiones con la vida social de esas calles, aunque sí con sus propias vidas. Se genera como un círculo endogámico. Quienes sí que mantienen relación o vínculo con ese día a día de la calle, lo hacen a través del sistema de consumo, de explotación o de cualquier otro que apenas tiene nada que ver con las ideas y prácticas anarquistas, pero es ahí donde se pueden confrontar las jerarquías con la horizontalidad, y eso se hace desde lo colectivo, lo barrial, lo comunitario, no desde una individualidad necesaria para otras cuestiones igualmente fundamentales.

Anarquistas como Kropotkin no iban a la naturaleza a violentarla, sino a observar para conocer y analizar. Cuando estamos en grupos sociales diversos o afines, descalificar no es la manera más adecuada para que nuestras palabras sean oídas y escuchadas sin prejuicios y resentimientos. No hay sentido o pensamiento crítico alguno, al afirmar cuestiones como que "el fascismo no es el problema", porque el problema es el que crea el fascismo para confrontarnos desde sus violencias. El fascismo es parte estructural del problema y no confrontarlo puede provocar, como vemos que está sucediendo, que se extienda porque este sistema lo necesita para desarrollar sus programas y proyectos neoliberales. No es casualidad que en países europeos de estas hipotéticas democracias, los gobiernos ultraconservadores adquieran más impunidad y poder porque los intereses de este capitalismo, en su fase de transformación tecnológica, los necesita para imponer sus formas de vida tecnificadas. Sin la desviación hacia ese autoritarismo fundamentalista, su avance seguramente sería más lento.

Una cuestión sobre la que desde hace mucho tiempo llevo interrogándome, es sobre dónde están esos proyectos revolucionarios y transformadores para llevar nuestras vidas hacia alguna manifestación de la anarquía, sea desde la afinidad, el apoyo mutuo, la solidaridad, la compartición, la colectivización...

Podemos hacer mil necesarias proclamas contra la sociedad tecnológica, pero si no hay proyectos y experiencias que empiecen a desarrollarse desde la horizontalidad, otras maneras de relacionarnos, construyendo comunidades de vida y resistencia, todas esas proclamas y alegatos necesarios para comprender y analizar la realidad, no dejan de ser algo parecido a la superficialidad de esas comunidades virtuales que crea el sistema de mercancías. No son más que otro producto intelectual de consumo interno. Es por eso que debemos de transcender la virtualidad y materializarlos en nuestros pueblos, barrios y entornos cercanos..., pero no como parte de la múltiples actividades de la diversidad social, sino como experiencias de transformación revolucionaria que vaya demoliendo todas las estructuras jerárquicas, productivas y disciplinarias, en donde el dinero desaparezca como principal economía de cambio y los conocimientos sean ampliamente compartidos.

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