|
Notícies :: antifeixisme : guerra |
Israel, más allá de la libertad de expresión
|
|
per William Wallace |
28 abr 2004
|
LA EX PRESIDENTA DE Irlanda, Mary Robinson, ha sido ferozmente atacada en Estados Unidos por atreverse a cuestionar la política israelí |
Atención a Mary Robinson, anterior presidenta de Irlanda, anterior alta comisionada de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos. Estaba prevista su intervención en la ceremonia de entrega de diplomas de licenciatura en la Universidad de Emory (Atlanta, Estados Unidos). Pero cometió un grave error. Se atrevió a criticar a Israel. Apuntó –horror de los horrores– que “la causa profunda del conflicto palestino-israelà radica en la ocupaciónâ€?. ¡Un momento! ¿Cómo dice, Mary? ¿“Ocupaciónâ€?? ¿No suena eso a antiisraelÃ? ¿Está diciendo realmente que la ocupación militar de Cisjordania y la franja de Gaza por parte de Israel, su recurso a ejecuciones ilegales contra palestinos armados, los tiroteos israelÃes contra escolares que lanzan piedras, en fin, el robo indiscriminado de suelo árabe para edificar casas para judÃos, resultan inadecuados o incorrectos en alguna medida?
Tal vez le entendà mal. Sin duda. Porque su respuesta a estas groseras difamaciones, a estos reparos insultantes y desconsiderados a su derecho a expresarse libremente, a estos calumniosos ataques contra su rectitud e integridad ¡fueron como el gemido de un minino! SÃ, señora, porque la verdad es que usted se sintió muy “apesadumbrada y consternadaâ€?. “Es penoso –como declaró a ‘The Irish Times’– que se hagan acusaciones totalmente infundadas.â€?
DeberÃa haber advertido a sus acusadores de la posibilidad de interponer acciones legales. Cuando yo advierto a quienes afirman en las execrables postales que me remiten que mi madre fue hija de Eichmann que recibirán la carta de un abogado –Peggy Fisk sirvió en la Royal Aire Force durante la Segunda Guerra Mundial, pero eso poco importa–, inmediatamente quedan reducidos al silencio.
Dejemos eso. Veamos. Usted está “apesadumbrada y afligida�. “Consternada.� Y, según parece, da pie a que el profesor Kenneth W. Stein, de la Universidad de Emory, diga que le “preocupa la aparente ausencia de la necesaria y debida diligencia de los responsables del acto al invitarle a hablar� (a la señora Robinson). Personalmente, me encanta ese pasaje que alude a la “necesaria y debida diligencia�. Ahora en serio: ¿cómo puede usted permitir, señora Robinson, que quede sin sanción esa perversa y retorcida versión de su reconocida rectitud e integridad?
Apesadumbrada... ¡Ah, Mary, bobita!
He tratado de comprobar la ortografÃa de “bobaâ€? (“diddumsâ€?) en el Webster’s, el magnÃfico y excelente diccionario americano. Sin éxito. Pero entonces, ¿de qué sirve que la tercera edición internacional del nuevo Webster’s defina el “antisemitismoâ€? como “oposición al sionismo: afinidad con quienes son contrarios al Estado de Israelâ€??
¿Ya estamos otra vez? Si usted o yo –de hecho ahora ha sido usted, querida Mary– nos atrevemos a sugerir que los palestinos han recibido un trato injusto bajo la ocupación israelÃ, nos convertimos en “antisemitasâ€?. Naturalmente, nadie nos podrá decir que no es justo y equitativo citar aquà la lamentable respuesta del director del Webster’s, Arthur Bicknell, al pedÃrsele que explicara esta grotesca definición.
“Nuestra tarea –respondió– consiste en explicar con exactitud y fidelidad los vocablos, expresiones y términos de la lengua inglesa tal y como de hecho se emplea. No hacemos juicios de valor; no nos movemos por inclinaciones polÃticas.â€? Aún de forma más increÃble y deplorable afirma que los responsables del diccionario contabilizan y verifican debidamente las “citas basadas en referencias existentesâ€? sobre el antisemitismo publicadas en “libros y publicaciones periódicas de esmerada prosaâ€?. Siendo como es ridÃcula y absurda, esta ambigua afirmación merece ser recibida con la más hueca y sepulcral de las carcajadas.
En fin, hasta equÃvocos y despropósitos del inglés americano se someten y humillan ante quienes censuran a las voces crÃticas de la polÃtica de Israel en Oriente Medio incluso a micrófono cerrado.
SÃ, a micrófono cerrado y sin cámaras delante. Acabo de recibir una ofendida y escandalizada nota –con razón– de Bathsheba Ratskoff, un productor y director de la American Media Education Foundation (MEF) que señala que su nuevo documental sobre “el final del debate sobre el conflicto palestino-israelÃâ€? –en realidad, una pelÃcula sobre las actividades de los equipos de relaciones públicas de Israel en Estados Unidos– ha estado en el punto de mira de la Fuerza Especial Acción JudÃa (sic). Estaba previsto que la pelÃcula “Paz, propaganda y la Tierra Prometidaâ€? se proyectara en el Museo de Bellas Artes de Boston.
¿Qué sucedió, en definitiva? Pues que Acción JudÃa exigió tras el incidente que se presentaran disculpas a la comunidad judÃa, solicitando la “promesa de una mayor sensibilidad y respeto (sic) a la hora de tratar en lo sucesivo asuntos relacionados con Israel y el conflicto de Oriente Medioâ€?. Es posible –se añadÃa– que los miembros de Acción JudÃa consideren “en consecuencia la eventualidad de proceder a cancelar su afiliación y retirar las aportaciones económicas que han venido realizandoâ€?.
En su momento, una tal Susan Longhenry, del Museo de Bellas Artes de Boston, escribió una horripilante carta a Sut Jhally, de la MEF, alusiva a la preocupación de “numerosos miembros de la comunidad de Bostonâ€? –que, naturalmente, por otra parte, no identificaba– sugiriendo una nueva proyección (dado que la proyección prevista en un principio habrÃa perjudicado plausiblemente la celebración del sábat judÃo) asà como un debate que habrÃa permitido que los crÃticos condenaran la pelÃcula. La carta finalizaba –y llegados a este punto me permito animarles a que aprovechen para familiarizarse con el equÃvoco lenguaje del poder– diciendo que “hemos hecho los mayores esfuerzos posibles para evitar la suspensión de todas las proyecciones de esta pelÃcula; no obstante, si no pueden dar su conformidad al enfoque procedentemente revisado de esta obra, sentiré mucho verme en la circunstancia de tener que proceder de forma efectiva a su suspensiónâ€?.
¿Qué pretende la señora o señorita Longhenry? ¿Que el verbo “longhenriar� salga en el Webster’s? ¿O al menos en el Oxford’s? No teman, su jefe desautorizó su pusilánime carta. Al menos, de momento.
Pero ¿dónde acaba todo esto? El domingo pasado me invitaron a hablar en el programa de sobremesa del canal televisivo irlandés TV3 sobre Iraq y el apoyo de Bush al nuevo muro de Sharon frente a Cisjordania. Cuando el programa tocaba a su fin, Tom Cooney, profesor de Derecho del University College de DublÃn, afirmó de repente que yo habÃa llamado “chusmaâ€? a una unidad de las fuerzas armadas israelÃes (y estaba totalmente en lo cierto, porque lo son) y que habÃa informado en una de mis crónicas de que habÃan perpetrado una matanza en Jenin en 2002.
Yo no dije que perpetraran una matanza, aunque deberÃa haberlo dicho. Una investigación subsiguiente concluyó que las tropas israelÃes habÃan matado a tiros a civiles inocentes, habÃan matado a una enfermera y habÃan atropellado a un parapléjico en su silla de ruedas. “¡Condenada mentira! ¡Condenada calumnia!â€?, chilló Cooney. Inmediatamente, el canal TV3 irlandés –procediendo correctamente, según sus normas– se desentendió de esta calumnia.
Por mi parte, volvà a observar para mis adentros hasta qué punto se mezclaba e implicaba una eminente institución universitaria –el University College de DublÃn es una de las mejores instituciones académicas y universitarias de Irlanda y no me resta más que desear a Cooney que haga con sus alumnos un mejor papel que el que hizo en televisión– en el alcance de la calumnia en cuestión. Por lo que a mà respecta, naturalmente, capté el mensaje. A callar. No critiquen al Estado de Israel.
PermÃtanme que termine con una reflexión positiva. Al igual que Bathsheba es judÃo norteamericano, los judÃos británicos se destacan también por las actividades de una organización llamada Deir Yassin Remembered, que conmemora la matanza de árabes palestinos a cargo de milicias judÃas a las afueras de Jerusalén en 1948. Este año han recordado a las vÃctimas árabes de la matanza –sucedida el 9 de abril– el mismo dÃa que los cristianos celebran el Viernes Santo.
La jornada marcó asimismo el cuarto de los ocho dÃas de la Pascua judÃa. Coincidió también con el aniversario de la ejecución por los nazis, en 1945, del teólogo y pastor alemán Dietrich Bonhoeffer en el campo de concentración de Flossenburg. La liberación de los judÃos hace 3.000 años, la muerte de un judÃo palestino hace 2.000 años, la muerte de un cristiano alemán hace 59 años, la matanza de más de cien palestinos –hombres y mujeres– hace 56 años... Por desgracia, Deir Yassin Remembered no obtiene la publicidad que merece.
El diccionario Webster’s calificarÃa rimbombante y artificiosamente a sus partidarios de “antisemitasâ€?, y “numerosos miembros de la comunidad bostonianaâ€? se mostrarÃan indudablemente contrarios a su causa. “Condenada calumnia.â€? “Protestas del eminente profesor del University College de DublÃn. Hemos de esperar a oÃr lo que piensa el College...â€?
Pero no. No nos sintamos “afligidosâ€?, “dolidosâ€? o “apesadumbradosâ€?. Limitémonos a decir cómo son las cosas. Por cierto, ¿no es eso lo que la escuela norteamericana de periodismo se proponÃa enseñarnos?
ROBERT FISK - Periodista - 25/04/2004 |
This work is in the public domain |