|
|
|
Contra la ultraderecha el voto no basta: ¡Organización social y calle!
|
|
per La Kaye
Correu-e: lakaye ARROBA protonmail.com (verificat) |
01 jul 2023
|
|
Es hora de juntarnos, activarnos, y fortalecer de nuevo los movimientos sociales. La ultraderecha asusta, pero tenemos herramientas propias para hacerle frente, votemos o no votemos, sea el resultado electoral que sea. Contra el avance del odio retornemos a la organización social en los barrios, defendamos nuestros derechos y volvamos a tomar las calles con ilusión y esperanza. |
|
Estamos en tiempos de auge internacional de la ultraderecha. Lo estamos viendo en resultados electorales municipales, autonómicos y estatales de una multitud de países, pero también en los medios de comunicación, en las redes sociales y en las calles. Una tras otra vez arden las infraviviendas de las trabajadoras migrantes y nos encontramos murales feministas y banderas arcoíris vandalizadas. Mientras tanto, la inmensa mayoría de los medios de comunicación en manos del capital, periódicos, radios, televisiones, apoyados por la producción masiva de bulos en las redes, desinforman e incentivan a la población a temer la okupación más que al desahucio; a los inmigrantes más que a los empresarios explotadores y a los grandes capitales que evaden en paraísos fiscales, tapando así la precariedad y la pobreza que, en mayor o menor medida, afecta a la inmensa mayoría de la población. Se privatiza la sanidad y se ponen en juego los derechos laborales. Para las escuelas, los negacionistas de la violencia machista y de la crisis climática promueven un sistema educativo retrógrado basado en la religión y unas costumbres “tradicionales” más propias de la dictadura que del siglo XXI.
A un mes de las elecciones generales, el voto a la (centro-)izquierda se está destacando como la única receta para frenar a la extrema derecha y la sucesiva normalización de su discurso. Sin embargo, mirando a la historia, desde el nazismo hasta la ultraderecha trumpista del presente, los parlamentos nunca han servido de vacuna contra el odio. El voto es respetable, pero nos equivocamos si lo vemos como nuestra única opción.
No podemos olvidar que los centros de poder que deciden en este sistema capitalista y patriarcal no se ven afectados por el resultado de unas elecciones. El poder económico, el mediático, y el poder del Estado - el administrativo, el judicial, el represivo - no se presentan a las elecciones, ni los elige nadie con su voto.
Hace no tantos años, en este país cada barrio tenía su asamblea de vecinas. Hartas de recortes y faltas de perspectivas veníamos de las plazas del 15M cargadas de imaginación, solidaridad y esperanza. Habíamos aprendido a tomar nosotras las riendas de nuestras vidas de forma colectiva, fortaleciendo los vínculos vecinales. Socializándonos, empoderándonos y apoyándonos unas a otras ante los atropellos contra la vida digna que los bancos y los gobiernos cometían a diario. También entonces la extrema derecha intentaba hacerse escuchar, pero sus mensajes no calaban porque no tenían cabida en una sociedad organizada, activa y concienciada. ¡No olvidemos que no somos mercancía en manos de políticos y banqueros!
Es hora de juntarnos, activarnos, y fortalecer de nuevo los movimientos sociales. La ultraderecha asusta, pero tenemos herramientas propias para hacerle frente, votemos o no votemos, sea el resultado electoral que sea. Contra el avance del odio retornemos a la organización social en los barrios, defendamos nuestros derechos y volvamos a tomar las calles con ilusión y esperanza.
Queda mucho por avanzar… ¡¡¡A qué esperamos!!! |
|
|
This work licensed under a
Creative Commons license |
