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El Ingenio del terror
Por lo menos diez familias integrantes de la Comunidad Indígena Guaraní Estación El Tabacal intentaron en el día de ayer la recuperación de La Loma, en la localidad salteña de Hipólito Irigoyen. Ante las intimidaciones y amenazas del personal de seguridad del Ingenio San Martín del Tabacal, y al verse rodeados por una gran cantidad de efectivos policiales, finalmente optaron por retirarse a las pocas horas. La decisión de reocupar se había tomado en una asamblea realizada el martes por la noche, ante el descontento por el desempeño de los funcionarios nacionales que visitaron durante dos días la provincia para investigar el conflicto territorial. También influyó la noticia de que el Ingenio comenzó el desmonte de las tierras, lo que haría de La Loma un lugar sólo apto para el cultivo de cítricos y cañas de azúcar.
La fugaz toma de posesión se inició por la mañana. A pocos minutos de instalarse en las tierras, personal de seguridad del Ingenio y efectivos policiales amenazaron a las familias con que les iba a pasar "lo mismo que la otra vez" y aconsejaron "no volver más". La intimidación se refería al desalojo del 16 de septiembre de este mismo año, cuando por orden del juez provincial Oscar Blanco se reprimió a quienes permanecían allí desde hacía más de una semana.
En aquella oportunidad, veintidós personas fueron detenidas y procesadas por usurpación, a raíz de la denuncia efectuada por el Ingenio San Martín del Tabacal. El desalojo se realizó en horas de la noche, lanzando tiros al aire y golpeando a quienes escapaban asustados.
Según informaron a Indymedia allegados a la comunidad, la reocupación finalizó cuando pasado al mediodía La Loma se vió rodeada por una gran cantidad de efectivos policiales, y ante esta situación, las pocas familias Ava Guaraní que se habían instalado allí nuevamente, decidieron retirarse.
Sin resultados a la vista
La semana pasada, una delegación de la Comunidad Indígena Guaraní Estación El Tabacal reclamó en la Capital Federal la restitución de las 5000 hectáreas ubicadas en la Loma, y castigo para los responsables de la represión del 16 de Septiembre. Luego de múltiples gestiones, el jueves 11 de Diciembre los indígenas lograron entrevistarse con la Ministra de Desarrollo Social, Alicia Kirchner, y el Secretario General de la Presidencia de La Nación, Oscar Parrilli, quienes se comprometieron a enviar una comisión de funcionarios nacionales para investigar a fondo el conflicto territorial y buscar una solución. La propuesta despertó expectativa en los Ava Guaraní, quienes regresaron a Hipólito Irigoyen el sábado 13 por la noche.
Finalmente, la comisión que viajó estuvo integrada por el Presidente del Instituto Nacional de Asuntos Indígenas (INAI), Julio Sosa; el Coordinador de Derechos Humanos de la Defensoría del Pueblo del Nación, Ricardo Scoles; y el Presidente de la Comisión de Tierras Fiscales Nacionales "Programa Arraigo" del Ministerio de Desarrollo Social, Hector Metón. También estuvieron presentes Daniel Slutzky, Coordinador del Area de Proyectos del INAI y la abogada salteña Liliana Mazzone, ex asesora del Instituto Provincial del Pueblo Indígena de Salta (IPPIS).
Los funcionarios se entrevistaron el día lunes en la ciudad de Salta con Hernán Mascietti, abogado de la comunidad, y con su presidenta Mónica Romero. El martes se reunieron en Orán con Oscar Blanco, el juez provincial que ordenó el anterior desalojo. Luego, visitaron la ciudad de Hipólito Irigoyen y mantuvieron una reunión con todos los integrantes de la comunidad. Pero al cabo de tres horas, se retiraron sin visitar las tierras en conflicto y sólo dejaron promesas.
Manifestación en Capital Federal
Casi en el mismo horario que los Ava Guaraní intentaban recuperar sus tierras, integrantes de las organizaciones Raíces Indianas y Amigos de la Tierra realizaron una manifestación frente a las oficinas de la Seabord Corporation -el grupo norteamericano propietario del Ingenio-, donde entregaron un documento en apoyo al reclamo de la Comunidad El Tabacal. El mismo fue recibido por la responsable del Area Marketing, Luciana Costa, quien manifestó que la empresa estaba enterada de todos los movimientos que están realizando y que éstos eran una "agresión" para la empresa.
"¿Acaso porque son negritos, de ojos oscuros, tienen más derecho a la tierra que la empresa? Tanto ancianos, mujeres y niños no son ningunos santitos, se pusieron duros, se hacían los locos y unos bastonazos de goma no les vinieron mal", había manifestado telefónicamente días atrás a Amigos de la Tierra el representante del Ingenio San Martín del Tabacal en Hipólito Irigoyen, Guillermo Yakúlica.
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