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Notícies :: corrupció i poder |
Contrapoder, pacto entre iguales, discultura libertaria y ami que mierda me importa el corporativismo.
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per amanecer anarquista |
18 mai 2024
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Decia Amanecer fiorito (fue un militante anarquista y el cerebro más lúcido del anarquismo argentino en los últimos 50 años): El Estado es la reacción y todo “revolucionario”, en el poder, es un reaccionario. Si el leitmotiv del confederalismo es la politica, eso no deja de ser, un modo de imponer como sea un interés privado en el area de lo colectivo autogestionado. Ello convierte a las propias organizaciones anarquistas en un espacio de lucha por el poder, fomenta el uso de cualquier recurso para conseguir el objetivo y desalienta la chance de crear espacios autogestionados de agregación de intereses que fomenten una lógica cooperativa en los asuntos de gestion a traves de afecto y mutua ayuda, porque en ese juego de poder politica y cultura militante donde el sujeto queda diluido en el proyecto (cgt, cnt, solidaridad obrera) suma cero solo vale anular al otro. |
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En la polemica en la protesta entre fiorito y bayer, se puede distinguir en el contraste de la misma, la vision de quien vive la anarquia y es anarquista consecuente y de quien la usa para desvirtuarla y ser lacayo de la socialdemocracia. Recientemente en La Protesta (se expresaba o. bayer): me criticaron por una nota que escribí reconociendo la figura del Che Guevara. Digan lo que digan, no renuncio a reconocer a los hombres que fueron protagonistas de la historia, aunque no hayan sido anarquistas. ¿O acaso se puede desconocer a hombres como Zapata o Sandino? Creo que el error está en erigirse como juez de la historia. En casos como esos es cuando se puede caer en el sectarismo. Hay que luchar contra eso: por el bien del anarquismo y por su salud; el anarquista tiene que ser todo menos sectario.”
Evidentemente, con esta respuesta, refiriéndose a los anarquistas en tercera persona, hacía hincapié en “ellos” evitando asumirse como tal, muy a pesar de aquellos compañeros que aún insisten en la pretendida afición ácrata del personaje. Pero, más allá de la distancia que guardaba con “ellos”, cabe resaltar las simpatías que mostraba hacia otros, no solo ajenos al ideal anárquico sino declarados enemigos de todo lo que oliera a antiautoritarismo, como era el caso de San Ernesto de La Higuera, también conocido y venerado como Che Guevara.
Precisamente, quien le “criticaba” su idolatría guevarista desde las páginas de La Protesta por aquellas fechas, era el compañero Amanecer (Negro) Fiorito, inquebrantable expropiador anárquico con amplio prontuario policial a ambas orillas del Río de la Plata. Fiorito, no solo cuestionó su patético “anarco”-guevarismo en esa ocasión sino que le reprochó sus constantes acomodos a nuestra historia y su fidelidad a la dictadura nacionalista de los hermanos Castro en todo momento y en todos los foros que estuvieron a su alcance hasta el último minuto de su incansable vida iconoclasta, desenmascarando el oportunismo de Bayer y cuestionando su inexplicable aceptación en nuestros espacios. En la réplica en cuestión, intitulada “La vieja historia del hombre nuevo” Fiorito subrayaba la necesidad “insoslayable” de darle oportuna respuesta a Bayer, con esa ironía inteligente que le caracterizaba:
«El Che Guevara, era leninista, trotskista, stalinista, castrista, guevarista… es marxista. Y para un marxista en el poder, no hay nada mejor que un anarquista muerto… fueron consecuentes […] No necesitamos de estadísticas, para saber de los miles de muertos, desaparecidos y perseguidos por el régimen cubano, en sus casi cuarenta años. Y no hablamos de las minorías derrocadas. El Che Guevara, era la segunda o tercera jerarquía, en la etapa (1959-1967) seguramente más fructífera de éstas matemáticas. En el proyecto emancipatorio de Cgt,cnt,so.) nos proponen ser una especie de mafia que interactua con el estado, a base de hacer politica y entrar a ejercer el poder colaborando con el estado todo ello dejandose huntar por el mismo estado en fin quien no recuerda aquello de entrar en el gobierno y tener ministros. Y para ello se inventan la ssopa de ajo, con la receta de : En todo este proceso paulatino toca recuperar la cultura militante. Entendiéndola como la predisposición al avance, mejora y posibilidad de la emancipación obrera aun sabiendo que no todas las decisiones o situaciones serán a gusto de todo el mundo. Que formamos parte de un movimiento complejo, contradictorio y oscilante. Una práctica que exige sacrificio, sin caer en la retórica del mártir, pero que puede traer consigo renuncia al bienestar, a la carrera profesional, a la integridad física o a las libertades elementales. Ese desarrollo de la cultura militante va acompañado de un sujeto colectivo por encima de la individualidad: la clase organizada.
En lo concreto, esta praxis se acompaña de una lealtad a la organización o proyecto. Es decir, exponemos las virtudes de nuestra apuesta política hacia fuera, pero discutimos los errores o debilidades desde dentro; sin airearlos hacia el exterior. Buscamos la permanente mejora de ésta porque es nuestra apuesta revolucionaria. Esto exige una militancia que va evolucionando, incorporando aprendizajes y engrasando de nuevo la máquina revolucionaria. Una cultura militante va aprendiendo con la organización. Es un movimiento orgánico y vivo. Se van acompañando y nutriendo, es un proceso donde el sujeto queda diluido en el proyecto general emancipatorio. Los anarquistas no necesitamos de cronistas, biógrafos e historiadores porque llevamos nuestra historia a cuestas y la hemos trasmitido en actos de generación en generación. El culto a la carroña no es la mejor manera de recordar a nuestros muertos, la única forma de mantener vivo su recuerdo es reproduciendo su inclemente accionar. La acción directa no es letra muerta, es nuestra arma más potente. https://www.youtube.com/watch?v=NATyMK4ceac. En una reunión, opinaba un compañero anarquista, que había que ser implacable con la burguesía y con todo tipo de clase en el Estado... con los estados. Este compañero fue detenido y fue torturado, (alguien le preguntó sobre esto), terminó la explicación diciendo que no tuvieron la suerte de quebrarlo. Entonces se le preguntó si porque no había hablado, y el
compañero respondió: No, no es eso, sino que nunca pensé en hacerles lo que hicieron conmigo. En una entrevista a osvaldo bayer, le preguntaron : Sin ir más lejos usted tuvo una polémica con Amanecer Fiorito (editor del periódico anarquista La Protesta) cuando reivindico la del Che. Amanecer lo criticó, ¿qué balance hace de esa discusión? – Y que yo tenía razón (risas), ¿qué voy a decir? Porque cuando yo contesté se calló la boca al final. |
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