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Anàlisi :: especulació i okupació
Un país dos sistemas.
02 jul 2019
China se apodera inexorablemente de las libertades de los hongkonesés
Hong Kong, un país dos sistemas.

Hace 22 años se hizo efectiva la transferencia de la soberanía de Hong Kong, por parte del Reino Unido a la República Popular de China. “Un país dos sistemas” fue el acuerdo con los británicos y consiste en que China, es responsable por la seguridad y asuntos externos de la ciudad mientras Hong Kong, mantiene una autonomía limitada para auto gobernarse con más libertades civiles, incluyendo, un sistema judicial independiente y una prensa sin restricciones.

El pueblo hongkonés en 22 años se dio cuenta que si acepta la ley de extradición a China, no solo están en juego las libertades de las personas y medios de comunicación sino que se afectaría todo el sistema incluso el desarrollo humano que mide el progreso de un país, según Naciones Unidas. Los hongkoneses son los que mejor calidad de vida tienen en el Ranking Doing Businnes, están en el cuarto puesto entre los países que prestan mejores facilidades para los negocios.

Para Beijing y Xi Jinping, no ofrecer señales de cómo será la adhesión total de Hong Kong, es una gran incertidumbre para el pueblo hongkonés que protesta con millones de personas en las calles desde el año 2014, en la revolución de los paraguas.

Xi propuso a Taiwán, el mismo sistema de un país dos sistemas que el pueblo de Hong Kong rechaza. Hace 22 años en la República Popular de China, el PIB per cápita era de 781,74 dólares mientras en Hong Kong se situaba en 27.330 dólares; hoy, en la región con administración especial de Hong Kong, en el 2018 el PIB per cápita fue de 46.721 y en China de 9.645 dólares, por supuesto la densidad poblacional entre uno y otro es enorme, ni así los chinos mejoran el per cápita. China es la segunda potencia económica mundial, pero, está muy lejos de Estados Unidos cuyo PIB ronda los 21 billones contra 13 de los chinos.

Joshua Wong, líder estudiantil y promotor de la revolución de los paraguas dice “la balanza se inclina paulatinamente a China y las cosas van para peor en los próximos 28 años, hasta que pasemos a ser territorio chino”.

“Si hace 10 años nos hubieran dicho que en el 2047, China se parecería a Hong Kong, nos lo habríamos creído pero en los últimos años hemos visto como el Partido Comunista Chino busca hacer de Hong Kong más similar a China, con el “crédito social”, sistema de reconocimiento facial para calificarlos como ciudadanos buenos y malos según su comportamiento en todos los ámbitos de la vida.

Se teme que las protestas de más de dos millones de hongkoneses termine en una mini Tianamen, manifestó la encargada de seguridad interna de Hong Kong, Regina Ip. El cargo más importante en Hong Kong, es el de jefe de gobierno; en el año 2014 era seleccionada por 1.200 personas la mayoría pertenecientes a elites pro Pekín. Carri Lam, cabeza del ejecutivo tras ganar las elecciones del 2017, intenta favorecer los intereses chinos, agregan los manifetantes.

“En Hong Kong, vivimos un sistema y medio” dice Wong y sus millones de coidearios “y si no protestamos terminaremos con el sistema chino”.
Los activistas lograron recaudar en una semana más de 800.000 dólares para campañas de prensa internacionales mientras Pekín manifiesta que no permitirá más protestas; preocupa que la guarnición del ejército popular chino acantonada en Hong Kong, disuelva las protestas tipo Tianamen, que termino en una masacre en 1989, en Pekín.

Raúl Crespo.

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