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Microcréditos como punto de partida
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per uno de tantos |
08 ago 2004
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por Sergio RodrÃguez Sánchez
Los microcréditos son préstamos que se conceden sin necesidad de presentar un aval. Esta es la principal diferencia con los préstamos bancarios. La cuantÃa de los microcréditos suele ser pequeña. En condiciones normales, no superan los 6.000 dólares. Estos créditos son de vital importancia para la supervivencia de millones de personas.
El Grameen Bank, fundado por Muhammad Yunus, y conocido como el ‘banco de los pobres’, lleva desde 1976 ligado a los microcréditos. Cuenta Yunus que “visitando una pequeña aldea, conocà a una mujer que trenzaba el bambú para fabricar unos pequeños asientos. El problema era que no disponÃa del suficiente dinero para comprar el bambú, por lo que tenÃa que pedirle prestado a uno de los caciques de la aldea, que a cambio la obligaba a venderle casi toda su producción a precios Ãnfimosâ€?.
Esta práctica, que aún hoy es común, indignó a Yunus, quien se decidió a organizar un sistema de créditos sin garantÃa de devolución que permitiesen a los más pobres salir de ese cÃrculo vicioso. Esta aventura ha fructificado en negocio y, para 2005, Yunus espera que sus microcréditos alcancen a 100 millones de personas. En contra de lo que se podrÃa pensar, el porcentaje de impagados está en un 3%, por debajo de otros sistemas de créditos al uso.
En los paÃses en vÃas de desarrollo, los microcréditos suponen un importante incentivo para el crecimiento económico, pues a través de ellos se logra una importante aportación al Producto Interior Bruto (PIB). Es una manera eficaz de mejorar la distribución de la renta.
La experiencia de Firoza Ajter, de la aldea de Gorma, en Bangladesh, es significativa del uso que se da a los microcréditos. Invirtió el dinero del préstamo en vacas, cabras, tierra, una casa firme y profesores privados para su hija. De todo ello va sacando beneficios, de forma que puede prosperar y a la vez devolver este préstamo, aunque no hay una garantÃa que se lo exija. Pero Firoza, aún siendo de origen humilde, no se encontraba entre la población más pobre de la zona.
Investigadores del Comité de Acción Rural de Bangladesh (CARB) han descubierto que quienes se encuentran por debajo del umbral de la pobreza tienen más dificultades para acceder a los microcréditos. Este mismo banco está comenzando a desarrollar un nuevo programa: en lugar de créditos, dan a las mujeres más pobres cabras o vacas, formación y cuidados sanitarios. Además, las personas enérgicas, decididas y emprendedoras, si cuentan con una mÃnima formación, pueden obtener, en teorÃa, mejores beneficios.
El próximo reto, aparte de extender los microcréditos por los paÃses en vÃas de desarrollo, es aplicarlos a los paÃses desarrollados. La pregunta es, por tanto, cómo podrÃan los paÃses industrializados aplicar esta herramienta que tan buenos resultados ha dado y a tan bajo coste.
Según algunos expertos, la solución serÃa convertir el microcrédito en un instrumento para hacer llegar recursos financieros a las actividades de reinserción social o laboral. Además, esta serÃa una alternativa fiable e interesante a la economÃa sumergida. Sin embargo, habrÃa que tener en cuenta que los paÃses industrializados tienen unas peculiaridades distintas, y lo que ha triunfado en el Tercer Mundo podrÃa fracasar en el primero. Por ejemplo, hay que preguntarse cómo se podrÃa garantizar la devolución de los préstamos o qué cantidades de dinero serÃan necesarias para sobrevivir en una economÃa de mercado.
Los microcréditos pueden convertirse en un primer paso para el desarrollo de los paÃses pobres. Se trata de aprovechar las nuevas tecnologÃas para potenciar el desarrollo. Muhammad Yunus tiene grandes esperanzas en este sistema. Las nuevas tecnologÃas pueden ayudar a integrar a los pobres en la globalización, creando un gran mercado de trabajo, ofreciendo formación y acercando los servicios sanitarios. Para ello, según Yunus, “los pobres tienen que participar activamente en este nuevo periodo económico y si no se les ayuda a ello, puede ser tarde para mitigar esa gran brecha que se agranda entre ricos y pobresâ€?.
Sergio RodrÃguez Sánchez es periodista |
Mira també:
http://www.radiochango.com/espanol/konciencia/articulos.php3?tipo=dossier&dossier=4&ID=851 |
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Comentaris
Re: Microcréditos como punto de partida
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per Jm |
09 ago 2004
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Las nuevas formas de "caridad cristiana" y todos los reformistas juntos no detendrán la REVOLUCION SOCIALISTA, porque mientras el sistema capitalista-dogmático no sea superado, la burguesía del mundo seguirá esclavizando vorazmente a la clase trabajadora.
El acceso al crédito para disponer de las herramientas de trabajo es un derecho básico en una economía socialista, y las nuevas formas de "dar limosna a los pobres" son meros intentos de perpetuar el sistema esclavista. |
megalerdo...
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per visitante |
09 ago 2004
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no sales a la calle?
parece q estuvieses en el mundo d hace dos siglos.
los microcreditos estan funcionando muy bien y permiten independizarse a las familias del sistema esclavista.
no puedes usar un lenguaje menos decimononico? |
Re: Microcréditos como punto de partida
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per shefard's silence |
09 ago 2004
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JM, creo que estás equivocado!...los microcréditos no son caridad, son créditos bancarios que se aplican a gente sin recursos y no lo practica ningún banco asociado al vaticano, la mayoría de veces se los conceden a mujeres para que se compren un móvil.
Con esta herramienta, son capaces de organizarse con sus vecinos y realizar cambalaches, trabajillos y buscarse la vida para poder devolver el dinero+inter€$.
Cuando lo devuelven se meten en otra aventura, and so on...el problema es que a nadie se le ha ocurrido meterse en temas de banca ética y microcréditos aki. Salut |
Re: Microcréditos como punto de partida
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per ahimsa |
09 ago 2004
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yo creo que es un tema super complejo el de los microcreditos: se trata de un empoderamiento de los desfavorecidos, o de una capitalizacion de los pobres?
nos llevan a revisar, en cualquier caso muchas de las definiciones clasicas de lo que es el capitalismo y de lo que puede ser socialismo, cuando hasta hoy las visiones sobre el socialismo parten de una vision de trabajadores asalariados, y lo que proponen los microceditos es hacer de los "pobres", pequeños capitalistas autónomos, porque los grupos financieros han visto que con algunos pequeños cambios, tambien los "pobres" son rentables financieramente.
se pasará de reivindicar el derecho a 6 horas de trabajo al derecho a credito para emprendimientos autonomos? para la señora que hace su canastita para venderla en la aldea, lo de las 6 horas maximo no le sirve, ni el derecho a vacaciones, etc, es una trabajadora autonoma.
debera entonces el socialismo luchar por hacer de los pobres pequeños capitalistas?
llevaria eso no solo a una redefinicion del socialismo sino tambien a la del capitalismo, ya que los capitalistas dejarian de ser cuatro grandes peces gordos desalmados, para ser millones de pequenos autonomos en el mundo, que hasta hace poco vivian en la miseria?
seria eso una victoria de los 5.000.000.000 de desfavorecidos en el mundo, o la victoria final del capitalismo? pero un capitalismo en el que los "pobres" pueden ser empresarios, es el mismo capitalismo que clasicamente hemos combatido desde el socialismo?
complejo, muy complejo. tuve la suerte de poder acompañar un poco el dilogo de microcreditos en el tan vilipendiado forum de las culturtas, del que sí admito muchas faltas, pero tambien algun acierto, y como socilista libertario y estudioso de nuevas formas de economia solidaria y comunitarias me quede un buen rato pensando..y aun sigo pensando y no lo tengo nada claro, la verdad. |
me has dejado pensando tambien a mi
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per visitante |
09 ago 2004
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mmmmmmmmmm
en principio la situacion es mejor q lo d ahora pero creo q no es el camino q creo q se haya d seguir.
mmmmmmmmmm
seguire pensando :) |
Re: Microcréditos como punto de partida
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per JM |
10 ago 2004
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Sí, el tema es realmente complejo: pero las trampas del lenguaje no debe hacernos olvidar que el conflicto no sólo se produce en los "microcréditos para los pobres" sino que se extiende a la situación que se vive en el "primer mundo capitalista" por llamarlo de algún modo. La estrategia de los capitalistas de desactivar la lucha de clases ha pasado por generar un "ejército" de presuntos pequeñoburgueses propietarios teóricamente de sus medios de producción para los cuales no existe cobertura de derechos sociales ni laborales apreciable, estos son los llamados "autónomos" del Estado español, un invento de los asesores económicos de la escuela catalana -formados en las teorías económicas precursoras de la Escuela de Chicago- durante el franquismo de los años sesenta.
Desde luego, tienes razón al señalar que los microcréditos no son caridad: el banco de Yunus suele cobrar intereses bastante altos y en general, como bien señalas se trata de préstamos que deben devolverse con sus correspondientes gastos. Pero yo no digo que la "caridad" sea nunca "grátuíta" o desinteresada, sino que suele tener un altísimo precio en términos de libertad, conciencia, educación o simplemente, en la restricción de oportunidades personales y colectivas. EN el caso de los "microcréditos" que potencian especialmente las fuerzas vinculadas al "ecumenismo mundial", se presentan como un esfuerzo para "ayudar a los pobres", siendo en realidad una forma de extensión del crédito propia del sistema capitalista reformado: las propias cajas de ahorro que son el producto de una ley socialista de la II República Española y que fueron estratégicamente respetadas por el franquismo han tenido esta misma función elevando la actividad económica.
La cuestión es que ideológicamente existe un "gap", una mentira; se presenta el microcrédito como una "asistencia a los probres" cuando en realidad, esa actividad puramente bancaria genera importantes beneficios a sus promotores. Por eso digo que se trata de una nueva forma de "caridad cristiana", porque la iglesia dice de sí misma que "lucha contra la pobreza" cuando en realidad, es una institución ligada al poder capitalista del que obtiene los máximos rendimientos vía cesión de impuestos, privilegios fiscales, etc.
De la misma forma que se desconoce cuál es la actividad económica de la iglesia, nada se dice en el asunto de los microcrédito de los beneficios, del valor EXTRAIDO por el capitalista a sus "pobres", mediante el cobro de intereses y gastos.
La palabra "microcrédito" y su "márketing" esconden en realidad una situación de dominio y dependencia entre el "banquero" y sus "clientes", mucho más en un contexto social en el que no existen derechos ni una tutela. Para que este sistema estuviera de acuerdo con los principios de justicia social debería debatirse y establecerse la forma jurídica del "banco de microcrédito", dotándolo de formas cooperativas y autogestionarias al objeto de impedir lo que sucede con la entidad de Yunus, en el que existe una relación total de subordinación y dependencia.
Pero elevar el nivel de conciencia de los trabajadores en situación de necesidad extrema, como la que se produce en muchos países de lo que llaman "el sur" es una tarea muy compleja que requiere largos períodos de formación...no se puede tener conciencia política si no se tienen cubiertas con dignidad, las necesidades mínimas de subsistencia.
El problema del "microcrédito" tal y como lo presentan las fuerzas capitalistas-dogmáticas, revestido de elementos asistenciales en realidad falsos, es que se ha subvertido su naturaleza social, que sería en buena lógica de carácter cooperativo y autogestionario, conviertiéndolo en un instrumento más de explotación y dominio, en el cual las decisiones las toma una sóla persona o una élite directiva.
En términos prácticos, con el márketing que se realiza por las fuerzas capitalitas del concepto de "microcrédito" se obvia y se omiten totalmente dos hechos cruciales:
1.- Que las decisiones no se toman de forma cooperativa ni autogestionada, sino de forma jerárquica con sometimiento al principio de obediencia.
2.- Que el coste y los derechos de los "clientes" del mirocrédito ni se conocen ni están garantizados, existiendo por tanto la posibilidad de todo tipo de abusos.
¿Qué beneficios obtiene Yunus de aplicar un eventual sobrecoste en el precio de los microcrédito y de no respetar derechos mínimos de sus usuarios?
¿Cómo se determina el interés y los gastos que han de pagar los usuario del microcrédito de Yunus?
¿Qué hace Yunus con los excedentes, con el valor excededentario aportado por sus clientes? ¿Se apropia de los beneficios en cuyo caso estaríamos ante una mera sociedad anónima? ¿Qué excedentes genera en todo caso su actividad y a qué normativa legal están sujetos?
Antes de pronunciarse definitivamente respecto a una cuestión, es necesario intentar conocer todos sus aspectos. En concreto, en este caso, existen importantes cuestiones sobre las que nada se conoce. |
Re: Microcréditos como punto de partida
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per Uno que pasaba por aquà |
11 ago 2004
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En unas conferencias sobre desarrollo que dió La Caixa hace unos meses, un promotor de microcréditos lo dijo muy clarito:"This is a business" (Esto es un negocio), no una obra de caridad (pues cobran intereses). Comentaba que era difícil encontrar (en Bangladesh) particulares dispuestos a aportar capital porque les parecía que era como aprovecharse de los pobres, por eso recurría a la banca comercial para conseguir capital.
También comentó que tenían problemas con los imanes de la zona, ya que el Islam prohíbe el préstamo con interés. Parece que el cristianismo no lo permitió hasta el siglo XIX -por eso los judíos eran los únicos prestamistas en la Edad Media-. El judaísmo parece que también originalmente lo prohibía.
Podéis consultar www.dinarydirham.com para entender más sobre el dinero y los bancos. |
Re: Microcréditos como punto de partida
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per domitilo toala toalapreciado@yahoo.ec |
01 des 2004
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el credito rural es creer en las personas y dar una esperanza de oportunidades para el sector desprotegido, abandonado por todos los organismo de, como ong, gobierno, en la cual siempre esta en el segundo lugar del pib del ecuador que pasaria si en el ecuador se terminara el petroleo |
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