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Notícies :: guerra |
La Recuperación Nihilista
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10 abr 2013
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Al críticar al nihilismo[1], no queremos despreciar esta corriente filosófica y revolucionaria ni a la gente que se identifica con ella. Más bien, queremos señalar un rol que desempeña a menudo. Esto no es una característica intrínseca del nihilismo, pero es una característica histórica que se repite con frecuencia. Primero, queremos afirmar que estamos inspirados por los golpes potentes realizados por los compañeros nihilistas, desde Conspiración Células del Fuego y otros grupos contemporáneos, hasta históricos grupos como Narodnaya Volna. Nos consideramos parte de la misma lucha y hacemos esta crítica desde la solidaridad.
De todos las corrientes radicales anticapitalistas, el nihilismo puede ser la única que fue denominada y hasta un cierto punto creada por el espectáculo en sí mismo.[2] El término “nihilismo” se origina en un libro por el escritor ruso Turgenev (un escritor interesante, pero al final un progresista y no un radical), quien usó ésto para describir a los nuevos revolucionarios anarquistas y socialistas que iban apareciendo entonces en Rusia. Ellos eran gente que creia en nada- “nihil”.
La adopción de este nombre como una identidad ideológica sería como si, dentro de 100 años, radicales de todo el mundo se llamasen a si mismos koukouloforistas o encapuchistas. En otras palabras, en sus orígenes, nihilismo es un término aplicado por la prensa para ridiculizar o generar temor en torno a una corriente política.
Una característica del nihilismo original fue su absoluto rechazo del cristianismo y de cualquier creencia o superstición no racional, y, como tal, una fuerte adhesión al racionalismo. En este caso, lejos de ser radical, su posición quedó caduca. En este momento, el cristianismo ya estaba siendo reemplazado como religión del estado por la ciencia misma, por el racionalismo fetichizado de los nihilistas.
Para decirlo de otra manera, su deseo de parecer muy radicales superó su capacidad de llegar, a través del pensamiento crítico, a un análisis verdaderamente radical que permitiese identificar las raíces del sistema que odiaban.
Hoy en día, uno se da cuenta del mismo patrón. Los nihilistas odian (y con plena justificación) a la izquierda y todo lo que se parezca—aunque sea un poco—a la izquierda o a sus prácticas.[3] Pero no se dan cuenta de que ya hace décadas, la izquierda está desapareciendo. En la actualidad, es el espectáculo el que tiene una importancia mucho mayor en el desempeño de la recuperación de la lucha. Irónicamente, pero fiel a sus orígenes, el nihilismo actual es la más espectacular de las luchas anticapitalistas.
Su mayor impacto es en el espacio virtual: en Internet y en los medios.
Después de una ola de ataques en Barcelona reivindicados en Internet por el grupo “Anarquistas Nihilistas”, muchos compañeros anarquistas se preguntaron si esta impresionante serie de acciones realmente ocurrió o si fue un montaje. No porque no creemos que hay compañeros nihilistas en Barcelona que son valientes y están preparados para atacar – sabemos que los hay – , sino porque muchos de los ataques reivindicados ocurrieron en nuestros propios barrios y no tuvimos notícias más que por un artículo en Indymedia. Uno debe asumir que en una ciudad alienada, es normal que uno no se entere de los acontecimientos que suceden de una calle a otra, por lo que podría ser una coincidencia que la mayor repercusión de estas acciones sucediese en el Internet. Pero sabemos que los ataques que se han cometido dentro de las luchas sociales tuvieron una mayor repercusión: se habló de ellos en las calles y sirvieron como referente – negativo o positivo, no nos importa – para otras personas fuera de nuestros círculos.
Posteriormente, el mismo grupo comenzó a publicar videos con sus comunicados, lo que demuestra que las acciones fueron reales. Pero esto no aumentó su repercusión directa en las luchas, sólo demostró más claramente su espectacularidad.
Estamos de acuerdo con los nihilistas en que no hay que esperar hasta que haya movimientos sociales para atacar el sistema, pero no estamos de acuerdo en que tenemos que rechazar estos movimientos y las personas que las componen. Para nosotros, es importante conocer a estos otros y saber si son políticos de base o personas reales, y como tal, posibles cómplices.
Recordamos cuando teníamos 15 o 12 años, la felicidad, la sensación de emoción peligrosa, que hemos sentido al enterarnos de fuertes ataques contra el sistema. También por esta razón llevamos a cabo ataques en los momentos más visibles: para crear señales para otras personas, perdidas y inquietas como nosotros.
Está claro que los nihilistas no atacan simplemente por motivos personales, por puro placer o por necesidad de atacar – una motivación que apoyaríamos totalmente – porque comunican sus ataques a Indymedia con la intención de extenderlos. Por lo tanto, hay un elemento estratégico en sus acciones. Pero estratégicamente, no se puede justificar que una lucha verdaderamente radical adoptase y mantuviese las formas más espectaculares y siguiese permanenciendo, sobre todo, en el espacio virtual.
Cuando las personas que ya estaban llevando a cabo ataques incendiarios contra el sistema empezaron a utilizar las siglas de la Federación Anarquista Informal (FAI), intencionalmente eligieron una forma que les daría una fuerza virtual y aseguraron que la prensa tomaría nota de su existencia. Cuando las personas que iniciaron la Conspiración de Células del Fuego dejaron la práctica bien establecida dentro del espacio anarquista no-izquierdista (o insurreccional) en Grecia, y en lugar de tener una existencia temporal y de firmar cada comunicado con un nuevo nombre (o no escribir ningún comunicado), se constituyeron en un grupo permanente con una existencia simbólica y un protagonismo, asegurando su éxito en los medios de comunicación.
Sólo tenemos que mirar las luchas de los años '60 y '70 para confirmar que la prensa – y como tal el Estado – no desea enfrentarse a una lucha descentralizada y caótica sin un enemigo bien definido. Por esto financian a los académicos: para definir siempre a su enemigo. En todo caso, cuando apareció un grupo armado izquierdista que se consideraba la punta de lanza y quería dirigir toda una lucha heterogénea, la prensa reaccionó de inmediato, convirtiendo al grupo en un símbolo de la lucha, fijándolos con un protagonismo central y una presencia mediática fuerte. Dicho de otra manera, se produjo una fuerte confluencia entre las estrategias de la prensa y las de estos grupos. Grupos como la FAI o la CCF, al tiempo que actúan como los más radicales, están realmente volviendo a una forma de lucha que pertenece a la izquierda revolucionaria, y confiando en los medios de comunicación para que les den una fuerte repercusión. [4]
Algunos de ellos también comparten otra característica con la izquierda: como los marxistas, buscan el sujeto revolucionario que es el único capaz de rebelarse, y el único digno de respeto. Para Anarquistas Nihilistas de Barcelona, se trata de “los jóvenes criminales” a los que imponen sus ideas [5]. En el caso de un grupo muy heterogéneo, como “jóvenes criminales”, se imaginan una conspiración amplia y revolucionaria consciente, a pesar de que estos nihilistas sin duda conocen muy pocos jóvenes que coinciden con la descripción. Y a pesar de que afirman que “Queremos unirnos con todos los elementos de la lucha”, dejan muy claro que rechazan la forma de lucha, con suprema arrogancia, de todas las personas que no son nihilistas o afines a ellos.
Otro aspecto curioso de estos grupos: a menudo, sus comunicados, impregnados con el tono de los más revolucionarios, están dirigidos al enemigo. Están escritos a un “tú” que incluye el Estado, los ricos y los reformistas. El público preferido de muchos nihilistas, en la práctica, es aquél que debe ser destruido. Pero la negación no es posible donde hay diálogo de cualquier tipo. A pesar de ello, a veces los nihilistas celebran su transparencia o legibilidad al Estado. Por ejemplo, “esta afinidad y complicidad [...] se encuentra y se reconoce a través del deseo común de los ataques aquí y ahora, a través de señales de humo entendibles a veces sólo por nosotros mismos y nuestros enemigos”. [6]
Hay que decir que, a pesar de que esta manera tan coherente de vivir la guerra social es admirable e inspiradora, es una concepción de la guerra muy similar a la concepción que tiene el mismo Estado: un conflicto entre dos antagonistas que se resuelve a través de acciones armadas por la destrucción de la infraestructura, el personal y la capacidad de organización de uno de ellos. La diferencia fundamental con el Estado es que la motivación nihilista es el deseo de libertad y no el deseo de poder. La motivación nihilista se basa en la valentía y el ideal, y como tal, no tiene límites, mientras que la motivación autoritaria está limitada por las posibilidades calculadas de ganar. Los nihilistas irán a la guerra incluso cuando saben que no pueden ganar, y eso es admirable. La diferencia con las guerrillas maoístas es que el esquema nihilista no incluye la eventual incorporación de las masas a la organización político-militar de la guerrilla. Ese es otro punto a favor del nihilismo. Pero a pesar de estos dos elementos mínimamente libertarios, la concepción nihilista de la guerra social lleva a la militarización del conflicto (el desarrollo del conflicto de acuerdo con una lógica estatista) y como tal, el aumento del poder del Estado para “leer”, entender, rodear y reprimir al enemigo. Para aclarar la crítica, a diferencia del maoísmo o de cualquier otra corriente revolucionaria pero autoritaria, no creemos que el nihilismo es capaz ni está dispuesto a reproducir un Estado, pero lleva la lucha a un terreno estatal.
No se puede proponer la creación de un nuevo mundo sin la destrucción del actual. Y no podemos planificar la forma del nuevo mundo ya que de momento no podemos imaginar las condiciones futuras. Además, planeando la forma del mundo – o la planificación de la forma de cualquier colectividad mayor que nuestro círculo de conocidos – estamos haciendo un ejercicio autoritario. Pero el Estado no sólo existe en sus estructuras materiales, sino también en las relaciones sociales que se reproducen, y una relación no puede ser destruida sin la simultánea creación de una nueva relación. Se puede derrumbar un edificio sin construir otro, pero no se puede acabar con una relación de alienación sin crear otro tipo de relación. Siempre hay una relación entre los cuerpos y seres en el mismo espacio. Sin hablar de la creación de nuevas relaciones sociales, no podemos hablar honestamente sobre la destrucción del Estado. Para decirlo de otra manera, hemos llegado a una bifurcación entre la propuesta de atacar al Estado y la propuesta de destruir el Estado. La propuesta que habla más de destrucción, la propuesta nihilista, puede ser incapaz de realizar esto, ya que se dedica únicamente al ataque. Sería una visión muy triste de la “revuelta permanente”: atacar los símbolos del Estado sin ser capaz de tocar la base de su poder.
Debido a que es una práctica de ataque y no de destrucción (ya que la destrucción de cosas no físicas sino sociales también requeriría un aspecto creativo, aspecto que no proponen los nihilistas [7]), esto lleva fácilmente a bordo el concepto de violencia. El discurso sobre la violencia de muchos nihilistas (y no de todos) es un diálogo de contrarios con el discurso pacifista de los ciudadanos. Es un diálogo entre el ángel y el diablo, pero no obstante un diálogo. En lugar de rechazar la dicotomía del espectáculo respecto a la violencia, toman el polo opuesto del pacifismo dentro del mismo paradigma creado por él. El truco más viejo de la democracia es el control de los términos del debate para que las dos opciones que se muestran, la buena y la mala, reproduzcan la lógica del poder y del Estado. No es posible llegar a una visión radical dentro del paradigma estatista. A pesar de esto, el nihilismo, desde sus orígenes ha estado en el polo del diablo, la opción del mal definida y señalada por el espectáculo mismo. El conflicto trascendental del nihilismo es el siguiente: elegir la postura del malo que lleva a cabo todas las funciones que dan sentido a la oposición pacifista y ciudadana, o elegir el proyecto de la negación radical de los fundamentos del sistema y, como tal, la negación de la jerarquía patriarcal de las tácticas, la categorización y la fetichización de la violencia y las formas alienadas y espectacularizadas de comunicación.
La recuperación nihilista es una recuperación de los momentos simbólicos de las luchas heterogéneas dentro de un discurso de la violencia, que es la misma tarea que la prensa realiza en lo que respecta a estas luchas, a pesar de que la prensa lo hace para generar miedo y el nihilismo lo hace para generar una ilusión simplificada y virtualizada de su propia fuerza, dentro de una narrativa heroica de combate entre la Autoridad y el Rebelde.
Esta narrativa y la espectacularización anteriormente mencionada son también alimentadas por la selección de objetivos de ataque: a menudo son personajes o símbolos del protagonismo del Estado (como los políticos o las fachadas de los ministerios) en lugar de los engranajes del Estado. Este enfoque de la lucha es otra cosa que los grupos nihilistas como CCF o Narodnaya Volna de hace un siglo compartían con grupos de izquierda como Brigate Rosse y la RAF. Nos encanta la idea de que los bastardos que nos gobiernan sientan miedo o mejor aún, los besos amargos de la bala o el cuchillo, pero creemos que no es ni inteligente ni libertario dirigir una gran parte de nuestros ataques contra las máscaras del poder, y de una manera tan profesionalizada que es casi imposible para este tipo de ataques ser generalizado.
Teniendo en cuenta que muchos de ellos han optado por una jerarquía patriarcal de tácticas, por una visión de sí mismos como los protagonistas de un combate heroico contra el Estado, y que están condicionados por un rechazo total de la izquierda (con esto queremos decir, que no diferencian entre la izquierda como una fuerza institucional y los movimientos o personas que la izquierda pretende institucionalizar), es prácticamente inevitable que se enfrenten a otros anti-autoritarios que no son de la misma línea con una soberbia exagerada y que los confundan con los enemigos .
A los emisarios y mártires de la lucha armada, a pesar de que pueden representar líneas muy distintas y hasta contradictorias, como Lambros Foundas de Grecia o Marcelo Villarroel de Chile, los nihilistas los aglomeran y aceptan como compañeros, como los únicos que luchan, y hablan del resto como si fuéramos pacifistas y reformistas.
Sabemos que éste no es el caso. Sabemos de los muchos fuegos que hemos prendido, y de muchas otras cosas igualmente importantes que hemos hecho. Cuando ellos responden a nuestras críticas como si fuéramos vendidos, sabemos que sólo tienen miedo al debate. Es posible que algunos de ellos tienen toda su sangre en el corazón y ninguna en el cerebro. Pero estamos cansados de que ellos siempre estén rompiendo la solidaridad. Tienen que aprender a criticar a otras líneas de lucha sin adoptar la arrogancia y el elitismo que pertenece a una vanguardia.
Somos anarquistas que criticamos la parte de nuestra tradición que viene de la izquierda, pero también estamos agradecidos por todos los errores de esta tradición, ya que son oportunidades para aprender. Creemos en la negación total de todas las bases del sistema actual. Con esto queremos también entender la negación de su espectacularización, su alienación y aislamiento, la conquista y la aniquilación de la imaginación, la dicotomía entre la violencia y la no violencia, y su concepto de militarización que también ha influido en nuestras propias luchas.
Terminamos con un saludo solidario a las compañeras y compañeros de Anarquistas Nihilistas, Lobos Negros y todas las personas que realizan ataques en las calles de Barcelona. Esperamos que sigan vuestras acciones y críticas, pero también que se mejoren las vías de comunicación y solidaridad que nos unen.
Acerca de ciertas páginas anarquistas
Anteriormente publicamos un artículo anexo a éste (“Comunicado por acciones anarquistas en Barcelona y respuesta a los compañeros nihilistas” http://barcelona.indymedia.org/newswire/display/463376/index.php ). Advertimos que páginas como Liberación Total y War on Society se negaron a publicarlo. Era un comunicado sobre acciones directas acompañado por un texto crítico a ciertos conceptos de lucha en el ámbito anarquista. Ambas páginas publican casi exclusivamente textos de este tipo. Nos preguntamos, ¿en qué momento habéis debatido y decidido que acciones de cuidado, de transmisión de la memoria colectiva de nuestra lucha, de creación de relaciones comunales y de apoyo mutuo, no constituyen acciones importantes? ¿En qué texto o conversación habéis argumentado el porqué sólo importan los ataques? ¿Y en qué momento habéis analizado y concluido que ésto no constituye una jerarquía patriarcal de tácticas, o que el patriarcado no constituye un sistema de poder imprescindible en la evolución del Estado y del capitalismo? ¿A caso podéis articular una visión propia de la raíz del Estado y del capitalismo que no pase por el patriarcado? La verdad es que dudamos que existe tal proceso de debate, de pensamiento crítico o de análisis histórico. Y la pregunta que nadie puede responder: ¿si vuestra falta de pensamiento crítico provoca más fracasos estratégicos, quienes van a estar ahí, apoyando y recuperando el hilo de la lucha, como tantas otras veces ya olvidadas?
Pero lo que realmente nos da asco es que otras veces habéis publicado nuestros textos, no obstante esta vez parece que preferís que guardemos silencio. Luchamos en las calles codo a codo, no obstante cuando criticamos la visión de lucha que algunos tenéis, nos metéis en el mismo saco con reformistas, izquierdistas, ciudadanos y pacifistas. Y lo que más asco da es que si morimos en esta lucha, posibilidad tanto para nosotros que para vosotros, nos convertiréis en los nuevos símbolos de vuestra visión parcial de la lucha.
¡Por favor, un poco más de autocrítica, compañeros!
Notas al pie
[1] Por nihilismo, entendemos una corriente de lucha que no está bien definida, pero puede ser reconocida a través de una cierta afinidad en las siguientes cuestiones 1) Un rechazo al capitalismo, al Estado, a la izquierda, a la sociedad (entendida como el conjunto de fuerzas que organizan la vida diaria), y a cualquier forma de dominación o pacificación de los conflictos. 2) Una práctica que se centra exclusivamente en los ataques físicos y fuertes contra la paz social, los edificios o los agentes del sistema, y en segundo lugar, en la organización de la propaganda y la comunicación acerca de estos ataques con el propósito de fomentar su reproducción en otros lugares (uno encuentra una visión clara de la segunda prioridad en el comunicado de los presos de CCF en Grecia, "Carta de la CCF en solidaridad con los compañeros reprimidos en Italia", publicado el 5 de abril del 2012). 3) La creencia en la negación total del sistema, de tal manera que la formulación de propuestas o visiones respecto a la auto-organización o a la creación de un mundo o comunidad libertarios también son rechazadas. 4) Un pesimismo con respecto a la revolución que podría renunciar a la posibilidad de "ganar", e incluso el concepto de revolución, pero que en cualquier caso funda la motivación para luchar no en las posibilidades de realizar una revolución, sino más bien en la necesidad personal de atacar y no vivir como un esclavo.
[2] Los "indignados" también podrían estar cualificados, excepto que para llegar a ser radicales y anticapitalistas, los participantes de este primer movimiento tuvieron que superar su propia identidad de ser ciudadanos indignados.
[3] En sus comunicados de abril y mayo, 2012, Anarquistas Nihilistas critican contundamente a la izquierda. El comunicado de 1 noviembre, 2012 de “Coordinadora Nihilista II” de Barcelona reivindica el sabotaje de unos 130 cajeros automáticos durante los tres meses anteriores, junto con “Lobos Negros”. El texto no nombra la izquierda sino habla de una “actitud de activista” y de los sindicatos. Los autores guardan su mayor crítica para la CGT, sindicato anarco-reformista. La crítica se centra en un acontecimiento en la manifestación del día anterior, cuando la seguridad de la mani parte la cara de un joven que tiraba huevos. La crítica a la pacificación realizada por la CGT es precisa: esta tendencia suya de pacificar, demostrado de sobra, es un peligro que muchos anarquistas olvidan, tranquilizados por su bandera rojinegra. Coordinadora Nihilista señala la hipocrisía de la multitud en aceptar este hecho, cuando si hubiera sido la policia partiendo la cara del joven, todos hubiera gritado sobre la democracia. Es un buen argumento, pero su indignación con el uso de la violencia por parte de la CGT es problemática porque un sindicato puede pacificar una multitud con medios mucho menos visibles.
[4] Por ejemplo, se nota una cierta preocupación y decepción, en el tercer comunicado de la CCF-FAI de México, que el procurador, al igual que los medios de comunicación, "también se une al silencio y a la minimización ocultando nuestra lucha".
[5] o en otro párrafo, “los protagonistas son esos jóvenes salvajes, problemáticos, desarraigados, esos jóvenes de minorías étnicas y clases sociales bajas, que en un grito nihilista-revolucionario empezamos a abrir los ojos.” Podría ser que algunos – aunque no todos – de los autores de este comunicado pertenecen a la demografía mencionada, pero, por un lado, sólo una pequeña parte del resto de la juventud criminal está familiarizada con el nihilismo revolucionario o de acuerdo con ella, y por otro lado, la demografía es una tarea del Estado, del marxismo, o de los políticos de identidad. La cita se extrae del comunicado de “Anarquistas Nihilistas de Barcelona”, del 25 de abril del 2012. En su comunicado de 9 de mayo del 2012, dejan claro que hablan de “esos chavales” como personas ajenas por quien luchar y señalan que “Luchamos por todos ellos por que son los únicos que—aunque inconscientemente o no—se rebelan contra la sociedad capitalista, que sufren las agresiones fascistas y policiales.” Se puede constatar que no es cierto que “el chaval que tiene que mantener a su familia el solo, que pasa sus días en la calle buscando comida o en la chatarra” no es el único que se rebela contra la sociedad capitalista, pero es él que los Anarquistas Nihilistas han decidido destacar como el sujeto revolucionario y además una víctima por quien hay que luchar. Ya que ellos luchan en nombre del único rebelde verdadero, todos los demás no somos rebeldes de verdad si discrepamos con los compañeros nihilistas sobre como luchar.
A diferencia del comunicado del mayo (“La ciudad de las bombas volverá a arder”), lo de abril (“Nueva ola de ataques incendiarios y sabotajes...”) es realmente bonito. “para nosotros, nuestros compañeros son la chavalada que en lugar de ocupar sus escuelas y lanzar proclamas reformistas, deciden destruir las mismas reventando las (j)aulas y quemando los libros manipuladores,” ¡Por fin que se lo diga!
Pero siguen en su contradicción manipulativa, por un lado reclamando solidaridad amplia [“Queremos juntarnos con todos los elementos de lucha” y “Las acciones son dedicadas a todos los que en la huelga del 29 de marzo recibieron pelotazos, fueron detenidos, encarcelados, juzgados y golpeados.”] y por otro lado no reconocienda las luchas distíntas a las suyas. Por ejemplo, muchas personas golpeadas o detenidas en la huelga que mencionan son progres o izquierdistas. Entonces, ¿son compañeros o no? ¿Sólo merecen la solidaridad al convertirse en mártires?
[6] El texto de introducción a la edición en español del libro sobre el CCF, Reventando lo existente, reflexiones del combate minoritario, 2011, p.6.
[7] "Anarquistas Nihilistas" de Barcelona no se consideran incapacitados por su falta de sueños, sino más "peligrosos". |
This work is in the public domain |
Comentaris
Re: La Recuperación Nihilista
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per A |
10 abr 2013
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Molt bon text, espero que dins del moviment llibertari es cree debat, i sobre tot que sectors nihilistes i "pseudo insurres",no acaben fent l'insult facil ( Autoritari-reformista), totes les lluites son valides pero com no creem debat i tinguesem estrategia acabarem com a Grecia ( igual fa anys la expressio acabar com a Grecia feia pensar en revolucio, pero actualment dins del moviment llibertari grec, la insostenibilitat sectaria, les divisions de fraccions i sobre tot la lluita de "egos",ha dut la proposta anarqusita a un punt bastant cŕitic)
Salut, debat i reflexió |
Re: La Recuperación Nihilista
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per Un |
10 abr 2013
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Sembla que nihilista etimològicament vol dir "no creure en res".
Trobo que és una etimologia molt negativa, i que les forces revolucionàries haurien d'emfatitzar tot allò en que creuen i pel que lluiten.
Només un comentari sobre etimologia. Salut. |
Re: La Recuperación Nihilista
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per WYWH ;-) |
10 abr 2013
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Textazo. Xapó nen/a. |
Re: La Recuperación Nihilista
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per Fight Club |
11 abr 2013
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Sergey Nechayev 1869
El Catecismo Revolucionario
Joven Nechayev
Fuente: El anarquismo ruso .
Sergey Genadievich Nechayev era un hombre tan temido por el Zar y la aristocracia, las clases dominantes, se convirtió en prisionero especial del Zar. El Zar recibe semanalmente informes especiales sobre las actividades de la prisión de Nechayev.
Nechayev nació 20 de septiembre 1847. Murió a los 35 años en la cárcel, el 3 de diciembre de 1882 - de hidropesía complicada por el escorbuto.
Fue condenado por el asesinato de un compañero de estudios, pero sus verdaderos crímenes eran políticos. Se asustó al estado porque se ha hecho para dirigir una sociedad secreto de cuatro millones de personas. En realidad, se trataba de un grupo pequeño, tal vez unos pocos cientos, principalmente de estudiantes de St. Petersburg. El juicio lo sentenció a 20 años en Siberia. El Zar intervino y le ordenó que se mantenga durante el resto de su vida. Fue mantenido en la celda n º 1 de los famosos revellín de Alexis de la Fortaleza de Pedro y Pablo.
Como ser humano, dejó mucho que desear - mintió, engañó, chantajeados, asesinados. Por supuesto, él defendería sus acciones sobre la base de los principios establecidos en el siguiente documento. Independientemente de sus atributos personales, rechazó la autoridad del Estado a su fin triste y, por eso, ganó el estatus de leyenda en Rusia.
El Narodnaya Volya (Libertad del Pueblo) considerado el uso de sus recursos para liberarlo en lugar de matar al Zar - una oferta que él rechazó, diciendo que la muerte del Zar era más importante. (Y, en efecto, el 13 de marzo de 1881, el zar Alejandro II fue asesinado, mientras que a caballo por las calles nevadas de San Petersburgo.)
Dostoyevsky Nechayev utilizo como inspiración para su novela Los endemoniados.
Nechayev escribió bastantes pocos panfletos sobre temas revolucionarios. Probablemente el más famoso y perdurable El Catecismo Revolucionario.
Los deberes del revolucionario hacia sí mismo
1. El revolucionario es un hombre condenado. No tiene intereses personales, asuntos de negocios, no hay emociones, apegos, no hay ninguna propiedad, y el nombre no. Todo en él está totalmente absorto en el pensamiento único y la única pasión por la revolución.
2. El revolucionario sabe que en lo más profundo de su ser, no sólo en palabras sino también con hechos, que ha roto todos los lazos que lo atan al orden social y al mundo civilizado con todas sus leyes, morales y costumbres, y con todas sus convenciones generalmente aceptados. Él es su enemigo implacable, y si él continúa viviendo con ellos, es sólo con el fin de destruir más rápidamente.
3. El revolucionario desprecia todas las doctrinas y se niega a aceptar las ciencias mundanas, dejando para las generaciones futuras. Él sabe que una sola ciencia: la ciencia de la destrucción. Por esta razón, pero sólo por esta razón, se estudiará la mecánica, la física, la química, la medicina y, tal vez. Pero durante todo el día y toda la noche estudia la ciencia fundamental de los seres humanos, sus características y circunstancias, y todos los fenómenos del orden social presente. El objeto es perpetuamente el mismo: la forma más segura y más rápida de destruir el orden sucia conjunto.
4. El revolucionario desprecia la opinión pública. Desprecia y odia la moralidad social existente en todas sus manifestaciones. Para él, la moral es todo lo que contribuye al triunfo de la revolución. Inmoral y criminal es todo lo que se interponga en su camino.
5. El revolucionario es un hombre dedicado, sin piedad hacia el Estado y hacia las clases educadas, y que puede esperar ninguna piedad de ellos. Entre él y ellos existe, declarada o encubierta, una guerra implacable e irreconciliable hasta la muerte. Tiene que acostumbrarse a la tortura.
6. Tiránico hacia sí mismo, debe ser tiránico hacia los demás. Todos los sentimientos suaves y enervante de parentesco, amor, amistad, gratitud, e incluso el honor, deben ser suprimidos en él y dar lugar a la pasión fría y decidida por la revolución. Para él, no existe más que un placer, en consuelo, una recompensa, una satisfacción - el éxito de la revolución. Noche y día, él debe tener más que un pensamiento, un objetivo - la destrucción despiadada. La lucha a sangre fría y sin descanso hacia este fin, debe estar preparado para destruirse y destruir con su propias manos todo lo que se interponga en el camino de la revolución.
7. La naturaleza del verdadero revolucionario excluye todo sentimentalismo, romanticismo, entusiasmo y exaltación. Todo el odio y la venganza privada también debe ser excluida. Pasión revolucionaria, practicado en todos los momentos del día hasta que se convierte en un hábito, se va a emplear con el cálculo frío. En todo momento y en todo lugar, el revolucionario no debe obedecer a sus impulsos personales, sino sólo los que sirven a la causa de la revolución.
Las relaciones del Revolucionario con sus camaradas
8. El revolucionario no puede tener ninguna amistad o un archivo adjunto, a excepción de aquellos que han demostrado con sus acciones que, como él, se dedican a la revolución. El grado de amistad, la devoción y la obligación hacia un compañero está determinado únicamente por el grado de su utilidad para la causa de la destrucción revolucionaria total.
9. Es superfluo hablar de solidaridad entre los revolucionarios. Toda la fuerza del trabajo revolucionario radica en esto. Los camaradas que poseen la misma pasión revolucionaria y el entendimiento deben, en lo posible, deliberar todas las cuestiones importantes juntos y llegar a conclusiones unánimes. Cuando el plan sea finalmente decidido, entonces el revolucionario debe basarse únicamente en sí mismo. Al llevar a cabo actos de destrucción, cada uno debe actuar solo, nunca corriendo a otro para obtener asesoramiento y asistencia, excepto cuando éstos sean necesarios para el cumplimiento del plan.
10. Todos los revolucionarios deben tener en virtud de ellos revolucionarios de segundo o tercer grado - es decir, compañeros que no están completamente iniciados. estos deben ser considerados como parte del capital común revolucionario puesto a su disposición. Este capital debe, por supuesto, ser consumido como económicamente como sea posible con el fin de extraer de él la mayor beneficio posible. El verdadero revolucionario debe considerarse a sí mismo como capital consagradas al triunfo de la revolución, sin embargo, no puede personalmente y solo disponer de ese capital sin el consentimiento unánime de los compañeros iniciados completamente.
11. Cuando un compañero está en peligro y la pregunta que surge es si se debe guardar o no guardar, la decisión no debe ser calculado sobre la base del sentimiento, sino únicamente en interés de la causa revolucionaria. Por lo tanto, es necesario sopesar cuidadosamente la utilidad de la camarada contra el gasto de las fuerzas revolucionarias necesarias para salvarlo, y la decisión debe ser tomada en consecuencia.
Las relaciones de la Sociedad con la Revolución
12. El nuevo miembro, después de haber dado prueba de su lealtad no con palabras sino con hechos, pueden ser recibidos en la sociedad sólo por el acuerdo unánime de todos los miembros.
13. El revolucionario entra en el mundo del Estado, de las clases privilegiadas, de la llamada civilización, y vive en este mundo sólo con el propósito de lograr su destrucción rápida y total. Él no es un revolucionario si no tiene ninguna simpatía por este mundo. Él no debe dudar en destruir cualquier posición, en cualquier lugar, o cualquier hombre en este mundo. Él debe odiar a todos y todo en él con un odio igual. Tanto peor para él si tiene alguna relación con los padres, amigos o amantes, él ya no es un revolucionario si se deja influenciar por estas relaciones.
14. Con el objetivo de revolución implacable, el revolucionario puede y con frecuencia tienen que vivir dentro de la sociedad que pretende ser completamente diferente de lo que realmente es, ya que debe penetrar en todas partes, en todo lo superior y clases medias, en las casas de comercio, las iglesias, y los palacios de la aristocracia, y en el mundo de la burocracia y de la literatura y de los militares, y también en la Tercera División y el Palacio de Invierno del Zar.
15. Este orden social sucio se puede dividir en varias categorías. La primera categoría comprende a los que debe ser condenado a muerte sin demora. Camaradas deberá compilar una lista de las personas a ser condenado de acuerdo con la gravedad relativa de los delitos, y las ejecuciones deben llevarse a cabo de acuerdo con el orden preparada.
16. Cuando una lista de los condenados se hace, y el orden de ejecución está preparado, no tiene sentido privado de indignación debe ser considerado, ni tampoco es necesario prestar atención al odio provocado por estas personas entre los compañeros o la gente. El odio y el sentimiento de indignación incluso puede ser útil en la medida que incitar a las masas a la rebelión. Es necesario guiarse sólo por la utilidad relativa de estas ejecuciones en aras de la revolución. Por encima de todo, los que son especialmente hostiles a la organización revolucionaria debe ser destruido, y sus muertes violentas y repentinas se producen el mayor pánico en el gobierno, privándolo de su voluntad a la acción mediante la eliminación de los partidarios más inteligentes y más enérgico.
17. El segundo grupo comprende a los que se salvarán por el momento, a fin de que, por una serie de actos monstruosos, pueden conducir al pueblo a la rebelión inevitable.
18. La tercera categoría consiste en un gran número de bestias que ocupan altos cargos, que se distinguen ni por su inteligencia ni su energía, mientras disfruta de las riquezas, influencia, poder y altos cargos, en virtud de su rango. Estos deben ser explotados de todas las formas posibles, que estén implicados y envueltos en nuestros asuntos, sus secretos sucios deben ser husmeado, y deben ser transformados en esclavos. Su poder, influencia y conexiones, su riqueza y su energía, se formará un tesoro inagotable y una preciosa ayuda en todas nuestras empresas.
19. La cuarta categoría comprende ambiciosos titulares de cargos y liberales de diferentes matices de opinión. El revolucionario debe pretender colaborar con ellos, a ciegas que le seguían, mientras que al mismo tiempo, haciendo palanca sus secretos hasta que estén completamente en su poder. Deben ser tan comprometida que no hay salida para ellos, y luego se pueden utilizar para crear desorden en el Estado.
20. La quinta categoría se compone de los doctrinarios, conspiradores y revolucionarios, que cortaron una figura muy bien en papel o en sus camarillas. Deben ser constantemente impulsado a hacer declaraciones comprometedoras: como resultado, la mayoría de ellos serán destruidos, mientras que una minoría se convertirá en auténticos revolucionarios.
21. La sexta categoría es de especial importancia: las mujeres. Se pueden dividir en tres grupos principales. En primer lugar, esas mujeres frívolas, sin pensamientos e insípido, a la que vamos a utilizar como usamos la categoría tercera y la cuarta parte de los hombres. En segundo lugar, las mujeres que están dispuestas, capaces y dedicadas, pero a quien no nos pertenecen a nosotros ya que no han alcanzado todavía un entendimiento revolucionario desapasionado y austero; éstas deben utilizarse como los hombres de la quinta categoría. Por último, están las mujeres que son totalmente de nuestra parte - es decir, aquellas que están dedicadas por entero y que han aceptado nuestro programa en su totalidad. Debemos considerar a estas mujeres como el más valioso o nuestros tesoros, sin su ayuda, nunca tendría éxito.
La actitud de la Sociedad hacia las personas
22. Nuestra Sociedad no tiene otro fin que la completa liberación y la felicidad de las masas - es decir, de la gente que vive por el trabajo manual. Convencido de que su emancipación y el logro de esa felicidad sólo puede producirse como resultado de una revuelta que destruye todo popular, la Sociedad hará uso de todos sus recursos y energías hacia el aumento y la intensificación de los males y miserias de la gente hasta que por fin su paciencia se agota y se dejan llevar a un levantamiento general.
23. Por una revolución, la Sociedad no significa una revuelta ordenada de acuerdo con el modelo occidental clásico - una revuelta que siempre llega a atacar los derechos de propiedad y los sistemas sociales tradicionales de la llamada civilización y la moralidad. Hasta ahora, una revolución siempre se ha limitado a la caída de una forma política con el fin de reemplazarlo por otro, intentando así crear un estado revolucionario llamado. La única forma de revolución beneficioso para el pueblo es el que destruye todo el Estado a las raíces y exterminado todas las tradiciones, las instituciones estatales y las clases en Rusia.
24. Con este fin, la Sociedad por lo tanto se niega a imponer una nueva organización desde arriba. Cualquier organización futura, sin duda, se abrirá camino a través del movimiento y la vida de las personas, pero esto es una cuestión para las futuras generaciones para decidir. Nuestra tarea es terrible, total, universal, y la destrucción despiadada.
25. Por lo tanto, en la cercanía a la gente, debemos, sobre todo, hacer causa común con los elementos de las masas que, desde la fundación del estado de Moscovia, nunca han dejado de protestar, no sólo con palabras sino con hechos, en contra de todo lo directamente o indirectamente relacionadas con el Estado: en contra de la nobleza, la burocracia, el clero, los comerciantes, los kulaks y parasitarias. Debemos unirnos con las tribus de aventureros y de bandidos, que son los auténticos revolucionarios sólo en Rusia.
26. Para soldar a la gente en una sola fuerza invencible y todo destructiva - este es nuestro objetivo, nuestra conspiración, y nuestra tarea. |
Re: La Recuperación Nihilista
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per Acné |
11 abr 2013
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Netchaev era un carota y un vividor que se decicaba a sacarle la pasta a revolucionarios "ingenuos"... entre ellos al propio Bakunin.
Es probable que en algún momento pasara de carota aprovechado a provocador policial al servicio del Zar.
Reivindicar su figura en la actualidad es algo bastante cretino e ignorante. |
Re: La Recuperación Nihilista
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per cler4asil |
11 abr 2013
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claro la historia es la que es, y hay que reindivcar a los buenos, el rull sua madre y su hermano unos miserables a las ordenes del gobernador civil, el netachez provocador del zar, y los atentados que nosotros los buenos decimos son los anarkistas y son los que hay que reindivicar, siempre lo mism0 la historia la hacen los que pagan y si no se publica copmo documento historico oficial, por eso esos mimundis que se dicen historiadores van a los registros judiciales y policiales, para contarnos lo que fue, deporable como el acne. |
Re: La Recuperación Nihilista
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per dog eat dog |
11 abr 2013
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netchaiev y el zar son parte de la historia... reivindicarlos o denostarlos es ejercicio futil:
otro texto
La Faccion Canibal / Historia del Vandalismo Ilustrado & sus tripas en pdf |
Re: La Recuperación Nihilista
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per n. |
12 abr 2013
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No intenteis llenar de conceptos dentro del nihilismo, vosotros que no lo sois.
El concepto esta claro: atacar.
Y es en la praxis donde se hacen los analisis, los comunicados y donde se forjan los compas, el resto es solo puro politiqueo; para quien piensa que todo gira en el social, la respuesta para ellos tambien està clara: l'autonomia y la decision individual es màs importante que lo que digan los gurus de las asambleas.....
Si para los politicos anarquistas las asambleas es lo mas importante. para los nihilistas es en la accion donde se desarrolla la anarquia.
viva el nihilismo destructor.
Viva la nueva guerrilla anarquista |
Re: La Recuperación Nihilista
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per a n.. |
14 abr 2013
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jajajajaja pero que tonto eres. Que no estas en atenas, niniooo! que tu hablas de tirarte a la piscina, y la mayoria ya hemos ido y vuelto dos veces, capullin!!!
Que gracia estos insus de ultima hora! |
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