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Notícies :: amèrica llatina |
En América latina existe un agotamiento institucional
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per Graciela Fernández Correu-e: gracefernandezsanchez@yahoo.com.ar (no verificat!) |
22 mai 2008
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La construcción de un nuevo estado se hace imprescindible para dejar de estar presos del mercado de la muerte. |
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Barometro Internacional
Análisis PolÃtico y Social Nacional e Internacional De Venezuela y el Resto del Mundo.
Director: Diego Olivera. Jefe de Redacción: Miguel Guaglianone
Al frente de una investigación pionera sobre la construcción social del miedo en el continente, Roxana Reguillo, antropóloga mexicana, advierte sobre la responsabilidad del Estado y los medios, en la difusión de representaciones que vinculan juventud, pobreza y crimen. AquÃ, analiza el vaciamiento de lo público, las paralegalidades y el narcotráfico como nueva forma de reproducir el neoliberalismo.
“Estamos ante empresarios, no frente a sujetos confundidos que están actuando sin ton ni son. Ellos en México tomaron la decisión de dejar de pagar protección, por ejemplo, policÃaca o de circuitos al interior de los barrios populares, en efectivo, en dólares, y empiezan a pagar con mercancÃa, con cocaÃna. De tal manera, el policÃa del barrio, el pequeño dealer, la señora de la casa ya no tienen dólares, lo que tienen es cocaÃna, y cocaÃna a veces de buenÃsima calidad. Asà se abarata el costo, se expanden los circuitos de distribución y se genera un mercado transclasista, transversalizadoâ€?.
América Latina es un territorio en el que se ocultan, tanto a los actores polÃticos, como a los verdaderos responsables de los crÃmenes, mientras lo que aparece es la cara de la victimización. Los que surgen, son procesos muy peligrosos; porque se recurre a la estigmatización total o a un lugar común “guerra de pobres contra pobresâ€?. Se trata de una profunda ausencia de sentido, de pacto social, y de cualquier margen de acotamiento institucional, donde ya no se puede registrarse mutuamente como vecino, sino como enemigo y no es la pobreza lo que enfrenta, es la indefensión en la que ambos, compartiendo un mismo territorio, resisten a condiciones de vida cada vez más paupérrimas, materiales y simbólicas. Dice Reguillo, en una parte de su investigación.
Los criminólogos señalan estos circuitos del narcotráfico como funcionales para la gobernabilidad y el aplacamiento del conflicto social. Uno de los casos paradigmáticos de nuevas violencias, por ejemplo en Argentina, es el control paralegal de las familias peruanas en el barrio conocido como Bajo Flores. Es evidente que no basta, con que se pueda negociar con los lÃderes comunitarios; a veces representando a organismos del Estado, que terminan exponiéndose a la cada vez más evidente relación de las policÃas locales con los narcotraficantes; asà como también, es materialmente imposible, que se logre aislar el territorio de los flujos globales de comercialización de la droga.
Finalmente la expresión de estas violencias, de estos enfrentamientos territoriales hasta hoy, se hacen imposibles de ser combatidos. Ésta es la cruda realidad; aunque muchos gobiernos de Latinoamérica se rasguen las vestiduras diciendo que combaten el narcotráfico, como por ejemplo Colombia con su tan mentado plan, que en realidad justifica el accionar de fuerzas norteamericanas en la región; ocupando un lugar geopolÃticamente estratégico. |
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