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Notícies :: corrupció i poder
Cambio en Ecuador,, entre la extrema derecha y derecha
11 mar 2017
Un cambio es necesario.
Cambio en Ecuador, entre la derecha y la extrema derecha.

Hace rato largo que Ecuador, no tiene izquierdas políticas con capacidad masiva de convocatoria ni liderazgos para ocupar el poder del Estado.

La expresión izquierda no puede existir sin la relación con el pueblo, sus manifestaciones y con todo cuanto es producto suyo como sujetos de la razón, ética y moralidad.

La supuesta izquierda de Rafael Correa, no es una izquierda tradicional ni moderna solo aprovecho el socialismo del siglo XXI nacido en Venezuela y acepto la petición de Hugo Chávez para que participe por la presidencia. Este oportunismo hizo que los ciudadanos estén subordinados a intereses electorales de nuevos grupos de derecha que dicen, igual que antes, “que gobiernan para el pueblo no con el pueblo”.

Prácticas administrativas populistas corrosivas que han restado institucionalidad, aumentado el burocratismo, la corrupción, la petulancia y el conformismo en la sociedad ecuatoriana que no entiende peor reclama participación política en el gobierno. El pueblo ecuatoriano se acostumbró a participar en las urnas y con eso le basto para creer que participa sin diferenciar con lo que significa representación política.

Guillermo Lasso y Lenin Moreno, continúan con la basura teórica populista alejada de la realidad económica del país cuya deuda publica cercana a los 40.000 millones o más y con un PIB proyectado para el 2017 en 100.000 millones de dólares, es toda una trampa si consideramos el desajuste fiscal, el desempleo y la poca competitividad que se alimentan entre si cada vez que se trata de paliar una de ellas con soluciones tipo maquillaje. ¿Cómo puede haber compra en el mercado interno con un sueldo básico de 370 dólares? La gente sale a Colombia y Perú a realizar compras porque no somos competitivos.

10 Años de un supuesto gobierno de izquierda que se llena la boca hablando de equidad con sueldos en los diferentes poderes que oscilan entre los 2.000 hasta los 6.000 dólares mientras el pueblo se las arregla con un salario básico de 370 a los 500 dólares y esto hasta el 2014. Después la caída del precio del petróleo especialmente hizo que la economía entre en crisis; de más de 8 millones de gentes en condiciones de trabajar algo más de 4 millones están subempleados y desempleados.
En mayor o menor grado es la historia del país.

Es fácil hablar de soberanía, libertad, democracia, revolución amparados en la propaganda y publicidad oficial sin reducir el abismo entre riqueza y pobreza sustentada en el tiempo y a base de crecimiento gracias a un empleo, educación, conocimiento e innovación.

Por décadas estos gobiernos populistas de derecha y extrema derecha han traído desorden, dolor, dependencia, corrupción, éxodo; han impedido una patria mejor con ciudadanos participativos y libres, capacitados intelectualmente y con conocimiento cultural para construir un Estado más justo y solidario.

Ecuador no ha tenido lideres solo ha contado con presidentes mentalmente de talla media hacia abajo que han sostenido el subdesarrollo y la pobreza material y mental ¿Acaso, antes como ahora nos hemos arrepentido de los presidentes que hemos elegido por sentir frustración por su mediocridad?

Y, no solo es culpa de los gobiernos es culpa de nosotros como pueblo porque el fracaso también es cultural, todavía soplan fuertes vientos colonialistas del que no podemos desprendernos como el racismo, individualismo e indolencia hacia lo colectivo.

Es hora de modificar desde nuestras raíces la modernidad. Es hora que nuestra política sea una gestión creativa y liberadora pero no solo hablando palabras tradicionalmente asociadas a las izquierdas que hoy la mencionan oportunistas militares, empresarios, sacerdotes que son de derecha y extrema derecha. Son los gobiernos que ha tenido Ecuador, en toda su historia Republicana.

Continuamos con el extrativismo porque ninguno de estos gobiernos impulsó el agro y el turismo como una industria. Continúan siendo pequeños negocios en manos de intermediarios que sostienen la especulación, la escasa creatividad y la casi ninguna innovacion.

¿Quién gana Lasso o Moreno el 2 de abril?
La segunda vuelta electoral que definirá el presidente de los ecuatorianos esta en tablas.

Los oficialistas de Moreno temen a la candidatura de Lasso, porque una gran mayoría del pueblo busca el cambio.

Lasso, en la oposición está preocupado porque el pueblo opina que, “es preferible malo conocido que bueno por conocer”. La cosa esta difícil y muy peleada…

Es triste decirlo pero el conformismo y la ignorancia jugaran un papel decisivo si Moreno gana las elecciones.

Ninguna de estas candidaturas se considera ganador. Representan una concepción populista de extrema derecha y derecha, negativa y esquelética de poder como la de los últimos diez años que nos llenó de obras públicas necesarias, mientras y simultáneamente nos saturo de impuestos, deuda pública, desempleo, preocupación, iliquidez, miedo, porque el poder se lo trasmitió desde lo jurídico represivo que privilegia la fuerza del temor en la población.

Raúl Crespo.

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