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Notícies :: altres temes |
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Etarras de Coronel Tapioca .
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per S.P. |
26 ago 2004
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Etarras de Coronel Tapioca . |
En el verano de 1980, un comando de ETA armado con fusiles de asalto tendió una emboscada a una patrulla de la Guardia Civil en la localidad guipuzcoana de Aia y mató a dos agentes. Los uniformados, sin embargo, supieron reaccionar y dieron muerte a dos de los activistas que les estaban ametrallando. HabÃan aprendido la lección de otra trampa tendida por ETA cinco meses antes en Ispaster (Vizcaya) en la que fueron asesinados seis guardias civiles que escoltaban un transporte de morteros.
Activistas d ETA entrenados en Argelia y Yemen participaron en estas emboscadas, que constituyeron los únicos episodios en los que ETA ha estado más cerca de actuar como una guerrilla que como un grupo terrorista urbano. El Gobierno de la época llegó a temer que la banda intentara imitar a los grupos insurgentes latinoamericanos y se planteara ocupar un territorio. La organización terrorista predicaba oficialmente la negociación, pero en sus filas todavÃa existÃa quien creÃa en la CAPACIDAD DE PROMOVER UNA INSURRECCION GENERAL. El Estado se las veÃa y se las deseaba para hacer frente a una ETA poderosa, con centenares de activistas armados y bastante bien adiestrados muchos de ellos. ETA-militar, en 1980, cometió 154 atentados (uno cada 57 horas) y mató a 85 personas (una cada cuatro dÃas).
Pasados casi cinco lustros de aquellos sucesos, el Estado se encuentra preocupado este verano por saber cuántos iglús de recogida de vidrio será capaz de reventar ETA en su campaña contra los intereses turÃsticos y si todos serán contenedores cantábricos o también los habrá del Mediterráneo. Además, los responsables de la lucha antiterrorista todavÃa están asombrados después de ver las caracterÃsticas del comando Arkaitz(al que se localizo tras olvidar su d.n.i. en un fiat uno robado y utilizado para psteriormente ser abandonado)última célula etarra desarticulada en Vizcaya el pasado mes de julio. Como sus compañeros de hace veinticuatro años, habÃan elegido la montaña como centro de sus operaciones. Pero no puede decirse que sean exactamente lo mismo.
El acta extendida por el juzgado de instrucción número 2 de Vitoria tras el registro del lugar donde estaban acampados los dos etarras detenidos refleja los efectos intervenidos: “En el bolsillo lateral izquierdo la mochila guarda dos rodilleras negras, spray antiagresión, un lector de mapas nocturno de Coronel Tapioca y un mapa guardado en una bolsa de plástico de autocierre de la zona del Gorbeaâ€?. El spray antiagresión, para más señas, era de la marca Sam-7, como los misiles rusos. Hace veinte años ETA tenÃa en sus arsenales dos auténticos misiles rusos Strela, bien es cierto que de pega, porque se los vendió la policÃa sin carga explosiva y con un chip delator. Ahora tiene un spray que se llama igual que los misiles.
La "Dmocracia"española, cuando estaba débil y en gestación, resistió la ofensiva de aquellos terroristas que venÃan a pegar tiros en San Sebastián después de haber combatido con la guerrilla salvadoreña o de haber realizado marchas nocturnas de endurecimiento en el desierto yemenÃ. Ha costado mucho dolor a demasiada gente, pero se superó aquella etapa. La que viene nunca será peor, ni por asomo. No puede serlo con terroristas que en vez de aprovisionarse en el aparato logÃstico de toda la vida buscan sus pertrechos en Coronel Tapioca, como turistas con pretensiones que se equipan antes de visitar el Gorongoro. Con terroristas que al cabo de un mes de pasar la frontera todavÃa no tienen una casa de confianza en la que pasar una noche y tienen que seguir acampados en el monte. O el apoyo social ya no es lo que era o se han tomado demasiado en serio los capÃtulos de la vida del Cabra en televisión.
Los etarras de Coronel Tapioca pueden matar y lo volverán a hacer, pero nunca volverán a ser lo que fueron. El Estado tampoco, porque ahora es mucho más sólido que entonces. Cuanto antes lo comprendan, mejor para todos, para ellos y para nosotros. |
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Comentaris
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Re: Etarras de Coronel Tapioca .
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per MalBitxo |
26 ago 2004
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Que guai, ara el psikofatxa que s'arrosega per internet ens ofereix la possibilitat de tastar la merda que l'ha convertit en el que és. Tanta obsessió amb ETA ja cansa, insisteixen en parlar d'ETA només per evitar de parlar de la necessitat urgent d'encetar un debat obert sobre el dret a l'autodeterminació a l'estat espanyol. S'aprofiten d'ETA igual que ho va fer l'Assnar per manipular les eleccions, per electoralisme i per distorsionar la realitat. |
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Re: Etarras de Coronel Tapioca .
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per Jonatan |
26 ago 2004
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Dad de comer E.T.A. al pueblo y cagareis votos...
E.T.A. es el alimento del nacionalista español...
Salut Revolució i fora nacionalisme espanyol ranci!!! |
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Re: Etarras de Coronel Tapioca .
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per ps |
26 ago 2004
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un gran análisis, si señor. ETA está en las últimas porque utiliza lupas marca Coronel Tapiocca. Hay organizaciones que estan más acabadas, aún: utilizan mochilas y teléfonos móviles. Si es que hay que ser gilipollas.
Si ETA no ha cometido siete masacres en las últimas semanas, ha sido única y exclusivamente porque a ellos no les ha dado la gana, y han avisado previamente de dónde estaban las bombas. |
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Re: Etarras de Coronel Tapioca .
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per sbd |
26 ago 2004
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Tapioca, tapioca...
sembla el pais dels Pícaros.
"tu fantasme de què et queixes si..."
Si tinguessim ETA aquí, otro gallo cantaría.
"la lucha, cuando se pierde, se llama terrorismo, cuando se gana, revolución!" |
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POLICIA ASSASSINA
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per Nazi=Policia |
26 ago 2004
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Sin embargo la policia española (rrtzaintza, nacional o guardia civil) y el estado español no cambian...
La policia y el estado español siguen torturando a los disidentes polÃticos vascos:
1- MUERTOS BAJO TORTURA DESDE EN REGIMEN DE INCOMUNICACIÓN DESDE 1981 (antes de 1978 hubieron más pero aquà sólo hacemos constar los de vuestra “democracia�):
JOXE ARREGI IZAGIRRE, 30 años, muerto en la cárcel de Carabanchel (Estado Español) en Febrero de 1981, tras haber sido torturado durante los 9 dÃas que permaneció bajo detención incomunicada en la Dirección General de Seguridad en Madrid. Sus últimas palabras antes de morir en el hospital de Carabachel fueron “oso latza izan daâ€? (ha sido muy duro).
ESTEBAN MURUETAGOIENA SCOLA, 38 años, muerto en su domicilio en Marzo de 1982, tras haber permanecido 10 dÃas bajo detención incomunicada en dependencias policiales. La autopsia mostró evidencias de tortura.
MIKEL ZABALZA GARATE, 32 años, su cuerpo fue hallado en el rÃo Bidasoa en Diciembre del año 1985. Fue encontrado esposado. HabÃa sido arrestado por la Guardia Civil en Noviembre de 1984. El cuerpo policial alegó que Zabalza habÃa escapado. Testigos aseguraron haber visto a Zabalza tendido en una camilla en dependencias policiales y que parecÃa demasiado débil como para haber intentado huir.
GURUTZE IANTZI IGERATEGI, 31 años, muerta en Septiembre de 1993 en el cuartel central de la Guardia Civil en Madrid donde permanecÃa arrestada bajo régimen de incomunicación. Las Autoridades aseguraron que murió de un ataque al corazón. Las personas que fueron detenidas junto a ella relataron y denunciaron torturas.
XABIER KALPARSORO GOLMAIO, 26 años, muerto en Septiembre de 1993 por las heridas provocadas cuando cayó por una ventana del tercer piso del cuartel central de la policÃa española. El cuerpo policial alegó que intentó huir mientras estaba siendo interrogado. Según su propio testimonio, enviado a la organización ETA antes de morir, permaneció secuestrado durante un mes, desconociencdose en la actualidad quienes fueron sus secuestradores, aunque él mismo los identificaba como policÃas.
2- Ahora en el siglo XXI la policÃa española ha perfeccionado sus métodos de tortura y son más capaces de que una tortura no se les vaya de las manos, lo que no quiere decir que un dÃa no vuelva a ocurrir (si vuelve a ocurrir las excusas policiales y del gobierno español de turno serán también las de siempre: ha saltado por la ventana, se ha suicidado, tenÃa problemas cardiacos...). Ahora como antes la policÃa española y su gobierno de turmo siguen torturando:
Testimonio de IRATXE SORZABAL DIAZ: Me detuvo la Guardia Civil en Hernani el 30 de marzo, y desde entonces pasé 5 dÃas en sus manos.
30/03/2001, viernes: La detención se produjo a las 9.10h de la mañana, cuando salÃa de casa. Se me acercaron tres personas, sacaron la placa, se identificaron y me metieron en un coche. Me dijeron que Ãbamos a Intxaurrondo “¿Ya sabes a donde vamos? ¡A Intxaurrondo! Ya sabes lo que eso quiere decir, ¿no?â€? Llegamos a Intxaurrondo (todo el trayecto en coche me obligaron a llevar la cabeza agachada), me metieron en un edificio y me colocaron un antifaz en los ojos que me impedÃa la visión. Me cogieron las huellas, pero no sé en que papel las pondrÃan al tener la visión impedida. Vino una mujer y comenzó a cachearme. HabÃa dos hombres al lado mÃo y me obligaron a quitarme el sujetador mientras me desnudaban de cintura para arriba. Entonces los dos hombres comenzaron a sobarme los pechos, mientras decÃa “mira que tetasâ€? y cosas del estilo. Yo forcejeaba y comencé a tener arcadas, ellos empezaron a reÃrse, y medio gritando me decÃan que no hiciese teatro. Después de decirme que me vistiese me leyeron mis derechos. Me sacaron de allÃ, y metiéndome en un coche me trasladaron a Hernani a realizar el registro de mi domicilio.
Pararon el coche en la puerta del portal y me llevaron a casa con mi jersey puesto por la cabeza (antes de sacarme del coche me quitaron el antifaz). Allà habÃa muchos guardias civiles y también el juez y la secretaria del juzgado. Registraron toda la casa en presencia suya y mÃa, también el trastero, y para ello rompieron la puerta. Antes de llegar a casa para realizar el registro, me dijeron que yo irÃa delante cuando entrásemos en casa y que tuviese cuidado, porque si habÃa alguien allà ya verÃa (esto me lo dijeron en un tono amenazador).
Cuando hubieron acabado el registro, me dieron la orden de registro para que la firmara, no la firmé. El juez y la secretaria me dieron una copia que me la quitó la guardia civil y no la he vuelto a ver. Me pusieron de nuevo el jersey por la cabeza, me sacaron de casa y me metieron en el coche, serÃa sobre las 15.00h, y nada más meterme en el coche comenzó el traslado a Madrid.
En el coche Ãbamos cinco personas, 4 guardias civiles y yo. Yo iba detrás entre dos de ellos. Pude ver la cara de los dos que iban delante y del de mi izquierda. Nada más entrar en el coche el jefe me dijo “bueno, aquà se han acabado las mariconadas de derechos, jueces y mierdas, de aquà en adelante vas a saber lo que es bueno. ¿Has oÃdo hija de puta?â€?. Y me golpeó en la cabeza. De aquà en adelante me pusieron el antifaz y se sucedieron los golpes en la cabeza, los insultos y las amenazas. Menos el conductor, los otros tres me golpeaban fuertemente en la cabeza. El que estaba a mi derecha sacó un aparato que llevaba entre las piernas y comenzó a darme descargas en el costado derecho. Mientras, el que iba a mi izquierda cogió una bolsa de plástico y me la puso en la cabeza impidiéndome la respiración y casi hasta asfixiarme. Los golpes en la cabeza que me daba el que iba delante eran continuos. Y además, el que iba a mi derecha me sobaba el pecho. Todo ello, los electrodos, la bolsa, las sobadas y los golpes eran continuos entre gritos, insultos y amenazas. Perdà el conocimiento en dos ocasiones por lo menos, y me oriné encima. Antes de llegar a perder el conocimiento, rompà en un par de ocasiones la bolsa con los dientes, y entonces me colocaban otra. Al final y al ver que rompÃa las bolsas, decidieron ponérmelas de tres en tres.
Me decÃan que lo que estaban haciendo era muy suave, que cuando llegásemos a Madrid iba a saber lo que era sufrir, que los de allà eran unos animales. El de mi derecha dijo que se le habÃan acabado las pilas del aparato, las cambió y comenzó de nuevo con las descargas. En un par de ocasiones le pasó el aparato al que estaba a mi izquierda y éste también me aplicó descargas, en la parte izquierda. Eran constantes los electrodos, los golpes, la bolsa, las sobadas, los gritos, insultos y amenazas, todo a la vez.
Pararon le coche (por lo que dijeron era una gasolinera), donde estuvimos unos dos o tres minutos, tiempo en el que pararon de torturarme. Uno de ellos salió y volvió con más bolsas, diciendo que yo las rompÃa todas, pero que no habrÃa ningún problema, que tendrÃan bolsas hasta que me matasen. Nos pusimos en marcha, y más de lo mismo: la bolsa, electrodos, insultos, tocamientos, gritos, golpes...
Uno de ellos me dijo que me iban a hacer lo mismo que a Geresta o que le habÃan hecho a Basajaun, que me llevarÃan a un monte y me iban a matar. Pararon el coche (me dijeron que estábamos en el monte) y me colocaron una pistola en las manos. Yo no la querÃa coger y me seguÃan golpeando mientras me obligaban a cogerla, me dijeron que saliese del coche y que echase a correr, que entonces ellos me dispararÃan, me matarÃan y luego dirÃan que como habÃa intentado escapar me habÃan tenido que disparar, y que por eso me habÃan matado. Me obligaron a coger la pistola y bajar del coche. Me gritaron que corriese, pero yo no me podÃa ni mover, y no corrÃ. Me volvieron a meter en el coche mientras uno de ellos decÃa “vamos, vamos, al coche que viene gente, métete en el coche que viene gente. De buena te has librado zorra, porque venÃa gente que si no te matamos aquà mismoâ€?.
De aquà en adelante pusieron el coche en marcha, y más de lo mismo: la bolsa, electrodos, tocamientos, gritos, golpes, amenazas... Me decÃan de todo, entre otras cosas “hija de puta, gorda, te hemos dejado cebarte... ¿cuánto pesabas hace un año, 38 kilos?, mira, mira como te has puesto... y esto solo es el principio... ya verás cuando lleguemos a Madrid... te vas a cagar... allà será mucho peor... los compañeros que te esperan allà son unos animales... ya verás... aquà en el coche no se puede trabajar cómodo, pero ya verás allà que hay sitio de sobra y espacio y tiempo para trabajar a gusto... te vamos a matar poco a poco...â€?
Llegamos a Madrid. Más tarde sabrÃa que estábamos en la jefatura superior de la GC. Me metieron por un pasillo, y entre 6 ó 7 guardias civiles me dieron una paliza impresionante. Me dijeron que era “mi bienvenidaâ€?. Mientras me golpeaban (fueron golpes en la cabeza sobre todo), se me movió el antifaz y pude ver que eran 6 ó 7 hombres, los que me habÃan trasladado hasta allà y otros dos o tres que iban con pasamontañas. La paliza fue brutal, pero en un periodo de tiempo muy corto, durarÃa unos 20 segundos. Me golpearon con las manos y con algo duro.
Me llevan a un calabozo en volandas, me dejaron allà un cuarto de hora más o menos, y vinieron en busca mÃo de nuevo, pasando por un pasillo y unas escaleras me llevaron a una habitación del piso de arriba. Antes de meterme en la habitación me quitaron el antifaz. HabÃa un hombre que me dijo que era el médico forense, me enseñó un carné. Pero yo estaba muy nerviosa y no le creÃ. Creo que es un guardia civil y que está haciendo teatro. Me pregunta si quiero que me reconozca, pero cada vez que se me acerca yo me sobresalto por el miedo que tengo. Estoy temblando y no puedo hablar, estoy llorando y temblando... Intenta tranquilizarme pero no le creo, tengo mucho miedo. Estoy como una media hora en aquella habitación, sentada en una silla, temblando, sin poder hablar y llorando.
Sobre las 19.30h se va el forense (más tarde sabrÃa que era médico de verdad), y a mà me bajan al piso de abajo. Nada más irse el forense me colocan de nuevo el antifaz. Desde este momento hasta el mediodÃa del dÃa siguiente, es esto lo que sucede (son 16 horas seguidas, sin descanso): Me meten en una habitación que denominan “habitación Aâ€?, donde hay muchos hombres, unos diez calculo. Y se van turnando todos para torturarme. Me colocan bolsas por la cabeza hasta mi asfixia continuamente... Para ello uno de ellos me sujeta por detrás y cada vez que pierdo el conocimiento no me caigo al suelo, los golpes en la cabeza son continuos (con la mano, con un listÃn telefónico- me dicen ellos que lo es-, con una revista enrollada- esto lo puedo ver-...). Me atan las muñecas y los pies, me colocan goma espuma para que no me queden marcas. Entonces me enrollan en una manta, y me inmovilizan con precinto. Me tumban en el suelo boca arriba (solo tengo la cabeza al aire), y un guardia civil se coloca sobre mà y me asfixia una y otra vez con la bolsa. Me introduce la bolsa por la boca hasta la garganta y me tapa la nariz, hasta provocarme al vómito. Se van turnando para hacerlo, en realidad se turnan para hacerme de todo. Me desnudan (lo hacen ellos de forma muy violenta porque yo ya no tengo fuerzas), y se colocan en cÃrculo, dejándome a mà en el medio. Me obligan a hacer flexiones de dos tipos. Unas subiendo y bajando el cuerpo, y las otras subiendo y bajando los brazos. Mientras realizo las flexiones me golpean en la cabeza, y comienzan a tocarme el cuerpo, en especial el pecho, el culo y el pubis. Me colocan un palo en las manos y me dicen que me lo van a meter por el culo, me obligan a colocarme a cuatro patas en el suelo sobre la manta, me dan sopapos...
Esto ocurre durante 16 horas seguidas, constantemente entre gritos, insultos y amenazas. Se van turnando entre ellos y me dicen “ahora vienen los malos de verdad...â€?. Constantemente me amenazan con que van a violarme... Uno de ellos se quita el cinturón y se baja la bragueta (yo como estoy con el antifaz no lo veo, pero lo siento), y me dice “ahora me vas a comer la pollaâ€?... Mientras tanto los demás me dicen “ahora te vamos a echar un polvo, uno a uno, nos vamos a turnar...â€? etc., etc. También son constantes las amenazas contra mi familia, que le van a detener a mi hermana, a mi madre también y la van a violar... Uno de ellos hace que habla por teléfono dando la orden de detener a mi madre y llevarla allà (más tarde sabrÃa que era mentira). Oigo gritos y me dicen que es una amiga, y que también la están torturando (luego me enterarÃa que era mentira). Me dicen que me van a sacar de allà en helicóptero y que me van a tirar de allÃ, me dicen que tengo que aprender lo que ellos me digan, que si no van a seguir asà hasta matarme... Me amenazan con la “bañeraâ€? y con el “potroâ€? diciéndome que es lo único que me falta por probar... Me hacen preguntas entre gritos, diciéndome una y otra vez las respuestas que quieren oÃr, y cuando digo algo que no les gusta me golpean más fuerte, me dicen las respuestas para que las vaya memorizando.
En estas 16 horas me llevan en tres ocasiones a lo que ellos llaman la “habitación Bâ€?. Está al lado de la “habitación Aâ€?. Cada vez que me llevan allÃ, me obligan a sentarme en una silla, y comienzan a interrogarme y a decirme lo que tengo que responder. Me dicen que si no digo las respuestas que ellos quieren, van a seguir con el trato de hasta entonces. Y cada vez que no doy una de sus respuestas me llevan de nuevo a la “habitación Aâ€?, y me siguen torturando. Cuando estoy en la “habitación Bâ€?, me parece que están los mismos que suelen estar en la otra habitación, por las voces. En esta habitación me quitan el antifaz y puedo reconocer a los del coche entre ellos, porque los demás tienen la cara tapada.
Todo esto ocurre entre el viernes a la tarde y el sábado al mediodÃa.
31/03/2001, sábado: Sobre las 12 del mediodÃa me llevan al calabozo, y al de un cuarto de hora más o menos, me llevan al piso de arriba a donde el médico forense. TodavÃa tengo dudas respecto a él, no sé si será médico de verdad, pero estoy destrozada y me arriesgo a contarle el trato del que estoy siendo objeto, creo que si de verdad es médico me va a ayudar, y si no lo es, pues la verdad, es imposible que me hagan algo peor de lo que estoy sufriendo... Tengo mucho miedo, pero ya no aguantaba más... TenÃa la cabeza que parecÃa que me iba a explotar, un dolor de cuello terrible, un agotamiento fÃsico extremo, y comencé a enseñarle las marcas que me habÃa dejado la aplicación de los electrodos. Al verme, me dijo que me iba a llevar al hospital, salió de la habitación y entró otro médico que dijo era médico de la Guardia Civil, pero no pudo oponerse, y me llevaron al hospital, a urgencias. Allà me tuvieron hasta las 19.00 h más o menos haciéndome diferentes pruebas.
Primero me observa un médico de medicina interna, hace un informe de las lesiones que tengo, le digo que me las ha provocado la guardia civil con su trato, electrodos, golpes... Me reconoce y manda que me realicen diferentes pruebas, un escáner, una placa de las cervicales. También viene un dermatólogo y tras sacarme fotografÃas de las marcas que me han dejado los electrodos, me practica una biopsia en la piel herida. Cuando vuelve el médico de medicina interna me dice que tengo dos cervicales movidas y me manda al traumatólogo, ya que seguramente me van a tener que colocar un collarÃn. El traumatólogo tras mirarme el cuello, sin hacerme demasiado caso, me receta unas pastillas y punto (paracetamol).
El médico forense me dice que va a remitirle los informes y las pruebas al juez, pero hoy es el dÃa en que todavÃa no tengo noticias de aquellas pruebas.
Cuando salimos del hospital, me llevan de nuevo a la comisarÃa de la GC. Nada más bajar del coche, uno de ellos me dice al oÃdo “¡te vas a cagar!â€?. Me llevan directamente a la “habitación Bâ€?, sin antifaz, me sientan en una silla y delante está el jefe sentado tras una mesa, detrás de mà hay más guardias civiles pero solo puedo ver a tres, porque cada vez que miro para atrás, me gritan que no les mire.
El jefe comienza a hablarme, y me dice que están muy enfadados conmigo. Me dice que en adelante tengo que hacer lo que ellos me manden, y que tengo que declarar palabra por palabra lo que me manden. Me dice que tengo tres opciones:
Si no realizo la declaración policial, van a seguir como hasta entonces, es decir, torturándome sin parar; la bolsa, electrodos, golpes... Que el jefe que está por encima de él conoce bien el trato que me están dando, y que no tienen ningún problema por ese lado.
Si subo a prestar declaración, pero no digo palabra por palabra lo que ellos me dicen que tengo que decir, el trato va a ser peor del que hasta entonces venÃa sufriendo, que en los tres dÃas que quedaban me iban a hacer sufrir hasta matarme.
Si realizo la declaración como ellos me han dicho, no me iban a poner una mano encima y me iban a dejar dormir tras la declaración.
Me dicen que no tengo derechos y que tengo que elegir una de las tres opciones. Yo estoy destrozada fÃsica y psicológicamente y les digo que realizaré la declaración que ellos quieran. Me obligan a repetirla una y otra vez hasta aprendérmela de memoria, y me llevan a otra habitación, con los ojos cerrados y mirando al suelo. Llevo medio cuerpo torcido porque a causa del dolor de cuello no puedo mirar para abajo torciendo solamente el cuello. En esta habitación hay un hombre sentado que me dice que es el abogado de oficio. Me sientan en una silla que está delante de él, delante de mà hay una mesa con sillas donde están sentados el instructor, que es el que hasta entonces me decÃa que era el jefe, y otro hombre escribiendo en el ordenador. Declaro lo que ellos me han obligado a aprenderme de memoria, por el miedo que tengo.
01/04/2001, domingo: por la mañana tengo un interrogatorio que durarÃa unas cuatro horas en la “habitación Bâ€?. Me obligan a aprender cosas nuevas, y me dicen que esa tarde tengo que realizar otra declaración. De nuevo me dan las tres mismas opciones del dÃa anterior, entre amenazas... Me llevan al calabozo y me dan una pastilla para el dolor. La tomo porque son insoportables el dolor de cabeza y de cuello que tengo.
Al mediodÃa viene el médico forense a reconocerme, ve que fÃsicamente estoy mejor, pero no me atrevo a decirle que me están presionando para que realice la declaración que ellos quieren, porque tengo mucho miedo de que si le digo algo vuelvan con el trato anterior a llevarme al hospital.
Por la tarde realizo la segunda declaración policial. Como ellos me han obligado digo lo que me han hecho aprenderme. El abogado de oficio se da cuenta de que me encuentro mal, porque para levantarme de la silla me tienen que ayudar entre dos guardias civiles, y pregunta si me pasa algo. Pero uno de los guardias civiles le dice que estoy bien y no me pasa nada. Me lo pregunta directamente a mÃ, y como estoy aterrorizada le digo que estoy bien, aunque creo que no podÃa estar peor.
Los dos dÃas restantes los paso como el domingo, me llevan del calabozo a la “habitación Bâ€?, me aprendo lo que quieren que declare y de nuevo a realizar otra declaración... Todo ello entre constantes amenazas.
El forense viene todos los dÃas, pero yo sigo sin atreverme a contarle lo de las amenazas, porque no quiero que el trato vuelva a ser el de los dos primeros dÃas... Los últimos dÃas soy torturada psicológicamente, mediante amenazas etc. El domingo cuando estoy en el calabozo entran dos guardias civiles gritando y me golpean en la cabeza, pero quitando ésto, en los tres dÃas restantes no me torturan fÃsicamente. Aunque me ofrecen comida, no como casi nada, por lo que me encuentro muy débil fÃsicamente.
El martes por la noche entra el jefe al calabozo y sin gritar, hablándome, me amenaza de nuevo diciéndome que al dÃa siguiente me van a llevar a la Audiencia Nacional, y que lo que tengo que hacer es reafirmarme en las declaraciones policiales. Que si no hago lo que él me dice van a detener a mi familia, a mi madre, y que van a tratarle como lo han hecho conmigo, y que además le van a meter colaboración. Pero que ello no ocurriese estaba en mis manos. Yo, aterrorizada aún, le digo que voy a hacer lo que él me diga.
El martes a las seis de la mañana me dicen que me cambie de ropa, y el jefe me amenaza de nuevo para que declare ante el juez. Me meten en una furgoneta y me trasladan a la Audiencia Nacional. Antes me reconoce el medico forense de nuevo.
Ante el juez declaro incomunicada, sin la presencia de mi abogado de confianza. Entonces ya sé que tras haber pasado 5 dÃas en manos de la Guardia Civil, no voy a volver a sus manos, y me niego a declarar, porque no está presente mi abogado de confianza, y le relato al juez el trato del que he sido objeto.
Vuelvo a los calabozos de la Audiencia Nacional y viene de nuevo el médico forense a reconocerme y a realizar otro parte de lesiones. Me levantan la incomunicación y puedo estar con mi abogado, al que le relato el trato.
Recibo la orden de ingreso en prisión y me llevan a Soto del Real. Me vuelven a hacer otro parte de lesiones porque las marcas de las torturas padecidas son visibles.
Fotos que evidencian las torturas a Iratxe Sorzabal Diaz: http://www.stoptortura.com/irudiIkus.php?gai=Tortura%20probak&ord=filena
Testimonio de UNAI ROMANO: Alrededor de las 4.00 del dÃa 6 de setiembre de 2001, estoy durmiendo y me despiertan unos ruidos. Salgo al pasillo y veo unos guardias civiles discutiendo con mis padres. Me acerco y me preguntan si soy Unai Romano, a lo que contesto que sà (...) Me dicen que estoy acusado de «colaboración con banda armada», y en ese momento empiezan a subir por las escaleras guardias civiles vestidos de paisano y la secretaria del Juzgado. Me ponen las esposas y me dicen que van a registrar el piso.
Empezamos por mi cuarto. Miran papel por papel, libro por libro. El registro de mi cuarto es eterno (...) Lo que les interesa lo van dejando encima de la mesa (...) Luego se levanta acta de todas las cosas que se llevan de mi cuarto y pasamos al siguiente (...) La secretaria se empieza a cansar y el mando de los guardias civiles les dice que vayan más rápido (...) Se ha levantado acta de todo, y cuando parece que se ha terminado todo se acuerdan del camarote. Cuando estamos entrando no se fÃan y se cubren conmigo, mientras tienen la mano en la pistolera. Cuando bajamos a casa, me permiten que me duche, me vista y me despida de mis familiares pero sin abrir la boca, como ha sucedido en todo el registro.
Me bajan al soportal y me ponen contra una esquina mientras ellos discuten de cómo me sacan (...) Al final, me tapan y me llevan dos de ellos. El coche me lleva a un sitio que desconozco. Todo el trayecto lo he hecho en silencio y con la cabeza entre las piernas. Nada más bajarme del coche hay unas escaleras, no me avisan y me caigo de rodillas en ellas. Me meten a un calabozo con pasamontañas y me ponen contra la pared. Tengo problemas para respirar y el guardia civil que me cuida dice que no tengo derecho a respirar.
Me meten en una furgoneta, al rato, y sin esposar me llevan a Madrid. El viaje se realiza a gran velocidad, según deduzco por el ruido que saca el motor. Durante el traslado se mete alguien en donde estoy yo y me pregunta por qué creo que me han detenido. Le respondo que es porque conozco a algún detenido. El me aconseja, como amigo, que colabore. Me dice que hasta el momento ellos se han portado bien conmigo, y que colabore.
Me llevan a una comisarÃa, me ca- chean y me dan cuatro consejos muy importantes allÃ: obedecerles, tener los ojos cerrados, no mirarles a ellos a la cara y, si me cruzo con algún otro detenido, no mirarle. Me meten en un calabozo y me obligan a permanecer de pie.
Al cabo de un rato empiezan los interrogatorios. Me piden que colabore continuamente, mientras me golpean en la cabeza con unos palos forrados en espuma o cinta aislante. Que si conozco a fulano, que si conozco a mengano, que si puse un coche bomba, que si disparé a alguien... Me dicen que he hecho todo ese tipo de cosas, lo que yo niego rotundamente. Al instante de negarlo, me golpean tres o cuatro veces con los palos forrados. Luego me preguntan de nuevo. Cuando estoy grogui paran y me preguntan sobre la cuadrilla, sobre los familiares, sobre dónde poteaba en la Parte Vieja de Vitoria, sobre camareros, temas sobre el trabajo, polÃtica, ikastolas, gaztetxes. Cuando me tranquilizo un poco y después de que me den un poco de agua agua que me recupera mucho, no sé si estarÃa drogada o algo por el estilo empiezan de nuevo (...)
Todos los interrogatorios los hago con un antifaz puesto en los ojos (...), y por encima del antifaz me ponen un pasamontañas. Cada vez los interrogatorios son más duros y me llegan a colocar hasta tres pasamontañas. Yo creo que es para amortiguar los golpes, pero la sensación de agobio es terrible, y no paro de sudar la gota gorda.
Otra cosa que me hacen es la bolsa. Me colocan una bolsa en la cabeza y la cierran aguantándola, y asà hasta que me tambaleo. Me lo hacen hasta unas ocho veces en total. Luego lo mismo; cuando estoy atontado, preguntas sobre mi forma de vivir, de dónde andaba y con quién, más agua y vuelta a empezar.
También me obligan a realizar flexiones. Estoy de pie y me hacen ponerme en cuclillas a esto le llaman «el ascensor». Me tienen mucho tiempo haciendo esto y acabo totalmente empapado en sudor. En una de éstas me hacen firmar una hoja para el Juzgado, según creo recordar, que tengo que volver a repetir ya que la he dejado totalmente mojada del sudor que me cae de la cabeza y del que tengo en las manos y brazos (...)
Durante los interrogatorios oigo gritos de dolor de otra gente. No sé quiénes o si los producen ellos mismos, pero son espeluznantes (...) En una de éstas, cuando me sacan de un interrogatorio y me tienen en el calabozo de pie, entra uno de ellos y solamente me coloca el antifaz (...) y me lleva a una habitación donde está una mujer. Se identifica como médico forense y me enseña su carné (...) Me pregunta por mi estado de salud en general, y le digo que estoy reventado fÃsicamente y lo de los golpes en la cabeza. Me pregunta por las operaciones que habÃa tenido y le comento lo de mi arritmia asintomática (...) Los guardias civiles están detrás de la puerta y me imagino que ellos nos oirÃan a nosotros como nosotros les oÃmos a ellos.
Me meten en el calabozo y, a los pocos minutos, me ponen el antifaz y la capucha o capuchas. Me meten en otro lugar y me preguntan qué le he dicho a la médico forense. Empiezo a contárselo y me interrumpe uno de ellos gritándome como un loco que ya sabÃa lo que le habÃa dicho. Al instante, me golpea unas veinte veces seguidas con aquellos palos, creo.
Empiezan los interrogatorios. Estos son mucho más salvajes que los anteriores. Las preguntas son las mismas o parecidas (...) Siempre que contesto que no, me golpean duramente. Yo estoy de pie. Me preguntan constantemente y me caen golpes cada vez más fuertes, pero ahora me van girando ellos, una vuelta para aquÃ, media para allá, ahora para aquÃ..., todo ello entre golpes y preguntas intercalándose constantemente. Dos guardias civiles me suben en sillas y comienzan a golpearme desde arriba. Cada vez están más agresivos y los palazos que me meten son ya de campeonato. Los golpes son siempre en la cabeza y en la frente. No sé cuánto tiempo llevo ni qué hora es (...)
Me tienen haciendo ese tipo de flexiones, de pie, en cuclillas, de pie..., pero cuando estoy en cuclillas me golpean en la cabeza y con el mismo impulso del golpe me caigo al suelo, aunque siempre me cogen antes de que caiga del todo (...) Me dejan descansar y me dicen que soy el único «hijo de puta» que no ha hablado y que como no les diga nada, voy a salir como «el Lasa ése» (...)
Más agua, más preguntas y empezamos. Ahora me tienen sentado en una silla. Ya no me aguanto de pie, y me gol-pean constantemente. Las preguntas ya no son tan habituales, pero los golpes son constantes. Me tienen en una silla con respaldos para los brazos y ando grogui de un lado para otro. No quieren que me desmaye, y cuando ven que no puedo más, se controlan un poco. Uno de ellos me habla al oÃdo suavemente diciéndome que diga cualquier cosa, que me lo invente, que ése es su trabajo (...) Luego viene y le digo que no lo he hecho, se pone histérico y me dice que a partir de ahora le voy a rogar que me mate. Me agarran entre unos y me golpean más fuerte en la cabeza. Ellos se cansan y se van turnando. Me ponen los electrodos con una porra eléctrica en los genitales, en el pene, en la parte superior de la oreja, y detrás de las orejas. También me ponen la bolsa, y me siguen golpeando.
Estoy roto y me empiezan a amenazar con que mi novia y mi hermano están de camino y que les van a hacer el doble de lo que me han hecho a mà (...) Los golpes continúan mientras me agarran entre algunos y me empiezan a decir que han detenido a mi madre y que está camino del pantano que está cerca de Vitoria. Los golpes continúan. Yo les ruego que dejen a mi madre, que nunca ha hecho nada. Me dicen que le están haciendo «el ascensor» en la presa, atada por los pies y en el agua. Se oyen llamadas como que están hablando con los del pantano. Uno de ellos pega un grito y se callan todos. Me sientan en una silla y uno de ellos me comunica que mi madre ha fallecido (...)
Me llevan al calabozo y me dejan allà alrededor de una hora. Mi situación es brutal. Se me está hinchando la cabeza a una velocidad increÃble, y ya no veo nada. El pensamiento me juega una mala pasada y me creo lo de mi madre. La cabeza me está quemando y lo único que quiero es salir de allÃ. De repente viene uno de ellos y me ve que me estoy levantando de la cama (...) Me quema la cabeza entera, me la palpa y está exageradamente hinchada, me duelen los ojos y siento como si me fuera a estallar la cabeza. Lo de mi madre me tiene histérico y decido autolesionarme mordiéndome las muñecas. Tengo, o mejor dicho noto ,una pequeñas marcas en las muñecas y primero con los dedos y luego con la boca logro lesionarme.
De repente, viene uno de ellos y me dice que me levante y que le acompañe. Me coge las manos por detrás y se da cuenta de lo de las muñecas. Me llevan por los pasillos, me suben las escaleras y me meten en una habitación. La médico forense está asustada, pregunta qué me ha pasado y qué me han hecho. El guardia civil le dice lo de las muñecas, y se va. Me dejan con ella, estoy histérico, no reconozco la voz de esa mujer y no puedo verla (...) Me obliga a sentarme y me pregunta qué tal estoy, a lo que le contesto que me va a estallar la cabeza.
Son las 10.00 del 7 de setiembre. Pide un coche urgente a los guardias civiles y nos dirigimos al hospital (...) Ellos me quieren llevar a un hospital militar, pero la médico dice que no, y que vamos al hospital «no sé qué universitario», no me acuerdo del nombre. Por el camino me pongo histérico, y le digo al médico forense que han matado a mi madre y que llame a mi casa (...) Llegamos al hospital, por urgencias, creo. Me sientan en una silla de ruedas y me curan lo de las muñecas. La médico forense se va a hablar con los médicos (...) Luego viene la médico forense, que me dice que ha llamado al juez y que no le ha pasado nada a mi madre. Me sigue dando la mano y tranquilizándome.
Me empiezan a hacer las pruebas. Su mayor preocupación es que no me hayan roto el cráneo o, mejor dicho, que no tenga rotura craneoncefálica (...) No sé durante cuántas horas me tienen allÃ, pero la médico forense me comenta que me voy a quedar ingresado en aquel hospital. Me dice que está en contacto con el juez y que ya sabe qué ha pasado.
Cada vez que me hacen una prueba, la médico forense viene y me dice que no tengo rotura de cráneo. El dolor me mata vivo y no me quieren dar nada hasta que no tengan los resultados de todas las pruebas. Ella me sigue dando la mano. Con el paso del tiempo, me dicen que no tengo rotura craneoencefálica y que tengo un edema y contractura muscular en el cuello. Tengo toda la cabeza y el cuello hinchados. La médico forense me dice que tengo toda la cabeza morada y los ojos negros, pero que es normal con un edema. Me quieren poner un collarÃn, pero como tengo el cuello tan hinchado no me sirven los que tienen allÃ, me quedan todos pequeños y tardan una hora en encontrar uno que me pueda poner.
En un momento dado, le comento a la médico forense lo que me han hecho, y cuando le digo lo de los electrodos, me mira la oreja y me dice que la tengo quemada por la parte de arriba y que detrás está hinchada (...)
Me hacen un reconocimiento médico completo, con todo tipo de pruebas de coordinación (...) Queda por verme el oftalmólogo, ya que no puedo abrir los ojos. Viene la médico forense y me dicen que me llevan a la enfermerÃa de una prisión, pero que primero tenemos que ir a comisarÃa, donde he estado anteriormente, y que después me llevan a prisión. Me entra un miedo atroz, pero ella me tranquiliza diciéndome que el juez lo sabe y que no me van a hacer nada (...)
Me llevan a la comisarÃa y me meten junto con la forense en su habitación. Ella pide la silla más cómoda que tengan y me traen una sin apoyabrazos. Me siento con ella. Me traen hielo y me lo pongo unos segundos en cada lugar que creo oportuno (...) Me traen la comida, aunque más o menos son las 18.00. La comida consiste en dos yogures y un sandwich. La médico forense se sienta a mi lado y me da de comer los yogures. El sandwich no puedo masticarlo y no me lo como. Ella se tiene que ir y me deja solo alrededor de dos horas. Durante ese tiempo tengo a dos guardias civiles fuera de la habitación, mirándome y riéndose continuamente. Se van turnando y se rÃen del aspecto de mi cara, mientras me dicen cosas del estilo de que soy un cerdo, un monstruo, y más tonterÃas del estilo. Yo mientras tanto, permanezco quieto y sólo me muevo para colocarme el hielo. Hacen amagos de venir pero no me tocan ni un pelo mientras permanezco en aquella habitación. El dolor persiste y lo ! único que me calma es darme hielo y estar quieto (...)
Oigo cómo viene uno gritando que trae mi cena y escucho como agitan los yogures y se los beben mientras se rÃen. Pasa el tiempo y los dolores empiezan a aumentar de nuevo. Me quejo de dolor y mandan a algunos de ellos a buscar a la médico forense, pero pasa el tiempo y no aparece nadie. De repente viene uno de ellos con una ampolla y dice que es para mÃ. Pero yo no me fÃo y pego un traguito pequeño y, como sabe a rayos, cuando oigo que se aleja vacÃo todo el vaso en una silla acolchada de ésas de tela que tengo a mi lado (...) Ese medicamento es muy fuerte y lo poco que bebo me produce unas enormes ganas de dormir, por lo que tengo que hacer un gran esfuerzo para no dormirme.
A la hora, aproximadamente, me meten en un coche y empiezan a hacer tonterÃas mientras nos dirigimos a un lado que no sé. Meten grandes acelerones y luego frenan bruscamente, ponen las sirenas y andan en zig-zag. La música la tienen muy alta y paran el coche en un par de ocasiones, se bajan los que van sentados delante y hacen como que abren la puerta, pero luego seguimos adelante. En una de las ocasiones en que hacen un zig-zag, tengo que apoyar la cabeza en el cristal para no golpearme, y noto que tiene una cortina (...)
En una de estas ocasiones paramos, y el guardia civil que va a mi lado me pregunta si quiero hablar con la Guardia Civil. Yo le respondo que no y me bajan del coche. Comienzo a oÃr ruidos y puertas que se abren y se cierran continuamente. Creo que estoy en una prisión, pero no me fÃo. Me sacan dos fotos y me toman las huellas (...)
Estoy totalmente ciego y algo atontado, y me llevan ante los médicos. Me miran por encima, me preguntan algo y me dicen que me van a poner un apoyo para dormir, ya que no puedo valerme por mà mismo, y me meten en una celda con dos camillas, un baño, un labavo y una ducha. El apoyo es un colombiano que me ayuda a acostarme, a orinar y a levantarme de la cama. Me dan otras pastillas y duermo unas horas, según me dice el apoyo. Por la mañana hablamos y me dice que tengo la cara totalmente hinchada, con los ojos negros y todo el resto morado, menos la punta de la nariz y los labios, que tienen un color normal. Me cambian de apoyo, y me ponen otro (...)
Me entero que he llegado a la cárcel el dÃa 8 de setiembre, sobre la una de la madrugada. Estoy en Soto del Real, en el módulo de enfermerÃa, en la zona de aislados.
A las dos horas de llegar el segundo apoyo, me comunican que estoy incomunicado y no puedo tener apoyo. A partir de ese momento, tengo que ir palpando todo, para poder ir al baño, a la cama, a comer (...)
Pasa el sábado dÃa 8 y el domingo 9, hasta la tarde. Me pego una ducha y empiezo a ver algo. Al principio es borroso, pero con el paso de las horas veo mejor. Tengo los alrededores de los ojos negros, lo que es el blanco del ojo ensangrentado, toda la cara hinchada y oscurecida, y el cuello y los hombros, hasta el pecho, oscurecidos también (....)
No puedo dormir, ya que al apoyar la cabeza en la almohada me duele, y le digo al médico que me aumente el medicamento. Quedamos en que me va a dar dos Nolotil, pero me da una pastilla verde y blanca que resulta ser demasiado fuerte. He estado en dos ocasiones a punto de caerme al suelo, mareado, y le digo que no la quiero más y que me dé dos Nolotil.
Me tiene 24 horas al dÃa encerrado en la celda de enfermerÃa, y no quieren que me vea nadie ya que mi cara es bastante espectacular según me dicen los apoyos, ya que ellos sà que me ven al darme la comida. Sigo durmiendo muy mal.
El lunes, dÃa 10 de setiembre, viene otro médico forense del juzgado (...) Toma nota de mi estado, sobre todo de la cara y del cuello, y cuando le quiero comentar algo, me dice que aquéllo es un mero trámite para poder pasar ante el juez. Acordamos que estoy en condiciones de pasar, no en muy buenas, pero accedo. Por la noche me comunican que me van a levantar a las 7.00 del dÃa siguiente, el 11 de setiembre.
Me llevan a ingresos, me dan de desayunar y luego me ponen en manos de la Guardia Civil, que me va a llevar a la Audiencia Nacional. Le comunico al guardia civil que me va a colocar las esposas que tengo las muñecas heridas y que no me las ponga, a lo que me responde con que si tengo un papel médico que diga eso. Le digo que no y me esposa a la espalda.
El viaje a la Audiencia resulta muy duro, ya que todavÃa no me encuentro muy bien. Una vez allà me dejan en manos de la PolicÃa Nacional, y uno de ellos comenta al otro que me han hecho «la del pulpo» (...) La secretaria del juez me lee mis derechos, designo a Iker Urbina como mi abogado y digo que quiero ver al médico forense.
Me llevan al calabozo y al rato me sacan para llevarme delante del médico forense. Le digo que tengo un dolor que es nuevo en la mitad del pecho, que se agudiza al moverme y que me deja tres o cuatro segundos sin respiración (...) Le cuento los tipos de torturas y toma nota, pero me dice que eso se lo diga al juez (...) Me llevan al calabozo, y al rato me suben ante el juez.
El trayecto desde el calabozo hasta el despacho del señor juez lo hago con una chaqueta en la cabeza que me impide ver nada. Empieza la toma de declaración, respondo a las preguntas y niego las acusaciones. Cuando me pregunta si quiero añadir algo más le comento las torturas y malos tratos que he sufrido y empiezo a contárselas. Al cabo de medio minuto, me interrumpe diciéndome que lleva muchos años trabajando con la Guardia Civil y que mucha gente dice sufrir las torturas y que no me cree. Dice también que además, al no haber declaración policial, que ése no es el sitio indicado para denunciarlo, y que vaya al Juzgado para poner una denuncia. Me quedo perplejo, le miro a la secretaria y asiente con la cabeza. Mi abogada de oficio no me quita la vista de la cara y tampoco no dice nada (...)
Me bajan al sótano con la chaqueta puesta de nuevo en la cabeza y me meten en una furgoneta de la Guardia Civil que me lleva de nuevo a la prisión. Yo esperaba poder ver a mi abogado, pero al parecer no quieren que nadie me vea la cara.
Una vez en prisión les digo que quiero hacer la llamada que me corresponde ya que me encuentro comunicado, y me dicen que hasta que llegue la notificación no puedo hacerla.
Me sacan de aislamiento y me llevan a una zona de hombres. A la mañana siguiente pasa el médico y me dice que hasta que no me desaparezcan las marcas de la cara voy a seguir en la enfermerÃa (...) Para el dÃa 14 creo estar en bastantes buenas condiciones para que me trasladen al módulo, pero no me llevan hasta el dÃa 18, que es cuando han desaparecido todas las marcas, o casi todas (..)
He tardado tanto en escribirlo porque cada vez que me ponÃa a describir lo que pasó me ponÃa muy nervioso y tenÃa que ir poco a poco. Se me ha olvidado comentar que en los interrogatorios me hicieron estar mucho tiempo desnudo.
Fotos que evidencian las torturas a Unai Romano: http://www.stoptortura.com/irudiIkus.php?bilaBai=0&ikus=10&guztira=20&or
3- Ahora, como antes, la policÃa sigue asesinando a ciudadanos vascos:
3.1- A trabajadores: El 3 de marzo de 1976 la policÃa mataba en Vitoria a 5 trabajadores y herÃa a más de 100, de ellos 20 de gravedad. Ese dÃa, miércoles de ceniza, se habÃa convocado una huelga general que estaba siendo seguida de forma casi absoluta en fábricas y otros centros de trabajo, centros de estudio, comercios, bares, etc. La ciudad, paralizada desde primeras horas de la mañana, habÃa conocido ya antes de la matanza que tendrÃa lugar en la asamblea celebrada en la iglesia de San Francisco, en el barrio de Zaramaga, a las 5 de la tarde, duros enfrentamientos con la policÃa con el saldo de algunos heridos de bala.
En el desalojo de la asamblea obrera de la iglesia de San Francisco (5.000 asistentes en el interior y varios miles en el exterior a los que la policÃa no dejó entrar), la policÃa disparó balas a mansalva. Pedro MarÃa MartÃnez Ocio, de 27 años y Francisco Aznar, de 17, murieron allà mismo. Romualdo Barroso, herido por una ráfaga de arma automática al escapar por una ventana de la iglesia, morÃa a las 11 de aquella noche y Bienvenido Perea, de 30 años, también herido en San Francisco, morirÃa dos meses después, el 5 de mayo de 1976. TodavÃa habrÃa un muerto mas en Vitoria. José GarcÃa Castillo, de 32 años, fue baleado por la policÃa cuando intentaba retirar su coche de una barricada y murió el domingo dÃa 7. CerrarÃa la cuenta fúnebre de aquellos dÃas Vicente Antón Ferrero, trabajador de 18 años, muerto por la Guardia Civil en Basauri (Vizcaya), en la huelga general del lunes 8 de marzo, cuya convocatoria cosechó en el conjunto de Euskadi el nivel de paro y movilización mas alto nunca alcanzado hasta entonces.
El 14 de marzo de 2004 Un policÃa mata a tiros a un abertzale de Iruñea
·Angel Berrueta, de 60 años, se habÃa negado al parecer a colocar un cartel contra ETA en su panaderÃa
Un agente de la PolicÃa española cuya identidad no ha sido facilitada, ni siquiera sus iniciales, acabó ayer, a tiros, con la vida del vecino de Iruñea Angel Berrueta, en la panaderÃa que regentaba en el barrio de Donibane. Según la versión difundida en la zona, la mujer del policÃa habrÃa intentado poco antes que Berrueta, miembro de Gurasoak, colocara un cartel que atribuÃa a ETA los atentados de Madrid, a lo que éste se negó. Lo que está confirmado plenamente es que el policÃa bajó entonces de su casa, anexa a la panaderÃa, y disparó cuatro tiros con su arma, causándole la muerte.
Ramón SOLA
IRUÑEA
Muerto por negarse a poner un cartel contra ETA tras las explosiones de Madrid. Esta es la versión de vecinos del barrio iruindarra de Donibane sobre lo ocurrido ayer, alrededor de las 14.00, en la calle MartÃn Azpilikueta. Aproximadamente a esa hora, un agente de la PolicÃa española cuya identidad mantienen en secreto las fuentes oficiales bajó de su domicilio, situado justo en el primer piso del portal anexo las ventanas quedarÃan sobre la lecherÃa de Berrueta y le disparó a bocajarro con su arma.
Todos los intentos de reanimar a este vecino de Iruñea de 61 años, muy conocido en el barrio y miembro de Gurasoak desde su fundación, fueron vanos. Pese a que fue asistido en el mismo lugar y trasladado con urgencia al Hospital de Navarra, murió casi al instante. La noticia corrió con rapidez y provocó una intensa conmoción en el barrio de la capital navarra y en toda Euskal Herria.
El policÃa, según la versión de la Delegación del Gobierno español en Nafarroa, llamó posteriormente a la Jefatura Superior de PolicÃa para explicar que habÃa disparado contra Angel Berrueta. «Los agentes desplazados al lugar verificaron los hechos y detuvieron a su compañero», explicaron agencias de información. La Delegación del Gobierno se limita a añadir que la propia PolicÃa española es quien se va a encargar oficialmente de investigar qué es lo ocurrió antes.
Mientras las autoridades callan, los vecinos aseguran que hubo algún testigo de que el panadero mantuvo previamente un cruce de palabras con la mujer del policÃa que lo mató. Según se afirma, ésta habrÃa entrado al local con la pretensión de que Berrueta colocara en él un cartel contra ETA, tratando asà de adjudicar a esta organización la autorÃa de los atentados de Madrid. Al parecer, el fallecido le habrÃa respondido que no y que, en todo caso, lo colocara en el exterior.
La PolicÃa cortó rápidamente el acceso a los portales para impedir hablar con los testigos directos, pero durante la jornada trascendieron algunos detalles sin confirmar sobre lo ocurrido. AsÃ, se asegura que una mujer que vive en el número 18 de la calle MartÃn Azpilikueta se encontró con el policÃa cuando entraba al portal y que éste le indicó a gritos: «Voy a pegarle cuatro tiros a ese hijo de puta». La testigo explicó que muy poco después se oyeron varios disparos.
El Servicio de Urgencias del Hospital de Navarra confirmó la defunción de Angel Berrueta y apuntó a que recibió posiblemente cuatro impactos de bala. En concreto, presentaba orificios en el pecho, el hombro y la nalga. Uno de ellos le alcanzó la zona preauricular junto al corazón. Según explicó, llegó al Hospital a las 14.18, y su defunción se certificó poco después, a las 14.38 horas. La Delegación del Gobierno español dijo que ingresó ya cadáver.
Desde la oficina que dirige José Carlos Iribas se afirmó luego que dos personas han sido detenidas por la muerte de Berrueta: el autor de los disparos y su hijo, que también habrÃa participado en la discusión previa, aunque ningún testigo dio cuenta de ello. Se da la circunstancia de que aproximadamente una hora después de los disparos, una persona que los vecinos identificaron como el hijo del policÃa salió del número 18 de MartÃn Azpilikueta junto a los policÃas. Iba sin esposar y caminaba solo.
La Delegación del Gobierno del PP no ofreció más datos y señaló que se está investigando lo ocurrido. Precisó únicamente que la Jefatura Superior de PolicÃa ha propuesto la suspensión inmediata de funciones para el agente, y puso interés también en remarcar que «se encontraba fuera de servicio».
La mujer del policÃa, según los datos existentes, no ha sido detenida. El funeral por Angel Berrueta será mañana en Iruñea
Angel Berrueta Legaz deja tres hijos y una hija. Dos de ellos Enekoitz e Imanol fueron detenidos hace varios años acusados de kale borroka, por lo que el fallecido ha estado muy implicado en Gurasoak desde el momento de su fundación. Su esposa, Mari Carmen Mañas, también es miembro de la asociación de familiares de jóvenes y ejerció en su dÃa como portavoz en algunas movilizaciones. El matrimonio regentaba la panaderÃa-lecherÃa de la calle MartÃn Azpilikueta desde hace bastante años, y Angel, siempre con su inconfundible txapela, era muy conocido por ello. Los funerales tendrán lugar mañana a las 20.00 en la parroquia de La Asunción, muy cerca de su casa y del lugar en que murió. Etxerat y Gurasoak animan a acudir.
3.2- A mujeres en manifestaciones: El 24 de junio de 1995, en San Sebastián, y
como consecuencia de un impacto de una pelota de goma
disparada a bocajarro por agentes de la Ertzaintza, tuvo que ser
hospitalizada ROSA ZARRA MAR�N, de 58 años de edad, que
ingresó en la UVI de la Residencia de Nuestra Señora de Aranzazu.
El 30 de junio, Rosa Zarra murió al agravársele las heridas
sufridas.
El 24 de junio se celebraban, en las cercanÃas de Anoeta, en
la capital guipuzcoana, concentraciones de los trabajadores de la
empresa Alditrans, en petición de la libertad de José MarÃa
Aldaya, en poder de ETA, y de miembros de Herri Batasuna que
protestaban por la violencia policial, dÃas antes, contra las
personas que esperaban los restos de José Antonio Lasa y José
Ignacio Zabala, asesinados por los GAL en 1983 y cuyos restos
hacÃa poco habÃan sido identificados .
Agentes de la Ertzaintza atacaron a los segundos con
abundante material antidisturbios. Testigos de lo que ocurrÃa fue
un numeroso grupo de mujeres, que aguardaban el fin de los
enfrentamientos bajo unos soportales. Repentinamente, dos
agentes se acercaron al grupo y dispararon contra ellas a
bocajarro. Uno de los disparos impactó en Rosa Zarra y le reventó
el intestino grueso causándole una grave peritonitis.
15 de marzo de 2004: Muere una mujer, Kontxi Sanchiz, en Hernani al cargar y disolver duramente la ertzaintza una manifestación
Gara
Hoy al mediodia se estaba realizando una manifestación en Hernani en protesta por la muerte de Ã?ngel Berrueta ayer por la policÃa española que ha sido disuelta duramente por la ertzaintza. Al ver lo violento de la situación, Kontxi Sanchiz, hernaniarra de 58 años , ha caÃdo al suelo sin conocimiento. La han trasladado al hospital en ambulancia, muriendo en el camino. Contra estos hechos, se ha convocado una manifestación hoy en Hernani a las 8 de la tarde.
Kontxi Sanchiz, hernaniarra de 58 años, estaba participando en una manifestación de 200 personas en denuncia por la muerte de Agel Berrueta, muerto ayer en Iruñea por la policÃa española.
La ertzaintza ha parado la manifestación y ha pedido la documentación a los portadores de la pancarta. Después, han dicho que la manifestación podÃa continuar sin problemas.
Al escucharse unos gritos en contra por parte de los manifestantes, se han acercado a detener a una persona. Al mismo tiempo han empezado a disolver a los manifestantes a pelotazos, y entonces, Kontxi Sanchiz ha caÃdo al suelo sin conocimiento.
"A la ertzaina no le importa"
Viendo la gravedad de la situación los presentes han llamado a una ambulancia, y viendo que esta tardaba mucho han pedido a los ertzainas que llevasen a la mujer al hospital. La respuesta de estos, según nos ha comentado un testigo, ha sido: "A nosotros no nos importa". Contra estos hechos, se ha convocado una manifestación hoy en Hernani a las 8 de la tarde.
ESTO ES SOLO UNA MUESTRA DE QUE LA POLIC�A ESPAÑOLA Y SU GOBIERNO NO CAMBIAN, Y QUE LA REPRESIÓN, LA TORTURA Y EL ASESINATO SON SUS ÚNICAS RESPUESTAS CONTRA LA GENTE QUE PIENSA DIFERENTE A LO QUE ELLOS DICTAN. |
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Re: Barrena: "La izquierda abertzale sigue en la centralidad del panorama polÃtico"
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per gara.net |
27 ago 2004
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A DOS AÑOS DE LA ILEGALIZACIÓN DE BATASUNA DICTADA POR EL ESTADO ESPAÑOL Y SU LEY DE PARTIDOS POL�TICOS. OTRA MUESTRA DE FASCISMO A LA ESPAÑOLA
GARA.NET
El portavoz de Batasuna, Pernando Barrena ha valorado, en rueda de prensa, que "la izquierda abertzale en estos momentos vuelve a estar en la centralidad del panorama polÃtico", a cumplirse dos años del auto de ilegalización de Batasuna.
IRUÑEA.- Al cumplirse hoy dos años del desalojo por orden judicial de la sede nacional de Batasuna en Iruñea, Barrena ha manifestado en conferencia de prensa que, en este periodo de tiempo, "se ha ratificado nuestra primera impresión", en el sentido de que el PP "tomó una medida de carácter totalmente desesperado para tratar de acabar con la izquierda abertzale".
Barrena ha valorado que se aprecian "zonas oscuras", en formaciones que tienen un discurso contrario a la ilegalización de Batasuna, pero que, en la práctica, obtienen un "ventajismo" de la Ley de Partidos, en alusión, precisó, de EA, PNV, IU, Aralar y Batzarre.
Barrena ha comentado que, sin embargo, "la izquierda abertzale en estos momentos vuelve a estar en la centralidad del panorama polÃtico", mostrando "una capacidad de iniciativa polÃtica más que notoria".
Para denunciar esta situación, Barrena ha anunciado la convocatoria de una manifestación, mañana en Bilbo, que partirá desde la puerta de la precintada sede de Batasuna.
Finalmente, Barrena ha considerado que este curso polÃtico "será clave para la superación del conflicto polÃtico vasco" y ha subrayado por ello que "es una época para hacer apuestas valientes y la izquierda abertzale no se va a quedar atrás". |
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Re: Etarras de Coronel Tapioca .
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per jfq |
27 ago 2004
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Acrónimos de las bandas armadas(anti-eta):
AAA: Alianza Apostólica Anticomunista
ANE: Acción Nacional Española
ATE: Antiterrorismo ETA
BVE: Batallón Vasco Español
GAE: Grupos Armados Españoles
GAL: Grupos Armados de Liberación
GIN: Grupo de Intervención Nacionalista
Terroristas asesinados por ETA de las organizaciones mencionadas
AÑOS MUERTOS GRUPO TERRORISTA
1975 1
1976 2
1977 1 TRIPLE A
1978 3 BVE TRIPLE A
1979 5 BVE
1980 17 BVE
1981 1 BVE
1983 4 GAL
1984 9 GAL
1985 11 GAL
1986 2 GAL
1987 1 GAL
1989 1
TOTAL 58
1983:Aparecen los GAL .
Jefe de Operaciones del CESID: José Alberto Perote
Jefe del CESID: Alonso Manglano
Ministro de Defensa: Suarez Pertierra
Máximo dirigente del PSOE en Euskadi: Ricardo García Damborenea
Director General de la Seguridad del Estado: Rafel Vera
Jefe de los GAL: Clement Perret. Asesinado por el Comando Itinerante de ETA, mientras era jefe de la banda armada Azkoiti.
Fecha Lugar Tipo Víctimas Objetivo Acusados Revíndica
10/83 Bayona Secuestro, Disparo en la cabeza. Posteriormente enterrados con cal viva. Muertos: José Lasa Arostegui "Joxean" y José Ignacio Zabala "Joxi". Encontrados restos en Alicante en 1.995 Refugiados vascos, posibles miembros de ETA. Condenados tras juicio en la Audiencia Nacional Española en Abril del 2.000:
- E. Rguez. Galindo 71 años de prisión.
- Jose Julián Elorriaga 71 años de prisión.
- Angel Vaquero 69 años de prisión.
- Felipe Bayo 67 años y 8 meses.
- Enrique Dorado 67 años y 8 meses. GAL en 1984 a través de una emisora de radio en Alicante
18/10/83 Bayona Intento de secuestro. José Mari Larretxea Goñi Militante de ETA Detenidos in farganti: Jesús Alfredo Gutierrez Argüelles (inspector), Javier López Mallen (GEO) Sebastián Sotos García(GEO) y José María Rubio García (GEO) -
11/83 San Juan de Luz Intento de secuestro ¿? Militante responsable de la acogida de refugiados No No
12/83 San Juan de Luz Intento de atropello ¿? 2 refugiados vascos No No
12/83 Hendaya Secuestro y posterior liberación Segundo Marey Sin relación con ETA o su entorno Pedro Sanchez, Mohamed Talbi, Jean Pierre Echalier y José Amedo GAL (1ª nota firmada por esta organización)
12/83 Bayona Disparos Muerto: Ramón Oñaederra "Kattu" Refugiado vasco No GAL
12/83 Bayona Disparos Muerto: Mikel Goikoetxea "Txapela" Refugiado vasco. Profesor de Euskera. Máximo dirigente de ETA No GAL
1984
Fecha Lugar Tipo Víctimas Objetivo Acusados Revíndica
2/84 Bayona Ametrallamiento Muertos: Vicente Perurena "Peru" y Angel Gurmindo "Stein" Dirigentes de ETA No GAL
2/84 Mendi (Soule) Francotirador Muerto: Eugenio Gutierrez Salazar "Tigre" Dirigente de ETA No GAL. 1ª disculpa pública por error cometido.
1/3/84 Estación de Hendaya Disparos Muerto: Jean Pierre Leiva Trabajador del ferrocarril. Ninguna relación con ETA 4 personas. Son detenidos: Daniel Fernandez Aceña y otro. Implican a Victor Manule Navscues y a un tal Andres (G.C. de Intxaurrondo) GAL
3/84 Biarritz (gasolinera) Disparos Muerto. Javier Pérez Arenaza (cuñado de "Txomin" Iturbe) Dirigente de ETA No GAL
3/84 Bayona Disparos Herido: Ramón Basañez Jauregui ¿militante de ETA? No GAL
3/84 Bayona y Biarritz Coches Bomba En uno de ellos muere uno de los terroristas del GAL: Jean Pierre Cherid Terror urbano No GAL. (1ª nota lamentando la muerte de uno de sus miembros)
4/84 Baigorri (Baxenafarroa) Disparos Muerto: Rafael Goikoetxea
Herido: Jesús Zugarramurdi "Kixkur"
Militante y dirigente de ETA No GAL
5/84 ¿? Secuestro, tortura y liberación Xavier Lorenzo y Endica Lorenzo Refugiados vascos. El GAL reconoce que el segundo fue un error No GAL
6/84 ¿? Moto bomba Muerto:Tomás Perez Revilla
Herido: Ramón Orbe
Dirigente de ETA y refugiado vasco respectivamente NO GAL
7/84 San Juan de Luz Bomba Heridos 3 refugiados: José Oliva Gallastegui. Bonifacio García y Juan Jaúregui Aurria Bar Consolation No GAL
7/84 Bayona Ametrallamiento Varios heridos Bar Etxabe No GAL
7/84 Irún Ametrallamiento Varios heridos Bar El Penalty No GAL
8/84 Hernani y Rentería Incendio No Sedes de Herri Batasuna No GAL
BVE
8/84 Bayona Ametrallamiento Varios heridos Bar Etxabe No GAL
8/84 Bilbao Secuestro, tortura y liberación ¿? Militante de Herri Batsuna No GAL
8/84 Arrosa (Baxenafarroa) Incendios ¿? Cooperativas: Denek, Aurki y Alki No GAL
11/84 Biriatu Disparos Muerto: Christian Olaskoaga Ninguna relación con ETA. No GAL. Reconocen error
11/84 Bilbao Disparos Muerto: Santi Brouard Dirigente del HASI (*) y miembro de la Mesa Nacional de HB Instigador: Rafael Masa GAL
11/84 ¿? Bomba No Automóvil y tienda de la mujer de Joaquín Olano No No
12/84 Hendaya Disparos Herido: Juan José Iradier Refugiado vasco No GAL
12/84 ¿? Bomba en su coche No Ramón López Abetxuko.Responsable de seguridad de ETA No GAL
(*) HASI: Partido Revolucionario Patriótico
1985
Fecha Lugar Tipo Víctimas Objetivo Acusados Revíndica
2/85 ¿? Ametrallamiento No Bar Legunekin No GAL
2/85 ¿? Disparos Herido. Xabier Manterola Dirigente de Herri Taldeak No GAL
2/85 Bayona Coche bomba Herido: Christian Casteigts Ninguna relación con ETA No No
3/85 Guetary Ametrallamiento y granadas Heridos los tres hermanos Ibarboure propietarios del Bar Bar Briketania No GAL
3/85 Bayona Ametrallamiento Muerto: Benoit Pecasteing
Heridos: Jean Marc Mutio y Pedro José Pikabea
Bar Les Pyreneés y militante de ETA Pedro José Pikabea Pierre Baldés, detenido in fraganti GAL
3/85 Ciboure Escopeta y granadas Herido: Juan Ramón Basañez Jauregui Bar Vittor. Posible militante de ETA No No
3/85 San Juan de Luz Disparos Muerto: Xabier Galdeano Corresponsal del diario Egin No GAL
6/85 Bayona Disparos Muerto: Santos Blanco Gonzalez Posible militante de ETA No GAL
6/85 Ciboure Ametrallamiento Muertos: Emile Weiss y Claude Doer Bar Trinkete. Ninguna relación con ETA No GAL
7/85 Ciboure Disparos Herido: Juan Carlos Lezertua Bar Vittor. Refugiado vasco No GAL
7/85 Anglet Bomba en su coche No Fernando Eguileor Ituarte No No
8/85 St. Jean Pied-de-Port ¿? Muerto: Juan manuel Otegui Elizegui "Txato" Miembro de ETA No GAL
8/85 ¿? Disparos Muerto: Dominique Labeyrie Ninguna relación con ETA No GAL. Reconoce error
9/85 St. Jean Pied-de-Port Bomba en su coche No José Arraztoaga Posible militante de ETA No GAL
25/9/85 Bayona Ametrallamiento Muertos: José Mari Etxaniz "Potros", Iñaki Asteazu Izarra "Beltza", Agustín Irazustabarrena "Legrá" Y Sabin Etxaide Ibarguren "Eskumotz" Militantes de ETA Lucien Mattei y Pierre Frugoli GAL
12/85 Anglet ¿? No Fernando Biurrun No No
12/85 Rio Bidasoa Primero torturas en "bañera" y luego arrojado al Bidasoa Muerto: Mikel Zabalza Garate Ninguna relación con ETA Detenido 2 días antes por la GC, para saber donde arsenal de ETA No
24/12/85 Biarritz Disparos Muerto: Robert Caplane Ninguna relación con ETA 5 miembros de la ultraderecha CEDADE e Ismael Miquel Gutierrez GAL.
1986
Ultimo año de atentados del GAL
Triunfo de la derecha en Francia
Comienza la política de expulsión de refugiados vascos de Francia
Teniente Coronel de la Guardia Civil en el Cuartel de Intxaurrondo: Actual General de la G.C. Enrique Rodríguez Galindo
María Dolores González "Yoyes". Asesinada por ETA el 10.9.86
Fecha Lugar Tipo Víctimas Objetivo Acusados Revíndica
2/85 Bayona Ametrallamiento Heridos: Nagore Otegui, Carmen Otegui, José Cao, Juan Luis Zabaleta y frederic Haramboure Bar Batxoki José Paulo Figueiredo Fontes (detenido). Rogerio Carvalho da Silva y Antonio Ferreira GAL
2/85 San Juan de Luz Ametrallamiento Herido: Juan Ramón Basañez Jauregui Bar Consolation. Posible militante de ETA José Paulo Figueiredo Fontes (detenido) y Rogerio Carvalho da Silva. Inculpan a José Amedo Fouce y a Michel Dominguez GAL
2/85 Bidarray (Baxenafarroa) Disparos Muertos: Christophe Matxikote y Catherine Brion. Campesino y estudiante. Ninguna relación ETA No No
1.987
Argel contactos ETA-Gobierno.:
- Por parte de ETA: Domingo Iturbe Abasolo "Txomin", Belen González Peñalva "Carmen" e Ignacio Aracamamendía "Macario".
- Por el Gobierno español: Julian San Cristobal, Manuel Ballesteros, Pedro Martinez.
Domingo Iturbe Abasolo "Txomin". Muere en Argel el 26.2.87.
- Llega en sustitución de Txomin, Eugenio Etxebeste "Antxon" y por otro lado el Gobierno envía al comisario Jesús Martínez Torres y más tarde al militante del PSOE y antiguo Delegado del Gobierno en Guipúzcoa Julen Eelorriaga.
- El 11.12. 87 el Gobierno pone fin a las conversaciones tras el atentado al Cuartel de la GC de Zaragoza.
Fecha Lugar Tipo Víctimas Objetivo Acusados Revíndicado
24/7/87 Hendaya ¿? Muerto: Juan Carlos garcía Goena Ninguna relación con ETA. Refugiado vasco por insumiso Daniel Fernandez Aceña (GAL) implica a Galindo (GC), un tal Andres (GC), Victor Manuel Navascues (Empresario), Carlos Gastón y J.Luis García Anuarbe (Fotografo). No
1.988
No hay atentados
El 12 de Agosto de 1988, comienza el Pacto de Ajurianea
1989
Un único atentado revindicado en última instancia por los GAL, pero que se supone como acción de desafío de la extrema derecha política, la que formó parte del BVE, AAA, etc. de la primera época.
Fecha Lugar Tipo Víctimas Objetivo Acusados Revíndicado
20/11/89 Madrid. Hotel Alcala Disparos Muertos: Josu Muguruza
Heridos: Iñaki Esnaola
Ilesos: Jon Idigoras e Itziar Aizpurua
Diputados Nacionales de HB Angel Duce y Ricardo Perez Inestrillas Llamada del GAL , no fiable. |
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Re: Etarras de Coronel Tapioca .
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per jfq |
27 ago 2004
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1975
Muerte del Presidente del Gobierno, Almirante Luis Carrero Blanco(ogro) el 20 de Diciembre de 1.973
Muerte del Jefe del Estado Francisco Franco Bahamonte el 20 de Noviembre de 1.975
Fecha Lugar Tipo Víctimas Objetivo Acusados Revíndica
04/75 Hendaya Bomba No Librería Mugalde No No
05/75 Hendaya Bomba No Librería Mugalde Teodoro delas Heras y "Pallego" No
06/75 Hendaya Bomba No Librería Mugalde No No
06/75 Biarritz Coche bomba Los propios autores: 1 muerto y 1 herido Jose Antonio Urritikoetxea ¿? No
06/75 Biarritz Bomba en domicilio No Sagardia No No
06/75 Bayona Bomba No Restaurante Etxabe Chabessier No
06/75 Bayona Bomba No Librería Nafarroa No GIN
07/75 Bayona Bomba No Centro cultural Franco-español No ATE
07/75 Bayona Bomba No Librería Nafarroa No ATE
07/75 Hendaya Bomba No Empresa Alkar No ATE
08/75 San Juan de Luz Bomba No Imprenta Axular Iraregui y Arrondo "Cocoliso" No
08/75 San Juan de Luz Bomba No Librería Axular No No
08/75 San Juan de Luz Bomba No Librería M. Marie No No
08/75 Bardos Ametrallamiento No Camioneta con refugiados No No
10/75 Hotel Kanpazar Tiro Muerto: Iñaki Etxabe Iñaki Etxabe No No
11/75 ¿? Coche bomba Herido: Hijo de Txomin Iturbe ¿Txomin Iturbe? No No
12/75 San Juan de Luz Bomba Concejal Municipal Concejal Municipal No No
12/75 Bayona Bomba No Centro cultural Franco-español No No
1.976
Fecha Lugar Tipo Víctimas Objetivo Acusados Revíndica
2/76 Diferentes refugiados sufren voladuras e incendios de automóviles No No
3/76 ¿? Disparos Heridos: Tomás Pérez Revilla su esposa Feli Ziluaga e hijo Tomás Perez Revilla No ATE
4/76 Bayona ¿? ¿? Domingo Iturbe Abasolo "Txomin" No No
5/76 Montejurra Disparos 2 muertos, varios heridos Ataque a los carlistas seguidores de Carlos Hugo Neofascistas italianos: Delle Chiae, Augusto Cauchi, Mario Ricci, Giuseppe Calzona, Jean Pierre Cherid.
Y miembros de los Guerrilleros de Cristo Rey.
No
7/76 Sare ¿? Badiola Badiola No No
7/76 ¿? Secuestro Eduardo Moreno Bergaretxe "Pertur" Eduardo Moreno Bergaretxe "Pertur" ETA p-m AAA
ATE
BVE
8/76 Bayona Bomba Librería Zabal Librería Zabal No No
10/76 Hendaya Bomba Empresa Elkar Empresa Elkar No No
1977
Fecha Lugar Tipo Víctimas Objetivo Acusados Revíndica
24/1/77 Madrid. C/ Atocha Ametrallamiento 4 abogados muertos y 5 heridos Despacho de abogados laboralistas Sanchez Covisa (Guerrilleros de Cristo Rey) AAA
1/77 Madrid Disparos Muertos: 2 estudiantes Manifestación No Guerrilleros de Cristo Rey
1/77 Donostia ¿? No Radio Loyola (emisora jesuita) No AAA
BVE
De 2/77 a 9/77 Varios atentados contra establecimientos públicos e industrias
10/77 ¿? Disparo David Salvador Jonio Era un taxista sin vinculación política conocida No AAA
BVE
1.978
Aprobada por las Cortes el 31.10.78 la Constitución Española
Ratificada por el pueblo español en Referendum del 6.12.78
Fecha Lugar Tipo Víctimas Objetivo Acusados Revíndica
3/78 Guipúzcoa y Vizcaya No Varios atentados contra establecimientos e industrias No BVE
4/78 Argel Acuchillado Herido: Dirigente MPAIC Dirigente MPAIC (*) Alfonso González
Cortés Rodríguez
José Luis Espinosa Pardo
Roberto Conesa
No
5/77 Andoain Ametrallamiento e incendio No Panadería Kale-Txiki No No
5/78 San Juan de Luz Bomba No Librería Txaramben No No
5/78 Irún Disparo Muerto: Martín Merkelanz Taxista No BVE
2/7/78 San Juan de Luz Disparo Heridos: Juan José Etxabe y su mujer Agurtzane Arregui Juan José Etxabe AAA No
8/78 Biarritz Ametrallamiento desde automóvil ¿? Varios refugiados No No
12/78 Anglet Bomba en su coche Muerto: José Miguel Beñarán "Argala" José Miguel Beñarán "Argala" (Comando España: Operación Ogro) Carlos Gastón No
(*) MPAIAC: Movimiento Independista de las Islas Canarias
1.979
25.10.79 Referendum por el Estatuto de Autonomía del País Vasco
Fecha Lugar Tipo Víctimas Objetivo Acusados Revíndica
1/79 ¿? Disparos Herido: José Manuel Pagoaga "Peixoto" José Manuel Pagoaga "Peixoto" (dirigente de ETA) No AAA
BVE
GAE
2/79 Bayona Intento de Secuestro Arantxa Sasiain Compañera de "Txomin" Iturbe Abasolo Un policía francés No
5/79 ¿? Disparos "Txomin" Iturbe Abasolo "Txomin" Iturbe Abasolo,( dirigente de ETA) No No
5/79 ¿? Disparos en control de Policía Muerto: Peru Lañarraga Control de la Policía No No
6/79 Andoain Secuestro y asesinato Muerto: José Ramón Ansa José Ramón Ansa No AAA
6/79 Bayona Disparos Enrique Alvarez Gómez "Korta" Enrique Alvarez Gómez "Korta" (militante ETA) No BVE
6/79 París Disparos F. Javier Martín Eizaguirre y Aurelio Fernández Cario Militantes PCE (r) No BVE
6/79 Ciboure Bomba No Empresa Zohuar No No
7/79 Anglet (playa) Ametrallamiento Muerto: Juan Lopetegui.
Heridos: Angel Iturbe Abasolo y Sasiain Etxabe
Militantes ETA No BVE
9/79 Biarritz Ametrallamiento Justo Leizarán "Periko" Refugiado vasco Jacques Debessa ANE
9/79 Bayona Bomba No Restaurante de Juan Jose Etxabe No No
9/79 Donostia Disparos Tomás Alba Concejal de Herri Batasuna ¿ETA? No
1.980
Fecha Lugar Tipo Víctimas Objetivo Acusados Revíndica
1/80 Lezo Disparos Karlos Saldise Máximo responsable de las Gestoras Pro Amnistía No BVE
1/80 Alonsotegui Bomba No Bar Aldana No BVE
2/80 Bayona Disparos sobre su automovil Heridos: Joaquín Gorostidi.
Ilesos. Eugenio Etxebeste y "Txomin" Iturbe
Militantes ETA No BVE
2/80 A la salida de un cine en Madrid Disparos Muerta: Yolanda González Militante PST (Partido Socialista de los Trabajadores) No BVE
3/80 Donostia Bomba Heridos: Jesús Mari Ijurko y su mujer Karmen Illiramendi Destacado miembro de las Gestoras Pro Amnistía No BVE
4/80 Hernani Disparos Muerto. Felipe Zagarna Ninguna relación con ETA o grupo de apoyo No BVE
6/80 San Juan de la Luz Secuestro José María Etxebarría Refugiado vasco No BVE
9/80 Hernani Disparos Heridos: Andrés Echevarría
Muerto: Joaquín Antimasveras
Sin relación alguna con ETA o su entorno No BVE
11/80 Caracas (Venezuela) ¿? Joaquín Alonso Etxebarria y su mujer Esperanza Arana Presidente del Comité de apoyo a los presos y refugiados vascos No No
23/11/80 Hendaya Ametrallamiento Muertos: Joseph Camio y Jean Pierre Haramendi.
Heridos: 10 personas más
Bar Hendayais Antonio González Pacheco "Billy el Niño" y los hermanos Perret junto con Jean Pierre Cherid No
12/80 Biarritz Bomba en el coche Muerto. José María Sagardía Zaldua Militante ETA No N o
1981
Dimite Alfonso Suarez como Presidente del Gobierno Español
Se incorpora a la Presidencia Leopoldo Calvo Sotelo
El 23 de febrero se produce un intento de golpe de estado en Madrid en la persona de Alfonso Tejero, Armada y otros
Se crea en España de forma oficial el Mando Unico de la Lucha Antiterrorista, para coordinar a todas las Fuerzas de Seguridad del Estado.
El BVE comienza su disolución y deja de atentar en el año siguiente.
Fecha Lugar Tipo Víctimas Objetivo Acusados Revíndica
2/81 Hernani Disparos Herido: Victor Fernández Ochoa Sin vinculación alguna con ETA o sus grupos de apoyo No No
3/81 Andoain Disparos Muerto:Francisco Javier Ansa Militante Herri Batasuna No No
3/81 San Juan de Luz Disparos Ilesos: Eugenio Etxebeste "Antxon" Nº 2 de ETA militar Andrés Pervins "Vladimir Vit" No
4/81 París Disparos Xavier Aguirre Refugiado vasco. ¿militante de ETA pm? No BVE
AAA
1982
Ningún atentado
En Octubre el PSOE gana las elecciones
Ministro del Interior: José Barrionuevo (PSOE)
Se suprime el Mando Unificado
Se nombra a Jesús Martínez Torres para la Comisaría General de Información
Y a Francisco Alvarez Sánchez como Jefe Superior de la Policía de Bilbao . |
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Coronel Tapioca de la ETA
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per Juan Cotino |
27 ago 2004
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Por las informaciones referidas en esta notícia habría que investigar si el tal Coronel Tapioca pertenece a ETA.
Rogamos a Garzón que investigue a esta persona y le cierre todas sus tiendas por suministrar material a ETA.
¡Viva la muerte! ¡Viva la policía!
¡Viva el mal! ¡Viva el capital!
P.D a Garzón: Estrella mía, tú aunque el Coronel Tapioca no sea de la ETA, sabrás sacarle alguna confesión: palizas, presiones, electrodos, bañeras, violaciones. ¡Todos contra el terrorismo! |
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Re: Etarras de Coronel Tapioca .
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per a |
27 ago 2004
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y yo digo............. pum catapum chimpum como me gusta el verano............ |
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Re: Etarras de Coronel Tapioca .
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per antifascismo |
29 nov 2004
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Después de leer esto tengo la impresión de que las víctimas merecían ser asesinadas por no estar de acuerdo con determinadas ideas consideradas correctas por quienes se erigen en juez y parte sobre la vida y la muerte... No merecen contestación... |
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