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¿Insostenibilidad o Terrorismo de Estado?
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per agustin antunez corrales Correu-e: antunez_a ARROBA uma.es (no verificat!) Telèfon: 952131669 Adreça: biologÃa animal, facultad ciencias, universidad de málaga |
09 abr 2008
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Reflexiones sobre un caso de represión siquiátrica, ahora hace tres años, y el entorno académico y socio-político del Estado Español |
Sinsostenone.pdf (497,37 KiB) |
Este artículo consta de 13 páginas que van como documentos adjuntos. Son textos escritos a mano y a colores.
Las últimas cuatro (9-13) van como comentarios más abajo. |
Sinsostentwo.pdf (480,99 KiB) | Sinsostenthree.pdf (465,44 KiB) | Sinsostenfour.pdf (443,41 KiB) | Sinsostenfive.pdf (489,82 KiB) | | | | |
Mira també:
http://argentina.indymedia.org/news/2005/03/273150.php http://barcelona.indymedia.org/newswire/display_any/223546 |
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Comentaris
Parte final del documento
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per agustin antunez corrales antunez_a ARROBA uma.es (verificat) |
09 abr 2008
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¿De qué manera nos influye el hecho de que la gran mayoría de la información que manejamos vaya ímpresa y en líneas totalmente rectas?
¿Influye todo eso en la dificultad que encontramos en la práctica para comprender la complejidad de las cosas y de la realidad? |
¿Censura en Indymedia?
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per frente wan-gulis Tum |
11 abr 2008
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Por qué California ha retirado "JaqueMate al M.I.T."?
¿Porque su lenguaje está tan codomesticado como para no entenderlo desde la Psicología Positiva? |
Re: ¿Insostenibilidad o Terrorismo de Estado?
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per Mabel misoria2006@gmail.com |
11 abr 2008
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Juer Agustin, cualquiera lee, lo que has escrito. chico tienes letra de medico y yo no soy enfermera, ni farmaceutic@. En fin, que lo leia, o me dejaba la vista en el intento. así que me he decidido ha decirtelo, para que aunque sea de mil colores, lo pongas con letras fáciles de leer, si no te quieres encontrar con demandas, por perdida de la vista de tus lectores, jejeje. Besos. |
No, No es un texto "plano"
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per agustin |
12 abr 2008
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Oye Mabel, que no es para tanto...
Al menos te ha sorprendido el formato ¿verdad?
Un poquito de desdomesticación no está mal ¿no crees?
Ya lo pasaremos, o lo pasará alguien, a un formato más cristiano (nunca mejor dicho).
De todos modos, Mabel, te recuerdo lo escrito al principio de la noticia: esto no es para aprendérselo, no va "para examen". Y a poco que leas verás que aunque patines en algunas palabras, el contexto se comprende.
Sí, comprendo que es un texto "todo-terreno". No es un texto "plano".
besos |
La enfermedad mental: un concepto anticuado
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per drfernandoluisgomez drfernandoluisgomez@yahoo.es |
13 abr 2008
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La enfermedad mental: un concepto anticuado
por Fernando Luis Gómez Monday, Aug. 23, 2004 at 1:14 AM
drfernandoluisgomez ARROBA yahoo.es
El concepto de enfermedad mental tuvo su utilidad histórica pero es,
en la actualidad, cientÃfica y médicamente anticuado, y moral y
polÃticamente dañino por las razones que veremos en este artÃculo.
En 1961, Thomas Szasz, médico psiquiatra, psicoanalista y actualmente
Profesor Emérito de la Universidad del Estado de New York, publicó "El
mito de la enfermedad mental", que inició un debate mundial sobre los
denominados trastornos mentales. Szasz anota que la mente no es un
órgano anatómico como el corazón o el hÃgado; por lo tanto, no puede
haber, literalmente hablando, enfermedad mental. Cuando hablamos de
enfermedad mental estamos hablando en sentido figurado, como cuando
alguien declara que la economÃa del paÃs está enferma. Los
diagnósticos psiquiátricos son etiquetas estigmatizadoras aplicadas a
personas cuyas conductas molestan o ofenden a la sociedad.Si no hay
enfermedad mental, tampoco puede haber hospitalización o tratamiento
para ella. Desde luego, las personas pueden cambiar de comportamiento,
y si el cambio va en la dirección aprobada por la sociedad es llamado
cura o recuperación.
Por consiguiente, las intervenciones psiquiátricas deben ser definidas
con claridad como voluntarias o involuntarias. En las voluntarias, la
persona busca la ayuda del profesional movida por sus problemas.
TÃpicamente, el individuo es un beneficiario de la intervención del
psiquiatra. En las involuntarias, la sociedad impone la intervención.
TÃpicamente, el individuo es una vÃctima de la acción del psiquiatra,
en tanto que la sociedad(la familia) es la beneficiaria. La
psiquiatrÃa involuntaria es incompatible con los principios de una
sociedad democrática y libre, y debe ser abolida.
LA FABRICACIÓN DE LA LOCURA
En 1970, Szasz publicó "La fabricación de la locura: Estudio comparado
de la Inquisición y el Movimiento de la Salud Mental", un monumental
estudio histórico dedicado a demostrar que-con el declinar de la
cosmovisión teológica y del poder del Estado Teocrático(la alianza del
Estado y la Religión), y el ascenso de la cosmovisión cientÃfica y del
poder del Estado Terapéutico(la alianza del Estado y la Medicina y, en
particular, la PsiquiatrÃa-, el mito teológico de la herejÃa fue
remplazado por el mito cientÃfico de la enfermedad mental, la
persecución de brujas y herejes por la persecución de pacientes
mentales y drogadictos, y la poderosa burocracia papal de la
Inquisición por la poderosa burocracia estatal de la PsiquiatrÃa
Institucional.
En esta obra, que dio inicio a la nueva disciplina de la historia
crÃtica de la psiquiatrÃa (junto con la "Historia de la locura en la
Era Clásica", de Michel Foucault), Szasz define también los dos tipos
de psiquiatrÃa: la institucional y la contractual.
La PsiquiatrÃa Institucional comprende todas las intervenciones
impuestas a las personas por los demás. Estas intervenciones se
caracterizan por la completa pérdida, por parte del denominado
paciente, del control de la relación con el psiquiatra. Su aspecto
económico más importante es que el psiquiatra es un empleado pagado
por una entidad privada o pública. Su caracterÃstica social más
destacada es el uso de la fuerza o del engaño.
La PsiquiatrÃa Contractual comprende todas las intervenciones
psiquiátricas buscadas por las personas, motivadas por sus
dificultades o problemas. Estas intervenciones se caracterizan por la
completa retención, por parte del llamado paciente, del control de la
relación con el psiquiatra. Su aspecto económico más importante es que
el psiquiatra es un profesional privado pagado por la propia
persona(en nuestros dÃas, la situación se complica por la existencia
de los seguros médicos). Su caracterÃstica social más notoria es la
evitación de la coacción o del engaño.
¿QUÉ ENTENDEMOS POR ENFERMEDAD MENTAL?
Al negar la validez cientÃfica del concepto de trastorno mental no
estoy negando la realidad de los fenómenos a los que,
desactualizadamente, mucha gente, tanto profesionales como legos,
llama enfermedades mentales. ¿Cuáles son? Por lo general, nos
referimos a los siguientes:
1. Alteraciones involuntarias de conducta(por ejemplo alucinaciones,
depresión, euforia, confusión, pérdida de la memoria y de la
orientación temporo-espacial, y cambios importantes de la conducta o
la personalidad) por enfermedades endocrinas, infecciosas,
metabólicas, neurológicas o de otro tipo. Pero estas no son
enfermedades mentales sino médicas.
2. La locura, ahora llamada esquizofrenia, o paranoia , o psicosis, u
otro término psiquiátrico. La literatura sobre la esquizofrenia,
considerada la más grave de las tales enfermedades mentales comprende
ahora miles de publicaciones que adolecen de un serio error
epistemológico: hablar de la esquizofrenia como si fuese una
enfermedad genuina como la diabetes cuando, en realidad, se trata de
un insulto psiquiátrico que justifica el internamiento forzado de los
locos.
Por otra parte, los psiquiatras llevan un siglo alegando que la
esquizofrenia es, en realidad, una enfermedad cerebral. Si es asÃ,
¿por qué sigue siendo definida como una enfermedad mental y tratada
por psiquiatras en vez de por neurólogos? Con relación a las
anormalidades detectadas mediante técnicas de imagenologÃa diagnóstica
en los cerebros de los llamados esquizofrénicos, surgen enseguida dos
inquietudes:
a) ¿Esas anomalÃas son causa o consecuencia de la conducta anormal?
b) Si la esquizofrenia es una enfermedad del cerebro como, digamos, la
enfermedad de Parkinson , o la enfermedad de Alzheimer, o la
esclerosis múltiple, ¿ cómo es que en muchos paÃses hay leyes
especiales de salud mental que obligan al internamiento o al
tratamiento forzado de los llamados esquizofrénicos? Que yo sepa, no
hay leyes especiales para el tratamiento coercitivo de las pacientes
con Parkinson, Alzheimer y esclerosis múltiple.
Al señalar que la esquizofrenia es parte del mito moderno de la
enfermedad mental, tampoco estoy negando la existencia de la locura.
De hecho, la locura abunda dentro y fuera de los manicomios( ahora
llamados hospitales mentales). Lo que estoy cuestionando es la
veracidad cientÃfica de categorizarla y tratarla como una enfermedad
legÃtima tan curable como una apendicitis o una neumonÃa. La locura,
en su sentido clásico y literario, es más bien un asunto personal
(locura individual) o polÃtico(locura colectiva).
3. El crimen y la violencia. El concepto psiquiátrico del crimen
surgió en el siglo XX con la publicación de "El criminal, el juez y el
público"(1929), de F. Alexander y H. Staub. Para estos autores, habÃa
dos clases de criminales: el normal y el anormal. Para el normal la
penologÃa tradicional era suficiente, en tanto que, para el anormal,
Alexander y Staub recomendaban la abolición de los castigos y la
implantación de tratamientos psiquiátricos.
Es importante tener en cuenta que esta tesis nació en la época del
ascenso al poder de las ideologÃas totalitarias de la Italia fascista,
la Alemania nazi y la Unión Soviética comunista, en las que los
psiquiatras estaban dispuestos a cooperar con gobiernos dictatoriales
en la represión de los ciudadanos.
Por su parte, Thomas Szasz, desde la publicación de "El derecho, la
libertad y la psiquiatrÃa"(1963), ha advertido que la PsiquiatrÃa
Institucional se ha convertido en una agencia represiva de control
social .
Esta psiquiatrización del crimen ha dado origen al mito del paciente
mental peligroso: con bastante frecuencia los medios masivos de
comunicación informan sobre un crimen al que, enseguida y tras la
entrevista a un psiquiatra o psicólogo, se le endilga el calificativo
de trastorno mental. Aunque no hay ninguna evidencia de que los
llamados pacientes psiquiátricos son más peligrosos que los
normales(la situación actual apunta más bien a todo lo contrario), el
mito del paciente mental peligroso se resiste a morir.
4. El consumo de drogas legales e ilegales. Aunque la humanidad ha
usado(y abusado de) drogas tales como el alcohol, la coca, la
marihuana, el opio y sus derivados, y el tabaco durante siglos, el
llamado problema de la droga, o drogadicción, o farmacodependencia, o
abuso de drogas fue una creación del siglo XX con la promulgación de
las primeras leyes antidrogas , y la inclusión del uso de ciertas
drogas en la lista oficial de trastornos mentales de la Asociación
Psiquiátrica Americana. Hasta ese entonces, no tenÃamos el llamado
problema de la droga, ni la palabra drogadicción tenÃa la connotación
peyorativa que hoy tiene. (De hecho, adicción quiere decir apego,
dedicación como cuando decimos que Fulano es adicto al Partido
Liberal, o Mengano es adicto al catolicismo).
Décadas más tarde, la guerra antidrogas, supuestamente ejecutada para
erradicar el consumo, es llevada a cabo con tanta insensatez y
ferocidad que sus terribles consecuencias(un ambiente de persecución
inquisitorial, criminalidad, corrupción, daño ecológico y toxicidad
agregada por la impureza) han terminado por afectar a toda la
sociedad. Pero en vez de atribuir estas nefastas consecuencias a la
ilegalidad y la guerra, los gobiernos las achacan a las drogas , los
drogadictos y los traficantes.
Por mi parte, sugiero que prohibir ciertas drogas porque su abuso
puede ser dañino para la salud es tan sensato como prohibir los
automóviles porque su abuso puede ser perjudicial para la salud, y
postulo que la guerra antidrogas nos está haciendo más daño que la
denominada drogadicción. Por consiguiente el asunto no es cómo acabar
con las drogas y los drogadictos sin cómo acabar con la persecución y
la guerra.
5. Los conflictos personales e interpersonales. Por último, cuando
seguimos hablando de trastornos mentales, tenemos en mente otros tipos
de hechos: los conflictos personales e interpersonales tales como la
angustia, el desempleo, las dificultades o desviaciones sexuales, la
discordia marital o familiar, la estupidez, las fobias, la incultura,
las inhibiciones y demás problemas de la condición humana. Se piensa
entonces que la vida es armónica y que los conflictos son causados por
psicopatologÃas subyacentes que es preciso curar para ser felices.
Esta es la versión pseudocientÃfica actual de la psiquiatrÃa y la
psicologÃa clÃnica convencionales. No obstante,me parece más realista
aceptar de una vez por todas que la vida es, en sÃ, una ardua
tragicomedia, y que lo que llamamos salud mental(que prefiero llamar
virtud o salud espiritual) es un largo y tortuoso camino de
aprendizaje cotidiano.
CONCLUSIONES
La historia de la ciencia está llena de teorÃas y modelos que fueron
descartados una vez que se lograron avances que permitieron un
conocimiento preciso de los fenómenos. No veo por qué no va a ocurrir
lo mismo con la teorÃa de la enfermedad mental. Nos corresponde a los
cientÃficos la responsabilidad social de revisar crÃtica y
constantemente el estado de nuestros conocimientos para asà ponernos
al dÃa en nuestra labor.
La teorÃa de la enfermedad mental tuvo, pues, su utilidad histórica
hasta el siglo pasado pero es, en la actualidad, cientÃfica y
médicamente anticuada pues permite diagnosticar y tratar como enfermos
mentales a pacientes con enfermedades cerebrales o de otro tipo que
cursan con trastornos involuntarios de conducta; y es moral y
polÃticamente dañina porque se ha vuelto una cortina de humo para toda
una serie de problemas económicos, existenciales, morales y polÃticos
que, estrictamente hablando, no requieren terapias médicas sino
alternativas económicas, existenciales, morales y polÃticas.
REFERENCIAS
Gómez, F.L." El mito de la enfermedad mental", en "La libertad y el
psicoanálisis". Barranquilla: Editorial Antillas; 1998.
Gómez, F.L. "El mito cientÃfico de la enfermedad mental", en "Asilo de
cuerdos". Barranquilla: Editorial Antillas; 2000.
Gómez, F.L. "La enfermedad mental: ¿mito o realidad?", en
http://www.opinatio.com (5 de mayo de 2004).
Szasz, T.S. "The Myth of Mental Illness", 2nd edition. New York:
Harper & Row, 1974.
Szasz, T.S. "The Manufacture of Madness: A Comparative Study of the
Inquisition and the Mental Health Movement." New York: Harper & Row;
1970.
RESUMEN
La teorÃa de la enfermedad mental es cientÃficamente anticuada pues
permite diagnosticar como enfermos mentales a pacientes con
enfermedades cerebrales; y socialmente dañina pues es una cortina de
humo para una serie de problemas sociales. Hay dos tipos de
psiquiatrÃa: voluntaria e involuntaria. La psiquiatrÃa involuntaria es
incompatible con los principios de una sociedad democrática y libre, y
debe ser abolida. Al negar la validez cientÃfica de la teorÃa de la
enfermedad no estoy negando la realidad de las enfermedades
neurológicas, la locura, el crimen, el consumo de drogas y los
conflictos sociales.
PALABRAS CLAVES
ENFERMEDAD. MENTE. MEDICINA. PSIQUIATRÃ?A. PSICOLOGÃ?A. PSICOANÃ?LISIS.
ENFERMEDAD CEREBRAL. LOCURA. DELITO. CONSUMO DE DROGAS. CONFLICTOS
SOCIALES. THOMAS SZASZ
AUTOR
Fernando Luis Gómez, médico psicoanalista en práctica privada, y
Profesor de BiologÃa y NeurofisiologÃa, Facultad de PsicologÃa,
Corporación Universitaria de la Costa.
Barranquilla, Colombia
drfernandoluisgomez ARROBA yahoo.es
TEL. (57-5)3561982 |
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