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Notícies :: antifeixisme |
El falseamiento democrático
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per Falstaff |
24 feb 2004
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Si el comunismo es utópico e indeseable y la extrema derecha también ¿a quién puede extrañar que el fascismo de apariencia corderil pero estilo y acciones gravísimas violentas y violentadas que le delatan, sea el norteamericano, el español o el inglés sigan avanzando? |
Ni Estados Unidos tolera hace mucho tiempo al pensamiento comunista ni a sus partidarios, ni ahora Francia, por la puerta de atrás, las tesis de los conservadores radicales de Le Pen.
Entonces, si para defender la democracia hay que despojarla de las partes del pensamiento incómodas para otra parte de ella, es decir, opciones polÃticas significativas que representan aspiraciones legîtimas concretas ¿qué le queda a la democracia para ser tomada en serio? ¿quién puede creerse que vivamos inmersos en una competición limpia de ideas y opciones sobre el modo de organizarse el Estado, la sociedad y el individuo, que no otra cosa es la PolÃtica?
Vivimos constantemente sobre un montón de falsedades. Los polÃticos falsean la realidad mintiendo constantemente, haciéndonos ver que sucede lo que no sucede y que no sucede lo que sucede. Los jueces profesionales y polÃticos de Estados Unidos hace mucho y ahora los de Francia, la deforman también. Deformar la realidad viva es despojarla de ideas. Extirpar ideas polÃticas, ilegitimarlas, condenarlas y suprimirlas es otra manera de falsearla y de falsear la democracia.
Si el bipartidismo en Estados Unidos es excluyente; si Francia ahora, extirpándose otra opción importante polÃtica, se prepara para el bipartidismo; si España imita siempre lo peor de los paÃses y persigue más de lo mismo, y tanto allÃ, en Estados Unidos y en Francia, como aquÃ, los partidos polÃticos no son sino fascismos más o menos suaves y encubiertos, por un lado, pero todos menospreciadores de la cultura y del pensamiento, y sobre todo interesados en que reine sin cortapisas el pensamiento único ¿qué queda dentro de la cáscara que envuelve a las democracias? ¿qué clase de imaginación y soluciones quedan para resolver los problemas de cada una de estas sociedades, del individuo y del mundo que no sea la de seguir depredando y repartiendo migajas, como de la mano del cristianismo el pensamiento predominante de antaño hizo hasta hace poco menos de un cuarto de siglo en España y poco más de un siglo en la Europa medular?
El único pensamiento que puede detener la falta de escrúpulos caracterÃstico del fascismo es el marxismo, dÃgase lo que se diga sobre la caÃda del muro de BerlÃn. Ahà están mil millones en China -sexta parte de la humanidad- para recordarnos que el marxismo no ha muerto y que, dejado en paz (aunque en el caso de China haya sido a la fuerza por su situación geográfica), puede alcanzar en progreso, y con muchas más altas cotas de equidad, al coloso... Pero también son capaces de “centrarâ€? las cosas, de corregir excesos y de oponerse al fascismo partidos de extrema derecha circunscrita a problemas nuevos y graves como el inmigratorio, como el de Le Pen en Francia y el antiguo partido del desaparecido Haider en Austria.
Pues, más allá de las etiquetas negativas que se les quiere colgar a toda costa por miedo a que les reste votos, para conducir aspectos de la realidad nueva que requieren buenas dosis de radicalidad en asuntos y en tiempos tan revueltos como los que vivimos, nada mejor que discriminar sin ambages y poner muchas cosas en el sitio que les corresponde. Pues es ése el propósito de los partidos radicales, tanto la extrema derecha como el comunismo.
Si demócratas y republicanos allÃ; si pepeÃstas y pesoÃstas aquÃ; si derecha e izquierda en Francia... lo que quieren es quedarse solos y rivalizar sólo entre ellos; si comunismo y derecha radical empiezan a ser tratados como apestados, vista la ocupación de dos paÃses ajenos a nuestra cultura para apropiarse de su petróleo y el modo de conducirse los partidos de los gobiernos fascistoides de estos paÃses, no nos quepa la menor duda de que la marcha del fascismo “realâ€?, ventajista y aniquilador haciendo de las suyas hasta conseguir que Occidente sea un enemigo irreconciliable con el mundo islámico, será imparable.
Llamar despectivamente comunista a unos y extrema derecha a otros para quitárselos de encima, es la fórmula abyecta y fácil a la que los partidos de corte fascista y sus cómplices recurren para ir poco a poco quedándose con el control social e implantar el ominoso pensamiento único.
No creo que quede mucho tiempo para que después de suprimida Batasuna y cerrados sus periódicos, IU, Ezquerra Republicana y asà sucesivamente, empiecen a ser perseguidos con saña, por vÃa judicial y por cualquier medio con pretextos de tahúr. ¡Qué horror y qué asco!, pues Matrix se habrá salido con la suya... |
Re: El falseamiento democrático
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per Tiananmen |
24 feb 2004
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"El único pensamiento que puede detener la falta de escrúpulos característico del fascismo es el marxismo, dígase lo que se diga sobre la caída del muro de Berlín. Ahí están mil millones en China -sexta parte de la humanidad- para recordarnos que el marxismo no ha muerto"
Que yo sepa China no és ni fué NUNCA marxista sinó maoista. Dile a un comunista chino marxista y te pegará 4 golpes de kung-fu.
Pero es que en realidad ni siquiera es comunista.. Como podemos pensar que un pais que entra a gusto en la OMC es un pais comunista? Un pais que mantiene su elite dictatorial "comunista" en el poder pero que por lo que hace a la economia esta entrando en el modelo economico capitalista a lo bestia!
Criticar al "fascismo" de las democracias occidentales puede llegar a ser posible si tu realmente no tienes ninguna libertad para nada y ves tambien que los que te rodean estan igual de jodidos excepto los que mandan y manipulan... Es una opción que puede llegar a ser creible en un discurso. Lo que es mucho mas dificil -y menos apoyandose en el falso ejemplo de China- és mostrar un camino alternativo posible. |
Re: El falseamiento democrático
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per Falstaff |
24 feb 2004
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El maoísmo es un marxismo revisado. Es cuestión dialéctica o doctrinal que no entra en mis cálculos discutir ahora: el lenguaje y los conceptos, sobre todo en política, pueden hacer trizas cualquier razonamiento, y mucho más si lo que deseamos es lucirnos con nuestra erudición.
Pero sea maoísmo, sea marxismo el fundamento de partida, China se encuentra en estos momentos en una de las fases de desarrollo previstas por Marx y por Mao. Por eso comento que si le dejan en paz, y a China no han tenido más remedio, el comunismo entendido en su sentido genérico prospera pacíficamente abriéndose a soluciones intermedias fruto de la combinación de sus postulados iniciales con la libre concurrencia. Esto es lo que, a mi juicio y observación, está sucediendo. |
Re: El falseamiento democrático
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per pseudoefedrina |
25 feb 2004
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aunque no entre en tus cálculos: qualificar Xina de comunista em sembla un disbarat tan gran com el de qui qualifica l'estat espanyol de democràcia.
no sé en quin món vius |