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Actualizaciones respecto a lxs presxs anarquistas en Grecia (23 de febrero de 2012)-parte 1
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per annrqqqh |
23 feb 2012
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Actualizaciones |
Juicios
En este momento siguen dos juicios: por el caso de Lucha Revolucionaria (con acusadxs siendo 8 personas: 3 miembros de L.R. Nikos Maziotis, Pola Roupa y Kostas Gournas, además Hristoforos Kortesis, Vagelis Stathopoulos, Sarandos Nikitopoulos, Maria Beraha y Kostas Katsenos, que niegan a las acusaciones. Recordamos que K.Katsenos es único que de momento se encuentra encarcelado) y el segundo juicio del “caso Halandri” (acusados son 4 miembros de CCF, Damianos Bolano, Christos Tsakalos, Mihalis y Giorgos Nikolopoulos).
El 17 de febrero tenía que empezar el juicio contra 4 compañerxs de Tesalónica, acusadxs de varios ataques incendiaros realizados en 2006-2007. Esto era la primera vez cuando las autoridades griegas intentaron aplicar la ley antiterrorista a lxs anarquistas. Recordamos que uno de lxs acusadxs, Vagelis Botsatsis, pasó más de un año en prisión preventiva, mientras que lxs demás, Ilias Nikolau, Dimitra Sirianou y Kostas Halazas escogieron el camino de clandestinidad para finalmente, en diciembre de 2008 después de que Vagelis fue soltado en libertad condicional, entregarse a las autoridades. Entonces, todxs tres quedaron en libertad condicional con cargos, pero Ilias Nikolau fue detenido nuevamente en el enero de 2009, acusado de colocar un artefacto incendiario en la comisaría. Ilias cumplió su condena y salió hace mucho tiempo ya, sin embargo a todxs 4 les espera un juicio difícil. Por ahora, el juicio quedó aplazado hasta el 10 de enero de 2013.
En marzo que viene, así dentro de unas pocas semanas empezarán dos últimos (o por lo menos esperemos que sea así...) juicios a cuales se tiene que enfrentar Simos Seisidis. Se trata del juicio por robo de arma de un guardia que estaba vigilando la casa de Kedikoglou (juez del Tribunal Supremo), el hecho ocurrido hace algunos años y el juicio por un atraco al “Banco Alfa” en Nea Halkidona de Atenas que pasó hace muchos años. Estas dos acciones fueron atribuidas al Simos cuando este se encontraba fugado, por el dicho atraco fue condenado, en ausencia, a 6 años. Dentro de poco publicaremos informaciones más detalladas respecto a la situación de Simos.
El 8 de marzo empezará el juicio del compañero anarquista Apostolis Kiriakopoulos y otras tres personas arrestadas durante los grandes disturbios del diciembre de 2008. Apostolis pasó medio año en prisión, actualmente está en libertad condicional y tiene cargos por lanzar molotov, etc.
El 5 de marzo Konstantina Karakatsani, condenada en primer juicio del “caso Halandri” a 11 años de prisión, presentará su petición de suspensión de condena. Lo mismo hará el 19 de marzo otro acusado en el mismo juicio, Panagiotis Masouras.
El 6 de marzo la petición de liberación por razones de salud presentará, quinta vez ya, la compañera Stella Adoniou, acusada también de pertenencia a CCF.
El 26 de marzo empezará el juicio del compañero Rami Sirianos, arrestado en enero de 2011 después de atracar a una subasta de vehículos en Tesalónica. En el banquillo de acusados se encontrará también un otro compañero, Kleomenis Savvanidis, que fue arrestado el mismo día que Rami y acusado de ser su complice, sin que existiese prueba ninguna de su participación en dicha acción. Dado una fuerte coartada y varios testimonios de defensa en su favor, Kleomenis fue soltado en libertad condicional dos días después, pero los cargos siguen en vigencia.
El 24 de abril empezará el tribunal de apelación de Polikarpos Georgiadis y Vagelis Hrisohoidis, ambos arrestados en verano de 2008, acusados de secuestro de un industrial y varios atracos y condenados a 22 años y 3 meses cada uno.
A la continuación presentamos algunas cartas que tuvimos en “lista de espera para traducción” bastante tiempo. Otras seguirán cuando el tiempo nos lo permite.
Texto de 5 compañeros anarquistas presos
El texto siguiente fue publicado hace varias meses, el 3 de octubre de 2010 (en griego: http://athens.indymedia.org/front.php3?lang=el&article_id=1338311), muchos de los presos mencionados están ya libres, sin embargo consideramos bastante importante traducirlo.
Puesto que ninguna de las condiciones en las que vivimos, ni siquiera la de ahora mismo, puede ser vista fuera de su contexto actual y su continuidad histórica, para ser capaz de darse cuenta de las condiciones que enmarcan a la acción revolucionaria hoy en día, tenemos que recurrir al recorrido histórico de ésta lucha. Y para ser, además, consecuentes, con el recorrido de la lucha revolucionaria desde el momento en que empezaron a encarnizarse las actuales: condiciones sociales.
Desde el período de cambio político y con el paso del tiempo, aparte de una Grecia moderna y neo-capitalista, están tomando forma y llevándose a cabo unas actividades revolucionarias dentro del mismo país. Las acciones que van más allá de los estrechos marcos de la lucha “contra la Junta” y obtienen un más complejo, en lo que se refiere a dónde apuntan y a qué se proponen, contenido político.
Así se está llevando a cabo, un permanente desarrollo de lucha con muchas formas de expresión: desde la combativa y conflictiva presencia de los anarquistas en las calles de las metrópolis, hasta la realización de unos actos más conspirativos de ataque.
El hecho de que esta lucha está evolucionando con esta consecuencia histórica, sigue poniendo en posición de combate a más y más nuevos luchadores. Nuevos medios tras los cuales se realizan, nuevos objetivos y un contenido político en permanente desarrollo, que a su vez lanza a la batalla unas nuevas percepciones y puntos de vista. Sin embargo, especialmente la última década, debido a ese progreso geométrico con cual crece y se difunde el discurso anarquista-revolucionario y su correspondiente práctica. Los revolucionarios, anarquistas y luchadores se proponen nuevos desafíos y por el hecho de que sí que los logran, les convierte en uno de los más grandes pesadillas que teme el Dominio. Desafíos, como la creación de ateneos y casas ocupadas en muchos puntos de los centros urbanos, la permanente presencia combativa de los anarquistas en las calles, pasando por unos ataques organizados a medias y llevados a cabo “si aparece la oportunidad”, a unos fuertes y violentes actos organizados de manera rígida, que continuamente desregulan la armonía social. Ademas, unas nuevas y con un número siempre creciente, organizaciones revolucionarias que eligen la acción a largo del tiempo, la acción coherente tanto en el discurso como en la práctica.
El punto culminante de ese evolutivo, consecuente y ascendente (en el nivel de violencia y de la peligrosidad que presenta para el Dominio) rumbo, era un momento que se convirtió en todo un período de importancia decisiva para la continuidad revolucionaria. La revuelta de Diciembre, aparte de ser un punto de referencia histórico para los anarquistas, ha demostrado también nuevas oportunidades de experimentación. La explosiva situación que predominaba entonces, a pesar de todas las poco homogéneas características que iban con ello, funcionó en un grado importante, como un terreno fértil tanto para el desarrollo de los ya existentes componentes anarquistas (estructuras, prácticas, percepciones), como también para crear unos componentes nuevos. La influencia de ese período es bastante fuerte si reflexionamos sobre lo que pasó luego. Era entonces, cuando se intensificó la evolución a cada nivel y de cada aspecto de lucha revolucionaria. Acciones callejeras, desde pegar carteles, charlas, concentraciones y ocupaciones de edificios, hasta enfrentamientos y refriegas con los maderos, ataques explosivos e incendiarios, ejecuciones políticas, vandalismos de las lujosas zonas urbanas y coordinadas series de sabotajes en todo el país, realizados por organizaciones que constituyeron la nueva guerrilla urbana, son sólo algunos de los aspectos que presentó la polimorfa lucha anarquista revolucionaria en aquel período.
En la época después de la revuelta, desde los inicios de 2009, el Estado intenta de recomponer su modo de funcionar, mientras que paralelamente otra vez se propone de implantar el miedo dentro del bando de la revuelta. Con el paso del tiempo, sin embargo, vemos que un tal intento de reajuste social está fracasando, mientras que hoy en día es evidente (con tal que, como ya sabemos, el sistema capitalista tiene ciertas tendencias suicidas) que el actual cuerpo social empieza de descomponerse a cada nivel (políticamente, económicamente, etc.). Más en concreto, empiezan a manifestarse los primeros síntomas de esa descomposición y lo hacen de una manera, que el Dominio tal vez ya sabía, pero seguro no lo deseaba. Además, no son pocos, en últimos tiempos, los momentos de desobediencia, descontento y negación expresados por individualidades y sectores sociales que encuentran una práctica garantía en las huelgas, protestas masivas y marchas combativas. Condiciones que empujan a las masas sociales, que se están moviendo y están activas en la Grecia capitalista de hoy en día, a enfrentarse con unos nuevos, por lo menos según lo que parece, callejones sin salida insuperables a los cuales les lleva el actual sistema de organización social y económica. En el nivel, pero, de algunas conciencias individuales que surgen de ese clima social que les rodea, estos callejones sin salida superan la fase de la pobreza económica y de la inseguridad social. Así llega el punto de sobrehervir en la superficie, la percepción de la vaciedad de la vida en lo existente. Eso, junto con el muy difundido descontento social (aunque sea como un descontento, que se dirige simplemente hacia los que gestionan la economía nacional y global) causado por la recesión mundial a que llegó el capitalismo, hace imperativa-y a la vez más factible-la realización y la difusión de la teoría y práctica revolucionaria.
Más específicamente, la mencionada condición crea con gran frecuencia los campos que constituyen un terreno adecuado para el desarrollo y aplicación de las ideas radicales seguidas por la difusión del proyecto anarquista, como también para dar a conocer la existencia de la guerra revolucionaria. La, cada vez más frecuente, aparición de los focos de tensión dentro del ámbito social, evaluando también los sentimientos del enojo que surgen de ello, ofrecen al bando revolucionario oportunidades para descoordinar y desestabilizar al sistema existente como resultado. La cada vez más creciente, amenaza que constituye la lucha anarquista revolucionaria, junto con la creación de cada vez más posibilidades para franquear nuevos senderos, para aplicarla por parte de cada vez más revolucionarios, seguramente toca las campanas de alerta para el Dominio, puesto que este según lo que parece, presenta señales de debilidad en cada de sus niveles (material e inmaterial) por los golpes que está recibiendo.
La directa, lógica y esperada reacción del Dominio a la continua e intensificada actividad del bando revolucionario era el contraataque. De cualquier posible manera, ya que el Dominio intenta de hacer frente contra las acciones que entran en conflicto con lo existente. De este modo, desde de los primeros meses del 2009, el bando del Dominio ha estado fortaleciendo sus arsenales de represión: en el nivel de la prevención y afrontamiento legal se introducen nuevas clausulas legislativas (por ejemplo la llamada “ley de capucha” que criminaliza el acto de taparse la cara) mientras que a las ya existentes (sobretodo la ley antiterrorista) al ser aplicadas se están “inflando” (por ejemplo dictando condenas más severas) y ampliando, en lo que se refiere al número de los potenciales acusados. En el nivel de conflicto directo, en la cotidianidad metropolitana, el Estado refuerza además el ejército de preservación del orden y la ley. Así, los cuerpos de seguridad (maderos) de una parte refuerzan sus estructuras materiales y técnicas (los “super-microfonos” para escuchas telefónicas, las nuevas herramientas de los Servicios de Inteligencia , etc.) y se aprovisionan con miles de nuevos cerdos, mientras que de otra parte, poco a poco entran en acción nuevas, “especialmente instruidas” (entre otras para las condiciones de concentraciones del carácter combativo y los ataques guerrilleros) unidades, como por ejemplo la unidad motorizada “Delta”.
Esa total ampliación de los arsenales represivos tenía como resultado el ataque del Dominio contra el bando revolucionario. Así, ya desde finales de 2009 empieza una ola de actos represivos que incluye, entre otras, arrestos y encarcelamientos de anarquistas revolucionarios por su participación en organizaciones revolucionarias, procesos penales y encarcelamientos de anarquistas a base de unas acusaciones “infladas” (en algunos casos) o falsas (en otros casos). Allanamientos policiales de ateneos y casas ocupadas anarquistas (sirviéndose de cualquier pretexto posible), hasta el duro y agresivo afrontamiento con las concentraciones combativas, con el fin de disolverlas.
En esa condición con la cual se está afrontando el “peligro” revolucionario no podría sin embargo, como en cada condición que el Dominio intente de imponer, faltar un elemento: está fomentada por el espectáculo.
Los medios de comunicación de masas, en este caso obran basándose en tres fundamentos. En primer lugar, emprenden su discurso principal, lo del permanente intento de neutralización de cualquier polarización social, algo que de todos modos hacen, así tomando parte en un a largo plazo proyecto represivo a nivel ideológico. En segundo lugar, se ocupan de reforzar, pero también de dirigir, unas nuevas direcciones (criminalidad difusa, terrorismo) en el clima de la inseguridad social, que ya prevalece, para confirmar ante el cuerpo social la imperativa necesidad de fortalecer los arsenales represivos. Mientras, por fin, en cuanto a la efectividad de la aplicada represión, están funcionando otra vez como multiplicadores, ya que a cualquier logrado golpe que el Estado inflige lo presentan como una victoria absoluta y fabrican unos arcos de triunfo televisivos por las cuales están desfilando maderos de cada especie, “analíticos sociales” e ingeniosos periodistas policíacos.
Por lo tanto, el Estado al reconocer a esa siempre presente amenaza que constituye el campo enemigo, inventa y aplica nuevas estrategias de contraataque, introduce nuevas tácticas de afrontar el peligro y todo el tiempo intenta de normalizar cada polarización social.
Nosotros por nuestra parte, reconocemos que cada momento en que se manifieste la guerra civil social tiene sus particularidades, sus dificultades pero también su singularidad en lo que se refiere a las posibilidades de su desarrollo insurreccional/revolucionario. De este modo también hoy en día podemos, como primero diagnosticar y luego agarrar y llevar a cabo las mejores y más fecundas probabilidades de agudizar la lucha anarquista revolucionaria y, como consecuencia, nuestra ruptura bélica con la sociedad autoritaria.
La notoria crisis económica y las endurecidas condiciones de esclavitud y explotación que engendra una, creciente de manera geométrica, intensificación de la represión en nivel ideológico, legislativo y operativo, el mismo progreso del sistema y su re-estructuración que se manifiesta de modo violenta sobre el ser humano y sobre la naturaleza, tiene que enfrentarse con el contrapeso de fuerza que nació fuera del Imperio y con cada posible manera y a cada coste se manifiesta en contra de ello. El subir de grado, tanto al nivel cualitativo como cuantitativo, de los enfrentamientos que se producen en los callejones de las metrópolis, el intento de internacionalizar la guerrilla urbana anarquista, la ampliación de infraestructuras de contra-información, de acción, de solidaridad.
En ese contexto, entramos en un período en que se realizarán todo una serie de juicios contra anarquistas y antiautoritarios encarcelados. Una serie de juicios que tienen que ver con toda la gama de tipos de acciones que abarca la lucha anarquista revolucionaria, desde atracos a bancos e enfrentamientos con la policía, hasta organizaciones armadas y ataques guerrilleros.
Una serie de juicios, con o sin pruebas, que se usaran para castigar a los sujetos subversivos y hacer de ellos un ejemplo, tras el miedo y su manejo listo, para los que posiblemente les vino a la cabeza la idea de andar hacia una ruptura violenta con la dominante condición de esclavitud.
Una serie de juicios que harán destacar los diferentes análisis y opciones de lucha, pero también las tendencias que se oponen a la institución de la justicia.
Finalmente, una serie de juicios, los cuales esta a nuestro alcance verlos como continuación de nuestra lucha, como nuestra propia pincelada sobre el cuadro revolucionario de nuestra época, como nuestra propia señal que SEGUIMOS enviado a la gente que lucha fuera de los muros de las prisiones.
Más en concreto, durante los meses siguientes serán juzgados:
Luchadores anarquistas Aris Seirinidis y Simos Seisidis por los hechos ocurridos el 4 de mayo de 2010, cuando ese segundo perdió su pierna al ser disparado por la espalda por los cerdos.
Antiautoritarios Aleksandros Kossivas y Mihalis Traikapis que están en cárcel preventive y Venos Polikretis y Maria Ikonomou, todos acusados de un atraco al banco en Psahna de isla Evia.
Guerrilleros Pola Roupa, Nikos Maziotis y Kostas Gournas que asumieron su responsabilidad política por la organización armada Lucha Revolucionaria(que durante años de su existencia golpeó fuertemente los símbolos del Estado y del Capital) así hablando sobre los objetivos mismos de su organización, pero también honrando de esta manera al miembro de LR, Lambros Foundas que cayó en combate durante el enfrentamiento con maderos el 10 de marzo de 2010, al realizar una acción preparativa del grupo.
Luchadores Vagelis Stathopoulos, Sarandos Nikitopoulos, Hristoforos Kortesis, Maria Beraha y Kostas Katsenos procesados por el mismo caso.
El compañero Dimitris Hadzivasiliadis, procesado por posesión de armas y “provisión de armas para una organización terrorista”.
Los compañeros y miembros de la Conspiración de Células del Fuego que serán juzgados por el envío de paquetes-trampa a las embajadas situadas en Grecia y a los símbolos, autoridades y mecanismos de Unión Europea. Además, se espera un nuevo juicio en el caso de Halandri, esta vez para aquellos que no aparecieron en el primer juicio por haber elegido el orgulloso y “golfo” camino de fuga de la ley.
Anarquistas Giorgos Karagiannidis, Konstantinos Sakkas, Aleksandros Mitrousias, Stella Adoniou, Hristos Politis y Dimitris Mihail acusados de pertenecer a una “desconocida organización terrorista”.
Acabando, no podemos pasar por alto los recientes encarcelamientos del compañero Hristos Kolentinis y del Mihalis O., ambos acusados de ataques contra antidisturbios, mientras que en este momento se examinan sus peticiones de liberación.
Es indiscutible que el papel del Estado es proteger y guardar la coherencia de la sociedad, sus instituciones y sus valores. Para lograrlo se empenya a reducir y reprimir cualquier intento subversivo/revolucionario. Se mueve por lo tanto en base de una común estrategia frente a todos los que se atreven a herir sus estructuras y su prestigio. Esto es algo que cada uno fácilmente puede comprender, algo que al mismo tiempo debe de ser afrontado por todos los que siguen con sus cabezas en alto.
Frente a esa estrategia nosotros proponemos la síntesis de luchas, no necesariamente a nivel de formación conjunta ni a nivel de análisis, sino a nivel de navegar juntos y de manera combativa en contra de nuestros perseguidores comunes. Guardando la autonomía de cada individuo y grupo pero SIEMPRE teniendo en mente una ORIENTACIÓN COMÚN frente a la justicia, esa mano alargada del castigo estatal.
La urgencia, pues, de atacar, cada uno según la manera que le parezca mejor, el procedimiento mismo de nuestro castigo, no es imperativa sólo por las razones estratégicas. Se trata de un primer paso hacia la realización de la experimentación anárquica.
No hacemos la vista gorda a las distinciones y contradicciones teóricas que existen entre los anarquistas revolucionarios, tanto “dentro” como “fuera” de los muros, sin embargo reconocemos la fuerza que pueden tener unas luchas colectivas o aquellas que se manifiestan al mismo tiempo y paralelamente con el mismo objetivo.
Porque las diferencias, los desacuerdos, las contradicciones y las rupturas son eso que puede nutrir al pensamiento crítico y dialéctico y a la solidaridad, mientras que aquellas a su vez pueden nutrir al DESARROLLO REVOLUCIONARIO.
Al mismo tiempo tenemos que tener en mente que para nosotros la identificación, aparte de ser inalcanzable, es también algo indeseable.
Concluyente: queremos que se expanda la percepción, de que el golpe contra uno de nosotros es un golpe contra todos nosotros, encarcelados o no.
Que cada lucha (individual o colectiva) es parte indivisible de una lucha ENTERA.
Si percibiremos nuestras persecuciones penales, arrestos y encarcelamientos simplemente como un castigo-para cada uno de nosotros-personal que nos impone el Estado, apartándolo de los motivos que incendiaron la mecha de nuestra acción, pero también del espacio/tiempo social que nos rodea, no excluimos la posibilidad de que lleguemos a unas soluciones individualizadas, que nos alejaran de los procesos de agudizar y evolucionar a la guerra civil social.
Si tenemos algo que ver con los cargos o no, si esos son inflados o de manera cruda, constituyen una venganza por las actividades anarquistas de un compañero o compañera, no debemos quedarnos en abordarlo dándole un único significado, sino verlos como una nueva causa para la guerra, despiadada y no negociable, contra los que oprimen la vida.
En una época de la fuerte polarización del cuerpo social, de unos intensos enfrentamientos y intercambios de golpes entre las fuerzas de anti-libertad y las de la revolución, en una época en que todo parece factible, las confirmaciones que recibimos están gestando un mensaje del miedo para el conjunto de gente que lucha, para el más amplio ámbito subversivo. Es sólo un intento del Estado de disuadirnos y disuadir a otros, hoy y mañana, de tomar parte en esas batallas con las que soñamos que vendrán cuando lucharemos en el asalto al cielo.
Ahora, más que nunca, el Estado intenta soplar el miedo hacia a los que luchan, a los que piensan o se pensarán de hacerlo, daremos unas duras respuestas frente a la represión o mejor seguiremos teniendo un estomago fuerte frente a sus golpes, cada uno a su manera, con su propio discurso y percepción.
CONVERTIREMOS TANTO LAS CÁRCELES COMO LOS JUZGADOS EN NUEVOS CAMPOS DE LUCHA, DE ATAQUE, DE NEGACIÓN, DE DESARROLLO DE ESA RELACIÓN BÉLICA QUE TENEMOS CON EL DOMINIO
OFRECEREMOS NUESTRA PROPIA CHISPA PARA INVERTIR EL CLIMA QUE QUIERE QUE EL ESTADO SEA OMNIPOTENTE
INTRASINGENTES ANDAREMOS A LADO DE LOS Y LAS QUE LUCHAN Y DERRAMAN SU SANGRE POR LAS CALLES
GUARAREMOS EN ALTO LA BANDERA DE LA REVOLUCIÓN, BAJO CUALQUIER CONDICIÓN
RABIA Y CONCIENCIA
Los anarquistas prisioneros de guerra
Theofilos Mavropoulos
Sokratis Tsifkas
Giannis Skouloudis
Dimitris Dimitsiadis
Babis Tsilianidis
Carta de Babis Tsilianidis
El 16 de noviembre Babis (para entender de quién hablamos ver Listado de presxs) fue llevado a los juzgados de Tesalónica. Al entrar en el despacho de la juez de instrucción declaro “soy anarquista revolucionario y me niego a tomar parte en el procedimiento”. De todos modos la juez y el fiscal le presentaron una nueva acusación contra su persona, esta vez por...el atraco a la oficina de contabilidad del hospital “Ahepa”. La única prueba de evidencia contra el compañero es un pañuelo encontrado cerca del lugar en que, según la policía, está su ADN . La siguiente es la carta que sacó Babis un par de días antes (en griego aquí: http://athens.indymedia.org/front.php3?lang=el&article_id=1353406).
El lunes 7 de noviembre me fue entregada una citación para presentarme ante la fiscal del Sección Regular de Instrucción Número 5 del Juzgado de la Primera Instancia de Tesalónica y declarar por los cargos de “robo”, “simple complicidad en robo” y “ilegal posesión de armas”.
El elemento irónico de todo este asunto es que no sabía-y sigo sin saber- por cuál robo me están citando, ya que el papel que llegó a mis manos no menciona el lugar ni la fecha en que se realizó. Desde luego, cuando mi abogado pidió que le informasen sobre los detalles, la respuesta que recibió fue : “no podemos decir nada hasta que vendrá el acusado mismo”. Al mismo tiempo corría el rumor sobre un pañuelo con muestra de ADN mio que fue encontrado cerca de ese, desconocido, lugar.
Obviamente que no me presenté, considerando una molestia de hacer ese viaje de más de mil kilómetros de ida y vuelta, un día y medio en el vehículo de traslados, así quedándome 10 horas en una jaula de 1m por 1m.
Y todo eso mientras cualquier que sería el acto que se me adjudica (si tengo que ver con ese o si no), tal como hice durante la instrucción previa y durante el procedimiento formal de interrogatorio por los anteriores casos de cuales se me está acusando, tal como hice durante el consejo formal de 6 meses, exactamente así lo haré en los juicios que vienen:
Me niego a conversar, tanto a nivel personal como tal vez político, con cualquiera autoridad ”al cargo”. Porque si no, ratificaría de este modo en mi consciencia, en la consciencia de mis compañeros y en la consciencia de mis enemigos, el procedimiento aquello durante el cual algunos, desde luego algunos que les tengo hostilidad, sean fijados como adecuados de juzgar a la lucha anarquista.
Superando la cuestión de que si algún anarquista tomó parte o no en los actos que se le adjudica, estoy percibiendo a las persecuciones penales de los que luchan, a mi reciente procesamiento y al cautiverio de decenas de anarquistas revolucionarios como parte de un general conflicto entre diferentes valores, como parte de la social guerra civil.
Se trata del intento por parte del Estado de soplar el miedo a los revolucionarios para que ceden en su acción, para parar la difusión de las ideas y prácticas anarquistas.
Su voluntad es la de disuadir a jóvenes de tomar parte de la acción.
En ningún caso, por lo tanto, haré el favor a las autoridades judiciales de jugar su juegito legal, buscando coartada de inocencia, exponiendo a ellos mi vida personal. En ningún caso me presentaré delante ellos como “sí que inquieto, pero en fondo un chico bueno y honesto”.
En ningún caso les voy a regalar una charla, ni siquiera ahora, siendo consecuente con mi deseo, pero también con la apuesta que puse con mi mismo y con mis compañeros, la de permanecer siendo yo mismo y seguir la Lucha de manera honrada, sin conversaciones con mis perseguidores.
No puedo reproducir al idioma del Dominio repitiendo como un loro “soy inocente” o “soy culpable”.
Actúo de acuerdo con mi consciencia, estoy en contra del sistema capitalista-democrático y en contra de la civilización autoritaria, apoyo a cada medio de lucha que camina al mismo paso con mis valores y que contribuye a la agudización de la lucha, sin que lo elija en base que de si tal medio está caracterizado como “legal” o “ilegal”.
Además, la lucha anarquista tiene como objetivo la destrucción de la jerarquía y así no puede ser nada otro que ilegal en el lenguaje del Dominio.
Como lo muestran también los enfrentamientos en las calles de toda la Tierra, los ataques contra objetivos del Dominio, el desarrollo de polimorfas estructuras y infraestructuras de lucha, la continua propagandización y difusión del discurso anarquista revolucionario.
Da igual todo lo mucho que se pueda encrudecer la represión. Aún por mucho que suba la tensión de la represión. Cuantos años de cárcel hagan cargar sobre nuestras espaldas. A cuantos de nosotros que tendrán prisioneros. A LA VOLUNTAD MISMA POR LA REVOLUCIÓN NO SE LA PUEDE ENCARCELAR, AISLAR, CALLAR
La lucha anarquista-revolucionaria sigue y seguirá manifestándose bajo de cualquier condición, desafiando a cada costo.
El 16 de noviembre, pues para cuando fui citado por segunda vez para declarar frente a los que tienen encerradas miles de personas en las cárceles, voy a guardar silencio para dejar que se escuchase el ruido sordo del choque entre dos mundos diferentes, un ruido que está creciendo...
Mi solidaridad y respeto con todos los que con su acción regalan sonrisas a nosotros y heridas a la civilización autoritaria.
A los anarquistas prisioneros de guerra, que siguen su lucha dentro de las cárceles.
Babis Tsilianidis
Lunes, 14 de noviembre de 2010
Ala A de la Prisión Judicial de Koridallos
Carta de Konstantina Karakatsani
La petición de suspensión de condena será presentada por Nina y sus abogadxs el 5 de marzo de 2012. Siguiente es la última carta del compañera, publicada 3 de diciembre de 2010 (en griego: http://athens.indymedia.org/front.php3?lang=el&article_id=1359336).
El 19 de julio de 2011 en la sala judicial de la cárcel femenina de Koridallos, una estructurada y permanente activa organización terrorista con el nombre “tribunal de apelación de delitos graves” compuesto de 3 miembros (M.Varela, M. Dimitropoulou y P.Athanasopoulos) metió 130 en total años de cárcel a 7 personas acusadas en el caso Halandri.
A ese juicio fui citada en base de un imaginativo orden que imploró mi implicación simplemente porque estaba visitando la casa de Halandri y por mi, como lo menciona, ¡ “estilo de vida”! Con su sentencia no me atribuyeron sólo la pertenencia al grupo pero también “participación en un acto terrorista y en fabricación de dos artefactos”, algo que deja muy claro el hecho de que esta condena (11 años de prisión) no se ha producido en base de expediente, sino siguiendo la regla “meterle tantos años como se debe para que no saliera en un futuro inmediato” y también por esto no me dieron la suspensión. De este modo mi encierro en la galera de menores se está ampliando, mientras que esa historia de persecución penal contra mi persona tiene más de 2 años ya, desde septiembre de 2009 hasta ahora.
A partir de aquel septiembre de 2009, durante 7 meses me he escaqueado del arresto en un intento de evitar que me ponen en la prisión preventiva hasta el juicio (entonces creí que me van a absolver) pero también para no conceder a mis perseguidores el monopolio de tomar decisiones. Era mi ruptura personal y directa con un sin precedentes (hasta entonces) régimen de absurdidad judicial, era mi acto rebelde contra el descaro de la Unidad Antiterrorista, era una opción de lo más existencial.
A pesar de todo esto, en mi opinión la fuga de la ley no constituye una propuesta valida para todos los casos, dado que no fueron pocas las veces en que los maderos sacaban ordenes de busca y captura simplemente con el objetivo de causar confusión, de recargar al clima, de aislar y por fin aniquilar más fácilmente a la gente. El más reciente ejemplo es el caso de Maria Ikonomou y Aleksandros Kossivas (acusados por un atraco a oficina de correos en Skhimatari), en que las citaciones a propósito ni llegaron a los manos de los encausados. Finalmente, los compañeros fueron absueltos.
AHÍ DONDE NO LLEGA LA MANO DEL MADERO LLEGA EL MICROFONO DEL PERIODISTA
En lo que se refiere al orden de captura contra mi persona, éste me fue presentado por primera vez ya en los juzgados...La cosa es que todo este tiempo cuando la tele gritaba sobre “fugados y fugadas de la ley”( y eso mientras yo era la única mujer en busca y captura por este caso, no hubo ninguna otra...) ¡ no existió ningún orden sacado por los jueces de instrucción! Es decir que de hecho por el orden que les dio la planta 12, el piso franco de Unidad Antiterrorista en la Comisaría Central de Atenas, los medios de comunicación “han sacado” sus propios ordenes de captura televisivos, mientras que los verdaderos fueron emitidos más tarde, el 10 de enero de 2010, por lo tanto 4 meses después del asalto a la casa de Halandri, 4 meses después de fueron anunciados en la tele. ¿Porqué lo manejaron de esta manera? Las conclusiones las podéis sacar solos...Y en cuanto a los periodistas...vale: juicios hicieron, cargos atribuyeron, ordenes de captura sacaron... Lo único que entonces no hicieron fue tomar las armas y lanzarse, junto con Dirección de Afrontamiento de Crímenes Especiales (DAEEB), a la caza de los en busca y captura.
CUANDO EL TERROR SE HACE LA LEY
El caso de Halandri fue juzgado como primero de todos estos casos que surgieron del período tan represivo de 2009-2011. Y ya que se sabe que en los próximos años continuarán realizándose otros juicios políticos, esta vez se tuvo que confirmar la barbaridad creando un antecedente jurídico para los futuros juicios.
En este juicio la barbaridad lo constituyeron no sólo las condenas pero también una serie de asquerosas movidas por parte de los jueces y policías:
-El hecho de asignar los abogados de oficio. Lo hicieron para terminar el procedimiento más rápidamente y en ausencia de los acusados. La mayoría de esos abogados no fueron elegidos por los acusados y se negaron a tomar el caso con el resultando siendo la persecución penal contra ellos mismos.
-El rechazo de las peticiones sobre la grabación audio de las sesiones y sobre dejar de retener los carnets de identidad.
-Pelea con los guardias en calabozos, cuando los medios de comunicación de masas, para agudizar “el clima de terror” , convirtieron un forcejeo en “intento de fuga por parte de los acusados”.
-Reveladora protección de maderos/testigos de acusación por parte de los jueces con unos sucesivos rechazos de las demandas que pedían de examinar a su “credibilidad” (por ejemplo la demanda de levantar la confidencialidad de los teléfonos de maderos).
-Instalación de proyector con el fin de proyectar las fotografías privadas de los acusados en la sala judicial. Esto fue disuadido gracias a las fuertes objeciones , mientras que el secretario se posicionó de modo diferente que los demás jueces y estaba en desacuerdo con esta idea. Al mismo tiempo las autoridades iban afirmando que ¡ no haya posibilidad de cubrir el gasto del equipo para grabaciones audio!
-Prohibición para todos de visitar a los acusados en calabozos.
-Asfixiante presencia policial, el resultado de cual fueron pequeñas peleas durante todos esos meses que duró el juicio. Hubo días en que se tuviera que montar todo un rollo para que te permitiesen tomar un café...
-Presencia de la Unidad Antiterrorista todos los días entre el público. Observaban y hacían notas sobre todo y todos, mientras que tampoco omitieron de hacer comentarios.
-Lo más extremo de todo era la continua emisión de los comunicados y reportes de Unidad Antiterrorista y de los fiscales y jueces (K.Baltas y M.Dimitriou), los cuales a pesar de que el expediente del caso fue cerrado (como siempre pasa antes que empiece el juicio) se iban añadiendo al juicio, agravando un clima de todos modos cargado. Además, los jueces tuvieron como objetivo despolitizar al juicio, la presidenta del tribunal continuamente iba cortando las palabras de mis testigos de defensa diciendo “esas cosas no nos interesan” en un intento de ensombrecer a sus declaraciones. Esto continuamente me causaba la rabia a mi pero también a los demás que asistían al juicio.
La actitud fascista de la presidenta del tribunal, la sala judicial situada dentro de la cárcel, las tropas de EKAM, pero también “las especiales medidas de seguridad” y los hechos que ya he mencionado, todo eso constituye la postura política y la respuesta del Estado a los que estén en su contra. De esta manera se puede atestiguar que el régimen mismo, de modo informal, reconoce al carácter político de juicio de tal tipo.
En plena armonía con esa línea del Estado, viene también la ley antiterrorista que está encarnando la recompensa por el chivateo y la sumisión (anticipa la posibilidad de absolución para aquellos que ofrecen unas “informaciones útiles” sobre ataques y organizaciones, condenas reducidas para los arrepentidos, posibilidad de suspensión de su condena), desata a los manos de autoridades persecutorias para que pudiesen fabricar montajes y en general colocar intencionadamente falsos testimonios policiales (¡ está previsto pleno anonimato de testigos de acusación!), como también chantajea a los acusados con “regulaciones extraordinarias” respecto a los interrogatorios y el ADN. Por tanto, ésta como cada otra ley antiterrorista no puede ser nada menos que enemigo nuestro y unas condenas severas son la natural consecuencia para cada uno que tras su postura digna se enfrenta a todo ese proyecto legal de la sumisión y sigue de pie y recto frente al terrorismo del Estado.
Todas esas cosas no las digo para hacer destacar las arbitrariedades del sistema, ya que considero como arbitraria la existencia misma del Poder y no simplemente algunos de sus actos. Lo digo para dejar claro que estamos en una época de profunda crisis del Sistema en que reina la barbaridad estatal, en una época en que la historia cierra el círculo restableciendo unas prácticas persecutorias y judiciales propias de los tiempos de dictaduras y guerras. Yo personalmente no tengo ya ninguna ilusión que “tal vez las cosas no sean así”. Se hizo muy claro...
Que no nos olvidemos, pero, cómo hemos llegado hasta aquí...La revuelta del diciembre de 2008 dio fuerza al movimiento que lucha contra el régimen y logró, en cierto grado, conectarlo con sectores sociales más amplios creando, sea temporalmente,una situación importuna para la prosperidad del régimen. Como reacción a esto y dado el hecho que la crisis ya cruzó el umbral de Grecia, fue elaborado un plan estratégico de eliminar el ámbito anarquista/antiautoritario. Esto se hizo sentir tras decenas de operaciones represivas, una detrás de otra, empezando por “caso Halandri” en septiembre de 2009 y luego pasando por toda una serie de persecuciones penales, arrestos, allanamientos de diferentes espacios radicales y casas. Una serie de movidas que culminaron en la represión. Ese plan tenía como objetivo aplastar a las resistencias que surgieron en aquellas condiciones. Estas operaciones represivas (con el colmo siendo el asesinato de L.Foundas) y las persecuciones penales del período 2009-2011 (sin ningunos criterios espaciales aparte de la identidad política de los que entraron en el punto de mira de las autoridades), sí funcionaron como ejemplo para todos, así como aspiraban. Funcionaron como una capa de amenaza que tapó al entero movimiento radical, de hecho tomando cuerpo como difusión de síndromes del miedo, cuando gran parte de gente bajo el miedo de ser apuntado se llenó de cohibiciones y preocupaciones sobre “¿qué tocar y qué no?”, “¿a cuál casa voy a ir y a cuál no?, “¿con quién hablaré y con quién no?”, etc. Y así de alguna manera la policía del pensamiento se convirtió en el más fuerte mecanismo represivo que apretó los engranajes dentro de nuestros mismos mentes.
No tardaron, sin embargo, de aparecer también las repercusiones de una generaliza crisis del Sistema que se iba haciendo cada vez más profunda, acarreando los más extremos aspectos del terrorismo del Estado (el hecho de firmar el memorándum, pues el tratado de esclavitud, las graves lesiones y , por poco, asesinados de manifestantes por fuerzas represivas) en todos los niveles, los cuales crearon un campo social cubierto de sangre: agudización de desigualdades sociales y de clase, privación de conquistas sociales, aumento de matanza dentro de una clase, pobreza y un volcán de rabia masivo a punto de erupción, apenas acabe el tiempo en reloj de arena de la paciencia. O por lo menos así muestran las cosas...Pero si efectivamente está así, lo cierto es que éstas son las condiciones que hagan susceptible a radicalismo la sociedad que está sangrando mientras que la muerte gradualmente se expande alrededor de ella. Estas son las condiciones que empujan la sociedad a mostrarse responsable frente a sí misma, rendir de sí misma cuentas tanto por su subyugación a las élites como por su tolerancia hacia los intermediarios que están manejando la vida social y política.
Estas son las condiciones que crean perspectivas subversivas, por tanto las más ideales condiciones en cuales los que luchan tienen que aniquilar la base misma del plan organizado por el Poder.
En marcos de éste plan veo también la persecución penal contra mi persona y mi condena política.
Postdata. El domingo 6 de noviembre de 2011 se produjo un incendio en los calabozos de inmigrantes en Amygdaleza, resultando en lesión de 7 menores en espera a deportación. Sufrieron quemaduras graves y problemas respiratorias. Mientras, los presos en la comisaría de guardia fronteriza (puesto de guardia en la región de Evros), a pesar de estar completamente aislados de mundo de fuera, lograron sacar y publicar una carta en que hacen destacar la cínica realidad: peligrosamente miserables condiciones de encierro, continuas palizas por la policía, desconocimiento sobre cuánto durará su encarcelamiento...Además, una mujer de 32 años fue encontrada ahorcada en los calabozos de Patras, mientras que un preso en Trikala se intentó de suicidar. Hasta que habrá cárceles, la muerte acechará dentro de ellos. Incendios, falta de cualquier posibilidad de afrontar problemas de salud, drogas, degradación psicológica que empuja los presos a suicidio. Al fin y al cabo, lo único fácil en la cárcel es morirse ahí...
Nina Karakatsani
Cárcel de mujeres Thiva |
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