Imprès des de Indymedia Barcelona : https://barcelona.indymedia.org/
Independent Media Center
Notícies :: dones
Dejad en paz a las putas
04 jun 2006
Ya tenemos la normativa cínica de la ciudad de karcelona y gracias a ella ya no tendremos que soportar mas a las putas de calle, a los mendigos, a los músicos y artistas, a los que cuestionan de forma radical el sistema o tan solo algún aspecto de el, a los skaters, a los que se divierten en la calle y a los que cruzan mal la calle. Sobre esta norma se le suele echar la culpa al alcalde Joan Clos cuando, a pesar de ser bastante responsable, solo es un títere; detrás de la norma del civismo están quienes se benefician de que Barcelona sea la mayor tienda del mundo y un importante foco del negocio turístico, porque quieren una ciudad atractiva para los negocios y el turismo.
dejad en paz a las putas.jpeg
El ayuntamiento no prohíbe la prostitución, solo quiere que esta le deje buenos impuestos. Si quisiese impedir la prostitución debería echar un ojo a ferias ,como el construmat, donde se reúnen los empresarios de la construcción que suelen traer bastantes mujeres de menor edad que ellos que, por supuesto, seguro que les ha enamorado algo mas que su cartera y yo soy un malpensado. Otro punto es dibujar a la prostituta como una mujer humillada por quien paga sus servicios, personalmente, no siento que se las humille por pagarles dinero por sus servicios si se las trata con el debido respeto; no veo diferencia alguna con quien paga a una limpiadora, a una abogada, a una camarera o a una secretaria, no hay humillación en ese acto y si lo hay cuando se insulta o se trata como seres inferiores a otras personas, independientemente de que se tenga una relación comercial o no.

This work is in the public domain

Comentaris

Re: Dejad en paz a las putas
04 jun 2006
scuchar y poner atención a los relatos de quienes se prostituyen (mujeres, transexuales femeninas u hombres), respetar las decisiones de cada persona que opta por el ejercicio de la prostitución, respetar y exigir soluciones para quienes desean abandonarla, exigir que se persiga a las grandes mafias internacionalmente organizadas y que se dote de derechos humanos a todas las personas que ofrecen sexo a cambio de dinero. Estas son algunas de las líneas del pensamiento de Hetaira, colectivo en defensa de los derechos de las prostitutas.



Existen organizaciones que ofrecen talleres de “reinserción� (para nosotras sería más cercano a la realidad llamarles de “formación�) que desgraciadamente cuentan con pocos recursos y que consiguen “ayudar� de forma casi caritativa a quienes desean dejar la prostitución. Las instituciones tampoco ponen en marcha cursos de formación que posibiliten empleo no basura para los sectores más desprotegidos de la sociedad. Queremos pensar que por parte del Estado (cuerpo judicial y policial) existen todas las herramientas para luchar contra la explotación sexual y laboral de las personas y si no lo hacen habrá que demandarlo.



Hetaira opta, desde su fundación hace ya 10 años, por defender los derechos de quienes tienen intención de seguir ejerciendo porque creemos que han de poder hacerlo en las mejores condiciones posibles. Optamos por situarnos del lado de quienes afirman: “Ni víctimas, ni esclavas, nosotras decidimos�, porque todas las personas tenemos capacidad de decisión, absolutamente todas, a pesar de estar condicionada por múltiples situaciones personales (nivel económico, cultural, las ofertas de empleo...).



Estar cerquita de las trabajadoras del sexo de la zona centro, del polígono de Villaverde y de la Casa de Campo de Madrid, conocer su realidad, estar atentas a sus reivindicaciones, velar por sus intereses, conseguir espacios donde darles voz, organizar manifestaciones, denunciar actuaciones policiales abusivas y redadas indiscriminadas, ofrecer alternativas viables frente al vacío, debatir sobre la diferente situación de hombres y mujeres en nuestra sociedad, elevar juntas nuestra autoestima y compartir nuestras experiencias de vida (y también sexuales) y darnos cuenta de que no somos tan distintas, disgustarnos con las políticas que no dejan capacidad para sobrevivir y reírnos por la simple alegría de conocernos y re-conocernos las unas en las otras. De esta forma de organizarse, de esta forma de reivindicar, creando redes solidarias, sabemos mucho las feministas porque las mujeres pasamos -y seguimos pasando a día de hoy- por una pelea similar.

Facilitar atención asistencial y asesoramiento jurídico, socio-sanitario o psicológico; promover lazos de solidaridad y apoyo que sirvan para generar organización; mediar en los conflictos; reforzar su capacidad de negociación con los clientes para conseguir su autonomía y su autoafirmación como mujeres; y promover la conciencia sobre los derechos de las prostitutas para influir en las políticas que se planteen a nivel institucional, político o legal son nuestros grandes objetivos.



Hace 10 años cuando comenzamos nuestro viaje nadábamos sin tablas sólidas sobre las que descansar y mantenernos. Hoy navegamos sobre una pequeñita embarcación y de vez en cuando hasta somos capaces de darle el rumbo que queremos, aunque el mar ande picado, porque la marcha por la defensa de los derechos de estas mujeres (y hombres) ya no hay quien la pare.
Sindicato Sindicat