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Notícies :: sense clasificar |
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Rabia
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per La bandera roja |
20 feb 2012
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Texto aparecido en la publicación barcelonesa "La bandera roja: hoja anarquista revolucionaria", nº 7 (27 de noviembre de 1919) |
Quisiera...
... que mis brazos fueran de acero y que al cerrarlos estrujara a los miserables que hacen de mi sudor una mercancía, y entre el crujido de sus huesos al quebrarse, viera extinguirse sus vidas inútiles con el último estertor de su agonía.
... que mis ojos, cargados de efluvios eléctricos lanzaran rayos que pulverizaran el régimen tiránico y cruel que ellos sustentan y carbonizaran sus cuerpos de asquerosas alimañas corruptoras y ruines.
Quisiera con mis uñas rasgar su carne lentamente, arrancarles las entrañas y fregárselas por sus inmundos hocicos, mientras que sus quejas y lamentos fueran la música que deleitara, música para mi placentera, que amortiguase la rabia que en mi pecho ruge contra sus canalladas y maldades sin cuento.
Que mis dientes como agudos aguijones pudiera clavarlos en sus gargantas y su sangre fuera el néctar que alimentara mi organismo, elevado a la categoría de dios, por el placer de la venganza.
Quisiera tener el placer de degollarlos y su sangre fuera el alimento predilecto de los perros vagabundos.
... colocarlos en abrupta cima para que los buitres hicieran presa en sus carnes y que la melodía que alegrase sus últimos instantes, fuera el tétrico graznido de los cuervos, que al pasar en bandadas se llevaran jirones de su carne correosa, carne de burro y cochino de sus cuerpos.
Que los edificios que a costa de nuestra producción han levantado gravitaran con todo su peso en sus barrigas de puercos, barrigas de cabrón satisfecho, haciendo que arrojaran por su boca su corazón metalizado a fuerza de amontonar oro amasado con lágrimas y sangre del proletariado.
Quisiera que mi brazo armado, volteara sobre ellos segando cabezas como en tétrica siega de hierba maldita.
Quisiera... es decir: quiero; que su muerte sea mi vida. Que con su último suspiro se lleven los restos carcomidos de este régimen.
Y quiero ser libre.
Y quiero que desaparezcan.
Y desaparecerán.
y la humanidad se verá libre de sus tutela,
y será libre.
Libre; pero sólo a ese precio. |
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Re: Babia
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per anarquista decoloría |
20 feb 2012
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Esto lo podría decir cualquiera..., en las antípodas de la anarquía. Ese no es el mundo nuevo, sino el mundo muerto, y a veces se necesita que, para que algo florezca, aparezca el ángel de la muerte... Pero no siempre la muerte nos redime, más bien al contrario. Nuestros brazos ni son de acero, ni nuestras manos son diestras con las armas y deberíamos de empezar a hacer lo que sabemos..., ¿pero cuándo será eso?
Mejor no engañarnos, labrar nuestras vidas con sus muertes, tampoco es vida que merezca ser vivida. La tierra, necesita un cuidado que no estamos dispuestas a dar y sólo nos queda, morir matando o morir muriendo..., a no ser que cambiemos toda esta lógica de muerte y empecemos a construir nuestro propio proyecto. Ajeno a los intereses de los especuladores, de los explotadores, de quienes necesitan de nuestra sangre... ¿Estamos dispuestas a ello...? |
