Es como si se estuvieran preparando para el próximo modelo de acumulación de capital, [robotizador+deflacionario del salario+imperialista demográfico (1),] una alianza de fracciones de clases entre técnicos cualificados en biotecnologías, capital financiero con capitales sobrantes que colocar en innovación social e I+D+i, con sectores especialistas de control político-social del proletariado, como universitarios profesionales y funcionarios del estado a la busca de la reducción del número (o el costo de producción) de proletarios, preparados para acompañar la reducción estructural de la reproducción biológica con transgenerismos y mucha jeta, al estilo eugenista y malthusiano.

Los derechos LGTB, manipulados, vienen a formar una parte del imperialismo demográfico. Uno de los negocios emergentes sería (es) guardar óvulos para luego implantarlos en úteros mercantilizados de mujeres proletarias de la periferia (África, Asia, América), comprando a la vez espermatozoides en el mercado danés, que ofrece ojos azules y pelo rubio (aunque en Japón, EEUU o China la demanda quiza será más variada). Parece el sueño húmedo de Hitler si le añadimos que además deberíamos apoyarlo solidariamente los comunistas y anarquistas haciendo propaganda de ello con la coartada de la liberación LGTB, quienes, insisto, también están siendo manipulados para abrir estas ventanucos de la nueva matrix capitalista de la explotación y el machaque cosificador, ahora en el campo de la subsunción real de la reproducción biológica del proletariado y su potencia de producción de pluvalia. Y como colofón habría que importar esclavos refugiados, en plan asistencialismo humanitario, para en realidad hacerlos trabajar por un euro al día o a la semana, con lo cual en la fae Imperialista Demografica los obreros y las obreras de los paises capitalistas centrales, pioneros en sufrir estas destrucciones, de cualquier color de los miles de clores que ya somos, seguiremos teniendo mucho paro y mucho trabajo, más todavía, con el salario de mierda cada vez más de mierda, cuando lo haya, y ya puesto en deflación estructural, cn rollos como el Brexit o lo que se inventen. Es genial, aunque quizá no salga bien.

En este panorama de represión de la reproducción biológica no solvente en el centro imperialista y auge del mercado de la reproducción biológica sin embarazo, subrogada, es decir endosado a otras, la maternidad y paternidad proletarias no solventes es lógico que sean reprimidas, mientras a la vez la reproducción de la propiedad capitalista, incluso LGTB o lo que sea, es apoyada con el desarrollo de un mercado de la reproducción.

Pero no, no hay cinco sexo-géneros, hay tres, el hombre y la mujer, monógamos o polígamos, y la suma de ambos, es decir, la pareja, o lo hermafrodita, el tercer sexo, siendo el resto subgéneros, posiciones de subdesarrollo hacia lo hermafrodita, que, por ser eso, superpotencia, tiene el principio de la reproducción biológica, ahora en proceso de mercantilización. Por eso, el blanco del negocio es el control mercantil de lo hermafrodita, de la pareja, para su puesta en explotación reetructurándola a la altura de las necesidades actuales del capital. Nos meten entonces en el posfeminismo y el tranhumanismo como si fuera el sunsumcorda de nuestra liberación.

La cosa tiene nata. Por eso resulta necesario prestigiar las posiciones no hermafroditas, el patriarcado - para no decir paternidad -, y pronto la maternidad antes cosa de conejas pero pronto algo reservado para especialistas cualificadas en alguna universidad, con carné y permiso estatal. Eso si, el discurso transhumanista que se encuentra en la Ideología de Género posfeminista, tiene algo de verdad, cualquiera de esas posiciones de subdesarrollo de la superpotencia hermafrodita, o pareja humana, puede ser más cercana a la superpotencia que los dos sexo-géneros simples por si solos. En todo caso, ya estamos en la subsunción real de la reproducción biológica por el capital. Eso es lo que, sin saberlo, anuncia el articulo, en mi opinión.

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