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Notícies :: pobles i cultures vs poder i estats |
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Candidatura única en defensa del derecho de autodeterminación para el pueblo vasco
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per nas |
16 des 2003
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Propuesta para conformar una candidatura única en defensa del derecho de autodeterminación para el pueblo vasco |
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Euskal Herria vive momentos difíciles y al mismo tiempo esperanzadores.
Estamos en una encrucijada política en la que la esperanza está representada por los sectores mayoritarios de nuestro pueblo que luchan y trabajan por reconquistar el derecho a la palabra y la decisión.
Por otro lado, estas ansias de democracia, paz y autodeterminación son respondidas tanto por el Estado español y el francés con la represión, del insulto y de la humillación. Nuestras señas de identidad (la lengua, la cultura, las instituciones y la economía) están siendo salvajemente agredidas por parte de ambos Estados.
Siendo esta la situación, los agentes políticos, sociales, sindicales tenemos la gran responsabilidad de dar un paso adelante, en la dirección que demanda y quiere la mayoría de los ciudadanos.
Nos corresponde a nosotros, abertzales y sectores que apuestan y defienden el derecho a la autodeterminación, la responsabilidad de unir fuerzas en esta situación.
La gravedad de esta situación no debe de ocultar las grandes diferencias que existen entre nosotros, en materia económica, en modelo social o en estrategias, pero no es el momento para buscar las diferencias. Deben de ser aparcadas para hacer frente a la actual situación.
No está en juego el color, ni el modelo de nuestro pueblo. Es nuestro pueblo quien está en juego. Es nuestra propia existencia la que se quiere poner en peligro, nuestro idioma, nuestra cultura, nuestro tejido económico, nuestra presencia en Europa.
Esta es la razón por la que proponemos una candidatuta única de cara a las próximas elecciones españolas. Hay que dejar de lado las divisiones y los desencuentros para sumar nuestras fuerzas y encarar un proceso que garantice una paz estable y duradera sustentada en nuestro derecho a decidir libre y democráticamente nuestro futuro.
Hace unas semanas planteamos con solemnidad, en el pabellón Anaitasuna de Iruñea que la izquierda abertzale extiende su mano a todos aquellos agentes políticos, sociales y sindicales, sin excepción, que quieran iniciar un proceso de diálogo para la superación del conflicto político.
La propuesta que hacemos hoy, se sitúa en esa misma dirección, en la dirección de construir instrumentos y compromisos colectivos que nos lleven a la solución del conflicto definitivamente.
El pueblo vasco debe de recuperar la llave de nuestra casa. Esta iniciativa es una buena oportunidad. En definitiva creemos, con sinceridad, que ha llegado el momento de actuar con valentía y honestidad política. Lo hecho hasta ahora no es suficiente, hay que hacer más.
Ha llegado el momento de decir con rotundidad y en voz alta que los vascos no somos una parte del territorio español. Que somos una nación y que tenemos derecho a decidir tanto nuestras relaciones internas como externas.
Las próximas elecciones españolas nos ofrecen una gran oportunidad para avanzar en esa dirección. Estamos seguros, además, que la consolidación de esta iniciativa nos acerca a la paz y a la democracia.
La izquierda abertzale cree que existen condiciones suficientes para dar este paso. Los agentes políticos, sociales y sindicales no podemos dar la espalda a una exigencia hoy mayoritaria en nuestro pueblo.
Estamos ante una oportunidad y una ocasión inigualable para ganar la batalla definitiva al estado español e instalar un escenario de paz y libertad para Euskal Herria. Sería incomprensible dejar pasar esta ocasión.
En consecuencia, hacemos una llamada al conjunto de sectores abertzales y democráticos en torno a esta propuesta:
PROPUESTA
- Constituir entre todas las fuerzas favorables al derecho de autodeterminación una candidatura única para presentarse a las elecciones españolas.
- Dicha candidatura se convertiría en la interlocución nacional del pueblo vasco en lo que respecta al Estado español.
- El objetivo de dicha candidatura sería, representando a Euskal Herria, abrir un proceso de negociaciones con el estado español para que sea respetado el derecho de autodeterminación para nuestro pueblo. |
Mira també:
http://www.gara.net
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Comentaris
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Re: Candidatura única en defensa del derecho de autodeterminación para el pueblo vasco
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per brocs i romanços |
17 des 2003
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De dur-se a terme aquesta coalició i amb aquests objectius, el que caldria més que mai seria una nova declaració unilateral de treva indefinida per part d'ETA.
Això descolocaria molt als pePPeros tot i que aviat reprendrien el discurs cínic de la "treva-trampa", o el de "ho fan perquè els hem afeblit", etc. Però és possible que aquest cop es quedin més sols en el seu feixisme atès que un dels efectes més interessants afectaria probablement al PsoE que es veuria fins a cert punt alliberat d'haver de fer seguidisme de l'estratègia espanyolista pePPera que s'ha pretés legitimar mitjançant la "lucha contra el terrorismo y por las libertades".
Això li donaria molt més marge de maniobra a en Zapatero per encapçalar una alternativa d'esquerres a la major part de l'estat capaç de cercar complicitats amb els partits nacionalistes de la resta de l'estat.
En aquest guió imaginari podrien tenir un paper estelar els representatnts dels partits que governen la Generalitat i molt especialment si aquests, ateses les circumstàncies excepcionals, fossin capaços de confegir una nova Entesa de l'esquerra catalanista (i independentista!) que segurament es presentaria a Madrid després d'haver aplegat un suport electoral espectacular. Posats a somiar, podríem esperar que el canvi d'orientació estratègica del PSC s'encomanés als seus companys socialistes valencians, balears i fins i tot aragonesos.
Per altra banda també caldrà veure els resultats del BNG i del PSG que tard o d'hora hauran d'arraconar als Vazquez i demés per tal d'arribar a acords si és que algún dia volen treure al PP del seu feu.
Es molt probable que tot i així guanyés el PP, però seria més fàcil que ho fes sense acostar-se prou a la majoria absoluta, aleshores el sarau estaria servit. Tanmateix, cal ressaltar que aquesta victòria hauria de ser forçosament conseqüència del seu triomf espectacular a la "españa central y profunda (la castellano-madrilenya)" que hauria de compensar sobradament les derrotes en els altres territoris. La mateixa España, no cal dir-ho, dels Ibarra, Bono o Simancas que representen l'esquerra més retrògada, españolista i amb tocs tardo-falangistes.
Tot plegat produiria un entorn polític i social força complex però clarificador tanmateix. I en aquest entorn, es produiria la batalla interna final dins un PsoE dividit entre "uni-nacionalistes" i "pluri-nacionalistes" i en ple procés de descomposició imparable.
Un entorn de refundació i replantejaments de tota mena en els diversos espais d'esquerres d'arreu de l'estat.
au |
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Re: Candidatura única en defensa del derecho de autodeterminación para el pueblo vasco
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per caram |
17 des 2003
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tenies la tarda lliure? |
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Re: Candidatura única en defensa del derecho de autodeterminación para el pueblo vasco
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per ni un paso atrás |
17 des 2003
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Josu Iraeta - Ex diputado de Herri Batasuna:
Los sueños no caben en las urnas
Ahora que los aldeanos insolidarios y separatistas, moradores de las «regiones ariscas», por fin, nos vamos enterando de que, a pesar de que la democracia garantiza que las decisiones sean tomadas por la mayoría, lo que no garantiza es que sean justas y correctas, ni deban aceptarse como verdad moral, además de eso, resulta que la voluntad depositada en las urnas el pasado mes de noviembre no refleja la opinión de un pueblo. Es decir, Catalunya no dijo nada, simplemente fue una parte mayoritaria, la que votó, de los españoles residentes en Catalunya. Esta brillante interpretación política de la democracia es fruto de una de las mentes con mejor formación (cátedra universitaria), además de ideólogo y mentor de ese «espíritu de centro constitucional» que lidera José M. Aznar.
Esta poco frecuente lucidez mental y política fue lo que me hizo añorar los meses que transcurrieron sin violencia de ETA. En estos meses tuvimos la oportunidad de mostrar las alegría que nos produce una cierta normalidad, pero también aprendimos que el cese de la lucha armada no resuelve el problema y que ésta seguirá presente mientras no haya capacidad para abordar la cuestión política de fondo que la genera.
Desde siempre se ha dicho que la guerra es la continuación de la política por otros medios. Es por eso que difícilmente cabe imaginar un horizonte de paz, mientras no se den garantías de que, mediante la acción política, puede lograrse el objetivo final que da razón a esa lucha armada.
Cuando Franco dejó de ser lo que fue, por simple imperativo biológico, la mayoría de los españoles, también de los vascos, estaban convencidos de que ETA dejaría de actuar para disolverse en el tiempo. Creyeron equivocadamente que, al reinstaurarse un sistema de democracia parlamentaria, la lucha armada por la libertad y contra el fascismo carecía de sentido.
Es cierto que desde la oposición antifranquista ETA era aceptada, incluso aplaudida, porque golpeaba a la dictadura, pero ETA tenía y tiene como objetivo la independencia.
En este sentido, la autodeterminación, además de ser un derecho inherente a todos los pueblos, resulta también un método para lograr la convivencia pacífica .
Es conocido que la Constitución española se impone a todos los poderes públicos del Estado (incluidas las Comunidades Autónomas, art. 9.1), pero la soberanía popular está por encima de ella (art. 2.2). Teniendo presente que la soberanía, atribuida en exclusiva al pueblo español, ocupa el espacio que les corresponde a los demás pueblos del Estado, niega de raíz la correspondiente a los pueblos de Euskal Herria, que recordémoslo en sus dos terceras partes no refrendó esa Constitución.
Quizá, si desde el Gobierno del Estado tuvieran la percepción de que el nacionalismo que gestiona en Gasteiz tiene la oculta intención de abandonar la contraposición entre su discurso político y su práctica cotidiana colaboradora en el poder, no fomentarían el enfrentamiento como ahora, y entenderían que negociar puede ser más rentable.
En esta repugnante situación democrática que vivimos, tanto la prensa escrita como la totalidad de los medios audiovisuales, públicos o no (salvo alguna rarísima excepción), mantienen que en España no hay presos políticos, dado que es una democracia. Hoy hay más de setecientas formas de demostrar que esa afirmación es una infamia.
Pero si queremos, podemos apoyarnos en la historia, recordando que también Francia era una democracia cuando la guerra de Argelia, y en aquella democracia francesa se torturaba, se mataba a argelinos, se les hacía desaparecer, se masacraba exactamente igual que bajo una dictadura. ¿Les suena o recuerda algo?
Es cierto que la violencia del FLN fue notable, es cierto, pero, ¿quiénes fueron los responsables? ¿Quién se negaba a negociar con los argelinos, tres provincias que se pretendía eran francesas? ¿Por qué fueron necesarios siete años y un millón de muertos para que se impusiera la evidencia? Bastaba con reconocer que esas provincias eran un país, Argelia, y que tenía pleno derecho a la soberanía y a su total independencia.
Los chechenos, moldavos, tártaros, alemanes del Volga, húngaros, rumanos, croatasŠ todos esos pueblos y muchos más tienen derecho a su soberanía. Cómo y por qué vamos a admitir la macabra hipocresía de quienes imponen con su fuerza que «allí» sí tienen derecho, pero aquí, en el oeste de Europa, los vascos no.
No son los vecinos franceses únicos portadores de larga trayectoria democrática. Hace ya siglos que los españoles demostraron poseer la misma vocación, cuando tuvieron por objetivo la formación de «una gran colectividad» (imperio) muy superior a sus proyectos actuales. Tan grande era que decían no se ponía el sol. Son muchos los pueblos en diferentes continentes que han desaparecido, víctimas de esa vocación. Naciones y razas extinguidas junto a sus creencias, idiomas y posesiones.
Todos fueron democratizados como ahora lo es el pueblo de Irak. Dicen, sin sonrojo, que la aplicación de la fuerza es necesaria para garantizar la paz y la democracia. Lo mismo decía Napoleón en su invasión, cuando ofrecía a los españoles libertades de las que carecían, pues no hay la más mínima duda de que Fernando VII no era más demócrata que Saddam Hussein.
Qué duda cabe de que, si hace siglos había insignes españoles que impartían democracia por el mundo, hoy tampoco faltan quienes se dedican al mismo menester, pero a nivel doméstico.
Llevan tiempo, años, con un discurso político único y plano (no necesitan otro puesto que no pretenden resolver nada), cuya apoyatura fundamental son las encuestas. Y aquí es donde la desvergüenza y la falta absoluta de respeto a la sociedad se manifiesta, eso sí, impregnada de serena y bizarra presencia. No es lo mismo preguntar a una persona de qué nación se siente parte a en qué Estado quiere vivir. Dicho de otro modo, no todos los que viviendo en Euskal Herria y sintiéndose franceses o españoles son ardorosos militantes contrarios a la desvinculación de Euskal Herria del Estado francés o español. De la misma forma que no todos los que se sienten vascos están dispuestos a trabajar de forma militante por la construcción del Estado vasco.
Y es que la tendencia de la argumentación de apoyo sobre los resultados en infinidad de encuestas es a subrayar el significado de la segunda postura, ocultando y dando por hecho que quienes no están por la desvinculación estuvieran dispuestos a dar de sí cuanto tienen para evitarlo, y eso es absolutamente falso.
Con este razonamiento se falsea la verdad y se utiliza para concluir que las condiciones objetivas hacen imposible profundizar el camino hacia la independencia. Creen estar en posición suficiente para hacer valer lo que dicen, eso sí, conscientes de que es falso. Este es el clímax al que ha llegado la democracia del PP.
José M. Aznar y sus equipos (tiene varios) tratan de evitar lo inevitable y para ello están obligando a meter ruido a todo aquel que depende o pudiera depender de la influencia y el poder de la Administración. Están desafinando de manera clamorosa y estridente.
No es nuevo el sistema, pues es de sobra conocida la estrategia utilizada por diversas especies animales cuando se efrentan a situaciones en clara debilidad. Intentan magnificar su aspecto coloreándolo, gritan y se mueven tratando de hacer creer al adversario ser más grandes de lo que son y poseer una fuerza de la que carecen. Otro vano intento, estéril una vez más. Esto quiere decir que ya queda menos. - |
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Re: Candidatura única en defensa del derecho de autodeterminación para el pueblo vasco
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per un |
18 des 2003
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quin text |
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