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Comentari :: amèrica llatina
La gran boda gitana de Los Chaparicos
22 jul 2016
La limusina en el Barrio Pradera y la gran boda gitana de los Chaparicos en el Hotel Tequendama es una exhibición pública de una subcultura pandillera con estética loba y actuar de nuevo rico, inculto, deshonesto y violento fruto de la narco cultura y corrupción que corroe a nuestra sociedad desde hace varios años.
Hace más de cuarenta años llegó al Barrio Pradera de Bogotá una tribu que viene haciendo de las suyas en nuestro barrio.

Los Chaparicos son un cartelillo de delincuentes de baja calaña que manejan la olla del bazuco en el barrio, compran y venden carros robados, atemorizan y extorsionan a la gente del barrio, chequean las casas cuando quedan solas y se meten por los tejados y las desocupan.

Los Chaparicos realizan fiestas costosas, el matrimonio de la hija de Sandro Cristo González alias Chaneco fue con limusina alquilada, vestidos con mucho brillo, un collar grueso con una morrocota, redonda y grande de oro y el matrimonio y la fiesta se celebraron en un salón del Hotel Tequendama.

Al matrimonio y fiesta fue mucha gente, hubo orquesta, mariachis, menú caro, bebidas finas, ponqué, descorche, decoración etc… La fiesta de matrimonio de la hija de Chaneco costó alrededor de unos $100.000.000 millones de pesos. Los festejos de este matrimonio duraron casi un mes y también fueron botando la casa por la ventana.

Estas tribus hacen fiestas costosas en el Club de la Policía y gastan en cada fiesta cerca de $40.000.000 millones de pesos, las celebraciones de quince años también son con limusina.

Los Chaparicos hacen fiestas lujosas cada rato, en estas fiestas estas tribus estrenan vestidos, zapatos, joyas nadie repite ropa y no es cualquier ropa son prendas caras de almacenes caros.

Chaneco presta plata con intereses altísimos es usurero y si no le pagan, Chaneco no descansa hasta dejar a la gente en la calle, los Chaparicos le quitan a la gente casas, apartamentos y carros, esta tribu ha dejado a gente de su propia tribu y familia en la ruina y sin trabajo.

Los Chaparicos tienen la costumbre de pedir plata prestada y no pagar, tomar en arriendo y no pagar.

Una vecina del barrio demandó al Gringo el hermano de Chaneco para que le pagara una plata que le prestó.

Los Chaparicos maltratan a las mujeres, cuando el Gringo pelea con la mujer se entera todo el barrio.Esta tribu tolera y acepta la violencia contra la mujer y son mal ejemplo y mala influencia para los niños y los jóvenes del barrio.

En Pradera nos tienen aburridos con esa charlatanería de la brujería y la leída de la mano en menos de diez minutos la gente cae y les entrega el dinero que llevan y al momentico se dan cuenta que los acaban de robar.

Los Chaparicos cuentan entre risas que mandan hacer trabajos de brujería a los amigos para controlarlos y a los enemigos para destruirlos.

Los Chaparicos son obsesivos con la venganza cuando tienen peleas entre ellos hasta que no van y rompen la casa de la persona con la que tienen el problema no quedan contentos, y cuando no pueden solucionar las cosas se ponen cita en el Parque y se agarran a trompadas, también dicen que ellos si no pueden con alguien lo mandan a matar.Esta tribu incita a la violencia y a la venganza y son mal ejemplo y mala influencia para los niños y los jóvenes del barrio.

No nos gusta que nuestros hijos y nietos se metan con estos Chaparicos que andan en malos pasos, a los Chaparicos no les gusta estudiar, ni trabajar, andan metidos en vicios: drogas, alcohol y juegos de azar.

Los Chaparicos son marginales y anómicos su única ley es: engañar, robar y destruir. Hace unos años apareció muerto un primo de Chaneco cuyo oficio era extorsionar a la gente del barrio, ese delincuente era el azote de Pradera.

No sabemos como hizo Chaneco para ser representante de una organización que “administra” recursos públicos, que Chaneco “administre” recursos públicos es como entregarle a Luis Alfredo Garavito la “administración” de un jardín infantil.

Los Chaparicos como cartel que se respete tiene contactos,alianzas y relaciones con funcionarios importantes, lo increíble es que gente estudiada,de buenas familias, de alcurnia y funcionarios del alto gobierno se mezcle, se rebaje y se ponga al nivel de una banda de bazuqueros, jaladores de carros y apartamenteros.

Chaneco cuenta que tiene la protección de un doctor muy importante del Ministerio del Interior, Chaneco se ríe y se burla porque ese doctor importante es quien le cuadra a la autoridad: la Policía, la Fiscalía y la Justicia y por eso Chaneco hace lo que se le da la gana y nunca le pasa nada.

La limusina en el Barrio Pradera y la gran boda gitana de los Chaparicos en el Hotel Tequendama es una exhibición pública de una subcultura pandillera con estética loba y actuar de nuevo rico, inculto, deshonesto y violento fruto de la narco cultura y corrupción que corroe a nuestra sociedad desde hace varios años.

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Sindicat Terrassa