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La Organización MOVE!
31 jul 2017
Aquí les dejo una información que me ha llegado de una compañera, Carolina Saldaña (Colectivo amigxs de Mumia México), con incorpora además un artículo de Hans Bennett, hablando ambas de una comunidad revolucionaria en los USA, MOVE, que siguen con su lucha revolucionaria y por la libertad de sus compañeros y compañeras presas en el corazón de la bestia.
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“Los 9 de MOVE” 36 años encerrados
Hace 36 años, el 8 de agosto de 1978, Merle, Delbert, Janine, Phil, Debbie, Chuck, Eddie, Janet y Mike África, integrantes de la organización MOVE de Filadelfia, fueron detenidos, enjuiciados y sentenciados a desde 30 a 100 años en prisión por el asesinato de un policía después de atreverse a sobrevivir una embestida de más de 500 policías contra su casa colectiva. Se conocen como los “MOVE 9”, o “los 9 de MOVE”. Ahora, en realidad, son ocho ––tres mujeres y cinco hombres–– que quedan del grupo original después de la muerte de la compañera Merle África en prisión bajo circunstancias muy sospechosas en 1998.

Este año cumplen 36 años tras las rejas en las prisiones del estado de Pensilvania. Según la ley, eran elegibles para la libertad condicional después de cumplir su sentencia mínima en el 2008. Sin embargo, el Consejo de Libertad Condicional les niega su libertad por “la naturaleza grave del delito” y por “no expresar remordimiento” por un crimen que ellos siempre han dicho que no cometieron.

Viene a la mente una carta escrita por George Jackson en Soledad Brother donde dice que en las prisiones de California en los años 60, los supuestos requisitos de haber cumplido x número de años en prisión y tener un record de buena conducta no bastaban para obtener libertad condicional. Escribe: “Ningún hombre negro con violencia en su pasado saldrá de este lugar a menos que vean cierta cosa en sus ojos. Y no la puedes fingir ––la resignación, la derrota —hay que llevar la marca inconfundible en la cara”.

A juzgar del creciente número de presos mantenidos en prisión contra la ley, parece que esta misma actitud se endurece aún más hoy en día entre los consejos autónomos que no tienen que rendir cuentas a nadie. De todos modos, MOVE sigue exigiendo la libertad de su familia encarcelada e invita a todo el mundo a respaldar la demanda.

El ataque policiaca de 1978 fue el primer acto de guerra urbana contra MOVE. El segundo fue el 13 de mayo de 1985, cuando la ciudad de Filadelfia lanzó una bomba sobre su casa que provocó un incendio, matando a 11 personas y quemando 61 casas. El 13 de mayo de 2010, MOVE presentó una querella criminal contra los oficiales responsables de la matanza.

La organización MOVE, surgió en la ciudad de Filadelfia a principios de los años 70 y se basa en las enseñanzas de su fundador John África. El nombre de la organización viene del verbo “mover” en inglés. Su filosofía es naturalista, anti-sistémica y anti-autoritaria. Su diosa es la Mamá Naturaleza y los integrantes intentan vivir en armonía con ella. Su discurso no es de la izquierda tradicional, pero se oponen a todos los aspectos del sistema que consideran letal para la vida en nuestro planeta—la explotación económica y política, la brutalidad policiaca, el sistema carcelario, la crueldad hacia los animales, la mala educación en las escuelas y la destrucción del medioambiente. Prefieren la no-violencia pero insisten en su derecho a la auto-defensa. Dice la vocera Ramona África: “Si alguien te ataca y te niegas a defenderte, estás alentando y perpetuando la peor clase de violencia”.

“La organización MOVE es una poderosa familia de revolucionarios, firmes en los principios, fuertes en la cohesión, raíz de un gran árbol en crecimiento. Unas personas comprometidas colectivamente avanzando en la dirección correcta. Mientras los llamados educadores hablan de amor y se llenan la boca con palabras de paz, nosotros vivimos la paz, afirmamos el poder del amor, y proclamamos la urgente necesidad de la liberación. El sistema mundial no puede hablar de amor mientras tolera el odio, de paz mientras hace la guerra, de libertad mientras aprieta las cadenas de la esclavitud. Porque hacer concesiones a la enfermedad nos hará perder la salud, hacer concesiones a la esclavitud acabará esclavizándonos.”
(John África)

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Día del bombardeo al hogar de MOVE, el 13 de mayo 1985

Después de sus días con los Panteras Negras, Mumia Abu-Jamal conoció a MOVE cuando era reportero en Filadelfia y cubría los juicios de MOVE, los cuales eran numerosos porque la organización siempre estaba en conflicto con el gobierno racista y represivo del notorio Frank Rizzo. Cuando Mumia fue enviado a prisión en 1981, la organización MOVE se volvió su base de apoyo en Filadelfia. Y el apoyo es mutuo. Desde su celda en el corredor de la muerte, Mumia ha escrito decenas de artículos exigiendo libertad y justicia para la familia África. Sobre “los 9 de MOVE”, dice: “Ellos fueron condenados por estar unidos, no en la delincuencia, sino en rebelión contra el sistema y en resistencia contra los ataques armados del Estado. Fueron condenados por ser integrantes de MOVE”.

Para las y los jóvenes que se unieron a MOVE a principios de los años 70, las enseñanzas de John África les dieron otra manera de entender el mundo y en muchos casos, él mismo les ayudó a salir de las adicciones a la droga y otros patrones de vida destructivos. De ahí viene su fuerte lealtad al hombre que cayó en la matanza de 1985.

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John Africa, Fundador de MOVE

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A Male Cult Member of MOVE

¿Quiénes son?
Merle África
Unos días después de la misteriosa muerte de Merle África en prisión el 13 de marzo de 1998, a la edad de 48, Mumia Abu-Jamal escribió las siguientes líneas: “¿Cuántas personas han visto su radiante sonrisa? Una vez la vi entrar en un tribunal y hablar de la trayectoria de MOVE y su resistencia contra la represión con tanta pasión y fuerza que todos quedamos pasmados.”

Pero no siempre fue así. Merle dijo en 1995 que antes de conocer a MOVE, ella se recibió del bachillerato y trabajó como secretaria, pero debido a muchos problemas personales y familiares, se había vuelto alcohólica a la edad de 8 y drogadicta a la edad de 15. Tuvo dos abortos ilegales que casi ocasionó su muerte y la dejó con tumores. Ella le atribuye su saneamiento físico y emocional a John África, quien le ayudó a recuperar una vida feliz, con sentido.

En 1997, seis meses antes de su muerte, Merle envió el siguiente mensaje a la Marcha de Un Millón de Mujeres:

“Nosotras, las mujeres de MOVE hemos estado en prisión durante 20 años, y hemos visto una explosión en la población de las prisiones. Es espantoso que tantas chavas de 16, 17, 18 años tengan largas sentencias, hasta cadena perpetua, en muchos casos por vender droga, pero en otros casos por defenderse y defender a sus hijas e hijos contra parejas abusivos. Está mal. Según el sistema, una mujer no tiene el derecho a la auto-defensa contra un ataque. Muchas personas dicen que hay que dejar al hombre si se abusa de ti. Algunas mujeres no lo hacen porque tienen miedo. Otras mujeres lo hacen, pero es común que el hombre persiga a la mujer y el abuso sigue. Ella no recibe ayuda de la policía, tampoco de las cortes…. ¿Qué se supone que la mujer debe hacer cuando es atacada? ¿Acostarse y permitir que el hombre la asesine a golpes? ¿Prestarle un bate? ¿una navaja? ¿una pistola?… Hay que formar redes para tomar control de nuestras vidas y las de nuestras hijas e hijos. Hay que batallar contra el gobierno para tomar control de nuestras comunidades, para poner fin al asesinato genocida de nuestros chavos y nuestros hombres por la policía. Hay que unirnos, sin miedo, para enfrentar a cualquier intruso que pretenda arrebatar a nuestras familias, nuestras vidas, nuestra libertad”.

Cuando murió Merle, hubo varios tributos en su honor y las mujeres de la prisión de Muncy en el estado de Pensilvania escribieron cartas y poemas que hablaban de su valor y de su compasión.

Eddie África
Uno de seis hijos criados en un hogar cristiano, Eddie creció en las calles de Filadelfia, donde empezó a tomar, fumar marihuana y usar heroína y otras drogas antes de la edad de 15. Dice que se fue a la cárcel durante 4 años por “recibir mercancía robada” y al salir, fue detenido repetidamente por no permitir revisiones por la policía cuando le hostigaban.

Llegó a la conclusión de que todos los blancos eran malvados y no quería tener nada que ver con ellos. Apoyaba a los Panteras Negras y al Ejército de Liberación Negra y por fin se unió con los Musulmanes Negros. Sintió que la organización le ofreció ciertas respuestas pero todavía no se sentía satisfecho. Un hermano y un primo le visitaron en prisión y empezaron a contarle de la organización MOVE. Al principio, no quería escucharles porque MOVE tenía unos integrantes blancos, pero por fin decidió unirse con la organización. Enfatiza que nunca era su intención volverse revolucionario. Por lo contrario, el sistema le empujó hacia esto y John África le ofreció algo de orientación.

Cuando su hermana Merle murió, Eddie estaba en aislamiento en el hoyo en la prisión Camp Hill. Sus familiares deseaban informarle en persona de la muerte de Merle, y Ramona África habló con el capellán para avisarle de su deseo. Le dijo que MOVE no quería una repetición de lo que pasó en 1985, cuando los guardias entraron de manera triunfante a las celdas de Janine y Phil y a Delbert y Janet para anunciar: “¡Ya bombardearon su casa! ¡Sus hijos han muertos!” Sin embargo, a pesar de la conversación con el capellán, Eddie fue informado de manera sádica y también fue negada una llamada telefónica para hablar con su familia.

Janine África
La Ministra de Educación de MOVE, Janine afirma que conoció a MOVE a la edad de 17 cuando ella pasaba por la calle donde la organización celebraba un mitin. “Escuché a los discursos y lo que realmente me llamó la atención era la fortaleza, la confianza en sí mismas y la firmeza de las mujeres de MOVE. Ellas eran todo lo que yo no era y yo quería ser como ellas. Después del mitin les pregunté quienes eran y me explicaron la filosofía de MOVE y me invitaron a sus círculos de estudio”.

Dice Janine que las responsabilidades de haberse casado y tenido un bebé cuando era aún más joven le estaban provocando una crisis nerviosa y que su garganta se cerraba y no podía comer. Ningún doctor había podido curarla y se sentía totalmente desesperada hasta que conoció a MOVE. Dice que fue John África quien le ayudó a resolver su crisis nerviosa y a cobrar fuerza, salud y confianza en sí misma y que por eso, siempre será fiel a sus enseñanzas aunque le cueste toda una vida en prisión.

En 1976, la policía de Filadelfia inició un enfrentamiento con los integrantes de MOVE, en el cual un agente pisoteó a su bebé Life África, matándola, causándole mucho sufrimiento a Janine.

En marzo del 2008, Janine envió el siguiente mensaje a las personas que apoyan su libertad: “Lo más importante es asegurar que los oficiales del gobierno sepan que MOVE tiene apoyo y que la gente quiere que lleguemos a casa…Ellos cometen sus atrocidades cuando sienten que pueden salir con la suya, por eso hay que dejarlos saber que están en la mira”.

Chuck África
Nacido en Filadelfia en 1959, Chuck no se acuerda mucho de su papá, divorciado de su mamá, pero recuerda a su abuelo, quien le habló mucho de la historia. Cuando era chiquito, se acuerda de ver a los Panteras Negras marchar por su comunidad, volcando patrullas. Él y sus amigos intentaron marchar con ellos, pero sus mamás no lo permitieron. Cuando su abuelo murió en 1972, Chuck era “el hombre de la casa” y trabajó de cerillo en el supermercado y de vendedor de periódicos en las calles. También aprendió a robar.

Una noche él y su pandilla pasó por la casa de su mamá y encontraron sentados en el piso muchos hombres y mujeres con el cabello largo que no conocía un peine. Dice que las cosas que escuchó aquella noche quedan grabadas en su memoria para siempre: “Hablaron del sistema judicial, del sistema educativa, de la religión, de los comentaristas de las noticias, de la ciencia, de la oración, del tiempo”. El joven Chuck nunca había cuestionado el lavado de cerebro que ocurre en las escuelas o el hecho de que casi todos los policías en la comunidad negra eran blancos. Dice: “los lineamientos de John África abrieron mi conciencia para cuestionar las normas, las restricciones de la vida cotidiana, las mentiras, las verdades escondidas en un mundo de constante deshonestidad”. Había encontrado su familia. Empezó a trabajar en el lavacoches de MOVE, comer fruta fresca que siempre tenían a mano, sacar a los perros a correr y tomar ejercicio diario. Cada día se sentía más fuerte.

Desde su celda en la prisión Graterford, Chuck inició una campaña para lograr un trato humano a los presos ancianos que están muriendo tras las rejas a un paso alarmante. Denunció que en un periodo de dos meses, hubo por lo menos 12 muertes de abuelos en su prisión, la mayoría de ellos desahuciados, inofensivos e indefensos. Insiste en que “algunos de estos hombres podrían tener un impacto positivo en sus comunidades. Hace falta su sabiduría en una sociedad cada vez más violenta. Por lo menos merecen pasar sus últimos días con su familia y amigos”.

Debbie África
El dolor de la separación ha sido un tema de los escritos de Debbie África. Como si no fuera suficiente estar separada de su esposo Mike durante 36 años, ha conocido el dolor de tener sus dos bebés arrancados de sus brazos por la policía y de vivir aparte de ellos todos estos años.

Aquel 8 de agosto de 1978, Debbie estaba embarazada y también cargaba su bebé de 23 meses, Witt, en su brazos cuando los policías empezaron a inundar con toneladas de agua el sótano donde MOVE se encontraba. Mientras se esforzó en proteger a su hija, sentía terror al ver ladrillos, tablas y sus grandes perros volar por el aire para estar aventados contra la pared por la fuerza del agua. Pensó que todos iban a morir, pero lograron eludir a las balas y los gases lacrimógenos que provocaban una tremenda sofocación. Debbie afirma que todos los hombres recibieron golpizas salvajes al salir de la casa, pero sólo la golpiza a Delbert África fue grabada en video. No pudo creerlo cuando la detuvieron porque no había hecho nada mal. Las mujeres ni cargaban armas. Pero le arrebataron su hija antes de llevarse a todos a la cárcel.

A la edad de 22, Debbie África dio a luz a su hijo Mike en su celda el 15 de septiembre de 1978. Dice: “Fue un parto natural, sin la asistencia de doctores, enfermeras o personal de la prisión. Los oficiales ni siquiera se enteraron hasta que nosotras decidimos avisarles varias horas después. Mi bebé estuvo conmigo cuatro días y el dolor que sentí cuando se lo llevaron es el dolor más grande que he conocido. Me han arrebatado dos bebés sólo porque creo en las enseñanzas de John África y porque soy fiel a MOVE. Harán cualquier cosa para deshacerse de MOVE”.

Debbie también ha escrito de las niñas y niños de MOVE que los adultos intentaron proteger, al sacarles de la ciudad antes de la confrontación del 20 de mayo de 1977. Aquel día Debbie se encargó de bañarlos ––Tree-Tree, Missy, Oyewolf, Netta, Tremaine, Lil Phil, Delisha, Malicyde, Linda, Tomaso. “Los enviamos al estado de Virginia para que no les hicieran daño. Cuando los traemos de regreso varios años después, el gobierno asesinó a la mitad de ellos el 13 de mayo de 1985”.

Mike África
“El bebé de una familia de ocho niños, crecí en un ambiente de pobreza, guerras pandilleras y todas las demás aflicciones del barrio”, dice Mike África. A la edad de 16, se unió a los Marines para intentar salir de los hábitos del alcohol y la droga, pero los problemas sólo se intensificaron. No tenía consciencia social y sólo buscaba las fiestas.

Mike conoció a unos integrantes de MOVE que había ayudado a la familia de su esposa resolver un problema vecinal y después los vio en una manifestación contra la policía que solía aterrorizar a la comunidad. Le impresionó el valor de MOVE porque nunca había visto a nadie enfrentar a la pandilla policiaca de manera tan directa sin retroceder un solo paso. Asistió a un mitin convocado por MOVE y fue detenido. Aunque le dio miedo, empezó a apreciar más la filosofía de MOVE.

En una reciente entrevista, Mike afirma que el día 8 de agosto de 1978, la policía no sólo disparó a los integrantes del MOVE desde afuera, sino que desde arriba también.

El joven Mike África, hijo de Mike y Debbie, trabaja por la libertad de sus papás y la familia MOVE, Mumia Abu-Jamal, Leonard Peltier y otros presos y presas políticas. Está consciente de que el Consejo de Libertad Condicional, presionado por los policías y fiscales de Filadelfia, simplemente inventa pretextos para que los integrantes de MOVE no salgan a las calles, como la falta de remordimiento por un crimen que no cometieron. Pregunta: ¿El Consejo de Libertad Condicional tiene algún remordimiento?

Janet África
Hija de mamá soltera, Janet nació en 1951. Su mamá vino de una familia de 20 hermanas y hermanos y no quería que su hija sufriera hambre en las frías calles de Newark, Nueva Jersey, por eso se la regaló a su hermana. Janet creció en una casa bonita suburbana con alberca y tomó lecciones de ballet, tap, jazz moderna y deportes. Ganó unas medallas en las olimpiadas locales. Cuando a su mamá le iba mejor, Janet volvió a vivir con ella. Estudió en buenas escuelas, usaba buena ropa y salió con los chavos como era de costumbre. Después empezó a trabajar, se juntó con un hombre y tuvo una bebé. Pero no se sentía feliz. Buscó la solución en la religión pero sólo encontró la hipocresía. Al conocer a MOVE, le gustó su manera de entender el mundo y se unió a la organización.

En un artículo del año 2004 en la revista 4strugglemag, publicada por presos desde las prisiones, ella enfatiza la importancia de no permitir que las autoridades presenten a los activistas y luchadores sociales como criminales que merecen estar en prisión. Dice que es lo intentan hacer, por ejemplo, con Leonard Peltier, después de robar a las tierras de los pueblos originarios y casi exterminar a todos de ellos, cuando en realidad, Leonard es preso por defender a su pueblo contra la esclavitud que existe en las reservaciones actuales. Enfatiza que MOVE siempre enfrenta las mentiras, la corrupción y la suciedad del sistema y “por eso nos mantienen en prisión, no porque somos criminales”.

Delbert África
Después de ser perseguido por ser uno de los líderes del partido Panteras Negras en Chicago y haberse refugiado en Canadá, Delbert conoció a MOVE a principios de los 70 y se sumó a la organización. Dice que con los Panteras, entendió lo que era una revolución según el marxismo-leninismo, pero que nunca logró limpiar la basura interior que se había acumulado. Durante un viaje, él fue gravemente herido en un choque y no pudo caminar debido al daño a un nervio. Los doctores le habían dicho que tal vez lograría caminar un poco pero que nunca volvería a correr. Sin embargo, cuando empezó a trabajar con MOVE, empezó a ver la vida con más claridad y, a la vez, se volvió fuerte físicamente. Valora mucho la participación de las mujeres en MOVE y siente que son la base de la revolución.

Comenta que la golpiza que él recibió el 8 de agosto de 1972 es considerada una de las peores jamás grabadas en video, pero dice que MOMMA, la Mama Naturaleza, le ayudó a sobrevivirla—que él entró en un estado de consciencia en el cual podía sentir la presión de todas las patadas, todos los golpes, pero que realmente no le estaban lastimando. Phil África recuerda que Delbert le gritó: “¡Todo va a estar bien! ¡Nosotros vamos a estar bien!” y que le gritó a un policía que tenía que quitarle su pie de la cabeza de Phil. Con esto, Phil también gritó: “¡Sí! Vamos a estar bien! ¡A movernos!”

Sin embargo, al llegar a la cárcel, una enfermera le ofreció una manzana, pero cuando la mordió, su cara se congeló porque tenía fractura de la mandíbula y también de la cuenca del ojo. Aún así estaba más enojado por haber sido capturado que por haber sido lastimado.

Delbert, como todos los hombres de MOVE, pasó 6 años en aislamiento por negarse a cortarle el cabello, y varios años más por otros motivos.

Insiste en que no podemos quedarnos estancados, que tenemos que estar en movimiento y quitarnos la idea de la cabeza de que el cambio es imposible. Hace falta que todos participen en esta revolución: “De la misma manera que el corazón late y circula la sangre, de la misma manera que los pulmones exhalan el viejo aire y inhalan el nuevo aire, todos tenemos que sacar todas las enfermedades, la hemorragias, los problemas que este sistema provoca. Cada quien al nivel que se pueda. Es lo que quiero plantear”.

Phil África
El hijo de Frank y Maude Phillips quien creció en una familia pobre con 12 hermanos y hermanas, se recibió del bachillerato y se hizo competente en varios oficios. A la edad de 14 o 15, conoció a primera mano la violencia de la policía cuando unos agentes hostigaron a su hermano mayor por andar con dinero.

Phil les iba a explicar que su hermano acaba de cobrar su salario de trabajador en un hospital cuando uno de ellos le dio una patada en los huevos tan fuerte que no pudo respirar ni gritar.

Phil andaba en los reventones y la vida de la calle, “víctima de las varias adicciones que el sistema utiliza para esclavizar a la gente”. Sentía que estaba encaminado hacia la auto-destrucción y que de seguir así, no llegaría a cumplir los 16, 18 o 21 años. Investigó a los varios movimientos de liberación negra antes de llegar a vivir en Powelton Village, donde conoció a MOVE y se unió a la organización.

Después de su detención en 1978, él y los otros presos de MOVE pasaron alrededor de 9 años en aislamiento por negarse a cortar el cabello y otras infracciones. Phil vivió los dos motines en la prisión Camp Hill en ‘83 y ‘89.

De niño, a Phil siempre le gustaba dibujar y en los últimos años ha pintado muchos cuadros desde la prisión.

http://www.youtube.com/watch?v=bz6BpYzxox4

Dice que lo que le mantiene fuerte es la filosofía revolucionaria de John África, de vivir en armonía con la naturaleza y dedicarse la vida a la destrucción del sistema construido en base a mentiras, violaciones, genocidio, esclavitud y opresión. Es un sistema que no tiene justicia para impartir, por eso, hay que destruirlo.

En diciembre de 2008, Phil envió este mensaje a las manifestaciones en apoyo a Mumia Abu-Jamal en México:

“¡Rendirnos jamás! El sistema no es verdaderamente poderoso. El poder verdadero se ve en la Mamá Naturaleza que nos abriga y nos alimenta, no en este sistema débil que sólo nos trae muerte, destrucción y dolor. Vendrá un día cuando todos y todas logremos convivir en paz y armonía. Se lo prometo. Este sistema pretendió asesinar a todos los integrantes de la organización MOVE el 8 de agosto de 1978, y ¡salimos vivos! Este sistema intentó pararnos cuando bombardeó a nuestro hogar el 13 de mayo de 1985, asesinando a 11 de nuestras hermanas, hermanos, hijos e hijas. ¡Pero no nos paró! Seguimos moviéndonos. Somos más fuertes que nunca. Han puesto a Mumia Abu-Jamal en el corredor de la muerte durante 27 años para callar su voz, pero él sigue siendo “la voz de los sin voz”.
¡OnaMOVE hermanas y hermanos! ¡Liberemos a Mumia! ¡Liberemos a todos los presos y presas políticas! ¡Acabemos con este podrido sistema! ¡Qué viva John Äfrica!”

MUERE PHIL AFRICA EN PRISIÓN ¡QUE DESCANSE EN LIBERTAD!

Una terrible noticia. Ha muerto en prisión bajo circunstancias sospechosas un gran compañero que siempre se ha solidarizado con nosotrxs aquí en México ––un alma rebelde, luchador hasta el final.
¡DESCANSE EN LIBERTAD PHIL ÁFRICA! ¡LIBERTAD PARA ‘LOS 9 DE MOVE’!

Va el comunicado de la organización MOVE sobre su muerte:

El sábado 10 de enero 2015, Phil África, un revolucionario y el primer ministro de defensa de John África, queridísimo hermano, esposo y padre, murió bajo circunstancias sospechosas en la Institución Correccional de Dallas, Pensilvania.

El domingo 4 de enero Phil no se sentía bien y fue a la clínica de la prisión. Aún así, otros presos vieron a Phil caminar, estirarse y hacer saltos de tijera ese día.

Al escuchar que Phil estaba en la clínica, algunos integrantes de MOVE hicieron el viaje a la prisión a verlo, pero las autoridades les prohibieron la visita. Mientras ellos visitaban con Delbert África, Phil fue trasladado en secreto al hospital general Wilkes Barre donde lo mantuvieron aislado e incomunicado durante cinco días.

Las autoridades de la prisión SCI-Dallas no dieron ninguna información sobre la condición de Phil. Les dijeron a representantes de MOVE que Phil estaba en Wilkes Barre, pero el hospital negó que él estuviera ahí. Durante casi una semana, dijeron puras mentiras.

Fue muy sospechoso que tanto el hospital como la prisión negaran a Phil su derecho a llamar a su familia y especialmente a su esposa de 44 años, Janine África, con el pretexto de que ella no era una pariente “de sangre”. Tanto el hospital como la prisión recibieron cientos de llamadas en apoyo a Phil de varias partes del mundo. Cuando por fin permitieron que Phil le llamara a Janine el jueves, 8 de enero, él estaba muy drogado, incoherente y casi no podía sostener el teléfono para hablar con ella.

El viernes, 9 de enero, Phil fue enviado de regreso a la clínica de la prisión, a la sección para enfermos terminales. El sábado 10 de enero, a Ramona y Carlos África les dieron permiso para visitar a Phil en la clínica. Cuando llegaron, a Phil le fallaban las palabras y no pudo hablar o mover su cabeza para verlos. Una hora después de que se fueron, Delbert África llamó desde la prisión con la noticia de que Phil había muerto.

Los presos en la clínica y en toda la prisión quedaron conmocionados al escuchar la noticia. Habían visto la vigorosa salud de Phil durante décadas en las prisiones y solo seis días antes, lo habían visto tomando ejercicio, haciendo saltos, etc. Este rápido debilitamiento ocurrió cuando estaba mantenido incomunicado, sin contacto con su familia MOVE en el hospital Wilkes Barre o la prisión Dallas o en cualquier lugar que estos conspiradores lo mantenían con alevosía.

El hecho de que Phil fue aislado seis días antes de morir y que las autoridades se negaron a dar información sobre su condición es más que sospechoso.

Éste es un ejemplo grave del odio a MOVE demostrado por parte del sistema. También tenemos el ejemplo del 8 de agosto de 1978 cuando ‘los 9 de MOVE’ fueron encarcelados ilegalmente, y el ejemplo del 13 de mayo de 1985 cuando el gobierno bombardeó e intencionalmente asesinó a once integrantes de MOVE. Cuando Merle África murió en prisión el 13 de marzo del 1998, las condiciones eran muy parecidas a las de Phil. Por lo regular, ella había vivido de manera saludable en prisión, pero después de unas pocas horas de estar obligada a ir a un hospital fuera de la prisión, murió.

Phil se relacionó con gente en todas partes del mundo. Escribía y enviaba solidaridad y fortaleza a cientos de personas. Trabajó duro para aprender a pintar y creó un sinnúmero de pinturas que mandaba gratis a la gente para llamar la atención sobre ciertos asuntos o para que ellos pudieran usarlas para recaudar fondos para su lucha o para unir a la gente. Phil tomó en serio su compromiso y su trabajo revolucionario, y también sonreía, se reía y daba abrazos y aliento a la gente. Era una figura paterna cálida para muchos jóvenes en la prisión donde les enseño a boxear, pensar y fortalecerse. A pesar de que dos de sus propios hijos fueron asesinados por el estado el 13 de mayo de 1985, era como un papá para muchos. Phil y su esposa Janine fueron obligados a vivir separados durante más de 36 de los 44 años que estuvieron casados, él en una prisión y ella en otra, pero a pesar de este cruel aislamiento, se esforzaron en mantenerse en comunicación.

Es la intención del sistema que la gente de MOVE muera en prisión. ‘Los 9 de MOVE’ nunca debieron haber estado encarcelados y según su sentencia, debieron haber salido bajo libertad condicional hace seis años. El gobierno es directamente responsable para las muertes de Merle y Phil África. Phil nunca será olvidado y lo vamos a extrañar con mucho cariño, pero las cosas no van a quedar así. Su fuerte ejemplo será una inspiración para luchar más duro por la libertad de ‘los 9 de MOVE y todas y todos los presos políticos. Este último acto de saña del gobierno será un motivo para que la gente acelere el ritmo de esta revolución.
¡VIVA PHIL AFRICA!
¡VIVA MERLE AFRICA!
¡LIBERTAD PARA ‘LOS 9 DE MOVE’!
¡VIVA JOHN AFRICA!


x Carolina Saldaña (Colectivo amigxs de Mumia México)
http://www.onamove.com/
www.MOVE9parole.blogspot.com

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¡ATENCIÓN, MOVE! ¡Ésta es América!
por Hans Bennett

“Atención, MOVE: Ésta es América!” declaró por megáfono el Comisario de Policía Sambor unos minutos antes del ataque policial contra el hogar de la organización revolucionaria MOVE el 13 de mayo de 1985. En el asalto mataron a 5 niños y 6 adultos, incluyendo el fundador de MOVE John África. Después de que la policía disparó más de 10,000 cartuchos a su hogar en el oeste de Filadelfia, un helicóptero de la policía estatal echó una bomba C-4, ilegalmente suministrada por el FBI, sobre el techo de MOVE. La bomba detonó un incendio que terminó destruyendo 60 casas, una cuadra entera en una colonia negra clasemediera. Cargando el joven Birdie Africa en sus brazos, la única otra sobreviviente Ramona África esquivó las balas y escapó del incendio con quemaduras que dejaron cicatrices permanentes.

Ramona recuerda haber estado en el sótano con los niños cuando el operativo empezó. “Torrentes de agua corrieron de las mangueras. Dispararon gases lacrimógenos después de usar explosivos para demoler la parte frontal de la casa. Escuchamos fuego intenso de ametralladores intenso y luego hubo más o menos silencio. Fue entonces que echaron la bomba, sin aviso”.

“Al principio nosotros que estábamos en el sótano no nos dimos cuenta que la casa estaba en llamas, pues hubo tanto gas lacrimógeno que era difícil reconocer el humo. Abrimos la puerta y empezamos a gritar que estábamos saliendo con los niños. Ellos estaban gritando también. Sabemos que nos escucharon pero en el instante en que nos hicimos visibles en el portal, abrieron fuego. Podrías escuchar el sonido de las balas pegando alrededor de la cochera. Con toda intención, nos apuntaron y dispararon. Es obvio que pretendieron matar a la gente de MOVE—no pensaron detener a nadie”.

Después de sobrevivir el bombardeo, a Ramona le acusaron de conspiración, de incitar disturbios, y de asalto simple y agravado. Su sentencia fue de 16 meses a 7 años, pero cumplió los 7 años después de que le negaron la libertad condicional por negarse a renunciar a MOVE. Durante el juicio, todos los cargos enumerados en la orden de detención para justificar el operativo fueron desestimados por el juez. Dice Ramona: “Esto significa que no tenían motivo válido para estar ahí afuera, pero no desestimaron los cargos contra mí como resultado de lo que pasó cuando aparecieron”.

Al final del juicio de Ramona en 1986, el juez Stiles específicamente instruyó a los jurados que no debieran tomar en cuenta la mala conducta de los policías u otros oficiales del gobierno porque ellos tendrían que rendir cuentas en otros procedimientos. Esto nunca ocurrió. Ramona explica: “Ni un solo oficial, ni un policía o cualquier otra persona ha tenido que rendir cuentas ante la corte por el asesinato de mi familia”.

“Nadie debe dejarse engañar cuando este gobierno usa palabras como “la justicia”. Mis familiares, quienes eran los papás de la mayoría de los niños asesinados ese 13 de mayo, han estado en la prisión casi 31 años, acusados de un asesinato que no cometieron. Ni un solo testigo los identificó. Mientras tanto, los que asesinaron a sus niños siguen en la nómina. El mundo los considera gente respetable; nunca pasaron ni un día en la cárcel”.

Los orígenes del enfrentamiento
El bombardeo policial de 1985 fue la culminación de muchos años de represión política ejercida por las autoridades de Filadelfia. Mucho se ha escrito sobre los sucesos del 13 de mayo de 1985, pero menos se sabe de los “9 de MOVE”: Janine, Debbie, Janet, Merle, Delbert, Mike, Phil, Eddie, y Chuck Africa. Estos nueve integrantes de la organización MOVE fueron sentenciados colectivamente por el asesinato del oficial James Ramp en 1978 después de un sitio policial alrededor del hogar de MOVE en la colonia de Powelton Village en Filadelfia. Tendrán sus audiencias para considerar su derecho a libertad condicional este año. Según Ramona África, “El gobierno llegó a Powelton Village en 1978 no para detenernos sino para matar. Al fracasar en esto, condenaron injustamente a mi familia por un asesinato que el gobierno sabe que no cometieron y los encarcelaron con sentencias de 30-100 años. Después, cuando nuestra familia se atrevió a denunciarlos, llegaron a nuestra casa de nuevo y nos bombardearon. Quemaron a nuestros bebés vivos”.

Primero, un poco de historia:
Fundada a principios de los 70 por John Africa, la organización MOVE buscó descubrir y desafiar todo tipo de injusticias y abusos contra la vida en todas sus formas, incluso contra los animales y la naturaleza. MOVE promovió el activismo comunitario y organizó protestas no-violentas frente al zoológico y laboratorios donde se realizaban pruebas en animales, foros públicos y medios corporativos, entre otros.

Los conflictos iniciales entre MOVE y la policía se dieron cuando los agentes del alcalde Frank Rizzo reaccionaron con su brutalidad de siempre ante estas protestas no violentas. Desde el principio, MOVE practicó el principio de la auto-defensa y sus integrantes “respondieron a golpes con golpes”. Al defender esta práctica, Ramona Africa dice: “Estoy segura que los policías se enojaron porque “estos niggers” los resistían, diciéndoles que no podían llegar a golpear a nuestros hombres, mujeres y bebés sin que nos defendiéramos. ¿Qué se suponía que debemos hacer? ¿Quedarnos con los brazos cruzados y aceptar los abusos?”

Dado el régimen de mano dura de Rizzo, un enfrentamiento con MOVE fue inevitable. Notorio por su brutalidad racista cuando era Comisario de la Policía de 1968 a 1971, Rizzo una vez alardeó en público que él iba a “hacer que Átila el Huno se viera como un maricón”. Fue elegido alcalde en 1972 con consignas como “Vota blanco”. En 1979, su departamento de policía sería el primero acusado por el gobierno federal de brutalidad y corrupción.
Los ataques policiales contra MOVE aumentaron después del 9 de mayo de 1974, cuando dos mujeres embarazadas de la organización, Janet y Leesing, abortaron después de ser golpeadas por la policía y encarceladas una noche sin comida o agua. El 29 de abril de 1975, Alberta África perdió su bebé después de ser detenida, arrastrada desde los separos, sujetada y golpeada en el abdomen y la vagina.

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MOVE en una de sus manifestaciones públicas.

La noche del 18 de marzo de 1976, siete prisioneros de MOVE acababan de salir libres y saludaban a sus familiares frente su casa en Powelton Village cuando los policías llegaron y atacaron a todos. Seis hombres de MOVE fueron detenidos y golpeados tan duro que sufrieron fracturas craneales, contusiones y huesos astillados. Janine Africa fue arrojada al suelo y pisoteada mientras cargaba su bebé de 3 semanas, Life África. El cráneo del bebé fue aplastado y Life murió.

Después de que MOVE les avisó a los medios del ataque y de la muerte del bebé, la policía declaró públicamente que el bebé no existía porque no hubo acta de nacimiento, y que MOVE mentía. Como respuesta, MOVE invitó a varios periodistas y políticos a su casa a ver el cadáver. Un poco después del ataque, el aclamado periodista de Filadelfia Mumia Abu-Jamal (ahora encarcelado en el corredor de la muerte en el mismo estado de Pensilvania) se entrevistó con un testigo presencial que había observado todo desde una ventana desde el otro lado de la calle. “Vi caer el bebé”, dijo el viejo. “Le daban de garrotazos a la mamá. Sabía que el bebé iba a quedarse lastimado. Levanté el teléfono para llamar a la policía, luego me di cuenta que ellos eran la policía. ¿Me entiendes?” La fiscalía se negó a presentar cargos por el asesinato.

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El enfrentamiento comienza
Como respuesta a la intensificación de la violencia policial, MOVE convocó una manifestación dramática el 20 de mayo de 1977. Varios integrantes subieron a un templete grande frente a su casa, cargando lo que parecían ser rifles. Según MOVE, “Les dijimos a los tiras que no habría más muertos escondidos, que esta vez tendrían que estar preparados a asesinarnos abiertamente porque si nos atacaban a golpes, les daríamos de golpes a ellos, si nos ataban a garrotazos, les daríamos de garrotazos, y si nos agredieran con armas, también responderíamos con armas. No creemos en las armas de muerte. Creemos en la vida. Pero sabíamos que los tiras no nos atacarían tan fácilmente si tuvieran que aguantar el mismo tratamiento que ellos dan de rutina a gente indefensa, sin armas”.

Hablando por megáfono en la plataforma, MOVE exigió la salida de sus presas y presos políticos y un fin al hostigamiento violento ejecutado en su contra por el gobierno de la ciudad. Policías fuertemente armados rodearon la casa, pero un probable ataque policial se evitó cuando una multitud de gente de la comunidad rompió la línea de policías y se paró frente a la casa de MOVE para proteger a los residentes del fuego.

Unos días después, la jueza Lynn Abraham respondió, emitiendo órdenes de detención para 11 integrantes de MOVE, acusándolos de incitar disturbios y de tener en su posesión un instrumento de la delincuencia”. La policía estableció vigilancia alrededor de la casa de MOVE para detener integrantes que salían de la propiedad. El empate duró casi un año.

El alcalde Rizzo agravó el conflicto el 16 de marzo de 1978, cuando su policía selló un perímetro de cuatro cuadras alrededor de la central de MOVE, bloqueando la entrada de comida y cerrando la llave del agua. Rizzo se jactó de que el bloqueo era “tan estrecho que ni siquiera una mosca podría pasar”. Muchas personas de la comunidad fueron golpeadas y detenidas al intentar entregar comida y agua a las mujeres embarazadas, bebés lactantes y niños adentro.

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MOVE ejerciendo el derecho a la Autodefensa

Después del bloqueo de hambre de dos meses, MOVE y el gobierno de la ciudad llegaron a un acuerdo bajo presión del gobierno federal. El 8 de mayo de 1978, los presos y presas de MOVE lograron salir de la cárcel; por otro lado, la policía pudo registrar la casa de MOVE para buscar armas. Los agentes se asombraron al encontrar sólo un puñado de fusiles inoperables de maqueta y unos cohetones que se veían como dinamita. Según el acuerdo, la fiscalía tendría que retirar todos los cargos contra MOVE y efectivamente purgar MOVE del sistema judicial dentro de 4-6 semanas. MOVE, por su parte, tendría que salir de su casa dentro de 90 días mientras el gobierno de la ciudad le ayudaba a conseguir un nuevo lugar.

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Golpiza recibida por Delbert Africa el 8 de agosto de 1972, es considerada una de las peores jamás grabadas en video.

Después de registrar la casa de MOVE y encontrar las armas de maqueta, la policía empezó a modificar los términos del acuerdo, enfocado en el plazo de 90 días. Dice MOVE que el periodo fue descrito a sus integrantes como un “un plan de trabajo factible para cambiar de sitio” pero que esto “fue falsamente presentado a los medios como un plazo absoluto. MOVE había dejado clara su intención a cambiar de casa y, a la vez, pretendía mantener la central abierta como una escuela”.

En la audiencia del 2 de agosto de 1978, el juez Fred DiBona falló que MOVE había violado la fecha tope. Firmó órdenes de detención para justificar el sitio policial que empezaría la semana siguiente.

La mañana del 8 de agosto, cientos de granaderos entraron. Los bulldozers tumbaron la barda y el templete mientras las grúas rompieron las ventanas de la casa. Unos 45 policías armados registraron la casa y encontraron que los de MOVE estaban apertrechados en el sótano. Con mangueras de alta presión, la policía empezó a inundar el lugar.

De repente, se escuchó disparos, probablemente desde una casa del otro lado de la calle. La policía abrió fuego contra la casa de MOVE, disparando más de 2,000 cartuchos. La policía y la mayoría de los medios principales reportaron después que MOVE había disparado primero. Sin embargo, los reporteros John McCullough y Larry Rosen de KYW Radio recuerdan que escucharon el primer disparo venir de una casa de enfrente, en diagonal, donde vieron un brazo que sostenía un arma recargada en una ventana del 3° piso.

Luego el fuego estuvo muy caótico, casi todo dirigido al sótano inundado. El oficial James Ramp fue herido de muerte en el tiroteo. Otros tres policías y varios bomberos también recibieron disparos. Después, un oficial encargado de vigilar la casa reconoció que había vaciado la recámara de su carabina, disparando al sótano donde escuchaba a las mujeres gritando y los niños llorando. En una reunión del personal unos días después, un capitán de la policía comentó sobre “la excesiva cantidad de disparos innecesarios de parte de los policías cuando no hubo blancos de por sí”.

Cuando MOVE eventualmente se entregó y salió de la casa, los oficiales se llevaron a los niños y golpearon a los adultos con saña. Chuck y Mike África habían recibido disparos en el sótano. La detención violenta de Delbert África fue grabada en vivo por un canal de televisión. Mientras yacía en el suelo, los agentes le pegaron en la cabeza con la cacha de un rifle y un casco de metal y lo patearon salvajemente. Doce adultos de MOVE quedaron detenidos.

En una conferencia de prensa en la tarde, alguien le preguntó a Rizzo si ésta sería la última vez que Filadelfia vería a MOVE. Él respondió: “La única manera de terminar con ellos es de reimponer la pena de muerte. Ponlos en la silla eléctrica y yo jalaré la palanca”.

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Bomba lanzada a la casa de MOVE, el 13 de Mayo de 1985

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La destrucción de evidencia
El caso posterior contra “los 9 de MOVE” estuvo plagado de irregularidades con respecto a los hechos y de la manipulación ilegal de evidencia por la policía.

El profesor de la Universidad Temple y periodista de Filadelfia Linn Washington cubrió el enfrentamiento del 8 de agosto y el juicio de los 9 de MOVE. Entrevistado en el documental titulado MOVE narrado por Howard Zinn, Washington declaró que “el Departamento de Policía sabe quién asesinó al oficial Ramp. Fue otro policía quien lo disparó sin querer. Hay bastante evidencia de que fue un error, pero nunca lo van a reconocer. Yo me enteré de esto al consultar varias fuentes del Departamento de Policía, tanto fuentes del equipo SWAT (Armas y Tácticas Especiales) como fuentes de la sección de Balística”.

La manipulación de evidencia se inició inmediatamente después de la detención de los adultos de MOVE: el alcalde Rizzo dio la orden para que la policía demoliera la casa de MOVE antes de mediodía del mismo día. Los policías no hicieron nada para preservar la escena del crimen, realizar trazos con gis, o medir los ángulos balísticos. En una audiencia preliminar para desestimar los cargos, MOVE postuló, sin éxito, que la destrucción de su casa les había impedido demostrar la imposibilidad física de que MOVE le disparara a Ramp. MOVE citó el caso de los Panteras Negras del estado de Illinois, en el cual la preservación de la escena del crimen permitió a los investigadores establecer que todos los hoyos de bala en las paredes y puertas se hicieron por fuego policial.

La evidencia fotográfica presentada en la corte también fue incompleta. Es cierto que antes de demoler la casa de MOVE, la policía sacó fotos de estantes vacíos y dijeron que se usaban para guardar armas. Sin embargo, no hay fotos de MOVE apuntando o disparando armas desde las ventanas del sótano o de la policía sacando armas de la casa, tampoco hay fotos que apoyen la suposición de que los policías sacaron armas del lodo en el piso del sótano. Al contrario, un video policial visto en la corte muestra al anterior Comisario de Policía Joseph O’Neill metiendo armas por la ventana frontal del sótano de la casa de MOVE.

Otra fuerte indicación de la destrucción intencional de evidencia, es que, en los tres videos policiales presentados en la corte, el metraje estuvo borrado precisamente en el momento cuando Ramp recibió el disparo.

La evidencia balística presentada sobre la muerte del oficial Ramp también es contradictoria. En el documental MOVE, Linn Washington recuerda la manera en que se manejó la evidencia en el juicio. “Tuvieron un gran problema con la autenticidad y, por eso, con la validez del informe del examinador médico. El fiscal sacó un lápiz y borró las palabras del informe que no le gustaron. Cuando MOVE objetaba, el juez decía “siéntense y cállense” y permitió que el tipo hiciera eso”.

El 8 de agosto, el Philadelphia Bulletin reportó que a Ramp le habían “disparado en la parte posterior de su cabeza, según la bitácora de la policía.” El Daily News, por lo contrario, reportó el día siguiente que la punta de la bala había entrado por la garganta, haciendo una trayectoria para abajo hacia el corazón. Más tarde, el examinador médico para la fiscalía, el doctor Marvin Aronson dio testimonio en la corte que la bala entró por su “pecho y viajó en dirección horizontal sin desviación para arriba o para abajo”.
En un boletín reciente, MOVE postula que si ellos hubieran disparado desde el sótano, la trayectoria de la bala habría sido para arriba en lugar de para abajo u horizontal, según las versiones presentadas.

Aparte, habría sido casi imposible hacer un disparo limpio en ese momento. El agua en el sótano, estimada en 2.13 metros de profundidad, obligó a los adultos a cargar a los niños y los animales para evitar que se ahogaran. “La presión del agua estuvo tan poderosa que levantaba los tirantes de ferrocarril de 2 metros (estas vigas formaron parte de nuestra valla) y los echaron a través de las ventanas del sótano sobre nosotros. No hay manera de que alguien pudiera haber aguantado la presión del agua y de los escombros para luego disparar o apuntar para matar a alguien”.

El 4 de mayo de 1980, Janine, Debbie, Janet, Merle, Delbert, Mike, Phil, Eddie, y Chuck Africa fueron condenados por asesinato en tercer grado, conspiración y varios cargos de tentativa de asesinato y asalto agravado. Cada persona recibió una sentencia de 30-100 años. Otras dos personas que renunciaron a MOVE fueron absueltas. Consuela África fue enjuiciada en un proceso aparte porque el fiscal no encontró evidencia de que ella era integrante de MOVE.

Mumia Abu-Jamal escribe que los 9 de MOVE “fueron condenados por ser unidos, no en la delincuencia, sino en rebelión contra el sistema y en resistencia contra los ataques armados del estado. Fueron condenados por ser integrantes de MOVE”.

Cuando Juez Malmed salió como invitado unos días después en un talk show, Abu-Jamal llamó para preguntarle quién había matado a Ramp. El juez dijo: “No tengo la menor idea”. Explicó que los integrantes de MOVE se consideraban como una familia y por eso él los encontró culpables como una familia.

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Las audiencias del 2009
Mike Africa, hijo, quiere que sus papás regresen a casa. Hijo de los presos Mike y Debbie, de los 9 de MOVE, el joven Mike nació en prisión unas semanas después de que su mamá sobrevivió el fuego policial y a una golpiza salvaje que recibió el 8 de agosto de 1978. Hoy día, Mike explica que crecer sin padres es “muy duro. Es como perder parte de ti mismo. El sistema separó a la gente de MOVE porque saben que es muy difícil vivir aparte de tu familia”.

Después del bombardeo del 13 de mayo de 1985, la abuela de Mike tomó la decisión de salir de MOVE y se llevó a él y a su hermana con ella. “El no estar en MOVE y no tener papás estuvo muy duro. No entendí por qué mis papás estaban en prisión y me dio vergüenza. Nadie me lo explicó hasta que Ramona me trajo de nuevo a MOVE después de que salió de la cárcel en 1992”. Después de regresar a MOVE, Mike ha viajado por muchas partes del mundo para difundir la lucha por liberar a sus papás y los demás presas y presos de los 9 de MOVE.

Una de estas presas, Merle África, murió trágicamente tras rejas en 1998 bajo circunstancias vistas como sospechosas por MOVE. El agosto de 2008 marcó el año 30 del encarcelamiento de los 9 de MOVE, y por primera vez tenían derecho a libertad condicional. Sus simpatizantes organizaron apoyo público para su salida, incluso una serie de videos en línea, una petición en línea y una campaña para comunicarse con el Consejo de Libertad Condicional a través de cartas y llamadas telefónicas. A pesar de la presión pública, el Consejo les negó su derecho a salir aún cuando las mujeres ni siquiera fueron acusadas de portar armas. MOVE ha empezado a organizar y reunir apoyo público para lograr su libertad.

Ahora, en el 2009, el Consejo de Libertad ha convocado audiencias de nuevo, y MOVE ha iniciado otra campaña para enviar llamadas y cartas en apoyo a la libertad de los presos. Convoca una manifestación en Filadelfia el 16 de mayo para marcar el aniversario 24 de la matanza del 13 de mayo de 1985.

A Ramona África le preocupan mucho dos posibles cláusulas que se podrían implementar para negarles la libertad condicional.

La primera se conoce como la cláusula “tomar responsabilidad”, la cual exige, en efecto, que un preso reconozca su culpabilidad para que le otorguen la libertad condicional. “Ésta no es aceptable; es patentemente ilegal. Si una persona está condenada en un juicio, es ridículo exigir que asuma la culpabilidad aun cuando proclama su inocencia, como es el caso con los 9 de MOVE. La única cuestión relevante con respecto al otorgamiento de libertad condicional debe de ser la mala conducta en la prisión, algo que podría indicar que una persona no está lista para recibir la libertad condicional. Aparte de eso, deben de permitir que salga”, explica Ramona.

La segunda es la cláusula que se refiere a “la naturaleza grave de la ofensa”. “Ésta también es patentemente ilegal porque el juez tomó todo eso en consideración cuando emitió la sentencia. Si no hubiera mala conducta, problemas, nuevos cargos, etc., deben de permitir que el preso o la presa salga después de servir el término mínimo. La negación de este derecho es, en su fondo, una nueva sentencia. Tenemos que resolver estas cuestiones porque cuando nuestros familiares pidan la libertad condicional, no queremos escuchar más de estas tonterías”.

Ramona también insta a la gente a apoyar a Mumia Abu-Jamal, a quien la Suprema Corte de Estados Unidos le acaba de negar un nuevo juicio para determinar inocencia o culpabilidad. Llama al presidente Barack Obama y al procurador Eric Holder a abrir una investigación sobre las violaciones de derechos civiles en el caso. Dice Ramona: “La vida de este hermano está en la línea…. Él se volvió un blanco del gobierno porque fue el único periodista que siempre decía la verdad sobre lo que pasaba con MOVE. Mumia nos dio su apoyo total durante muchos años y por eso le damos nuestro apoyo y lealtad ahora”.

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Hoy día Mumia Abu-Jamal escribe: “La callada respuesta del público al homicidio masivo de los integrantes de MOVE ha preparado el terreno para la violencia estatal aceptable contra los radicales, los negros, y todos considerados inaceptables socialmente…. Las mentalidades torcidas en juego aquí están parecidas a las de Alemania de los Nazis, o tal vez más al grano, a las de My Lai en Vietnam o de Bagdad. Son el espíritu tras la idiótica mantra asesina que hizo eco desde Da Nang: “Tuvimos que destruir la aldea para salvarla”.

Durante todos estos años, las autoridades nunca han dejado en paz a MOVE. La destrucción de sus casas en 1978 y 1985, la detención y condena de muerte impuesta al periodista Mumia Abu-Jamal, quien había cubierto los conflictos de MOVE; la muerte en 1998 de Merle Africa en prisión; y la batalla de custodia de 2002 sobre Zachary Gilbride Africa son unos pocos ejemplos de la larga historia de MOVE en sus enfrentamientos con el sistema. Esta tradición se resume mejor por el fundador de MOVE John África en su discurso al jurado en 1981 cuando fue absuelto de cargos federales de acopio de armas en el famoso juicio “John África vs. el Sistema”:
“Ya es tiempo para que toda la gente pobre se libere del ahogo engañoso de la sociedad…Este sistema les falló ayer, les falla hoy y ha creado las condiciones para fallarles mañana porque la sociedad está mal, el sistema está tambaleando, las cortes están en pleno desequilibrio. Los tiras están locos, los jueces esclavizadores, los abogados son tan justos como los jueces que enfrentan…entrenados por el sistema para ser como el sistema, para servir el sistema, para explotar de la mano con el sistema. Y MOVE no va a cerrar los ojos ante este monstruo”.

Escrito por Hans Bennett, un periodista independiente y multimediático
(www.insubordination.blogspot.com ) y co-fundador de Journalists For Mumia Periodistas por Mumia (www.Abu-Jamal-News.com ). Actualizado en 2009.

Para más información, vean: http://www.onamove.com o www.move9parole.blogspot.com

Vean la serie Libertad 9deMOVE, 2008, en http://www.youtube.com/watch?v=rfpnGgLf2dE

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¡ LIBERTAD Y JUSTICIA PARA LA FAMILIA MOVE QUE AÚN SIGUEN RESISTIENDO EN PRISIÓN !

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