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Notícies :: corrupció i poder
Toda la intelectualidad esta al servicio del gobierno antifascista, a fin de imponer su ideologia de pensamiento unico.
29 mai 2020
Decia bernieri: haz que perfeccione mi disciplina de trabajo y de vida con el fin de ahorrar energia, tiempo, recursos y dirigir mi voluntad contra la vanidad del intelectual y del politico .Toda la intelectualidad esta al servicio del gobierno antifascista, a fin de imponer su ideologia, como pensamiento unico. Desde las organizaciones de estado, el gobierno antifascista se esfuerza en movilizar a todos los que tienen un titulo, una firma, una parcela de gloria o de autoridad moral. Con la intencion de crear el estado antifascista, todos los grupos, los partidos desde nacionalistas vascos, catalanes, republicanos, socialistas y comunistas, se afañan en montar el gran tinglado y lo llaman antifascismo.
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El antifascismo somete rapidamente a los sindicatos, y se encamina a una lucha antifascista, que lleva a algunos ingenuos que se las dan de libertarios a participar en el movimiento antifascista que una vez mas demostrara, que no tiene ninguna salida salida, nada mas alla de reforzar al estado.
Ya asentado el gobierno antifascista, constituye organismos centralizados, que actualmente son predominantes, dejando a las organizaciones de base en la insignificancia, supeditadas a la consalidacion del estado ahora llamado antifascista..
Mientras llega la supuesta revolucion, el nuevo poder trata de eliminar todas las formas de competencia en los campos esenciales, las libertades de asociacion, de prensa, las de propaganda disidente son limitadas o suprimidas pues podrian hacer peligrar el nuevo poder en si del gobierno antifascista.
La estrategia del antifascismo,supone en esencia eliminar los fines y metodos anarquistas, y asi despues de meutralizar la lucha sindical, se impone los postulados de gramsci, se llega a la intimidacion para que se acabe admitiendo y apreciando el liderato de la pequeña burguesia, y asi de esa forma triunfa el concepto del centralismo democratico .
Como es inutil pedir racionalidad a los partidarios del centralismo democratico, es como pedirsela a los creyentes del fanatismo antifascista, pues con ella algunos aplicarian la logica, y entenderian que el antifascismo solo sirve para el ascenso de una nueva clase dirigente, que justifica sus derechos ante las capas sociales explotadas y marginadas y se propulsa a traves de ellas, en el debilitamiento, el desgaste y la progresiva incapacidad de la gran burguesia para responder a problemas que le superan por su naturaleza y magnitud.
Esa racionalidad tendria la ventaja de eliminar toda informacion que confunde en vez de aclarar, al mezclar esquemas ideologicos antifascistas con el anarquismo, que llevan como ya hemos dicho a luchas que solo sirven de reforzamiento del estado, ahora con el encumbramiento de una clase social, la dirigencia de la pequeña burguesia , que adquiere con el estado antifascista, el compartir privilejios como vanguardia supremacista con la elite dominante.
La unica oportunidad del anarquismo , es obvia, dar la espalda al gobierno antifascista, para asi poder profundizar en la practica que lo caracteriza como cultura libertaria, es decir: el antiparlamentarismo, el antiestatismo y lo que es mas importante el desentenderse de la educacion burguesa y atreverse a potenciar el atrevimiento de que los individuos se formen como autodidactas.
Los anarquistas, no tienen porque aceptar, el participar en campañas antifascista, junto a los cretinos del centralismo democratico. El mayor peligro de los militantes del anarquismo, es ilusionarse sobre el valor de su participacion en todas las manifestaciones y protestas antifascistas. Corren el riesgo de satisfacer sus reflejos de rebeldia sin por eso modificar en nada la realidad social. Su estado de agitado lo llevara a la agitacion, pero solo lo agitaran a la impotencia y de esa forma el anarquismo renuncia a sus posibilidades.Quizas ha llegado la hora de ver la realidad , que los anarquistas estan en el antifascismo como vestales de un fuego a punto de extinguirse, y que solo sirven de gorro frigio a politicos antifascistas que flirtean con el resurgir y reforzar al estado ahora con el gobierno antifascista.

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