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Notícies :: antifeixisme |
Un mundo de naranjas mecanicas: Opinió sobre les Festes de Gràcia
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per altra premsa |
21 ago 2005
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article d'opinió de La Vanguardia (si) d'avui sobre les Festes de Gràcia d'enguany |
UN MUNDO DE NARANJAS MECANICAS
Difícilmente la solución a ese problema pasa por aumentar la presencia policial, que acabaría por deslucir cualquier fiesta
JOSEP M. HUERTAS 21/08/2005
Buscando explicaciones al vandalismo, el concejal Ricard Martínez ha afirmado que la fiesta mayor de Gràcia ya no es una fiesta de barrio, sino que atrae a gente de todas partes y, por tanto, resulta difícil de controlar. Esa verdad de Perogrullo no es de ahora, persiste desde hace bastante tiempo.
En un principio las fiestas mayores servían para celebrar el final de las cosechas o para honrar al santo patrón del lugar, luego se mantuvieron como una señal de identidad urbana y en los últimos tiempos no han podido evitar la contaminación de esa tendencia a la juerga permanente, con inquietantes síntomas de violencia en algunas ocasiones.
No debería sorprendernos lo acaecido en Gràcia sólo con que pensemos que hace dos meses la popular Patum de Berga se vio teñida de sangre por la muerte de un joven. La reacción de la gente sorprendió por su virulencia, saltó la pátina civilizada de la que presumimos, y de nuevo surgió el mismo tema que ha aparecido ahora: la necesidad de más fuerza pública. Al menos, ésa ha sido la opinión del presidente de la federación de la fiesta graciense. Como si fuese una poción mágica, se recurre al reclamo de la seguridad.
Si refrescamos la memoria veremos que la preocupación por la violencia urbana no es cosa de hoy y que Anthony Burgess escribió una novela después muy difundida gracias a la versión cinematográfica, La naranja mecánica, donde Stanley Kubrick, ya en el año 1971, mostraba un mundo preocupante. De esta película, y también de la vida real, aprendimos y aprendemos, sin embargo, que difícilmente la solución a ese problema pasa por aumentar la presencia policial, que acabaría por deslucir cualquier celebración festiva.
El barrio de Gràcia, y en menor medida otros lugares, han sobrepasado hace tiempo los límites de la tolerancia voluntaria. Un muchacho que asistía el otro día a la fiesta se quejaba en voz alta de que se pretendiese poner fin al jolgorio a las dos y media de la madrugada, hora que permitiría algunas horas de sueño a quienes viven en el barrio. Él, y muchos otros y otras como él, querían continuar divirtiéndose sin límite temporal.
Claro está que algunos gracienses, cuando se acerca el 15 de agosto, suelen marchar para eludir los inconvenientes de tanta actividad nocturna, pero es una solución que no puede aplicarse continuamente. Cabe pensar que otras noches de verano los amantes de los bongos o del ruido, en forma musical o sonora, no cesan en su jarana, y de ahí la queja constante que enfrenta vecinos y amantes de la juerga. Pero lo que ahora acrecienta el problema es la violencia.
Es difícil saber cómo puede ponerse coto a un problema que no es nuevo pero que rebrota con cierta asiduidad. Es evidente que se entremezclan diversas causas: primera, la creciente - digamos- globalización también de las diversiones; segunda, el aumento de falta de valores; y tercera, la falta de civismo en algunos sectores de la sociedad.
Las campañas en pro de un mayor civismo en Barcelona - primero la emprendida por Marta Mata en 1992, ahora la dirigida por Marina Subirats- no han dado demasiado resultado, seguramente porque que tenemos una democracia demasiado joven y también porque cambiar determinadas conductas es de tiempo y de algo más que buenas intenciones.
En otros ámbitos las fiestas populares cuentan con el autocontrol de quienes participan y con el recha de conductas impropias. Hace pocos días lugar el inicio de curso en Bergen, la más alegre de las ciudades noruegas, y las calles eran llenas de jóvenes que reían, bailaban, cantaban, vendían libros de texto de segunda mano a alumnos que empezaban, e incluso algunos ellos, vestidos tan sólo con sucinta ropa interior, invitaban a los otros a algún tipo de celebración. Pero de noche terminaban los festejos porque los vecinos debían descansar. Nadie ponía en duda ese equilibrio. No había policía que persiguiese a los que no cumplían la norma. Por supuesto, que también en esas sociedades cuya democracia es más sólida y antigua hay violentos y violencias. Pero no suelen poner en peligro fiestas populares.
El debate aquí, entre nosotros, persistirá porque que ya se que ni la presencia de más policía - del tipo sea- ni las apelaciones al civismo han solventado el problema que, periódicamente, resucita, en ocasiones lo hace con virulencia inusitada. La única solución, por ahora, es continuar examinando sus causas para poder aplicar los remedios adecuados. Hablando entre todos, incluso con los violentos si cabe. |
Comentaris
Re: Un mundo de naranjas mecanicas: Opinió sobre les Festes de Gràcia
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per linus |
21 ago 2005
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Estic molt d'acord amb aquesta reflexió! Molt valent Josep Maria! La política de més policia no portarà a cap sol.lució. Cal parlar i buscar les sol.lucions entre tots els implicats.I Martínez, rés de prohibicions de les festes alternatives! |
Re: Un mundo de naranjas mecanicas: Opinió sobre les Festes de Gràcia
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per Garcia |
21 ago 2005
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El problema, del que no dice nada este periodista, es que el modelo de fiesta que Clos ha fomentado en Gràcia lo ha jodido todo.
Hasta ahora no han habido nunca problemas, ahora que los hay es muy fácil culpabilizar colectivos y hablar de civismo y otras historias.
Este periodista habla de Bergen, de Noruega, como modelo a seguir. Vaya, para meternos en agosto a la 2:00 en la cama es un buen modelo. Pero de las prestaciones sociales que hay allí, también para los jóvenes, no dice nada.
El horario noruego de para las fiestas de Gràcia en el mediterràneo es absurdo, el resto del año es normal que se le pida a la gente que no haga ruido desde esa hora de la madrugada. Pero en una unas fiestas como las de Gràcia, que duran una semana, es simplemente patético exigir que a las dos este todo el mundo en su casa metiendose en la cama. Si en Noruega lo hacen peor para ellos.
Y soy vecino de Gràcia, que conste. |
Re: Un mundo de naranjas mecanicas: Opinió sobre les Festes de Gràcia
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per linus |
21 ago 2005
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Garcia, per a mi l'important és el que diu en el sentit de que no valen les prohibicions i la policia, que és el que ha provocat el desastre d'aquest any. |
interesantísimo artículo??
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per pssss |
21 ago 2005
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pues vaya una interesante reflexión decir que la solución no es más policía. cualquiera al que le quede un poco de cordura (eso que sera?) en estos confusos tiempos sabe que más policía para resolver los problemas es la visibilización y el agravamiento de esos mismos problemas que trata de solucionar.
Por lo demás, muy de acuerdo con el post anterior. el artículo no hace mas que unas reflexiones y unas comparaciones absolutamente demagógicas e incompletas. qué tiene que ver el clima mediterraneo con el noruego, la cultura, la idiosincrasia. y por cierto... a vuelta con esto del civismo, que es el único sitio de todo el estado español donde existe esta obsesión que roza el absurdo, ¿no se tratará en realidad de esconder el mayor de los incivismos, el comportamiento despótico y autoritario de un ayuntamiento que se cree vanguardia europea, que desprecia y reprime toda expresión que no resulte de su agrado?
digámoslo alto y claro... barcelona es un ayuntamiento incívio e intolerante, y a través de los años esto se ha traspasado a sus ciudadanos aumentando la conflictividad en sus calles. por tanto no tiene autoridad moral de niguna clase para reivindicar valores de respeto, tolerancia y civismo.
por lo demás... no se... a lo mejor podrían preguntar en otros sitios del estado español a ver cómo se arreglan con fiestas mucho más descontroladas que las de barcelona, donde la gente se emborracha muchísimo más y se descontrola el triple. |
Re: Un mundo de naranjas mecanicas: Opinió sobre les Festes de Gràcia
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per Garcia |
21 ago 2005
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Claro que en Gràcia, a diferencia de estos lugares que dices, hay una red de movimientos vecinales y sociales de izquierdas, independentistas y libertarios. Eso es lo que molesta al alcalde Clos del partido de derecha moderada y regionalista español PSOE. El modelo de organización exitosa que durante muchos años ofrecen estos movimientos sociales y vecinales incomóda mucho a quienes, como Clos, prefieren tener a la gente calladita, obediente y sumisa a cambio de una pequeña subvención. |
Re: Un mundo de naranjas mecanicas: Opinió sobre les Festes de Gràcia
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per ... |
21 ago 2005
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pq a san fermines no pasa el k ha pasat aquest any a gracia?
i ki diu st.fermines pot posar l'exemple d qualsevol festa popular k ha estat totalment sobredimensionada i k es ja un descontrol, d cantitat d gent i d cantitat d beguda (a qui no li agrada beure birra durant tota la nit?, k per alguna cosa son festes coi!) |
Re: Un mundo de naranjas mecanicas: Opinió sobre les Festes de Gràcia
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per ideas a granel... |
21 ago 2005
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Estoy bastante de acuerdo con "psss", "...digámoslo alto y claro... barcelona es un ayuntamiento incívio e intolerante,..." y además especulador y por eso también necesita un tipo de fiestas populares normalizadas... Que mala imagen y cuanto "incivismo". Los turistas se llevarán un recuerdo de una ciudad "muy bonita", pero sin capacidad para resolver los más elementales conflictos sociales.
En la situación de fondo que se ha planteado en las fiestas de Gracia y que persiste el resto de días en el mismo barrio, pero que también se ha producido en otros, recordemos los desalojos del parque de la Ciudadela, seguramente que tienen infinitas soluciones, pero sobre todo una muy fácil pero que atenta contra el modelo especulativo de sociedad que desean sus gobernantes (da lo mismo que sean de la orientación política que sea). Una posible solución, sería crear en todos los barrios zonas verdes lo suficientemente amplias y retiradas de las viviendas, como para que quien desee alargar su horario nocturno, pudiesen ir allí. De hecho, me da la sensación que las fiestas alternativas de Gracia, además de la reivindicación y la autogestión, cumplían también esa función, la de juntar en unos espacios a quienes deseaban continuar la noche. |
Re: Un mundo de naranjas mecanicas: Opinió sobre les Festes de Gràcia
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per per a ... |
21 ago 2005
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no ha pasat pq a les 3h no estae el carrer ple d pasma en ganes d marxa. |
Re: Un mundo de naranjas mecanicas: Opinió sobre les Festes de Gràcia
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per de terra endins |
22 ago 2005
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A veure si ho entenem tots, el problema no és la festa, és la ciutat. Als pobles de l'interior la festa dura fins al dia següent i més i dingú es queixa, perquè? Doncs per que hi ha espai de sobres per a tothom, els joves disposen dels seus locals, pistes de ball o bars i la gent gran (alguns també s'hi queden fins al final) s'en va a dormir i tots contents. Que quedi clar, el problema no és la massificació dels asistents, sinó el colapse de l'espai urbà que ens ofega.
Salut! |
Re: Un mundo de naranjas mecanicas: Opinió sobre les Festes de Gràcia
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per ciudadano |
22 ago 2005
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Pues vaya mierda de artículo el del tal Josep M., toda esa berborrea para acabar hablando de autocontrol y buenas costumbres. Menos mal que todavía hay alguien que nos recuerda los "valores" tradicionales (que él quiere hacer pasar por democráticos) y nos remata poniéndonos como ejemplo a los noruegos, que son muy tranquilos en su país pero al llegar aquí pasean su rojo gamba y sus borracheras por las calles de Gracia. Normal que este tipo de sermones se publiquen en La Vanguardia, si es que ya dejan escribir a cualquiera.....
¿Porqué será tan complicado divertirse durante unas pocas horas y tan fácil currar 10 horas en un taller todos los xxxxx días? |
Re: Un mundo de naranjas mecanicas: Opinió sobre les Festes de Gràcia
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per d |
22 ago 2005
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si mal no m'equivoco i per l'estil, fet expres el contingut pel mitja on es publica -despres de un titular "BArcelona contra la violencia" per parla de la mani de la Federacio- no te tota la pinta de ser del Huertas Claveria?
Qui es Huertas Claveria? |
Re: Un mundo de naranjas mecanicas: Opinió sobre les Festes de Gràcia
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per Mare meva!! |
23 ago 2005
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A més de gamberros (o potser per això) sou uns incultes. No saber qui és Huertas Claveria...En dues paraules: Im-pressionant. Sou una caqueta. Més llegir i meys borratxera. |
Re: Un mundo de naranjas mecanicas: Opinió sobre les Festes de Gràcia
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per una |
23 ago 2005
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si dieran licencias a bares para abrir toda la noche, podríamos pasar las noches en lugares insonorizados sin molestar a nadie.
si no dejan abrir esos tipos de locales, ¿dónde quieren que vaya la gente?
te echan de las plazas, te echan de la playa, te echan de los bares, los vecinos llaman a la policía si haces mucho ruido...
todo eso se solucionaría si dieran más licencias y controlasen a los propietarios. |
Re: Un mundo de naranjas mecanicas: Opinió sobre les Festes de Gràcia
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per Horticola |
23 ago 2005
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Huertas Claveria és una de les persones que millor ha sabut retratar Barcelona durant dècades, aquest article s'hauria de codificar i entendre el seu context, on està publicat i com s'han de publicar les coses en aquests diaris. Tanmateix no estic d'acord en algunes coses d'aquest article i per molt bon cronista de la realitat que sigui això no li dona impunitat. Tot és criticable però amb arguments. |
Re: Un mundo de naranjas mecanicas: Opinió sobre les Festes de Gràcia
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per Antonio R. |
25 ago 2005
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Hola hola mis queridos drugos, jo flipe amb aquestes reflexions.
Jo tinc una altra molt bona "Un mundo de subnormales"
Salut! |
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