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Anàlisi :: criminalització i repressió
Europa 1918-Europa 2018
12 des 2018
Falta la integracion en Europa, para parar la destrucion de identidades.
Europa 1918-Europa 2018.

La primera guerra mundial mato los ideales del rey de reyes. Esta guerra fue un duelo de imperios, el resultado fue que todos quedaron muertos o heridos. El asesinato de Franz Ferdinand en Sarajevo, heredero del trono del imperio Austrohúngaro desato la primera guerra mundial que destruyo los imperios británicos, alemán, ruso, francés y Austrohúngaro.

El avance de las ideas democráticas hizo que el mundo dejara de creer en los emperadores que se resistían a desaparecer, incluso, con la creación de las naciones-estados en el siglo XIX.

El final de la guerra para los europeos fue una liberación de consciencia que nunca evito la agitación política y la inestabilidad europea de hoy.

100 Años han pasado desde esa guerra en donde esa seductora idea que un monarca gobierne varias naciones es más vieja que las hazañas de Alejandro Magno, estos reyes quisieron imitar esas conquistas para coleccionar países. Con la destrucción de los imperios nacieron otros países con economías destrozadas; el imperio británico quedo en pie pero muy debilitado y eso que controlaba territorios árabes que antes pertenecían a los otomanos.

El imperio británico paso de ser del mayor inversionista a ser una de las naciones más endeudadas situación que acelero su resquebrajamiento en 1947, con la independencia de India y Pakistán; desde ese instante el rey de Inglaterra dejo de usar el título de emperador de la India.

Después de 1918 nació el fascismo y el nacionalismo entre los alemanes derrotados, quienes renunciaron a Oceanía y África.

En febrero de 1917 los mencheviques derribaron a los zares pero los bolcheviques de Lenin tomaron el poder de los Ramanov, alternándose el poder desde 1613, en ese momento murió el imperio ruso que dio paso a la URSS.

El imperio Austrohúngaro, una prolongación de Austria (1804-1867) a su vez un nostálgico del sacro imperio romano-germánico (962-1806) una entidad supranacional prolongación del imperio carolingio (768-843) La piedra angular de Europa occidental.

El imperio Austrohúngaro abarcaba reinos menores, ducados y otros territorios más allá de Austria y Hungría como los Balcanes, Ucrania, Rumania, Moravia, Eslovaquia y Polonia. La derrota de este imperio en la guerra provoco el nacimiento de varios países y la prohibición de reinar a los Habsburgo en Austria.

Los Habsburgo era una de las monarquías de las más poderosas de Europa, su nombre en la casa real significaba “castillo del halcón” pero su sello real era un león coronado mirando a occidente; fundado en el siglo XI por Radbot, conde suizo que nunca imagino que sus descendientes adquirieran enorme fortuna y poder por medio de los matrimonios hasta controlar la corona de Austria.

Las alianzas matrimoniales se dividieron en varias ramas que dirigieron el imperio español, incluso, pusieron un pariente en México, Maximiliano emperador de México.

Con una larga trayectoria el imperio Otomano, murió hace 100 años, el más temido por occidente. En 1528 estuvo tan cerca de tomar Viena, asunto que hubiera cambiado la historia de Europa.
Solimán el magnífico (1520-1566) conquisto áfrica del Norte, los Balcanes y una gran parte del territorio de Oriente Medio, introduciendo profundas reformas legales en esos territorios para sostener la producción y las exportaciones no solo la represión y los asesinatos, comunes en los territorios conquistados por los imperios.

Desde el siglo XIX con el auge de los nacionalismos, la corrupción y las derrotas militares, el imperio Otomano se empezó a desmoronar, la primera guerra mundial debilito la dinastía Omaní, surgió la República de Turquía en 1923.

Europa 2018, 73 años unidos por la paz, es un continente relativamente próspero y democrático que no termina de integrarse ni con el euro ni con la libre circulación; la deuda pública los tiene sumidos en una serie crisis económica que afecta más la crisis política por la inmigración, por el desempleo, medidas de austeridad que no alcanzan para ocultar la pésima gestión de sus gobiernos ni la antipatía mutua entre varios países, lo saben Ángela Merkel y Emmanuel Macron, lo entendió el Reino Unido que se separa de la Unión Europea, para refugiarse en su isla como lo hizo en la segunda guerra mundial.

La desunión entre franceses y alemanes según la historia empezó en el siglo XVIII, muchos siglos de enemistad profundizado en la primera guerra mundial (1914-1918) que ocasiono 9 millones de muertos de los cuales 2 millones fueron soldados alemanes y 1,3 millones de franceses; en menor cuantía otros miles de muertos y asesinados judíos en la segunda guerra mundial, acentuó la enemistad entre ellos, con otros países y con Alemania.

Hoy, la distinción entre legalidad y legitimidad se interpreta en Europa, según los cánones de juristas medievales, que plantearon, como moralmente imperativo, el derecho contra la opresión, el combate al despotismo y la restauración de la legitimidad, pero, está implícito también el tema de que, a veces, muchas veces, la Unión Europea y la OTAN, sus leyes y los actos de ejecución son solo pura y dura expresión de poder y no siempre una encarnación de la justicia… ¿queda la inconstitucionalidad? Pregunto.

La globalización ha profanado instituciones mercantilizando todo lo que toca, pero hay realidades humanas que nunca deberían entrar en el mercadeo de la compraventa como la dignidad, derechos humanos, educación, salud, naturaleza. Por dos ocasiones Europa nos ha demostrado que los países así como se construyen se destruyen.

Un hueco en la roca para que la gente se proteja, luego ese hueco paso a ser una cueva como en sus orígenes su hogar.

En apariencia los europeos acogen identidades, culturas árabes, africanas, latinas, asiáticas, para luego destruir los vínculos sociales, destruyen identidades, lo han demostrado a lo largo y ancho de su historia.

Los pueblos europeos han salido a las calles reclamando algo tan elemental como la dignidad, mejores servicios y remuneraciones; servicios universales, gratuitos y de calidad, con esos reclamos no solo combaten el neoliberalismo que devora los cimientos de una sociedad que no puede atender la demanda ciudadana, combaten la falta de derechos de las personas especialmente de los más pobres. Es hora que entidades privadas y públicas acojan de mejor manera tantas identidades negadas y maltratadas por la política cuya gestión se remonta a antes de la primera o segunda guerra mundial, lo dicen los resultados desde 1914 hasta el 2018.

Los chalecos amarillos en Francia, como antes los indignados en España, Alemania, Grecia, Portugal, Alemania, Gran Bretaña, Bélgica, etc. Movimientos que en tiempos de crisis de representación, no responden a los partidos políticos ni a organizaciones sociales ni a ninguna militancia, en apariencia, nace de una indignación, quiero creerlo así: clase trabajadora, gente de zonas rurales, estudiantes, amas de casa de ciudades pequeñas y grandes protestando contra la política populista y neoliberal que no ofrece oportunidades de mejor vida, abandonados por los poderes públicos y por los políticos.

Estas protestas se repiten en todo el mundo, es verdad, pero estoy mencionado a Europa, en este artículo.

Raúl Crespo.

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Sindicat Terrassa