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Notícies :: globalització neoliberal : criminalització i repressió : amèrica llatina |
Guadalajara: Crónica de hechos desde el momento de las detenciones hasta hoy
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per geek |
04 jun 2004
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Otro Mayo Guadalajara enlace ARROBA otromayoguadalajara.org
CRONICA DE HECHOS DESDE LA VISPERA DE LA MIFESTACIÓN HATA EL D�A DE HOY EN LA QUE SE DESCRIBE LA IRREGULARIDAD DEL PROCESO Y LAS VIOLACIONES A LOS DERECHOS HUMANOS DE LOS DETENIDOS. |
CRÓNICA DE HECHOS
De los aproximadamente 95 detenidos:
33 fueron liberadas durante la noche, en su mayorÃa de Guadalajara,
10 más el sábado por la tarde del sábado,
8 extranjeros fueron enviados al Instituto Nacional de Migración de Iztapalapa en el Distrito Federal. 5 ya fueron deportados. 3 se ampararon.
49 han sido consignados por los delitos de motÃn, atentados contra las vÃas de comunicación, resistencia a la Ley y al arresto, vandalismo, lesiones, y daños a la propiedad privada y robo calificado. A 21 de ellos se les imputa el delito de “robo calificadoâ€?, que está tipificado como un delito grave y no alcanza fianza.
Jueves 27
ï‚· La vÃspera de la manifestación, cuerpos antimotines de la SecretarÃa de Seguridad Pública del Estado de Jalisco (SSP), cercaron a los jóvenes que acampaban en el parque contiguo a la Plaza Juárez desde las 6 de la tarde hasta las tres de la mañana. Durante este tiempo no se nos permitió hablar con ellos. Se buscó una salida dialogada y no se ofreció interlocutor por parte de las autoridades hasta avanzada la noche. Este suceso nos sorprendió puesto que el presidente municipal de Guadalajara, Emilio González Márquez, nos habÃa ofrecido todas las garantÃas y los servicios necesarios para los campamentos.
Viernes 28
ï‚· Antes de iniciada la marcha se observaron camionetas de las que descendÃan personas vestidas de civil con radios en la mano.
ï‚· La marcha de 4mil personas salió de la glorieta Minerva rumbo al Centro de la ciudad. Esta era la movilización unitaria que habÃa sido convocada por todos los grupos civiles que realizaron actividades alternativas frente a la III Cumbre América Latina y el Caribe – Unión Europea. En ella marchamos sindicatos, partidos polÃticos, músicos, artistas, jóvenes, libertarios, académicos, padres de familia y ciudadanos. La marcha transcurrió de manera pacÃfica y festiva hasta el cruce de las avenidas Alcalde y 16 de Septiembre.
 Cuando el primer contingente llega a este punto, por la banqueta un grupo de personas, desconocidas para las organizaciones, con palos y rostro cubierto, se dirigió a la valla policiaca e inició el enfrentamiento. Los contingentes deciden virar a la derecha en dirección del templo Aranzazú, y organizaron una valla humana de protección para que el resto de la marcha pudiera circular sin peligro.
 Cuando el contingente conformado por libertarios llegó al lugar de los enfrentamientos realizaron una segunda valla humana para evitar que los enfrentamientos arremetieran contra el resto de contingentes que avanzaban hacia la derecha.
 Detrás del último contingente se instala una segunda valla policiaca en la avenida Vallarta, de donde comenzaron a lanzar gases lacrimógenos. Las dos vallas policiacas avanzaron hasta convertirse en una sola comprimiendo a los contingentes de manera peligrosa.
 Algunas personas comenzaron a correr hacia el templo Aranzazú, pero otros escuadrones policiacos avanzaban del templo Aranzazú y de las calles aledañas hacia la marcha. Los últimos contingentes de la marcha quedaron atrapados.
ï‚· Una vez disuelta la manifestación se realizaron redadas en las calles aledañas al centro que duraron hasta las 1 de la mañana. Se detuvo a la gente caminando e incluso se les sacó de establecimientos comerciales. Muchas de las detenciones fueron apariencia fÃsica o manera de vestir. Otros más fueron detenidos en la Cruz Roja, cuando fueron a atenderse por lesiones. En muchos casos la detención fue con lujo de violencia.
ï‚· Una vez detenidos se les llevó al edificio de SSP de Jalisco, ubicado en Colón y Miguel Blanco en donde se les dividió por lugares de origen. A las mujeres se les desnudó y se les exigió que hicieran sentadillas. A los hombres golpeó se les mantuvo por más de tres horas boca a bajo y con las manos en la nuca. A algunos se les mostraron fotografÃas y se les pidió que identificaran gente, a otros se les comparaba con fotografÃas que tenÃan el tÃtulo los “cabecillasâ€? de distintos grupos. No se les permitió conciliar el sueño, el que intentaba darse una siesta era despertado a patadas. No se les remitió al Ministerio Público. No se les permitió ejercer su derecho a realizar alguna llamada y mucho menos nombrar un abogado defensor. Todos fueron obligados a firmar bajo tortura (psicológica y/o fÃsica) una declaración que los inculpa de los delitos de motÃn, robo, lesiones y daños en propiedad ajena y a aquellos que se resistieron se les torturó (AQUI HAY QUE PEDIR MAS INFORMACION A JOSÉ LUIS).
Sábado 29
 Alrededor de las 3 de la mañana se soltó al primer grupo, todos de Guadalajara.
 El sábado por la tarde se soltó a 10 más.
 No fue hasta el sábado por la noche que se nos entregó la lista extraoficial de consignados.
ï‚· En el transcurso del domingo se les trasladó a la ProcuradurÃa General de Justicia del Estado de Jalisco, hasta entonces no se les habÃa dado comida ni agua por lo que varios de ellos mostraban claros signos de deshidratación.
ï‚· A los ocho ciudadanos extranjeros (4 españoles, una canadiense, una australiana, un italiano y un estadounidense) que fueron arrestados también estuvieron incomunicados en la SSP, nunca les dijeron ni las leyes, ni sus derechos, ni de qué los acusaban y padecieron acoso, hostigamiento, intimidación, hambre, sed y burlas, por parte de los efectivos de la SSP. Por la noche del sábado fueron trasladados a la Estación Migratoria de Iztapala en la capital del paÃs. Tanto la canadiense como el norteamericano fueron detenidos en hospitales de Guadalajara y se encontraban heridos.
Domingo 30
 Fue hasta el domingo y después de muchas gestiones, se les permitió a los padres de familia poder ver a sus hijos. Los padres que sà pudieron ver a sus hijos, atestiguan que se les ha torturado y que se les ha hecho firmar su declaración bajo amenaza.
ï‚· Hasta entonces no se les habÃa permitido ver a los abogados de la Asociación Nacional de Abogados Democráticos quienes están solicitando ofrecer sus servicios como abogados defensores de los detenidos.
ï‚· A aquellos que no tenÃan familiares en Guadalajara, nadie les habÃa podido ver.
ï‚· Los extranjeros asustados, temerosos de permanecer en una cárcel mexicana, rechazaron el amparo que les ofreció en Centro de Derechos Miguel AgustÃn Pro.
ï‚· A Liliana GalavÃz, que tenÃa un trauma craneoencefálico, no se le habÃa llevado a un hospital.
Lunes 31
 Los consignados fueron trasladados al penal de Puente Grande. A partir de las 3pm comenzaron a rendir su declaración en la que se desisten de la anterior por haber sido rendida bajo tortura y sin conocerla.
ï‚· Liliana GalavÃz fue trasladada al Hospital Civil pero seguÃa incomunicada.
 A los extranjeros se les estuvo intimidando nuevamente diciéndoles que el juicio de amparo implicaba permanecer meses detenidos en México.
ï‚· Se entregó un amaparo por incomunicación pero no procedió porque “no se sabÃa en cuál MP se encontrabanâ€?.
 Por la noche se les comienzan a definir las fianzas de 25mil pesos para los de Guadalajara y 50mil pesos para los de fuera. Y una recuperación de daños de entre 137 a 247mil pesos. Los acusados de robo calificado no alcanzan fianza.
Martes 01
 La Comisión Nacional de Derechos Humanos habló con los extranjeros, aparentemente esto aceleró su deportación. Fueron llevados al aeropuerto las 4:30pm. Al menos el norteamericano y el italiano ya fueron deportados. Las españolas fueron subidas al avión.
 A 21 de los muchachos se les imputa el delito de “robo calificado�, que está tipificado como un delito grave y no alcanza fianza.
ï‚· Se logró visitar a Liliana GalavÃz confirmando que tenÃa un tráuna craneoencefálico leve.
Miércoles 02
ï‚· Alrededor de 30 muchachos hacen un plantón frente a palacio de Gobierno. 2 de ellos son detenidos por parte de la policÃa municipal por pegar con cinta canela uno de los carteles que llevaban. Se los llevan a Palacio Municipal. El resto trata de rescatarlos, forcejean con la puerta y logran sacarlos. Se retiran rumbo a la plaza de armas. Los policÃas piden refuerzos, llegan 2 patrullas y detienen a 8. Son liberados aproximadamente 4 horas después. Uno de ellos fue fuertemente golpeado en la cara y en el tórax.
 La Comisión Permanente del congreso de la Unión, por unanimidad, se pronunció para que el gobierno del Jalisco deslinde responsabilidades por la represión y ordene la inmediata libertad de las y los detenidos con motivo de las manifestaciones del pasado 28 de mayo. Se exhorta al Gobernador de Jalisco a: 1) realice un esclarecimiento puntual de los hechos y se deslinden responsabilidades para proceder panal y/o administrativamente, para sancionar a los responsables intelectuales y materiales que desde el gobierno estatal hubieran ordenado estos hechos de represión indiscriminada, 2) para que se de a conocer la lista completa de los detenidos tanto mexicanos como extranjeros y 3) para que se proceda a la inmediata libertad de quienes han sido ilegal e injustificadamente detenidos, desistiéndose del ejercicio de la acción penal. |
Mira també:
http://guadalajara.mediosindependientes.org/newswire/display/1305/index.php |
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Comentaris
Guadalajara: Extractos de testimonios
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04 jun 2004
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Otro Mayo Guadalajra
MAS TESTIMONIOS DE LAS VIOLACIONES A LOS DERECHOS HUMANOS DURANTE LAS DETENCIONES POSTERIORES ALA MARCHA DEL PASADO 28 DE MAYO
EXTRACTO DE TESTIMONIOS
Detenida
“…Después nos llevaron al primer lugar donde llegamos, nos dijeron que nos sentáramos y a los hombres aparte los tenÃan acostados boca abajo con las manos en las nucas y con las piernas cruzadas, los pateaban y un policÃa caminó encima de uno de ellos y le tronó la espalda, yo estaba mirando. Después les preguntaban que si querÃan ir al baño, al cuarto donde habÃa literas y se metÃan con ellos cuatro o cinco policÃas, mientras estaban adentro golpeándolos y no sé qué cosas más y se escuchaban gritos hasta donde estábamos las mujeres y que los azotaban contra los lockers, los chavos salÃan llorando y con las piernas abiertas, los policÃas salÃan con el cierre del overol abajo y acomodándose los boxers y otros con el pantalón desabrochado, tanto llegó su cochinada que hasta un chavo salió llorando desconsoladamente caminando abierto de piernas directo con el doctor y no se podÃa sentar y el doctor se reÃa junto con los policÃas…nos sentaron en el piso y mientras tanto los policÃas se burlaban de nosotros, nos torturaban mentalmente, pasamos la noche sentadas, no nos dejaban acostarnos, no nos dieron de comer, pura agua. Ã?bamos al baño cuando ellas querÃan. Trajeron tortas para ellas, nos ofrecÃan y algunas decÃan que sÃ, entonces ellas se comÃan su torta y se iban burlando…â€?
Testigo
“Saliendo de la manifestación tomé un camión y a las dos cuadras lo abordaron dos chavos de entre 16 y 17 años de edad. Al avanzar una cuadra unos policÃas detuvieron la unidad y pidieron prepotentemente y muy agresivos que abrieran las puertas, al mismo tiempo estaban golpeando la unidad y agrediendo verbalmente al chofer y a las personas que estaban dentro. La gente no querÃa que se abrieran las puertas estaba toda asustada, al abrirlas se subieron como cinco policÃas, y les dijeron a esos chavos que se bajaran y al apenas voltear ellos los empezaron a golpear fuertemente en la cabeza con las macanas y al caerse de la golpiza, los empezaron a patear y nuevamente con las macanas los golpearon, toda la gente estaba histérica, los niños empezaron a llorar y una que otra persona recibió golpes por la agresión dentro de la unidad, ya al sacarlos los aventaron desde dentro hasta la calle y en la banqueta los siguieron golpeando…â€?
Detenido (poeta de Guadalajara)
“…Después de dos horas, un muchacho pidió permiso para ir al baño y como yo estaba entumido, aproveché la ocasión para moverme. Al otro muchacho lo llevaron al baño y después de orinar lo obligaron a lavarse las manos dentro de un excusado. A mà me levantaron y me pasaron de ida y vuelta entre dos filas de granaderos que me golpearon a su antojo. Luego un tipo sacó su pistola, cortó cartucho y me la puso frente a la nariz. A ti ya te cargó la chingada, me dijo. A las tres de la mañana me soltaron y me ofrecieron disculpas�.
Detenida (extranjera, observadora civil de derechos humanos)
“…estaba tomando fotos de cómo golpeaban a un joven, cuando me señalaron y me persiguieron. Hubo golpes para detenerme y luego me manosearon…me dijeron “te vas a chingarâ€?, antes de que me quitaran la cámara y me trasladaran a la SSP. HabÃamos como 70 personas en ese sitio, a 20 de los cuales que juzgaban más radicales, creo los tenÃan sometidos y acostados en el suelo; a veces los pateaban y los humillaban…luego entre risas, preguntaban quién querÃa ir al baño… era una farsa porque cuando regresaban era obvio que los habÃan golpeado, que les habÃan reventado los huevos. A los extranjeros nos pasaron a otra oficina, donde nos tuvieron parados contra la pared en medio de comentarios humillantes. Nunca nos dijeron ni las leyes, ni nuestros derechos, ni de qué nos acusaban. Nos dejaron dormir poco y no nos dieron de comer ni de beber durante varias horasâ€?.
Detenido (Coordinador del CapÃtulo México Contra la Guerra, de la organización “No en Nuestro Nombreâ€?)
“HabÃa consigna de golpearnos lo más que pudieran, desde que nos agarraban hasta el traslado a la SSP. A mà me golpearon en el tórax, en los genitales y en las piernas…ahà nos iban pasando entre todos los policÃas y todos nos golpeaban. En los separos no habÃa nadie vestido de negro, de los que se supone que iniciaron la confrontación. Lo que hace suponer que fueron provocadores infiltrados. Entre los manifestantes habÃa algunos con paliacate que luego supimos que eran policÃas de civil, cuando sacaron los toletes y nos empezaron a golpear…hay una obsesión contra los defeños, llamados despectivamente chilangos y aún más contra los de la UNAMâ€?.
Testigo
“…Fueron detenidos mis amigos cerca de la Universidad de Guadalajara…entre las 9:30 y 10:00 de la noche…estábamos en un puesto de tacos cuando los policÃas llegaron…un amigo me ayudó a salir del centro y a él no lo agarraron porque dijo que era de Guadalajara…â€?
Amigo de detenido
“Recibà un pase del Ministerio Público para poder proporcionarle alimentos al detenido Daniel Orozco y me comentó que lo hicieron declarar y firmar lo que él no habÃa hecho y por supuesto me dijo que lo habÃan golpeado en las costillas y en el estómago, estaba destrozado moralmente y triste…â€?
Detenida
“…Nos metieron de dos en dos a unos cuartos, donde nos desnudaron y nos obligaron a hacer sentadillas…con los hombres hubo violencia fÃsica…con las mujeres presión psicológica…â€?
Testigo
“Una pareja de americanos salieron de su hotel a cenar como a las diez de la noche, unos policÃas det
Madre de un detenido
“Me dijo que lo agarraron de la mano izquierda y le fracturaron los dedos anular y meñique. Tiene golpes en la cabeza y en todo el cuerpo. No le han dado nada de comer y lo obligaron a firmar una declaración sin verla�.
Padre de un detenido
“A Jaime lo acaban de operar de las amÃgdalas y no puede hablar, pero mire usted lo que me escribió: me golpearon los antimotines pero q’ no diga nada pa’ q’ me dejen salirâ€?.
Madre de un detenido
“ …no le han dado de comer en dos dÃas?...Malditos! Me dijeron que no me preocupara, que los estaban atendiendo muy bien. ¡Malditos, desgraciados! ¿A quién puedo recurrir?â€?.
Padre de un detenido
“…lo sacaron herido de la Cruz Roja, lo arrastraron jalándolo de la cabeza y se lo llevaron a los sótanos de la Seguridad Pública del Estado�.
Hermana de detenido
“…me platicó que el viernes por la noche, al salir de la preparatoria Lafayette en compañÃa de un amigo, encontraron muchos policÃas en la calle y sintieron miedo. Entonces se acercaron a un agente y le preguntaron por dónde les convenÃa irse para no tener problemas y el oficial les indicó una calle, se fueron los dos por ahÃ, pero fueron rodeados por los caballos de la policÃa montada…â€?
Testigo (abogada)
“ Cuando llegamos a la Cruz Verde, Lalou estaba en los separos... estuvimos esperando un lapso de dos horas, lapso en el cual ante nuestra repetida insistencia el mencionado secretario de actas nos daba largas, aduciendo toda clase de pretextos, entre ellos que “el responsableâ€? no se encontraba... un oficial de la policÃa estatal, que no quiso identificarse, intentó hacer que la enfermera y yo abandonáramos la agencia... unos momentos más tarde, una agente de la misma corporación, comenzó a interrogarme solicitándome mi información personal... en ese momento, sin mayor trámite, Lalou fue sacada de la celda del separo, y trasladada al exterior por dos agentes. El MP se negó a explicarme las razones de esta situación... Salimos corriendo detrás de la chica, la enfermera intentaba hacer una valoración rápida de la situación, mientras yo le preguntaba algunos pormenores de su detención. La habÃan interrogado sin informarle de sus derechos, incomunicada y sin abogado de por medio. Pero es todo lo que me pudo decir pues respiraba con mucha dificultad y los policÃas intentaban impedir el diálogo. La enfermera intentaba consolarla un poco y del escaso contacto fÃsico que tuvieron su blusa quedó manchada de sangre. Intentaron subirla a la caja de una camioneta pick-up para trasladarla al edificio ubicado en las calles de Libertad y 16 de septiembre... Lalou le dio a la enfermera una playera que llevaba puesta, bañada en sangre, y uno de sus zapatos que no podÃa ponerse por la hinchazón de su pie. Seguimos a la patrulla que iba a alta velocidad, pero al llegar al edifico, no nos permitieron el paso, y nadie allà pudo darnos ninguna información... Lalou de 19 años, herida, asustada, sola, en un paÃs extranjero, incomunicada, secuestrada por la policÃa, sin garantÃas individuales y acusada de lesionar a un policÃa…â€?
Detenido
“..participaba como fotógrafo independiente... toda la banda que corrió y aparte habÃa unas personas con paliacate que corrÃan y tiraban a la banda, me caÃ, cuando me quise levantar, me comenzaron a golpear los policÃas antimotines. Hubo un momento en que les empecé a gritar que ya, que ya me dejaran pero pues seguÃan... me subieron a una ambulancia de la cruzo roja... habÃa policÃas vestidos de civiles con un botón rojo en el cuello de la camisa en el hospital. HabÃa otros compas muy golpeados, habÃa un chico con un brazo roto y a una chica con una gasa en un ojo y tenÃa también heridas en la cabeza... Estuvimos como media hora ahÃ, luego nos subieron a una camioneta de la estatal, ya no eran los policÃas de civil que nos tenÃan detenidos. Cuando nos sacaron del hospital se encargaron los estatales... habÃa como 80 personas y 20 más o menos mujeres. Se veÃan muy cansados, unos estaban muy golpeados y golpeadas. Estaban sentados en cuclillas y al principio me pusieron aparte enfrente de ellos y luego junto con ellos. No nos dejaban dormir, si nos acostábamos un poco nos pateaban y nos decÃan órale cabrón que no estás en tu casa, estás castigado, no nos daban agua tampoco. Cuando alguien pedÃa permiso para ir al baño le decÃan que sà pero lo golpeaban en las camas de atrás donde dormÃan los policÃas... Nos comenzaron a dar agua pero era muy poca y una era del baño, era café....separaron a los de Guadalajara, a los del DF y a los otros Estados los pusieron juntos... Me llevaron a un auditorio donde habÃa más personas lesionadas y otras chicas, unas del DF que son de la bazucada, que no habÃan comido ni bebido agua. Una de ellas estaba embarazada...â€?
Testigo (novia)
“Patrik yo estuvimos saliendo del Hotel a las 9 de la noche el dÃa 28 de Mayo para buscar comida... De repente vimos a unos chavos comiendo en la calle seguidos, a lo menos por 20 policÃas vestidos de traje antimotÃn. Yo salà corriendo hasta la entrada del Hotel, Patricio no llego a la entrada porque la policÃa lo agarró en la calle. Lo tiraron a la calle y empezaron a patearlo con las votas con acero. Él intento escapar otra vez a la entrada, le tiraron a él contra el vidrio de un lado de la entrada del Hotel, rompiéndolo y causando varias heridas en el hombro de él. En esté momento yo salà a la calle para intervenir y coloqué mi cuerpo entre él y los policÃas, nos agarraron y tiraron a la calle, yo estaba abrazándole a él con mi cuerpo para que no fuera posible a golpearlo a él más. Tres personas que trabajan en el Hotel Hamilton, salieron a la calle a gritar son huéspedes de este Hotel, están quedando aquÃ. Entramos todos nosotros (los trabajadores, patricio y yo) al Hotel. Esperamos hasta las diez de la noche y el dueño del hotel llamó a la cruz roja para una ambulancia, Patricio fue golpeado en la piernas , los brazos, la espalda y en la cabeza. También él me dijo que un policÃa sacó la pistola y la puso en la cabeza de Patricio y dijo “ no te muevas o yo voy a matarteâ€?. Dos enfermeras entraron al Hotel para revisarle y decidimos salir en la ambulancia para la clÃnica. Yo acompañe a Patricio en la ambulancia hasta la cruz roja en parque Morelos, llegamos allá entre las 10:15 o 10:30 por la noche yo esperaba en la sala de espera hasta las 11:15 o 11:30 de la noche cuando pregunté por la condición de él, una enfermera salió que la policÃa iba a detenerlo y llevarlo al ministerio público... TodavÃa no he escuchado nada más de Patricio hasta este punto, (ahora son las 4:30 por la tarde el dÃa 29 de mayo)â€?
Mamá de detenido
“El no fue a la marcha. Salió de la casa como quince a las 6 de la mañana, se fue a trabajar, él trabaja en Flextronex. De ahà salió a las 3 pm. De ahà iba para la escuela, Eco Computación, ubicada en Colón y Juárez... El, desde que compró la cámara, el jueves por la tarde, la carga con él para tomar cualquier cosa que le llame la atención. El traÃa una cámara y empezó a tomar fotos de la marcha mientras caminaba para llegar a la escuela... Lo agarraron del cabello e iban a estrellarlo contra un poste pero él se les alcanzó a zafar. Lo metieron al edificio de Seguridad Pública y dice que lo acostaron boca abajo con las manos en la nuca y los policÃas caminaban sobre de ellos. Nos contó que pidió permiso para ir al baño y que estaban unos policÃas dentro del baño y no lo dejaron hacer del baño. Lo pararon contra la pared con las piernas abiertas y le golpearon en sus partes privadas. Un familiar de otro detenido comentó que su hijo le dijo que sà vio para a los de Derechos Humanos y que vieron que estaban golpeándolos y no hicieron nada. Cuando los pasaron a la calle 14 lo golpearon más y él se desmayó de las golpizas que le daban y les pedÃan a los demás compañeros que los tuvieran de pie aunque estuvieran desmayados. Los tenÃan de pie con la frente en la pared por varias horas y pasaban con una macana golpeándolos en la nuca, en las piernas y en las costillas. HabÃa un señor que los detenÃa para que no se cayeran porque si se caÃan los golpeaban más. A algunos los metieron en la taza del baño. Cuando estaba dando su declaración no lo dejaban ver lo que escribÃan fue una declaración falsa y los hicieron que la firmaran a base de golpes. Otro muchacho nos contó que agarraron como a tres o cuatro y los asfixiaban con una bolsa de plástico obligándolos a que declararan que los demás habÃan robado, que los señalaran. Cuando llegamos a la calzada (domingo 30) sólo me dejaron estar con el como 3 minutos y fue donde él me comentó que los habÃan golpeado, que le dolÃan mucho las costillas, y que no les habÃan dado nada de comer desde el viernes... Al dÃa siguiente supuestamente nos iban dejar verlos, pero no nos dejaron entrar que volviéramos hasta hoy miércoles. El tiene el cargo de robo calificado, vandalismo, robo del escudo, lesiones a policÃas y no alcanza fianzaâ€?.
http://guadalajara.mediosindependientes.org/newswire/display/1304/index. |
"Todos tenÃamos miedo", recuerdan manifestantes vejados en Guadalajara
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per geek |
04 jun 2004
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FABIOLA MARTINEZ
* "Putas magdalenas lloronas", injuriaban policías a las detenidas
"Todos teníamos miedo... Nunca firmé nada, nadie me dijo por qué había sido detenido y mucho menos me dieron alguna razón de por qué me golpearon seis granaderos hasta abrirme la cabeza", relata Dante Costa, fotógrafo independiente, quien por razones profesionales estaba en la primera fila, frente a la valla policiaca, el pasado viernes en Guadalajara, Jalisco.
Aun con las secuelas de la golpiza, moretones, raspones y cuatro suturas en la cabeza de más de ocho centímetros, este joven de 20 años puede ahora contar lo que vivió a partir de las ocho de la noche del 28 de mayo en la capital jalisciense. Apenas puede moverse; la agresión de seis uniformados quedó plasmada en la imagen de primera plana de este diario el sábado 29 de mayo.
A continuación, su testimonio:"Me golpearon entre cinco y siete policías (en realidad fueron seis, constató el fotógrafo de La Jornada Carlos Ramos Mamahua). Me levantaron del suelo y me llevaron hacia atrás del Sanborns, luego me aventaron hacia la cortina de un comercio. Ahí me atendió un paramédico; me trasladaron al hospital de la Cruz Roja, donde vi a tres sujetos vestidos de civil con un botón rojo en el cuello. Cuando suturaron las heridas de mi cabeza me querían sacar de ahí inmediatamente, pero yo me sentía muy mal. Una doctora impidió que lo hicieran. Entonces los 'policías' me esposaron a la camilla.
"Después estas personas, militares o no sé qué, me metieron a unos separos. Luego, en una camioneta de la policía estatal, con las manos en la nuca y boca abajo, me llevaron al sótano del edificio de la Secretaría de Seguridad Pública, donde había varias personas golpeadas. Todas se veían cansados. No nos dejaban dormir; nos tenían en cuclillas, y si alguien se recargaba un poco nos pateaban y nos gritaban: '¡órale cabrón, que no estás en tu casa, estás castigado!' Cuando por fin nos dieron agua, una era del baño y otra normal, limpia, supongo.
"Jamás me informaron por qué estaba ahí, nunca nos dijeron ni quiénes eran. Después fueron separando a las personas de Guadalajara y a las del Distrito Federal. En ese sótano estaban los dormitorios de los policías antimotines. Después me subieron a un auditorio, donde estaban los más golpeados. Las personas seguían siendo golpeadas, unas en el baño y otras en el sótano. Nos decían que nos iban a aplicar todas las torturas que se sabían en la policía de Guadalajara. Nos gritaban: '¡pinches chilangos!, ¿ya encontraron lo que vinieron a buscar?' Los policías nos tomaban fotos. Como a las diez de la noche del sábado me sacaron por atrás del edificio. No me dijeron por qué finalmente me liberaban ni por qué me habían golpeado de esa forma. Todos teníamos miedo."
Norma Martínez, estudiante de la Facultad de Psicología de la Universidad Nacional Autónoma de México e integrante de la batucada que asistió a la marcha: "Nos subieron a las camionetas a golpes, que no cesaron hasta que llegamos al lugar donde nos recluyeron. Sabemos que nuestra detención fue ilegal, porque no estábamos haciendo nada; sólo esperábamos un taxi para llevar los tambores de la batucada, los cuales, por cierto, nos robaron. Nos pasaron de dos en dos a un cuarto donde había literas; hicieron que nos desnudáramos y nos pusieron a hacer sentadillas. Los policías varones abrían la puerta constantemente para mirarnos. Nos tomaron fotografías individuales y grupales, y nos pidieron nuestros datos completos como 40 veces. Les decíamos que nuestro derecho era hacer una llamada, pero nos respondieron que nosotros no teníamos derechos. Cuando llevaban a los chavos al baño los golpeaban; se escuchaban gritos horribles y los policías salían subiéndose el cierre del pantalón, como insinuando que los habían violado.
"En la madrugada llegó un sujeto que tenía la cabeza cubierta con una bolsa de papel; no tenía ni pantalones ni zapatos; estaba acompañado por policías y nos dijeron que él nos iba a identificar, así que comenzó a señalar a las personas que, según él, habían participado en actos violentos.
"Todo el tiempo nos insultaban y ejer-cían presión sexual sobre nosotras: '¡perras, putas, sucias, cabronas y pendejas'!, nos gritaban. Nos amenazaban con matarnos, violarnos, desaparecernos. Nos dijeron que nos iría peor que a los presos de Irak. Los policías no se sentían contentos hasta que nos hacían llorar, y al vernos en ese estado nos decían que parecíamos 'putas magdalenas lloronas'. Nos liberaron con la condición de que todos nos fuéramos inmediatamente de Guadalajara, bajo la amenaza de que si nos encontraban ahí ahora sí nos iba a cargar la chingada."
http://www.jornada.unam.mx/2004/jun04/040604/013n1pol.php?origen=politic |
Testimonio de Patrick Leet: "¡Si te mueves, te mato!"
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per geek |
04 jun 2004
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KARINA AVILES
En pleno centro de Guadalajara, a la vista de todos, "menos de las cámaras de televisión", esto le ocurrió al estadunidense Patrick Leet el pasado viernes 28, durante la cumbre de América Latina, el Caribe y la Unión Europea: ni un minuto había pasado cuando salió del Hotel Hamilton para comprar algo de comer y ya tenía encima a un policía que le apuntaba a la cabeza con su revólver y al mismo lo amenazaba: "¡si te mueves, te mato!"
Todavía hoy -dice desde su casa en el estado de Oregon, a la que llegó el pasado miércoles, después de ser expulsado del país- "no sé de qué se me acusa. Las autoridades de migración nunca me respondieron".
En una entrevista vía telefónica, Patrick, de 27 años, advierte que muchos de los detenidos que se conocieron en las instalaciones de la Procuraduría General de Justicia del estado de Jalisco (PGJEJ) "ni siquiera sabían qué es una manifestación".
A los ocho extranjeros "ya nos corrieron, pero los que más me preocupan son los mexicanos que se quedaron en la cárcel". Aunque él sabe que no era necesario estar en prisión para ser objeto de las vejaciones cometidas por los policías en contra de todo aquel que oliera, pareciera o fuera joven. Ese viernes no sólo las avenidas, sino hasta los centros hospitalarios de Guadalajara se convirtieron en un territorio de caza.
Así lo confirma la historia de Patrick. Desde que vio que unos provocadores comenzaron a cumplir con su tarea en la manifestación de los altermundistas, decidió regresar a su hotel, en la calle de Madero. Ahí aguardó unas dos horas. Casi a las nueve de la noche salió del albergue para comer.
Cuando menos lo esperaba, traía detrás un grupo de policías, quienes lo lanzaron al suelo, le dieron "patadas en la cabeza" y en todo el cuerpo. Asustado, "intenté escapar, pero uno de ellos me puso una pistola en la cabeza. Mirándome a los ojos dijo: '¡si te mueves, te mato!'"
Sin pensarlo, desafió la amenaza y corrió hacia el hotel. A unos pasos de la entrada de vidrio lo tomaron de la playera con tal fuerza que unos jirones de la misma quedaron en manos de los policías. Como si fuera un bulto lo lanzaron contra el cristal de la puerta, el cual se rompió en pedazos que se le clavaron en la espalda.
Para entonces los empleados del hotel gritaban: "¡es huésped, es huésped¡" Satisfechos, los policías lo dejaron herido "con sangre por todas partes" y se fueron. Patrick pensó que ahí había acabado todo. El dueño del hotel, al ver a su cliente en malas condiciones, sugirió llamar a una ambulancia. Una hora más tarde el joven estaba en la Cruz Roja. Esa fue su desgracia.
En una sala común, adonde "casualmente" llegaban más y más jóvenes golpeados, había decenas de hombres vestidos de civil que merodeaban alrededor de las camas; todos se distinguían por traer un botón rojo prendido de la camisa.
Uno de ellos se acercó a Patrick: "Me puso unas esposas en un solo brazo y luego las sujetó a la cama. Me dijo: 'si te portas bien no tenemos que hacer esto'. Pasé un rato con las esposas y después me las quitó, pero siempre hubo un hombre ahí, al lado, vigilándome todo el tiempo.
"Les pregunté quiénes eran, pero no respondían. Se quedaron callados hasta que uno dijo: '¡cállate, cabrón, o no sabes lo que te va a pasar!". Sin importar que los médicos recomendaron que el joven debía permanecer en el hospital, los policías lo sacaron y lo entregaron a una agencia del Ministerio Público cercana a la clínica.
Ya en la madrugada Patrick fue conducido a bordo de una camioneta hacia las instalaciones de la PGJEJ, lugar donde, junto con otros manifestantes, fueron golpeados, humillados, cubiertos del rostro con bolsas negras; las mujeres eran obligadas a hacer sentadillas, desnudas, como lo confirman los testimonios de los muchachos que estuvieron en aquel lugar.
En las primeras horas del domingo Patrick y otros siete jóvenes extranjeros llegaron a la Estación Migratoria de Iztapalapa. El martes por la noche fueron expulsados del país.
http://www.jornada.unam.mx/2004/jun04/040604/013n2pol.php?origen=politic |
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