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Notícies :: criminalització i repressió : amèrica llatina |
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En Tlalnepantla, Morelos, la policía reprime con gas lacrimógeno a ONG
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per LA JORNADA MORELOS |
19 gen 2004
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Confiscan una camioneta, machetes y progapanda en contra de Estrada Cajigal.
En Tlalnepantla, Morelos, la policía reprime con gas lacrimógeno a ONG.
Los activistas denuncian que en el municipio se vive un estado de sitio. |
Cuernavaca, Mor., 18 de enero. Efectivos de la Policía Preventiva del Estado (PPE) arrojaron gases lacrimógenos contra miembros de organismos no gubernamentales (ONG) y ejidatarios de San Salvador Atenco, estado de México, que pretendieron ingresar al municipio de Tlalnepantla, de cuya alcaldía se desalojó la madrugada del miércoles al concejo municipal autónomo que pretendió administrar la demarcación, y repudió al edil constitucional, Elías Osorio, en hechos que dejaron una persona muerta.
Durante la acción policiaca resultaron heridos algunos activistas, entre ellos el dirigente de Atenco, Ignacio del Valle. Además se confiscó una camioneta en que viajaban ejidatarios mexiquenses, lo mismo que machetes y propaganda en contra del gobernador Sergio Estrada Cajigal Ramírez.
Un observador alemán fue detenido por tener visa de turista, lo que no le permitía participar en actividades políticas.
Vigilados por un helicóptero de la Secretaría de Seguridad Pública estatal, 17 observadores de ONG, entre ellos la actriz Ana Colchero, lograron ingresar al poblado y recorrer la región con el propósito de apoyar a las familias desplazadas ante el temor de ser agredidas por la policía.
"Se trata de una situación muy grave. Hay estado de sitio, la gente se encuentra oculta en sus propios domicilios, no pueden salir y los alimentos, agua y medicamentos, escasean. Necesitan ayuda inmediata", afirmó Colchero.
Poco después de la una de la tarde, integrantes de diversas organizaciones, estudiantes del Comité General de Huelga de la Universidad Nacional Autónoma de México, integrantes del Frente Cívico Pro Defensa del Casino de la Selva y observadores internacionales, salieron del poblado Tlayacapan con el propósito de ingresar a la zona en conflicto.
Al llegar al entronque con Tlalnepantla, sobre la carretera Oaxtepec-Xochimilco, fueron detenidos en un retén de la PPE, cuyos efectivos disponían de equipo antimotines y gases lacrimógenos.
El alemán Martin Schwarzenblackh, profesor de la Universidad de Hamburgo, fue detenido por amparar su presencia con una visa de turista.
Uniformados y activistas discutieron cuando los segundos se opusieron a ser revisados, lo mismo que sus vehículos.
La tensión aumentó en el momento en que efectivos policiacos, al revisar una camioneta tipo Van color blanca, encontraron machetes, propaganda en contra del gobernador Sergio Estrada Cajigal y palos que los de Atenco utilizan como emblemas en sus manifestaciones.
De los reclamos se pasó a un intercambio de gritos entre manifestantes y policías; mientras, un grupo de vecinos de Tlalnepantla llevaron a dos niños, quienes portaban una manta que decía: "Queremos paz", luego lanzaron consignas contra los "fuereños" y les exigieron retirarse del lugar. "El conflicto en Tlalnepantla lo arreglamos nosotros. Fuera agitadores", dijeron.
En respuesta, los de Atenco y acompañantes se sentaron en la cinta asfáltica para emitir consignas en repudio al "gobierno asesino de Sergio Estrada Cajigal". Entonces, los granaderos los rodearon y se abalanzaron contra sus automotores para replegar a los manifestantes fuera del entronque.
Por varios minutos el caos se apoderó del lugar. Los oficiales golpearon con macanas a los activistas, a quienes lanzaron gas lacrimógeno.
Un agente de la PPE logró ingresar a la unidad de los de Atenco y se la llevó, al tiempo que los ocupantes de la camioneta corrieron hasta un camión de inconformes.
En conferencia de prensa, Ignacio del Valle y los heridos, uno de ellos con una fractura en el pie, afirmaron que la acción policiaca fue una demostración "del carácter represor del gobierno de Sergio Estrada Cajigal. Mantienen en estado de sitio a la comunidad al impedir el libre paso por el país". Además anunciaron que se reorganizarán para continuar con su apoyo a la comunidad de Tlalnepantla.
Logran activistas llegar al municipio
Luego que permitieron ser revisados por policías, 17 observadores de ONG, a quienes encabezó Ana Colchero, lograron ingresar al poblado, vigilados por un helicóptero de la Secretaría de Seguridad Pública de Morelos.
"Recorrimos tres horas el monte, y sólo encontramos restos de comida y de indicios de que sí había personas, incluso algunos casquillos de cartuchos percutidos. El helicóptero nos persiguió, era de risa", comentó la actriz.
Colchero dijo haber recabado testimonios de la situación en Tlalnepantla. "Salió gente llorando muy angustiada porque no pueden salir, no tienen ni agua. El llamado que estamos haciendo es que la Cruz Roja entre, brinde apoyo a las familias que simpatizan con el grupo opositor a la autoridad, porque los alimentos y apoyos se reparten, pero a los del grupo contrario. Independientemente del problema político, que haya una asistencia a esta gente, porque se encuentran aterrados. Están sin comida, sin agua, sin medicamentos y con niños enfermos. Hay familias que no pueden salir de sus domicilios porque los simpatizantes del otro grupo los agreden", señaló.
Por su parte, Edilberto Bautista, integrante de la Red de la Sociedad Civil, afirmó que situaciones como la que hoy se vive en Tlalnepantla "son muy graves; hay un estado de sitio. Las mujeres, los hombres y los niños se encuentran asustados, llorando. Los señores que tienen que salir del poblado tienen que presentar su credencial, identificarse plenamente. Los han estado golpeando, los han estado hostigando. Hubo testimonios de personas que aseguraron que las sacaron debajo de la cama, anoche. Continúan con los cateos sin ninguna orden. Eso es muy grave y muy delicado".
Indicó que a los productores que salen a vender nopales les quitan su dinero, de tal manera que "haremos un informe formal de lo que vivimos, tenemos testimonios documentados de ello, que presentaremos a instancias en pro de los derechos humanos, tanto nacionales como internacionales, porque es muy grave el tener un estado de sitio y que nadie pueda entrar. Es muy lamentable que diputados que tienen un fuero sean agredidos y reprimidos por policías preventivos".
Bautista destacó que hay personas en el poblado, "pero son pocas, por ello exhortamos a organismos humanitarios, como la Cruz Roja, para que ingresen con ayuda humanitaria". |
Mira també:
http://www.jornada.unam.mx/2004/ene04/040119/031n1est.php?origen=index.html&fly=1
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