El dirigente obrero aclaró que lo que cayó fue “el peor de los símbolos de la perversa dictadura stalinista que nada tenía que ver con el marxismo ni con el socialismo”.

“Los gobiernos de Alemania, Europa y Estados Unidos en esta fecha se regocijan y realizan suntuosas actividades tratando de demostrar que hace 20 años cayó el socialismo o el comunismo. Es parte de una campaña infame que tiene por objetivo intentar “reeducar” a la clase trabajadora y a los pueblos oprimidos del mundo, para que no realicen revoluciones ni luchen por el socialismo. Y lo hacen asociando las banderas del socialismo con la perversa dictadura totalitaria stalinista que impuso su yugo en Europa del Este y durante más de 40 años fue la aliada fundamental que tuvo el imperialismo a nivel mundial para contener, pactar y hacer retroceder revoluciones”, expresó el líder obrero.

Señaló que por el contrario, “todos los explotadores del mundo, los oligarcas y las multinacionales tienen que estarse lamentando porque hace 20 años perdieron a su principal socio, a su principal aliado contra-revolucionario, junto con el cual lograron impedir que la revolución socialista se extendiera por toda Europa al finalizar la II Guerra Mundial; por Asia luego del triunfo de la revolución china; por Centroamérica y el Caribe con el triunfo de la revolución cubana; por Latinoamérica con el triunfo en Chile o por África con los levantamientos de los pueblos de Angola y Sudáfrica. El stalinismo desde su bunker en el Kremlin llamó a los trabajadores y pueblos del mundo a confiar en supuestas burguesías progresivas y hacer alianzas con determinadas potencias imperialistas con el ruin argumento de que así se debilitaba al imperialismo yanqui. Es la misma política de colaboración de clases y de capitulación a los enemigos que ha desarrollado por décadas el Partido Comunista de Venezuela que hoy muestra su claro perfil de traidores a la clase obrera nacional e internacional al doblegarse ante el gobierno nacionalista burgués del Presidente Chávez al apoyar las atrocidades que se adelanta en contra de los derechos de los trabajadores, en nombre del socialismo”.

"La caída del Muro de Berlín fue un triunfo revolucionario de los trabajadores"

Argumentó Chirino que “los trotskystas revolucionarios reivindicamos la caída del Muro de Berlín como un triunfo revolucionario que le permitió a los trabajadores alemanes su reunificación como clase obrera y sacarse de encima un gobierno y un régimen totalitario que los oprimió y explotó en nombre del socialismo, pero que todos sabemos no era así, ya que esos gobiernos y regímenes del Este Europeo eran una vulgar caricatura, como hoy lo es el Socialismo del Siglo XXI en Venezuela”.

Chirino se lamentó de quienes “dicen ser de izquierda y lloran la caída del Muro de Berlín y lo sienten como una derrota. Los trabajadores y pueblos del mundo no podemos considerarnos ni huérfanos ni viudas del stalinismo. Ese vergonzoso papel le corresponde a los burócratas de los partidos comunistas de todo el mundo que vivían de las migajas que les lanzaban desde el Kremlin y del PC de la Unión Soviética para que traicionaran revoluciones."

"La mejor prueba de que la caída del Muro de Berlín y de todos los gobiernos del Este Europeo fue un triunfo, es que los trabajadores alemanes y el conjunto de pueblos de Europa Oriental se salvaron de convertirse en esclavos como si sucedió en China donde la burocracia derrotó a la revolución y masacró a miles de estudiantes en Tiananmen. Por eso hoy el pueblo chino es esclavo de la burocracia del partido comunista chino en estrecha alianza con las multinacionales”.

Mas adelante abrió una polémica con quienes "se quejan que la caída del Muro de Berlín conllevó a la restauración del capitalismo, como si en esos países hubiese existido socialismo. Eso es falso. Todos sabemos que la época dorada en el Este Europeo se vivió en la Unión Soviética entre el triunfo de la revolución de octubre en 1917 y el año 1923, pero en medio de grandes dificultades ya que los obreros, campesinos y pueblos tuvieron que enfrentar una guerra contrarrevolucionaria. En ese periodo se lograron fundamentalmente conquistas democráticas y se expropio a los burgueses y terratenientes. Pero a partir del año 23 todo cambió, se retrocedió, porque triunfó la burocracia comandada por Stalin en el Partido Comunista que liquidó la vanguardia revolucionaria, realizó los oprobiosos Juicios de Moscú, asesinó en masa a miles, exilió a millones, entre ellos a León Trosky y luego lo mando a asesinar. El hecho de que haya preservado el control sobre los medios de producción, no implicaba que existiese socialismo, ya que esas empresas y tierras que los trabajadores expropiaron a los burgueses y terrateniente, fueron a su vez expropiadas por la burocracia que se las arrancó a los obreros y los campesinos, para ponerla al servicio de una casta de parásitos burócratas y del imperialismo”.

Chirino hizo una comparación con lo que acontece en Venezuela, diciendo que “aquí muchos dicen que avanzamos hacia el socialismo supuestamente porque el gobierno nacionaliza empresas o expropia. No hay tal nacionalización, lo que se hace es comprar a precio de mercado y con grandes rendimientos económicos para los empresarios. Y cuando se ha hecho alguna nacionalización o expropiación es porque los trabajadores se lo han impuesto, como en los casos de Venepal o Sidor. Y en otras oportunidades lo ha hecho exclusivamente para favorecer a la naciente boli-burguesía. Esas empresa en manos del Estado no son sinónimo de socialismo del Siglo XXI, ni de socialismo de ningún siglo, eso es un fraude que los revolucionarios consecuentes tenemos la obligación de esclarecer ante el pueblo y los trabajadores, de tal forma que cuando las masas rompan con este gobierno, no tengan temor de que están tumbando el socialismo, sino que están rompiendo con un gobierno igual de burgués que los de la IV república, sólo que en algunas épocas tiene roces con el imperialismo que lo obliga a actuar puntualmente en forma independiente en lo político, porque en lo económico sigue al pie de la letra las recomendaciones de los empresarios y multinacionales de todo el mundo, que quieren descargar sobre los hombros de los trabajadores el peso de la crisis capitalistas”.

Se requiere una nueva dirección revolucionaria

Lo que si es cierto indicó Chirino, es que “durante estos años se ha agudizado la crisis de dirección revolucionaria, lo que le ha permitido al imperialismo temporalmente sacarle provecho a la debacle del stalinismo. Pero también en forma parcial, porque el imperialismo sigue en crisis y hoy sufre los golpes que le dan los pueblos de Irak, Afganistán y Palestina. Intentan reacomodarse y montar base en Colombia, pero es en medio de una situación defensiva porque los pueblos del mundo están sublevados y no se calan más imposiciones del imperialismo. El gran problema que tiene el imperialismo es que ahora no cuenta con una dirección que le colabore para desmontar las revoluciones; esa es su tragedia y esta oportunidad histórica la tenemos que aprovechar los verdaderos revolucionarios, para construir la dirección revolucionaria que requieren los trabajadores y pueblos del mundo.”

“Durante estos años no logramos construir esa dirección revolucionaria y esa sigue siendo la tarea fundamental que tenemos los revolucionarios. Nosotros estamos empeñados en Venezuela de construir una herramienta política y también a nivel internacional, un partido revolucionario que sea capaz de orientar a los trabajadores hacia la toma del poder como lo hizo el partido bolchevique con Lenin y Trotsky a la cabeza. Esa es nuestra misión fundamental y seguiremos dedicando nuestros mejores esfuerzos a esa tarea, ya que compartimos la tesis de Trotsky que dice que la crisis de la humanidad se reduce a la crisis de su dirección revolucionaria”.

Más información:

Laclase.info

Notícias internacionales:

UIT-CI

Izquierda Socialista