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Anàlisi :: amèrica llatina
américa latina ¿sumisión ecológica?
per Raúl Crespo Correu-e: rcpuma061@yahoo.com (no verificat!)	17 mar 2016
El cambio de matriz energética sera otra dependencia ecologica
América Latina ¿sumisión ecológica? América Latina emana el 9% de las emisiones globales de gases de efecto invernadero y ya se nos sugiere la obligación (más allá de lo moral) de adaptarnos a los cambios climáticos con las reglas de los países más desarrollados (que son los que más contaminan) como parte de nuestra historia futura con la complicidad de la ONU y sin que las reglas estén claras. Estados Unidos ha boicoteado todas las cumbres ambientales por sus ambiciones económicas que evitan establecer que países empiezan con la reducción de los gases de efecto invernadero y quien lo hace con mayor intensidad. Es algo que se llama “responsabilidades comunes pero diferenciadas” es decir, todos los países deben contribuir en la lucha contra los cambios climáticos pero algunos más que otros dependiendo de sus posibilidades, esta situación no permite que las reglas estén claras para llegar a un acuerdo sobre la reducción de las emisiones de gases de efecto invernadero en las cumbres. Es toda una estrategia inmoral liderada por Washington y la ONU. Por la ambición, financiación y diferenciación se frenan los acuerdos entre los 195 países que asistieron a la COP21 de Paris. La reducción de la temperatura de 2.7 grados centígrados hasta el año 2100, significa que la reducción antropogénicas de gases de efecto invernadero (GEI) pasara del 40% al 70% comparándolas con las emisiones del 2010, buscando que en el 2100 haya 0 emisiones. China es el primer emisor de gases de efecto invernadero con el 25% seguido de Estados Unidos con el 14%, Unión Europea 10%, India 7%, Rusia 5%, dentro de los 52 países que representan el 79% de las emisiones mundiales de GEI. Se calcula que China lanza al espacio más de 11.000 millones de toneladas de estos gases por año, EEUU 6.400 millones, le siguen india, UE, Rusia, Brasil, Alemania, Indonesia, Canadá, México, Australia, Irán, Italia, Japón, Inglaterra, pero, la deforestación del tercer mundo equivale a más del doble de las emisiones de CO2 por combustión. China, India, Brasil, Colombia, Indonesia, Costa de Marfil, Filipinas, Myanmar, Tailandia, Laos, Nigeria, son los mayores contaminadores por deforestación; a esto hay que sumarle la combustión de los vehículos, la ganadería, todo esto es dinero para los 195 países que buscan frenar el calentamiento global. La Organización Meteorológica Mundial (OMM) dice: “en el año 2014 la concentración de CO2 en la atmosfera alcanzo los 397.7 partes por millón (ppm) antes de la era industrial la concentración se calcula era de 278 ppm, en la época del Holoceno que empezó hace unos 12.000 años y el comienzo del Antropoceno que empezó en la era industrial. Según científicos de varios países, “la humanidad ha modificado tanto la geología de la tierra con una profunda marca en las capas de la tierra suficientemente grande para que las nuevas generaciones sepan que algo paso” manifiesta la revista Science. “La investigación demuestra que los cambios son tan enormes como los que ocurrieron a finales de la última era del hielo”. “Pasar de una época a otra con sus diversas eras evolutivas tomo millones de años, el ser humano lo ha logrado en 200 años” manifiesta Colin Waters de The Guardian, revista que ayudo en la investigación. 5 Billones de toneladas de plástico se acumulan en la tierra y en los océanos desde 1945 además de cemento, aluminio. Acero, fibras sintéticas, suficientes para cubrir toda la superficie de la tierra. La radiactividad de las pruebas atómicas realizadas hace 80 años en EEUU, Rusia, Francia, Japón, Inglaterra, está en toda la tierra incluso en el Cotopaxi y en las islas Galápagos. El fosforo y el nitrógeno se duplico en los últimos 100 años, lo mismo que el metano y el CO2 incrementaron la temperatura de la tierra en 1 grado centígrado, desde 1880 hasta el 2015. El Estero Salado de Guayaquil, esta tan contaminado con plomo, mercurio, cadmio y otros metales que prácticamente es una mina de oro futura. En los últimos 40 años el 49% de la fauna marina desapareció, entonces ¿aceptamos que estamos en una nueva época? Dice Theofilos Toulkedes de la Politécnica Nacional. Pero, continuemos con la política ecológica que alimenta los teatros de las cumbres ambientales y sus intereses porque estamos lejos de una toma de consciencia a largo plazo, indefinida, que pueda ser un auténtico despertar para entender y aceptar que en 200 años hemos terminado con una época que antes duraba millones o miles de años. El mundo dispone de algo más de 1.5 billones de barriles de petróleo, 10 veces más de carbón y gas para más allá del año 2100 ¿desaparecerá la industria que se mueve con energía fósil para replantear la economía mundial con 46 billones hasta el año 2050 para que toda la energía sea renovable como plantea la Agencia de Energía de EEUU? Dióxido de carbono, metano, óxido nitroso, hidrofluorocarbonos, perfluorocarbonos, hexaflouro de azufre, son los 6 gases que causan el calentamiento global y representan dinero para las arcas fiscales de cada país. ¿Se cumplirá y bastara la entrega de los 100.000 millones de dólares por año hasta el 2020 para ayudar a los países pobres para su desarrollo sostenible y adaptación a los cambios climáticos? Demasiadas contradicciones si solo consideramos un ejemplo: si se quema el 50% del petróleo disponible, las emisiones de GEI serian de unas 5.000 giga toneladas suficientes para reducir el espesor del hielo en los polos de 3 Km a 1.5 Km dicen científicos alemanes y estadounidenses que estudian los efectos de los gases de efecto invernadero procedentes de los combustibles fósiles en el polo sur. En el año 2010 la revista Science Advance calculo en 600 gigas toneladas de GTC de carbono acumuladas en la atmosfera y en los océanos de acuerdo con análisis del Panel intergubernamental para el Cambio Climático (CIPCC) Sostener en 2 grados la temperatura atmosférica es igual a que las emisiones no superen las 1.000 gigas toneladas y eso es imposible porque el mundo necesita seguir produciendo con petróleo más allá del 2025. La ONU a sus 70 años es una organización enferma y sumisa al G7. Los países más ricos e industrializados del mundo llevan años maquinando un nuevo orden mundial con el calentamiento global y su incidencia con los desplazamientos humanos, agua potable, economía, bioética, ciencia y tecnología para la energía alternativa con el programa de becas estudiantiles para que cientos de miles de profesionales sostengan los cambios proyectados en cada uno de sus países para un nuevo reordenamiento mundial. Las relaciones jerarquizadas de dependencia entre países ricos y pobres tiene el sello de la ONU. Naciones Unidas organiza las cumbres ambientales, delineando con la comunidad internacional un mapa geopolítico en grandes regiones de África, Oceanía, Asia, Oriente Medio y América Latina, ya con un calendario de actividades a partir del 2025, año en el que Estados Unidos y China se comprometieron a reducir sus emisiones de gases de efecto invernadero. La ONU tiene una gran experiencia para oponerse a las tendencias igualitarias y en sostener las concentraciones de poder en el 7% de la población mundial con el eslogan “sin el G7 los conflictos aumentaran sin control”. Mientras tanto, la COP 21 como las anteriores cumbres sirve para acallar la preocupación mundial por los cambios climáticos mientras reordenan los mercados globales sancionando a los países que Washington, y la comunidad internacional considere que deben ser sancionados porque no se alinean con su calendario de actividades. El calentamiento global por su incidencia en toda la tierra es el mejor pretexto que tiene el G7 para reafirmar su poder económico y político. Sin ayuda económica América Latina es muy vulnerable, los 100.000 millones de dólares del fondo verde como pago por compensaciones establecidas y para obras de mitigación por los cambios climáticos en países pobres, todavía, es puro cuento. Ante la imposibilidad científica y tecnológica para la masificación de la energía alternativa, los latinos tenemos que recurrir a la comunidad internacional que es una maraña de reglas, organizaciones, convenios, tratados que siempre han dibujado una gobernanza mundial. Por eso los fracasos de las cumbres ambientales cuyos actores son las mismas potencias de siempre, claro, “preocupados” por lo mundial del calentamiento atmosférico. América Latina dispone del 25% de la tierra agrícola, 32% de bosques, 31% de agua potable del mundo, nos hace la región más interesante (por la debilidad política, corrupción, desigualdad social, entre otros motivos) para invertir en energía renovable con las reglas de los organismos crediticios FMI, BM, etc. Establecidas para continuar con la dependencia bajo la política de una aldea global en donde el principal elemento en disputa será el agua dulce.     Raúl Crespo.
Mira també: http://publicación abierta
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