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Anàlisi :: corrupció i poder
Totalitarismo hasta la última gota
07 mar 2004
El estado español va a celebrar elecciones al gobierno central, único momento en el que los individuos pueden participar –de forma limitada- en la toma de decisiones. Los últimos cuatro años han tenido una mayoría absoluta y absolutista del Partido Popular, que les ha permitido poner a todo gas su maquinaria represiva.
El próximo mes de marzo finaliza la legislatura del Partido Popular. Cuatro años de mayoría absoluta, cuatro años complicados para los que aspiramos a transformar esta sociedad en algo más habitable, equitativo y participativo. Se han otorgado y negado privilegios de forma parcial y en este momento en el estado español hay un reparto desigual de los bienes. La división entre ricos y clase media-baja es cada vez mayor, no obstante una buena parte de las capas modestas de la sociedad respalda este tipo de sistema ya que han conseguido inculcarles que es el único que funciona y la decepción que causó el gobierno del PSOE no hizo más que corroborarlo.

Entre las técnicas utilizadas para cautivar al ciudadano existe una abundante campaña de propaganda electoral y la creación de chivos expiatorios como el terrorismo o la inmigración, para así generar una sensación de unidad frente a los supuestos peligros. Es necesario crear injusticia para fomentar la aparición del delito y así mantener el fantasma de la inseguridad, una amenaza que, entre otras cosas, provoca que los ciudadanos acaben votando a partidos que les recortan derechos y libertades.

Además de estas técnicas de marketing, el dominio del PP no sería posible si el estado español no arrastrase el pasado reciente del franquismo. Los cuarenta años de dictadura dejaron el terreno preparado para el avance de la derecha y crearon un caldo de cultivo de tolerancia al conservadurismo extremo. Hay que ser consciente del impacto estructural que supuso el régimen franquista: ganaron la guerra civil, limpiaron el país de toda oposición física y política, el caudillo dirigió el país hasta el mismo día de su muerte y, lo más importante, consiguieron que la ciudadanía aceptara la sumisión e interiorizase el régimen como algo “no tan malo�.

Y ya se sabe, la derecha es muy nostálgica. Los fascistas que quedan de aquella época se lo han pasado en grande durante los cuatro años de mayoría absoluta del PP. Eso sí, han modernizado sus formas de dominación con la paulatina supresión de los servicios públicos, el reparto de los mismos entre empresas privadas adjudicadas a dedo y como consecuencia de ello la menguante calidad de la sanidad, de la educación, de los transportes. La situación es límite: la sangrante precariedad laboral, la ignominia de la televisión pública, la falta de democracia, el recorte de libertades, la represión o el disparate de la vivienda, cuyo precio ha subido de forma escandalosa ocasionando un alto endeudamiento de las familias. No está siendo tratada como un derecho constitucional sino como un producto de mercado.

Esta oscura coyuntura política y social ha tenido una serie de momentos álgidos durante la legislatura, un conjunto de acciones que causaron especial rechazo. Una de las primeras decisiones del gobierno fue endurecer su posición ante el fenómeno de la inmigración, la Ley de Extranjería prohíbe a los no documentados algunos derechos que otorga la Constitución, como el de asociación o manifestación. El estado español es una puerta de entrada a Europa para los africanos y la zona del estrecho se ha convertido en una fosa común, pero las vidas humanas no son un argumento de peso para los partidarios de una política de hermetismo fronterizo.

La Ley Orgánica de Universidades fue un polémico intento de restar autonomía a la universidad, y lo consiguieron ya que la LOU fue aprobada sin respetar la opinión de rectores, profesores y alumnos. A pesar de que hubieron manifestaciones, encierros, etc. la ley salió adelante. También se practicó durante la legislatura una Reforma de la educación secundaria y la obligatoriedad de la asignatura de Religión (a la que se dedican más horas que por ejemplo a Biología).

Más tarde llegó el Plan Hidrológico Nacional, el famoso "agua para todos", que prevé el trasvase de agua del río Ebro a lo largo de la cuenca mediterránea. Es motivo de gran polémica y de enfrentamiento interterritorial. Un plan caracterizado por su elevado coste, poca utilidad y altísimo impacto en el medio ambiente. Otras alternativas mucho más viables para llevar el agua a donde hace falta han sido rechazadas sin ser ni tan solo escuchadas.

La Reforma de La Ley del Desempleo fue una medida rigurosa e innecesaria ya que la situación económica no es mala y la precariedad laboral está en alza. España es el estado con más temporalidad contractual de la UE (contratos basura, ETTs,...) y también es el segundo peor sueldo mínimo de la zona, lo cual hace harto difícil encontrar un puesto de trabajo fijo y digno. A todo esto hay que añadir los alarmantes índices de mortalidad y morbilidad laboral. No obstante la reforma se llevó a cabo y comportó un recorte de los derechos de los trabajadores: mayor facilidad para retirar las prestaciones, aceptación obligatoria de las ofertas de empleo del INEM incluso a 30 km. de distancia, etc. Esta decisión provocó una mínima reacción de los sindicatos que convocaron una huelga general el 20 de junio de 2002. La protesta tuvo un seguimiento importante pero fue desvirtuada por la forma en que se dio la noticia en los medios, con cifras contradictorias y cruce de acusaciones.

De hecho, la utilización partidista de diversos medios de comunicación ha sido una constante por parte del gobierno, y no podemos pasar por alto el caso de TVE, la televisión pública estatal pagada con el dinero de todos está volviendo a sus orígenes de NO-DO y propaganda gubernamental: manipulación de datos, ocultación de la verdad (demostrada con sentencias firmes de diferentes tribunales) y un estilo tendencioso a la hora de hablar de la oposición política son características básicas de sus servicios informativos.

El hundimiento del petrolero Prestige frente a las costas gallegas ha supuesto el mayor desastre ecológico en los últimos 20 años. La falta de coordinación entre gobierno central y gallego hizo que pasearan un petrolero agujereado por las costas causando una enorme marea negra. Tuvimos que ver a los pescadores recogiendo fuel altamente tóxico con sus propias manos por falta de medios, miles y miles de voluntarios se desplazaron para ofrecer su ayuda, mientras soportábamos unas declaraciones indignantes de los dirigentes, ocultando información y no admitiendo la catástrofe. Ni reaccionaron a tiempo ni asumieron sus responsabilidades. Fue impactante la actitud indiferente del gobierno, su banalización de la tragedia, su falta de escrúpulos y su poco respeto por la naturaleza.

El Partido Popular es un firme defensor de la Constitución de 1978, la cual aclara en su primera página que “España es un estado plurinacional�. No obstante, ellos nunca han sabido comprender la existencia de otras nacionalidades y rasgos culturales distintos dentro del estado español. Bien al contrario, se está atacando desde todos los frentes a las comunidades autónomas con una mayor identidad propia en un intento de “homogeneizar� el estado, provocando el previsible aumento de las tendencias secesionistas. Un ejemplo claro fue la decisión de exhibir semanalmente una bandera de España gigante en Madrid. La política de estado del PP se basa en el modelo franquista ("Una, grande y libre") y esto ha provocado una radicalización de los nacionalismos. La situación es crítica en el País Vasco y está empeorando en Catalunya y resto de autonomías con identidad propia. Falta total de respeto a las instituciones autonómicas elegidas por los ciudadanos así como a los partidos independentistas democráticos y a sus votantes. El punto culminante llegó con la aprobación de la Ley de Partidos y la consiguiente ilegalización de Batasuna por su tolerancia a la vía armada, más el cierre de periódicos y otras organizaciones abertzales. Más recientemente hemos observado la criminalización de ERC por la reunión Carod-ETA y su defensa del diálogo como vía para la paz, a pesar de que los independentistas catalanes han dejado claro en todo momento su rechazo a la violencia.

Esta estrategia represiva se repitió con la Reforma del Código Penal, el gobierno del PP trata de ocultar la existencia de otras identidades nacionales en el estado español y el proyecto de reforma del Estatuto de Autonomía Vasco (o Plan Ibarretxe) surge como respuesta a este ataque. El gobierno no permite la presencia de otras formas de pensamiento y decide eliminarlas aunque ello suponga saltarse algunos principios democráticos, de manera que prohíbe la convocatoria de referéndums a todo cargo político que no pertenezca al gobierno central. Esto provoca una reacción en bloque de todos los partidos de la oposición, que protestan airadamente por el abuso de poder.

Posiblemente, la decisión más impopular del gobierno haya sido colaborar en la Guerra de Irak, una intervención militar promovida por USA y UK con un objetivo preferente: hacerse con el control de las reservas petrolíferas del país. Una atrocidad que demuestra que el capitalismo puede llegar a anteponer el dinero a las vidas humanas. El estado español se implicó en este conflicto bélico al margen del consenso de la ONU y enfrentándonos a otros países europeos. En este momento, un año después del inicio del conflicto, todavía continúan allí los soldados. El mundo entero se dio cuenta y protestó de manera multitudinaria y global, y podemos decir que el tiempo les ha dado la razón porque no hay armas de destrucción masiva, ni democracia, ni descenso del terrorismo, ni se ha resuelto el conflicto palestino-israelí.

Nos pregunta Aznar si los que estamos contra de la guerra preferiríamos que Sadam Hussein siguiese en el poder. Me costaría creer que alguien posicionado en contra de la guerra defendiese el régimen de Sadam, existe una creencia firme en que este tipo de gobiernos no deben estar permitidos. Pero por otra parte, el uso de la fuerza, de las armas y de la violencia debe ser repudiado de forma permanente. Su uso únicamente debería permitirse en caso de defensa propia o extrema necesidad, los motivos claramente demostrables y tipificados debidamente en normas que podrán aplicarse después en otros casos parecidos.

En el ataque a Irak, las grandes potencias demuestran la arbitrariedad de sus acciones, pero cuidado, que nadie olvide que todo esto se hace por unos intereses programados. Nos dijeron que Irak era un peligro, que proyectaban una amenaza terrorista, que habían armas de destrucción masiva, pero ahora no las encuentran y nada encaja. Aun así, continúan diciendo que no ha sido un error porque Sadam Hussein era muy malo y debía ser eliminado. No creo que les cueste mucho encontrar otros mandatarios igual de malos que Sadam Hussein y así poder justificar las próximas guerras, aunque viendo la situación en la que ha quedado Irak cada vez será más difícil hacer creer que los ejércitos son el instrumento adecuado para levantar países.

También a lo largo de la legislatura han surgido diversos casos de corrupción, como Gescartera, el de Carlos Fabra en la Diputación de Castellón o dos escándalos de abuso sexual, uno en Alicante y otro en Galicia. Estos acontecimientos no tuvieron la repercusión que se les supone, ya que el control rígido de los medios de comunicación ha permitido correr un tupido velo y sortear airosamente cualquier escándalo. Ya no queda decencia ni rastros de democracia.
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