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Notícies :: criminalització i repressió
Vergonzosa presión contra la ANAIRC
18 abr 2009
Asediada la casa de la presidenta por sindicatos blancos
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“Indignante” es la palabra más adecuada para catalogar esta nueva forma de presión y amenaza en contra de la presidenta de la Asociación Nicaragüense de Afectados por Insuficiencia Renal Crónica (ANAIRC), organización afiliada a la UITA. En la mañana de hoy, 17 de Abril, la casa de Carmen Ríos fue asediada por unas trescientas personas, muchos de ellos trabajadores activos del Ingenio San Antonio, quienes fueron convocados por los dizque “sindicatos” blancos de esta empresa, propiedad de la Nicaragua Sugar Estates Ltd (NSEL), que integra el Grupo Pellas.

“En la mañana de hoy me llamó una señora afiliada a la ANAIRC desde Chichigalpa, para avisarme que los sindicatos blancos del Ingenio San Antonio y de la Compañía Licorera de Nicaragua estaban organizando una marcha hacia Managua para tratar de impedir la protesta que a diario desarrollamos frente al Edificio Pellas –comentó Carmen Ríos a Sirel.

Como no encontraron el trasporte para movilizarse, decidieron quedarse en Chichigalpa y organizar un plantón frente a mi casa, supuestamente para protestar porque yo habría dicho que nuestro objetivo es el cierre del Ingenio San Antonio, lo cual es totalmente falso.

En nuestro planteamiento –continuó Ríos– nunca hemos dicho que queremos el cierre de la empresa, sino que reclamamos nuestros derechos por los daños causados a nuestra salud por la empresa”.

Fueron aproximadamente unas trescientas personas las que asediaron la casa de la presidenta de la ANAIRC. Según fuentes fidedignas que asistieron a esta nueva vergonzosa forma de amenaza, estas personas fueron pagadas por los dizque “líderes sindicales”.

“Les pagaron entre 100 y 150 córdobas (5 y 7 dólares) cada uno para que marcharan hasta la casa de la presidenta de la ANAIRC y fueron los mismos dirigentes sindicales con dinero facilitado por la empresa”, dijo la fuente.

Para la dirigente de la ANAIRC el temor no fue tanto por su persona y las amenazan que en estos últimos días se han multiplicado, sino para su niña que en ese momento se encontraba sola en la casa.

“Vino mi hermana y se la llevó muy asustada por esta nueva sinvergüenzada, mientras yo llamé de inmediato a la Policía para que fueran a resguardar el lugar y enviaran también personal en nuestro campamento en Managua. Debo reconocer –manifestó Ríos– que la Policía actuó de forma efectiva y por eso agradezco por el apoyo que nos está dando como ciudadanos y ciudadanas que quieren poder protestar sin correr el riesgo de venir agredidas o amenazadas de muerte, como ha ocurrido en los días pasados”.

Estos hechos deplorables dejan al descubierto el fuerte nerviosismo de la empresa, que ha querido subirle la parada a los miembros de la ANAIRC para tratar de contrarrestar la fuerte campaña de solidaridad y apoyo a los ex trabajadores azucareros afectados por la IRC, que se ha desatado a nivel nacional e internacional.

ANAIRC está en máxima alerta y ha llamado a todas las organizaciones que hasta el momento la han apoyado a mantenerse atenta a lo que pueda ocurrir en los próximos días, “ya que como siempre los ricos y poderosos hechan los pobres a pelearse entre ellos, para quedarse después con la máxima ganancia, riéndose de los que al final son los que pagan los platos rotos”, concluyó la presidenta de la ANAIRC.

Respaldo desde Italia

El día de ayer, la Asociación Italia-Nicaragua envió una carta de respaldo a la ANAIRC y a su presidenta.

“La Asociación Italia-Nicaragua, que desde hace varios años acompaña su lucha para que se les reconozca el derecho a ser indemnizados por los daños ocasionados a su salud, y que contribuye con un modesto apoyo enfocado al tema sanitario, expresa máxima solidaridad con la presidenta de la ANAIRC, Carmen Ríos, quien ha sido objeto en los días pasados de insultos vulgares y hasta amenazas de muerte a través de cartas y llamadas anónimas.

Sabemos –continúa la carta– que cuándo las formas de protestas y de lucha resultan incómodas para los intereses de sujetos importantes, frecuentemente las reacciones se traducen en ataques calumniosos y amenazas para tratar de desacreditarlas.

Creemos que el sufrimiento de los ex trabajadores azucareros del Ingenio San Antonio afectados por insuficiencia renal crónica, de sus familiares y de las viudas es algo que está a la vista de todo el mundo. Querer negar la realidad de una relación directa entre esta enfermedad y el uso de agrotóxicos, que se han usado en la producción de caña de azúcar, resulta una maniobra indecente que pone al descubierto la mezquinidad de los y las que rinden ese tipo de declaraciones.

Apelamos a todas las organizaciones de la sociedad civil nicaragüense e internacional, al gobierno de Nicaragua, a todos los ciudadanos y ciudadanas, para que contribuyan a tutelar el derecho a protestar de forma pacífica y democrática, sin tener que aguantar amenazas y que se garantice la seguridad de los integrantes de la ANAIRC que se están manifestando en Managua”, termina la carta de respaldo enviada desde Italia.

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