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Notícies :: antifeixisme : guerra
Recerca i captura per als militars americans imputats en la mort de José Couso a l'Iraq
30 jul 2010
· El jutge dicta l'ingrés a la presó dels tres militars nord-americans que suposadament van matar el càmera espanyol José Couso el 8 d'abril del 2003
· Pedraz demana autorització per visitar el lloc dels fets la tardor vinent
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El jutge de l'Audiència Nacional, Santiago Pedraz, ha ordenat aquest dijous la cerca i captura dels militars nord-americans el sergent Thomas Gibson, el capità Philip Wolford i el tinent coronel Philip Camp als quals acusa de la mort del càmera espanyol de Telecinco José Couso, mort a causa d'un tret quan era a l'Hotel Palestina a Bagdad el 8 d'abril del 2003. D'aquesta manera, pretén poder extraditar-los al nostre país perquè siguin jutjats per aquests fets a l'Audiència Nacional.

Pedraz ha sol·licitat també al Consell General del Poder Judicial (CGPJ) permís per desplaçar-se a l'Iraq, entre els mesos d'octubre i novembre vinents, per investigar els fets sobre el terreny, han informat fonts jurídiques.

La interlocutòria dictada avui pel titular del jutjat central d'instrucció número 1 és conseqüència de la decisió del Tribunal Suprem de reobrir aquest cas, que havia estat arxivat per la sala penal de l'Audiència Nacional perquè va entendre que Pedraz no tenia prou base per continuar investigant la mort del càmera.
Mira també:
http://avui.elpunt.cat/noticia/article/3-politica/17-politica/201014-recerca-i-captura-per-als-militars-americans-imputats-en-l

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Ordena un juez español capturar a 3 soldados de EU por muerte de Couso
30 jul 2010
Madrid. El juez Santiago Pedraz de la Audiencia Nacional de España ordenó este jueves la búsqueda y captura de tres militares estadunidenses por el presunto asesinato del camarógrafo José Couso durante la invasión a Irak en 2003.

Pedraz ordenó la búsqueda y captura del sargento Thomas Gibson, del capitán Philip Wolford y del teniente coronel Philip Camp.

Asimismo, solicitó al Consejo General del Poder Judicial un permiso para viajar a Irak entre octubre y noviembre próximos para estar en el lugar de los hechos en el marco de sus investigaciones.

Es la tercera vez que se emiten órdenes de detención contra Gibson, Wolford y Philip de Camp.

José Couso, camarógrafo de la cadena de televisión privada Telecinco, murió el 8 de abril de 2003 alcanzado por el tiro de un carro de combate estadunidense cuando se encontraba en el hotel Palestina de Bagdad.

En 2006, la Audiencia Nacional había archivado la investigación considerando que la muerte de José Couso se había producido en el marco de un "acto de guerra" que no apuntaba de manera premeditada a los periodistas.

El Tribunal Supremo había después rechazado este argumento y ordenado, a petición de la familia de Couso, la reapertura de la investigación.

En 2009, la Audiencia Nacional volvió a archivar la investigación y anuló la imputación por "homicidio y delito contra la comunidad internacional" contra los tres militares estadunidenses.

Estimó entonces que los cargos contra estos militares que formaban la tripulación del tanque que disparó el obús que mató a Couso, se basaban en "indicios insuficientes".

Además del camarógrafo español, un ucraniano de la agencia Reuters, Taras Protsyuk, murió en el ataque.

La muerte de Couso, originario de Ferrol, Galicia, noreste de España, y quien era camarógrafo de Telecinco, tuvo lugar el 8 de abril de 2003 cuando se encontraba en el Hotel Palestina de Bagdad, sitio en que se alojaban y trabajaban los periodistas extranjeros que cubrían la invasión a Irak.

Un tanque M1 Abrams estadunidense disparó un cañón contra el hotel y murió en el acto el periodista ucraniano Taras Protsyuc, mientras que Couso resultó herido gravemente aunque falleció cuando era operado en el Hospital San Rafael de Bagdad.

El 26 de julio pasado, el Tribunal Supremo ordenó a la Audiencia Nacional reabrir el caso del camarógrafo al considerar que el ataque que le causó la muerte es penalmente imputable.

La Audiencia Nacional había archivado el caso considerando que los hechos no eran constitutivos de delito pero el Tribunal Supremo considera que el hecho merece enmarcarse en los delitos contra las personas y bienes protegidos en caso de conflicto armado.

También considera que se enmarca, en las normas del Derecho Internacional Humanitario, cuyo fin “no es poner fin a las guerras sino limitar la barbarie de los conflictos armados”.
Mira també:
http://www.jornada.unam.mx/ultimas/2010/07/29/ordena-juez-espanol-captura-de-militares-estadunidenses
Sindicato Sindicat