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Notícies :: amèrica llatina |
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Los venezolanos ganan su batalla contra la banca
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per Investigador |
30 des 2004
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Anauco consigue una sentencia histórica que rebaja al 50 por cien la deuda de los venezolanos con sus entidades financieras |
Exitoso trabajo de “Anauco� y “Ausbanc Internacional�
MILES DE FAMILIAS VENEZOLANAS VER�N REBAJADAS SUS DEUDAS POR PRÉSTAMOS HIPOTECARIOS EN M�S DE UN 50%
La sentencia que obliga a recalcular los créditos indexados, es el mayor éxito conseguido por la sociedad civil venezolana frente a una situación de clara injusticia
Durante la visita del presidente de Ausbanc Internacional, Luis Pineda, a la Superintendencia de Bancos, el órgano regulador anunció que velará por el cumplimiento del mandato judicial y para ello abre en su sede una oficina de atención al deudor que contará con estructuras de alto nivel y con un equipo profesional y técnico que atenderá a los deudores y a las Asociaciones de Usuarios y Consumidores para la verificación de la propuesta que cada Banco tiene que formular a sus deudores
La Banca venezolana tendrá que devolver a los deudores hipotecarios sobre los 300.000.000.000 de bolÃvares (equivalente a 156.250.000 dólares)
En lo individual, pueden citarse casos en los que el deudor mantenÃa un saldo de 150.000.000 de bolÃvares (78.125 dólares) y luego del recálculo su saldo será de 48.000.000 de bolÃvares (25.000 dólares)
Más de medio centenar de funcionarios serán puestos a disposición de los venezolanos para recalcular las cantidades que deben pagar los usuarios tras renegociar sus préstamos hipotecarios con los bancos en aplicación de la sentencia que resuelve un procedimiento judicial instado por Anauco que favorece a miles de miles de familias que verán rebajadas sus deudas en porcentajes que, en algunos casos, superan el 50%. El anuncio fue hecho durante la visita de Luis Pineda Salido , presidente de Ausbanc Internacional – organización a la que pertenece Anauco - a la Superintendencia de Bancos donde fue recibido por el propio Superintendente, Trino Alcides DÃaz , que estuvo acompañado por uno de sus asesores.
La sentencia que obliga a recalcular los créditos indexados, es el mayor éxito conseguido por la sociedad civil frente a una situación de clara injusticia que hacÃa prácticamente imposible que los ciudadanos pudieran atender los pagos que se le exigÃan. Este proceso, liderado por Anauco , traza una frontera en la defensa de los consumidores ya que demuestra que cuando se tiene razón y se utiliza el derecho es
posible acabar con situaciones tan complicadas y dañinas para el tejido social como esta de los créditos indexados.
En la entrevista, el presidente de Ausbanc Internacional, Luis Pineda Salido , hizo un breve resumen de la trayectoria de Ausbanc Consumo en España y Ausbanc Internacional , poniendo los acentos en el apoyo que estas organizaciones prestan al sistema financiero en un marco de transparencia, lealtad , eficacia y profesionalidad. Dijo Pineda que Ausbanc era el mejor aliado de los buenos bancos y la peor pesadilla para los malos bancos. Asimismo hizo entrega al Superintendente de las publicaciones de la asociación española y le ofreció la desinteresada y leal colaboración de Anauco y Ausbanc Internacional para lograr un mayor acercamiento entre los clientes y sus bancos.
Durante la entrevista , el Superintendente de Bancos, Trino Alcides DÃaz , se mostró muy a favor de la organización de los consumidores, ya que – admitió – “estos son muy débiles en Venezuela â€?. También dijo que “el futuro es que los bancos vean a sus clientes como personas y no como simples números, que los clientes se sientan seguros y satisfechos y para ello es necesario que ambos actores estén coordinadosâ€?.
Historial de los Créditos Indexados en Venezuela
Desde finales de los años 80 y principios de los 90, Venezuela presentó variables económicas que afectaron la capacidad del venezolano para acceder a los créditos hipotecarios tradicionales otorgados por las instituciones financieras. Las Tasas de interés activas rondaban el 100 % anual, mientras que el poder adquisitivo de la moneda era cada vez menor frente a una inflación que en un año alcanzaba niveles sobre el 50%, mientras que los aumentos salariales, en el mejor de los casos, sólo suponÃa un 10% anual.
Al juntarse estos elementos se produjo, como efecto directo, una depresión en el sector hipotecario. HabÃan excedentes en la banca para otorgar préstamos, pero el venezolano común no reunÃa las condiciones para acceder a dichos créditos y quien las reunÃa preferÃa abstenerse ante lo oneroso del compromiso frente a tasas tan elevadas. Es asà como el sector financiero propone y diseña un sistema de crédito que ya habÃa fracasado en México , de donde toma su nombre. Se trataba de créditos doblemente indexados: se indexan a la tasa de interés del mercado para producir la cuota financiera y se indexan al salario del deudor para producir la cuota real de pago. Es decir, el deudor cancela sus cuotas en base a sus ingresos lo cual produce una cuota muy inferior a la cuota financiera que en realidad deberÃa cancelar para que el crédito aplicara la porción de intereses devengados en el perÃodo y la correspondiente amortización a capital. Ahora bien, la diferencia entre lo que el deudor paga y lo que deberÃa pagar, a pesar de ser porción de intereses es nuevamente capitalizado, por lo tanto en lugar de haber amortización, y por ende descenso del saldo deudor, lo que hay es un abrupto crecimiento de la deuda. El deudor cada vez debe más.
Con la inclusión de estos créditos al mercado y posteriormente a la Ley de PolÃtica Habitacional , el sector financiero habÃa resuelto su problema de depresión para el sector hipotecario ya que habÃa creado una ficticia capacidad al deudor para comprometerse en una obligación que a la larga no podrÃa pagar pero que estaba garantizada con un inmueble que respaldaba el riesgo de la Banca. Cuando los créditos comenzaron a madurar por el año 1999, los deudores se dieron cuenta de la problemática al hacer el ejercicio siguiente: por Ejemplo, habÃa pedido 20.000.000 de bolÃvares (actualmente equivalen a 10.416 dólares), habÃa pagado 22.000.000 de bolÃvares (11.458 dólares) y aun debÃa 30.000.000 de bolÃvares (15.625 dólares) , es decir, la deuda asciende rápidamente con lo cual la persona se convierte muy pronto en deudor sobre el valor del bien. Estos hechos motivaron diversas reuniones de deudores que espontáneamente comenzaron a organizarse. Asà nació ANDHI ( Asociación Nacional de Deudores Hipotecarios ), filial de Anauco , que comenzó a plantear la problemática en instancias públicas, creándose mesas de trabajo en la Asamblea Nacional , Consejo Nacional de la Vivienda , Ministerio de Finanzas , etc.. Mientras se estudiaba la problemática un grupo de deudores del Estado Lara , reunidos en una asociación regional presentó al Tribunal Supremo de Justicia un Amparo Constitucional contra la Superintendencia de Bancos y El INDECU por haber permitido la inclusión de este crédito en el mercado y en la Ley, el TSJ en Sala Constitucional , quien ya habÃa oÃdo el tema en los medios de comunicación, se pronunció el 24 de enero de 2002, señalando que no era el Amparo la vÃa idónea y que se debió demandar a la Asociación Bancaria y al Consejo Bancario por lo cual admitió la denuncia abriendo un proceso por intereses colectivos o difusos, incluyendo como demandado al Sector Bancario Nacional y publicando un edicto para que los interesados se adhirieran al juicio. Asà nació el conocido juicio al que ANDHI se adhirió representando a más de 2.000 familias.
La sentencia fue a favor de los deudores y se declaró el crédito indexado contrario al orden público, a las buenas costumbres y a los principios constitucionales. Además se ordenó la apertura de averiguación penal para determinar si las ganancias percibidas por la banca eran desproporcionadas y constituÃan un delito de usura (aun en proceso ante el Ministerio Público ). Por otra parte, el Tribunal ordenó realizar un recálculo a todos los préstamos sobre la base de una tasa que fijarÃa desde esas fechas el Banco Central de Venezuela. La sentencia resultó en principio de difÃcil ejecución ante las controvertidas interpretaciones dadas por la banca y los deudores, además de las múltiples variables de casos con lo cual, fue necesario solicitar diversas aclaratorias al TSJ , siete en total. Todas resultaros beneficiosas al deudor, pero la última del 30 de agosto de 2004 fue definitiva al establecer claras normas para los recálculos y una tabla
única que será la formula matemática que habrá de aplicarse. Asimismo, a instancia de Anauco y demás deudores y asociaciones, el órgano regulador, Superintendencia de Bancos , velará por el fiel cumplimiento del mandato judicial. Para ello abrió en su sede una oficina de atención al deudor que contará con estructuras de alto nivel y con un equipo profesional y técnico que atenderá a los deudores y a las asociaciones de usuarios y consumidores para la verificación de la propuesta que cada banco tiene que
formular a sus deudores en un término de 30 dÃas. Anauco se apresta a representar a sus numerosos afiliados ante el banco respectivo y ante el órgano supervisor. Igualmente Anauco forma parte de la comisión interinstitucional creada para la correcta ejecución de la sentencia y sus aclaratorias.
En cuanto se refiere a las cifras, podrÃamos decir que existen por recálculo aproximadamente 29.000 créditos que afectan a 180.000 personas, atendiendo a los grupos familiares, lo que representará una devolución al deudor por parte de la Banca, mediante disminución del capital adeudado, sobre los 300.000.000.000 de bolÃvares (equivalente a 156.250.000 dólares). En lo individual, pueden citarse casos en los que el deudor mantenÃa un saldo de 150.000.000 de bolÃvares (78.125 dólares) y luego del recálculo su saldo será de 48.000.000 de bolÃvares (25.000 dólares). Sin embargo, aún queda camino por andar y ya varios Bancos están procediendo, mediante acuerdos con ANAUCO, a la solución de los casos, otros persisten en reclamaciones judiciales y de seguro habra que ejecutar la sentencia con mecanismos de intermediación de la Superintendencia o a través de la vÃa judicial.
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