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Notícies :: criminalització i repressió
El Diciembre Griego – un año después [Federación Anarquista · Reino Unido]
06 des 2009
Ha pasado un año desde que los acontecimientos de Grecia cautivaron al mundo, cuando estudiantes, trabajadores, inmigrantes y parados tomaron las calles de las ciudades más importantes del país. El Diciembre Griego vio ejemplos generalizados de acción directa de la clase obrera, desde huelgas y sabotajes hasta la ocupación de escuelas, lugares de trabajo y edificios municipales. Este artículo quiere reflexionar sobre los aspectos que emergieron en la revuelta, lo que los acontecimientos significaron y lo que implican para el futuro.
Un chico de 15 años

El levantamiento Griego fue una conmoción. Mientras que habíamos sido testigos de recientes ejemplos comparables de revueltas proletarias a lo largo de Europa en Francia e Italia, la escala y ferocidad de los acontecimientos de diciembre nos cogió a muchos por sorpresa. Fue el asesinato de un chico de 15 años, Alexis Grigoropoulos, por parte de la policía griega, lo que provocó la indignación que enfervorizó a la sociedad griega. La brutalidad policial es una realidad cotidiana para muchos griegos –especialmente en los centros urbanos contra inmigrantes y la juventud antiautoritaria. La corrupción y la malversación reinan entre los políticos y líderes civiles, como la Iglesia, y existe una verdadera crisis de confianza en los políticos entre grandes sectores de la población. La crisis económica también significaba recortes generalizados en los sueldos, pérdidas de empleo y una mayor inseguridad para muchos. Mientras que los disturbios iniciales se limitaban a la juventud del centro urbano, la cruda injusticia del asesinato de un inocente de 15 años provocó frustraciones más profundas y generales con el orden social y político. El levantamiento reunió a diferentes sectores de la sociedad griega de un modo nunca antes visto.



No reivindicamos nada

La causa central del declive del levantamiento fue su fracaso a la hora de expandir la lucha a otros sectores de la clase obrera. Las asambleas populares y de barrio trataron de popularizar la lucha, y la ocupación de las oficinas de la GSEE (una de las asambleas a las que más gente acudió) también dio algunos pasos adelante. Sin embargo, en general buena parte de la actividad en las calles, aunque logró un gran grado de apoyo popular, no consiguió extenderse a los lugares de trabajo. los trabajadores de varias industrias clave llevaron a cabo, y continúan haciéndolo, acciones disruptivas (según se informa, la huelga de los estibadores del Pireo ha costado unos 5 millones de euros al día) contra los recortes y las pérdidas de empleo, pero nunca pareció que esto estuviera relaiconado con las ocupaciones y los disturbios en las calles.

Un resultado positivo de la revuelta fue que, gracias a su mensaje radical y totalmente anticapitalista, la mejor actividad de diciembre nunca fue empujada a una dirección reformista. A pesar del hecho de que el Partido Socialista trata de catalogarse como “antiautoritarios en el poder”, no surgieron nuevos “líderes” o alianzas políticas de los hechos. Muchas de las iniciativas populares perdieron ímpetu en algún momento, pero aún se mantienen como ejemplos positivos y edificantes de la autoorganización de la clase obrera contemporánea.



El auge de la extrema derecha

En las últimas elecciones europeas, aumentó el apoyo a las organizaciones de la extrema derecha (incluido el Reino Unido) en todo el continente. Grecia no fue una excepción, con LAOS (un partido populista de derechas) asegurándose dos representantes con el 7,14% de los votos. El Estado griego también ha querido implementar nuevas políticas anti-inmigración. En mayo el ministro de Orden Público prometió “limpiar” el centro de Atenas de inmigrantes, tratando de llevar a cabo planes para convertir una antigua base de la OTAN en un campo para estas personas desplazadas. A lo largo de diciembre, la colaboración entre la policía y los grupos paramilitares fascistas (como el neonazi “Amanecer Dorado”) estuvo bien documentada. Se fotografió a los fascistas ayudando en las detenciones, atacando a manifestantes e incluso utilizando material policial contra las manifestaciones. Desde diciembre, los grupos fascistas han apuntado a lo que ven como elementos clave tras el levantamiento –principalmente inmigrantes y anarquistas-, incluyendo un ataque con granada de mano en febrero contra una okupa popular. La actividad antifascista y antirracista, sin embargo, se ha mantenido fuerte y a pesar del aumento de la represión, los antifascistas de todo el mundo pudieron celebrar que las oficinas centrales de “Amanecer Dorado” habían sido pasto de las llamas.



La Izquierda tradicional y los sindicatos

Los partidos de la Izquierda tradicional y los sindicatos se apresuraron a mostrar sus verdaderos colores tras el estallido. El Partido Comunista Griego rápidamente denunció los disturbios como el trabajo de “oscuras fuerzas extranjeras” y llamó a sus miembros a mantenerse al margen. Miembros de su juventud incluso trataron activamente de bloquear las ocupaciones. El Partido Socialista, ahora en el poder, ha supervisado la represión estatal contra los anarquistas, incluyendo un asalto masivo de okupas y centros sociales en el barrio de Exarjia (el barrio en el que dispararon a Alexis). Los líderes sindicales tampoco quisieron que sus miembros se contagiaran del espíritu de revuelta. Durante el mes de diciembre cancelaron una manifestación clave que habría coincidido con el levantamiento, y desde ese momento los líderes han continuado restringiendo la actividad de los trabajadores.



El destino de un árbol

La imagen de un árbol de Navidad ardiendo en la plaza de Syntagma se convirtió en un poderoso símbolo de la revuelta. ¡Tan fuerte, de hecho, que en posteriores manifestaciones la policía mostró un mayor interés en proteger el árbol replantado que los bancos y tiendas de lujo de alrededor! La temporada de vacaciones, sin embargo, no fue buena para el levantamiento. Las celebraciones tradicionales como la Navidad tienen una gran importancia y muchas iniciativas no consiguieron reanudarse tras el parón. El consumismo frenético en que consiste el “espíritu navideño” también fue una verdadera barrera entre las demandas del levantamiento y la experiencia del público en general.



¿La vuelta de la lucha armada?

Los grupos armados han sido siempre un aspect de la izquierda griega. El grupo marxista “17 de noviembre” orquestó una campaña constante de asesinatos y atentados contra la policía griega y oficiales públicos durante 29 años hasta su desmantelamiento en 2002. Los acontecimientos de diciembre vieron cómo los sucesores de “17 de noviembre”, “Lucha Revolucionaria”, reivindicaba los disparos a un agente de policía en el Ministerio de Cultura. Sin embargo, el grupo “17 de noviembre” nunca tuvo un verdadero atractivo social. los acontecimientos de diciembre provocaron el surgimiento de otros grupos que parecen conseguir alguna simpatía. Estos son “Acción Popular” y “Conspiración Núcleo de Fuego” (CNF). Ambos se han responsabilizado de la detonación de explosivos de pequeña escala que no han causado heridos. El comunicado de CNF, que se ha publicado en los medios comerciales, ha sido particularmente popular entre la nueva oleada de ocupaciones de institutos. Por supuesto, todo esto ha servido de pretexto para las autoridades para rodear y detener a anarquistas y otros activistas involucrados en el levantamiento. Se justifican los grandes asaltos en Exarjia refiriéndose a la actividad de las guerrillas, mientras que tres chicos de 20 años han sido encarcelados bajo la ley antiterrorista por supuesta implicación en la CNF (esto a pesar de que el caso rápidamente se paralizó y tuvieron que mantenerse “a la espera” de pruebas contra ellos). La prensa burguesa también ha querido resaltar la actividad de los grupos de guerrilla como medio para desacreditar el levantamiento en general.



Uno, dos, muchos Diciembres

Mientras que diciembre de 2008 ha sido el punto más alto, la lucha continúa en Grecia. Aún hay un malestar generalizado en las industrias más importantes y 2009 ya ha visto fuertes expresiones militantes de acción en el lugar de trabajo. Muchos activistas también continúan luchando contra la reacción violenta a la revuelta, ya sea la vuelta del Estado a políticas sociales racistas, el aumento de la represión a los activistas, o incluso la violencia estatal selectiva. En el momento en que se escribe este artículo, queda una semana para el comienzo oficial de la “temporada de disturbios”, los treinta días entre el aniversario del Levantamiento de la Politécnica en 1973 (17 de noviembre), el aniversario del asesinato de Alexandros Grigoropoulos y el comienzo de del Levantamiento de Diciembre de 2008 (6 de diciembre) y el juicio a los asesinos de Grigoropoulos (15 de diciembre), y las cosas están tensas. Los trabajadores de la Organización de la Seguridad Social de Auto-Empleados (AOEE) han ocupado los dos edificios de la organización para exigir una renovación de los contratos temporales. ¡Incluso el sindicato de jugadores de baloncesto ha anunciado una huelga de dos días exigiendo una serie de reformas en sus condiciones laborales! Por el momento, no está claro si se verá una erupción en el sentido en que se vio el año pasado. Una cosa está clara: podemos seguir viendo a la clase obrera griega como una inspiración para la lucha de nuestra clase, incluso en los momentos sociales y económicos más duros.



Originalmente publicado en Resistencia, el periódico de la Federación Anarquista, número 118, diciembre de 2009-enero de 2010


Extraído de Libcom
Traducido por Klinamen
Mira també:
http://klinamen.org/article7085.html
http://klinamen.org

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