China la gran conspiración neocons [TOP-SECRET]

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Comentari :: @rtivisme : globalització neoliberal : corrupció i poder : criminalització i repressió : educació i societat
China la gran conspiración neocons [TOP-SECRET]
per afc Adreça: Mallorca	29 mar 2008
La verdadera historia del éxito contemporáneo de China. Por qué hay que boicotear los Juegos Olímpicos y apoyar la Causa del Tibet libre. Quienes son los conspiradores que han montado todo este orden de expropiación, guerra, robo y pobreza en que vivimos. ¿Cuál es la verdadera historia de la protesta heróica de la Plaza de Tiananmen y por qué fueron aplastados?


Tengo un documentÃ³ Ãºnico, con el podrÃ¡s conocer cÃ³mo se fraguÃ³ la actual China neocons-comunista. Se puede decir que es Top-Secret porque aunque estÃ¡ publicado y disponible en librerÃas los medios se han encargado de ocultarlo. El informe â��secretoâ�? que publico pone al descubierto que â��la historia oficial occidentalâ�? sobre la represiÃ³n de la plaza de Tiananmen es totalmente falsa. Y a la vez el texto demuestra el carÃ¡cter mutante de las â��fuerzas de la conspiraciÃ³n neoconsâ�? ya que adoptan y penetran en todas las ideologÃas con tal de dominar el poder y anular las capacidades de defensa y oposiciÃ³n que toda sociedad tiene. El documento TOP-SECRET que aquÃ expongo es un formidable trabajo de investigaciÃ³n, muy documentado, muy trabajado con multitud de pruebas y comprobaciones de Naomi Klein, popular personalidad de la antiglobalizaciÃ³n neocons que si alguien tenÃa alguna duda de su lealtad y honestidad (lÃ³gico porque la Klein es mediÃ¡tica y a los medios no pasa nadie que no puedan controlar) no tiene mÃ¡s que leer este impresionante y valioso libro: La doctrina del SHOCK. Si de verdad quieres saber la maldad del totalitarismo neoliberal-neocons y de la codicia extrema y criminal que les mueve, tienes que estudiarte este libro con detalle. Y difundir su contenido. Para luego poder proponer las formas (inevitablemente nuevas y novedosas) que nos permitirÃ¡ destruirles y cambiar las cosas hacia un horizonte mÃ¡s esperanzador respetuoso con las identidades, los pueblos, el bienestar general y la vida. Si quieres conocer mÃ¡s detalles de este informe TOP SECRET que desenmascara totalmente la estrategia criminal neoliberal-ChicagoBoys-Kissinger que secuestrÃ³ y acabÃ³ con nuestras esperanzas de paz y progreso despuÃ©s de la CaÃda de Muro de BerlÃn, son solo 24 euros muy bien gastados, â��La doctrina del SHOCK, Naomi Klein, ed. PaidÃ³s. Â¡Â¡Viva el libre mercado!! En Inglaterra algÃºn periÃ³dico importante ha discutido sobre el libro, pero aquÃ en EspaÃ±a con unos medios mucho mÃ¡s dominados de lo que parece no verÃ¡s nada, la corte de tertulianos neocons y satÃ©lites ni siquiera entenderÃan dos lÃneas. Aunque te parezca mentira en la librerÃa hay mÃ¡s informaciÃ³n interesente que en Internet (sin negar su importancia y la influencia de nuestro â��modesto trabajoâ�?), porque en la web los neocons tienen impostores-bastardos con caretas o piel de todas las ideologÃas y pelaje (gracias al anonimato) para asÃ aplastar cualquier conocimiento que no les convenga. Las librerÃas y las editoriales sin embargo son pequeÃ±os o grandes negocios mucho mÃ¡s diverso y por tanto con posibilidades de que haya grupos que se empeÃ±en en resistir la desinformaciÃ³n y la mentira de estos parÃ¡sitos que se creen â��los dueÃ±os del mundoâ�?. De todas formas es necesaria esa industria editorial y las pequeÃ±as librerÃas pero tambiÃ©n Internet en pÃ¡ginas y web alternativas con la libertad de expresiÃ³n que todavÃa nos â��podemos coger sin permisoâ�?. Yo que soy experto mecanÃ³grafo (400 pulsaciones minuto) me he puesto a la labor para sacar el capÃtulo de la implantaciÃ³n en China del comunismo neocons que tantos dividendo ha dado a las Ã©lites comunistas chinas y a la vez a la flor y nata de las castas mÃ¡s parÃ¡sitas: los especuladores y la banca internacional â��de negociosâ�?. Especuladores y banca de negocio que, por cierto, ahora con las estafas USA en la vivienda estÃ¡n recibiendo miles de millones gratuitos mientras millones de usamericanos hipotecados estÃ¡n siendo despojados de lo invertido y de sus casas. IMPORTANTE este texto TOP-SECRET tambiÃ©n para algunos en â��la izquierda autÃ©nticaâ�? porque no se atreven a apoyar la Causa justa del Tibet (como la Palestina, el Sahara, Irak, etc) porque los ven demasiado pacÃficos y condescendientes con el capitalismo. GravÃsimo error porque si algÃºn paÃs de verdad representa el ideal capitalista (explotaciÃ³n salvaje y minorÃas â��progresistasâ�? multimillonarias) ese ideal no es la USA decadente y criminal de George W. Bush y sus aliados sÃ¡trapas neocons, neoliberales y pro-israel sino la China del burÃ³crata y tambiÃ©n criminal Hu Jintao. Por ello, los honestos dentro de la â��izquierda autÃ©nticaâ�? (que hagan el esfuerzo de leer el texto) no dormirÃ¡n esta noche porque Naomi Klein descubre en su investigaciÃ³n cual es el importante vÃnculo entre Pinochet y la polÃtica econÃ³mica y represiva China ahora encabezada por el burÃ³crata represor y criminal Hu Jintao. Repito para que te des cuenta de la magnitud de la conspiraciÃ³n, que mientras la FED regala el dinero a la banca estafadora, los hipotecados, todos y no solo las hipotecas basura, estÃ¡n siendo robados â��legalmenteâ�? con intereses de un usurero y escandaloso 30%. No me cabe la menor duda de que la FED estÃ¡ vendida a la banca (y a la red de intereses) mÃ¡s estafadora, criminal y negligente del mundo y de la historia de la humanidad. Y ademÃ¡s la FED por su incapacidad para afrontar la crisis haciendo pagar lo debido a quienes la han provocado no estÃ¡ haciendo otra cosa que conspirando contra los intereses del pueblo usamericano y con ello conspirando tambiÃ©n, repito, contra los intereses de un mundo mÃ¡s estable, decente y desarrollado. El binomio desleal y antiamericano Bush y Fed lo Ãºnico que van a conseguir es robarnos mÃ¡s mientras buscan y conspiran con alguna nueva guerra o espanto para â��que no se note lo que robanâ�?. Precisamente la tesis fundamental e importantÃsima de la Klein es demostrar como utilizan el terror y la desesperaciÃ³n social para imponer de forma rÃ¡pida y total un nuevo statu quo que deja indefensa a las sociedades frente a â��sus nuevos dueÃ±osâ�?. Del texto de la Naomi Klein sobresalgo estas denuncias y anotaciones fundamentales intentando con ello motivarte a leer todo el Informe TOP-SECRET: --La definiciÃ³n de libertad de Milton Friedman â��en la que las libertades polÃticas son secundarias, o, incluso, innecesarias en comparaciÃ³n con la libertad de comercio sin restricciones- se ajustaba perfectamente a los intereses que tomaban forma por aquel entonces en el PolitburÃ³ chino. --El modelo a emular del gobierno chino era el Chile de Pinochet: mercados libres combinados con un control polÃtico autoritario y represiÃ³n de mano de hierro. --Lo que encendiÃ³ las protestas de Tiananmen fue el descontento popular con los cambios econÃ³micos y neoliberales de Deng Xiaoping, consistentes en una reducciÃ³n salarial y una subida de precios que causaron â��una crisis de despidos masivos y desempleoâ�?. --Tiananmen fue de las primeras manifestaciones anti-neoliberales de la historia. --Deng Xiaoping utilizÃ³ el terror y la tortura que aniquilÃ³ la protesta social de la plaza de Tiananmen para acelerar las reformas-conspiraciÃ³n neoliberal que garantizaban el negocio mÃ¡s grande de la historia de la humanidad a todos los grandes especuladores asociados con las Ã©lites comunistas chinas. SegÃºn un estudio de 2006, el 90% de los â��milmillonariosâ�? de China (calculados en yuanes chinos) son hijos de funcionarios del Partido Comunista. Son en total aproximadamente, unos 2.900. Estos vÃ¡stagos del partido controlan una riqueza valorada en unos 260.000 millones de dÃ³lares USA. Se trata de un cÃ¡lculo del Estado corporativista del que Chile fue precursor en tiempos de Pinochet: una puerta giratoria entre las Ã©lites empresariales y polÃticas que unen su poder para eliminar a los trabajadores como fuerza polÃtica organizada [modelo tambiÃ©n seguido por Aznar] --La sociedad capitalista totalitaria neoliberal actual que ha secuestrado y maniatado nuestras democracias no es consecuencia de una secuencia de hechos espontÃ¡neos sino de una conspiraciÃ³n entre burÃ³cratas, economistas mediocres y degenerados y los especuladores mÃ¡s estafadores... Si tienes dudas del secuestro e inoperancia de nuestras democracias te recuerdo que Bush a robado por dos veces su Presidencia al voto del pueblo USA, que el 11-S fue aprovechado para la guerra y el robo masivo, y de la conspiraciÃ³n de Sarkozi hablarÃ© otro dÃa... afc euroimmersion.com 29Mrz8 INFORME TOPSECRET: CÃ³mo fue implantado el CAPITALISMO mÃ¡s salvaje en CHINA Una investigaciÃ³n honesta y valiente de Naomi Klein [El propagandista neocons] Fukuyama aseguraba [desinformando cÃnicamente] que las reformas democrÃ¡ticas y las â��del libre mercadoâ�? eran procesos gemelos imposibles de desdoblar. Sin embargo, en China, el gobierno estaba haciendo precisamente eso, desligar ambos procesos: estaba realizando grandes esfuerzos para desregular los salarios y los pecios y ampliar el Ã¡mbito de acciÃ³n del mercado, pero, al mismo tiempo, estaba firmemente decidido a oponerse a toda reivindicaciÃ³n de elecciones democrÃ¡ticas o de reconocimiento de los derechos humanos. Los manifestantes de Tiananmen, por su parte, exigÃan democracia, pero muchos de ellos estaban en contra de las medidas gubernamentales de promociÃ³n del capitalismo sin restricciones, un detalle del que la prensa occidental olvidÃ³ informar en la mayorÃa de sus noticias y reportajes sobre el mencionado movimiento popular. En China, la democracia y la teorÃa econÃ³mica de la Escuela de Chicago no estaban yendo de la mano, ni mucho menos, sino que ocupaban posiciones enfrentadas a uno y otro lado de las barricadas levantadas en torno a la plaza de Tiananmen. A principios, de los aÃ±os ochenta, el gobierno chino, liderado entonces por Deng Xiaoping, estaba obsesionado por evitar una reediciÃ³n en su paÃs de lo que acababa de suceder en Polonia, donde los trabajadores habÃan podido formar un movimiento independiente que desafiaba el monopolio que ejercÃa el Partido Comunista sobre el poder. Pero lo que preocupaba a los mÃ¡ximos dirigentes chinos no era la posibilidad de que desapareciesen la industria de propiedad estatal y las comunas agrÃcolas que constituÃan el fundamento del Estado comunista. De hecho, el propio Deng se habÃa convertido en un entusiasta de la reconversiÃ³n de la economÃa del paÃs hacia una economÃa de empresa [capitalista]. Hasta tal punto llegaba su entusiasmo que, en 1980, su gobierno invitÃ³ a Milton Friedman a visitar China para impartir tutorÃas a centenares de funcionarios de alto nivel, profesores y economistas del partido sobre los elementos fundamentales de al teorÃa del libre mercado. [Friedman engatusÃ³ a la gente con un mensaje demagÃ³gico apropiÃ¡ndose de las ventajas de la economÃa social de mercado que el nunca puede representar] y â��lo mucho y mejor que vivÃa la gente corriente en los paÃses capitalistas que en los paÃses comunistasâ�?. [Friedman ya anunciÃ³ cual es el modelo econÃ³mico y social nada democrÃ¡tico de las Ã©lites mafiosas, con Kissinger a la cabeza, que el representa y le financian] La definiciÃ³n de libertad de Friedman â��en la que las libertades polÃticas son secundarias, o, incluso, innecesarias en comparaciÃ³n con la libertad de comercio sin restricciones- se ajustaba perfectamente al proyecto de futuro que tomaba forma por aquel entonces en el PolitburÃ³ chino. El Partido querÃa abrir la economÃa a la propiedad privada y el consumismo sin renunciar a su propio control del poder, un plan que garantizaba que, en el momento en que los activos del Estado fuesen puestos a subasta, las autoridades del partido y sus familiares serÃan las primeras en hacerse con los pedazos de negocio mÃ¡s rentables [exactamente esto hizo tambiÃ©n Aznar]. SegÃºn esta idea de la â��transiciÃ³nâ�?, las mismas personas que controlaban el Estado bajo el comunismo lo seguirÃan controlando bajo el capitalismo, pero disfrutando, al mismo tiempo, de una mejora sustancial del estilo de vida. El modelo que pretendÃa emular el gobierno chino no era el de USA [Â¿?], sino, mÃ¡s bien, el del Chile de Pinochet: mercados libres combinados con un control polÃtico autoritario posibilitando una represiÃ³n de mano de hierro. Desde el primer momento, Deng entendiÃ³ con claridad que la represiÃ³n serÃa crucial. Bajo Mao, el Estado chino habÃa ejercido un control brutal sobre su pueblo, deshaciÃ©ndose de los oponentes y enviando a los disidentes a campos de reeducaciÃ³n. [...] Ahora el partido iba a emprender su propia contrarrevoluciÃ³n [...] para que una minorÃa pudiera recaudar enormes beneficios. En 1983, al tiempo que abrÃa el paÃs a las inversiones extranjeras y reducÃa las pocas protecciones sociales Deng ordenÃ³ la creaciÃ³n de la PolicÃa Armada Popular, un nuevo cuerpo antidisturbios de carÃ¡cter mÃ³vil (sin una base de operaciones fijas) y formado por 400.000 agentes, con la misiÃ³n de aplastar todo indicio de â��delito econÃ³micoâ�? (o sea, huelgas y manifestaciones). Muchas de las reformas de Deng tuvieron Ã©xito y fueron populares (los agricultores adquirieron un mayor control sobre sus vidas y el comercio regresÃ³ a las ciudades). Pero, a finales de la dÃ©cada de 1980, Deng empezÃ³ a introducir medidas que generaron oleadas de desempleados, inflaciÃ³n, y se abrieron profundas desigualdades entre los ganadores y los perdedores del cambio hacia la nueva China [capitalista]. En 1988, el partido, que estaba topando con una fuerte reacciÃ³n negativa, se vio obligado a dar marcha atrÃ¡s a parte de sus medidas de desregulaciÃ³n de precios. TambiÃ©n causaba creciente indignaciÃ³n la corrupciÃ³n y el nepotismo flagrantes que se practicaban en el partido. Numerosos ciudadanos chinos querÃan mÃ¡s libertad dentro del mercado, pero el tÃ©rmino â��reformaâ�? era una especie de nombre en clave para los negocios, ya que muchos de ellos tomaban ilegalmente posesiÃ³n de activos que anteriormente manejaban como burÃ³cratas del Estado. Ante el peligro de que [la conspiraciÃ³n y conversiÃ³n al] libre mercado se fuese al garete, Milton Friedman fue llamado como gran [â��sacerdote capitalistaâ�? para bendecir] el impulso que los â��reformadoresâ�? chinos necesitaban. Una reediciÃ³n, en cierto modo, de lo sucedido cuando los de Chicago y los piraÃ±as habÃan solicitado su ayuda en 1975 a raÃz de que su programa [de expropiaciÃ³n capitalista] hubiese desatado una revuelta interna en Chile [yo supongo que en los dos casos Friedman no fue mÃ¡s que la â��cara bonitaâ�? que repetÃa los dictados criminales y expropiatorios de Henri Kissinger entre otros grandes mafiosos, recuerdo que Kissinger fue el que diseÃ±Ã³ la â��transiciÃ³n democrÃ¡tica maniatadaâ�? del Chile neocons de Pinochet... ] Cuando Friedman y su esposa, Rose, llegaron a Shangai en septiembre de 1988, quedaron deslumbrados por la rapidez con que la China continental se iba asemejando cada vez mÃ¡s a Hong Kong. Pese a la rabia contenida que se respiraba en la base social del paÃs, todo lo que vieron no hizo mÃ¡s que confirmar su â��fe en el poder del libre mercadoâ�?. Friedman describiÃ³ aquel momento como â��el perÃodo mÃ¡s esperanzador del experimento [comunista y neoliberal] chinoâ�?. [Friedman se rie de la â��izquierda autÃ©nticaâ�?, donde hay, siguiendo las pautas de la guerra frÃa, muchos infiltrados neocons] Friedman se regocijaba a su regreso de la China â��comunistaâ�? que acababa de pasar doce dÃas como invitado de diversos organismos gubernamentales y se habÃa reunido con altos dirigentes del Partido Comunista (el secretario general Zhao Ziyang y con Jiang Zemi futuro presidente). Y, sin embargo, esas reuniones no habÃan provocado indignaciÃ³n alguna entre los defensores de los derechos humanos en las universidades USA. â��Curiosamente di el mismo consejo a China que a Chileâ�?. Y concluÃa preguntandose con sarcasmo, â��deberÃa estar preparado para una avalancha de protestas por haber estado dispuesto a asesorar a un gobierno tan malÃ©fico?â�?. Meses despuÃ©s el gobierno chino empezÃ³ a emular muchas de las tristemente famosas tÃ¡cticas de Pinochet... El viaje [santificador y corrupto] de Friedman no surtiÃ³ el efecto deseado. Las fotos publicadas en los diarios oficiales en las que se podÃa ver al profesor dando sus bendiciones [capitalistas] a los burÃ³cratas [comunistas] del partido no consiguieron hacer â��entrar en razÃ³nâ�? a la poblaciÃ³n. En los meses siguientes, las protestas se volvieron mÃ¡s firmes y radicales. Los signos mÃ¡s visibles de la oposiciÃ³n eran las manifestaciones de estudiantes en huelga en la plaza de Tiananmen. Estas histÃ³ricas protestas fueron descritas de forma casi unÃ¡nime en los medios internacionales como una confrontaciÃ³n entre unos estudiantes modernos e idealistas, deseosos de la implantaciÃ³n de libertades democrÃ¡ticas de corte occidental, y la vieja guardia autoritaria que pretendÃa salvaguardar el Estado comunista. Recientemente ha surgido otro anÃ¡lisis sobre el significado de lo acontecido en su moento en Tiananmen que pone en cuestiÃ³n la versiÃ³n mayoritaria y atribuye al friedmanismo [conspiraciÃ³n necons-comunista] y al sufrimiento social y econÃ³mico, la causa fundamental. Este relato alternativo [desmitificador y verdadero] ha sido propuesto entre otros, por Wang Hui, uno de los organizadores de las protestas de 1989 y que es hoy uno de los mÃ¡s destacados intelectuales de la conocida como â��nueva izquierdaâ�? de China. En su libro Chinaâ��s New Order, publicado en 2003, Wang explica que los manifestantes reunÃan a una amplia representaciÃ³n de sectores diversos de la sociedad china y no sÃ³lo a estudiantes universitarios de Ã©lite: tambiÃ©n habÃa obreros industriales, pequeÃ±os empresarios y profesores. Lo que encendiÃ³ las protestas, segÃºn recuerda, fue el descontento popular con los cambios econÃ³micos â��revolucionariosâ�? [y neoliberales] de Deng, consistentes en una reducciÃ³n salarial y una subida de precios, que causaron â��una crisis de despidos masivos y desempleoâ�?. SegÃºn Wang â��estos cambios actuaron de catalizador de la movilizaciÃ³n social de 1989â�?. Las manifestaciones no iban dirigidas contra el hecho de que se produjera una reforma econÃ³mica, sino contra la naturaleza especÃficamente friedmanita [neoliberal y kissingueriana] de las reformas: su velocidad, su carÃ¡cter implacable y el carÃ¡cter marcadamente antidemocrÃ¡tico del proceso. Wang dice que la peticiÃ³n de elecciones y de libertad de expresiÃ³n que hacÃan los manifestantes estaba estrechamente ligada a esa otra discrepancia en el apartado econÃ³mico [o sea que Tiananmen fue de las primeras manifestaciones anti-neoliberales de la historia]. Lo que impulsaba la demanda de democracia era el hecho mismo de que el partido estuviese imponiendo cambios de alcance â��revolucionarioâ�? [neoliberal] sin el mÃ¡s mÃnimo consentimiento popular previo. En ese sentido, Wang escribe que â��lo que se pedÃa, en general, eran medios democrÃ¡ticos para supervisar la equidad del proceso de reforma y de reorganizaciÃ³n de las prestaciones socialesâ�? [por supuesto en ningÃºn momento ningÃºn chino negaba la necesidad de â��transformar radicalmenteâ�? el comunismo maoÃsta] [IMPORTANTE] Esta revuelta y descontento obligaron al PolitburÃ³ a decantarse por una opciÃ³n clara y determinada. La disyuntiva no era, como tantas veces se ha dicho [por la desinformaciÃ³n y/o ignorancia de los medios], entre democracia y comunismo, o entre â��reformaâ�? o â��vieja guardiaâ�?. La decisiÃ³n pasaba por un cÃ¡lculo mÃ¡s complejo: Â¿debÃa el partido llevar adelante su programa de libre mercado a toda costa, lo que significaba pasar por encima de los cadÃ¡veres de los manifestantes si era necesario? Â¿O debÃa ceder a las peticiones de democracia de Ã©stos, ceder su monopolio sobre el poder y arriesgarse a un serio revÃ©s en su proyecto econÃ³mico? [Es decir Kissinguer y Milton Friedman habÃan creado un â��interÃ©s comÃºnâ�? entre la minorÃa gobernante china y la especulaciÃ³n y Wall Street de tal forma que a ninguna de las dos partes implicadas en esta conspiraciÃ³n antidemocrÃ¡tica interesaba â��fastidiar en negocio inmensoâ�? con debilidades democrÃ¡ticasâ�? algo parecido como apunta NoemÃ Klein se logrÃ³ con la â��privatizaciones masivasâ�? en la Polonia tras la revuelta anticomunista traicionando asÃ las esperanzas de cambio del pueblo polaco y del mundo entero y poniendo muy a la vista la maldad criminal de esta gente y de toda su red de intereses bastardos] [Frente a la protesta popular y esperanzadora de Tiananmen] El PolitburÃ³ iba a proteger su programa de â��reformaâ�? econÃ³mica [corrupciÃ³n y expropiaciÃ³n masiva que tambiÃ©n les habÃa vendido un personajillo miserable como Milton Friedman y un criminal como Henry Kissinger] aplastando a los manifestantes. Ã�se fue el claro mensaje que el gobierno de la RepÃºblica Popular China transmitiÃ³ cuando, el 20 de mayo de 1989, declarÃ³ la ley marcial. El 3 de junio, los tanques del EjÃ©rcito Popular de LiberaciÃ³n avanzaron contra las concentraciones de protesta disparando indiscriminadamente sobre los manifestantes. Los soldados irrumpieron violentamente en los autobuses en los que se refugiaban numerosos estudiantes y los golpearon con sus porras; otro conjunto de tropas atravesÃ³ las barricadas que protegÃan la plaza de Tiananmen (donde los estudiantes habÃan erigido una estatua representativa de la Diosa de la Democracia) y detuvieron a los organizadores. Por todo el paÃs tuvieron lugar redadas similares al mismo tiempo. [Al igual que ahora pasa con Tibet y con Irak] Nunca tendremos estimaciones fiables del nÃºmero de personas muertas y heridas durante aquellos dÃas. El partido comunista admite Ãºnicamente unos cuantos centenares, pero los testimonios de los testigos visuales de los hechos en aquel entonces sitÃºan la cifra de muertos entre 2.000 y los 7.000, y la de heridos, hasta en 30.000. Lo que siguiÃ³ a las protestas fue una caza de brujas nacional contra todos los crÃticos y los oponentes del rÃ©gimen. Unos 40.000 fueron arrestados, miles acabaron en prisiÃ³n y muchos de ellos (puede que centenares) fueron ejecutados. CÃ³mo ya sucediera en AmÃ©rica Latina, el gobierno reservÃ³ su represiÃ³n mÃ¡s dura para los obreros industriales, que representaban la amenaza mÃ¡s directa para el capitalismo desregualdo [y el negocio que representaba para especuladores y burÃ³cratas chinos]. â��La mayorÃa de los arrestados y prÃ¡cticamente todos los que fueron ejecutados eran obreros [`Â¡Â¡viva el comunismo neoliberal!!]. El sometimiento sistemÃ¡tico de los detenidos a palizas y a torturas se convirtiÃ³ en una prÃ¡ctica ampliamente publicitada con el fin evidente de aterrorizar a la poblaciÃ³nâ�?, segÃºn escribe Maurice Meisner. [Con un gobierno de manporreros fieles se garantizaba un gran negocio para los grandes de la especulaciÃ³n global Â¿cÃ³mo poder resistirse a invertir en una China comunista tan fiel y amiga de las grandes mafias de la especulaciÃ³n global?] [La trama de la conspiraciÃ³n comunista-capitalista no fue revelada y los grandes medios vendÃan el tÃpico anticomunismo de siempre ocultando la naturaleza malÃ©fica y degenerada de una conspiraciÃ³n y formidable negocio entre los burÃ³cratas chinos, los mÃ¡s salvajes especuladores de Wall Street y mafiosos encabezados por Henry Kissinger y/o satÃ©lites] La masacre fue tratada mayoritariamente en la prensa occidental como un nuevo ejemplo de la brutalidad comunista: del mismo modo que Mao habÃa liquidado a sus oponentes durante la RevoluciÃ³n Cultural, ahora Deng, â��el Carnicero de PekÃnâ�?, aplastaba a sus crÃticos bajo la atenta mirada del retrato gigante de Mao. En uno de sus titulares, el Wall Street Journal afirmaba que â��las duras medidas tomadas por China amenazan con retrasar el impulso reformista de [los Ãºltimos] diez aÃ±osâ�?, como si Deng hubiese sido un enemigo de aquellas reformas y no su mÃ¡s dedicado defensor, hasta el punto de estar decidido a llevarlas a un nuevo y mÃ¡s audaz terreno. [IMPORTANTE] Cinco dÃas despuÃ©s de la sangrienta ofensiva represora, Deng pronunciÃ³ un discurso ante la naciÃ³n y dejÃ³ meridianamente claro que lo que estaba protegiendo con aquella actuaciÃ³n no era el comunismo, sino el capitalismo. Tras [mentir y] tachar a los manifestantes de â��grupo donde se refugiaban buena parte de los desechos de la sociedadâ�?, el presidente chino confirmÃ³ el compromiso del partido con la terapia de shock econÃ³mica [termino que usa NoemÃ Klein para definir la imposiciÃ³n salvaje y bajo terror o catÃ¡strofes de desregulaciones y expropiaciones a favor de minorÃas de especuladores que son los Ãºnicos beneficiados de la â��revoluciÃ³n capitalista neoliberalâ�?]. â��En resumidas cuentas, esto era una prueba y la hemos superadoâ�?, dijo Deng. Y aÃ±adiÃ³: â��QuizÃ¡s este episodio negativo nos permita seguir adelante con la reforma y con la polÃtica de puertas abiertas a un ritmo mejor y mÃ¡s constante, incluso mÃ¡s rÃ¡pido. [...] No nos hemos equivocado. No hay ningÃºn error en los cuatro principios esenciales [de la reforma y conspiraciÃ³n econÃ³mica]. Si algÃºn problema existe al respecto, es que dichos principios no han sido implementados aÃºn de manera suficientemente exhaustivaâ�?. Orville Schell, un acadÃ©mico y periodista experto en China, resumiÃ³ la opciÃ³n tomada en aquel momento por Deng Xiaoping del modo siguiente: â��Tras la masacre de 1989, lo que vino a decir en realidad fue que no iban a poner freno a la reforma econÃ³mica, pero que sÃ pondrÃan fin, en la prÃ¡ctica, a toda reforma polÃticaâ�?. [Henry Kissinger, un mezquino y segÃºndon funcionario ahora gran sacerdote de la mafia global, estaba que se salÃa: el mÃ¡s grande negocio de las Ã©lites gobernantes diseÃ±ado por Ã©l estaba en marcha y con una capacidad de represiÃ³n absoluta e impune que garantizaba el Ã©xito. Dicen que cuando el carnicero Deng Xiaoping se encontrÃ³ con el criminal Kissinger se besuquearon profundamente...] Para Deng y el resto del PolitburÃ³, las posibilidades del libre mercado habÃan pasado a ser ilimitadas. Del mismo modo que el terror de Pinochet habÃa despejado las calles para dejar paso a su â��cambio revolucionarioâ�? [â��expropiaciÃ³n neoliberalâ�?], Tiananmen habÃa allanado el camino para la transformaciÃ³n radical sin que hubiera ya temor alguno de rebeliÃ³n. Si a los agricultores y a los obreros la vida les resultaba mÃ¡s difÃcil a partir de entonces, tendrÃan que aceptarlo en silencio o enfrentarse a la ira del ejÃ©rcito y de la policÃa secreta. Y asÃ, con la poblaciÃ³n sumida en un estado de salvaje terror, Deng pudo emprender reformas mÃ¡s radicales [y capitalistas] que no habÃa abordado hasta aquel momento. [Nota de Naomi Klein:] Deng tuvo algunos destacados defensores [de su matanza y represiÃ³n despiadada, al igual que ahora tambiÃ©n los hay contra el Tibet]. Tras la masacre, Henry Kissinger escribiÃ³ un artÃculo de opiniÃ³n en el que sostenÃa que el partido no habÃa tenido otra opciÃ³n: â��NingÃºn gobierno del mundo habrÃa tolerado que la plaza principal de su capital estuviese ocupada durante ocho semanas por decenas de miles de manifestantes [...] De ahÃ que fuese inevitable la actuaciÃ³n [criminal] del gobierno chinoâ�?. [Por si tenÃas alguna duda esta es la prueba de la complicidad del gran sacerdote mafioso y criminal: Henry Kissinger, por otra parte un burÃ³crata de segunda como sus amigos comunistas chinos] En los tres aÃ±os siguientes a aquel baÃ±o de sangre, la nuez china se abriÃ³ a la inversiÃ³n extranjera gracias, especialmente, a las zonas de explotaciÃ³n especiales constituidas por todo el paÃs. Al anunciar estas nuevas iniciativas, Deng recordÃ³ al paÃs que, â��de ser necesario, no se escatimarÃ¡n medios para eliminar cualquier posible agitaciÃ³n futura tan pronto como aparezca. PodrÃan asÃ introducirse desde la ley marcial hasta otros mÃ©todos mÃ¡s severosâ�?. [IMPORTANTE] Ã�sa en concreto fue la oleada de reformas que transformÃ³ a China en el taller industrial de mano de obra barata del mundo y, por tanto, en la ubicaciÃ³n preferida de las plantas de producciÃ³n subcontratadas por prÃ¡cticamente todas las multinacionales del planeta. NingÃºn paÃs ofrecÃa condiciones mÃ¡s lucrativas que China: impuestos y aranceles reducidos, autoridades corruptibles y, por encima de todo, una mano de obra abundante y escasamente remunerada que, durante muchos aÃ±os, no iba a querer arriesgarse a exigir salarios dignos ni las protecciones laborales mÃ¡s bÃ¡sicas por miedo a las mÃ¡s violentas represalias [que ademÃ¡s serÃan ignoradas y/o tergiversadas a favor de los chino-capitalistas por los grandes medios occidentales]. [IMPORTANTE] Para los [grandes especuladores] y para el partido [comunista], esta ha sido [una conspiraciÃ³n degenerada, criminal e impune] con la que â��todosâ�? han salido ganando. SegÃºn un estudio de 2006, el 90% de los â��milmillonariosâ�? de China (calculados en yuanes chinos) son hijos de funcionarios del Partido Comunista. Son en total aproximadamente, unos 2.900. Estos vÃ¡stagos del partido (conocidos como â��los principitosâ�?) controlan una riqueza valorada en unos 260.000 millones de dÃ³lares USA. Se trata de un cÃ¡lculo del Estado corporativista del que Chile fue precursor en tiempos de Pinochet: una puerta giratoria entre las Ã©lites empresariales y polÃticas que unen su poder para eliminar a los trabajadores como fuerza polÃtica organizada [tambiÃ©n Aznar ha hecho sus pinitos al respecto]. Este acuerdo de colaboraciÃ³n es apreciable hoy en dÃa en el modo en que las empresas multinacionales mediÃ¡ticas y tecnolÃ³gicas ayudan al Estado chino a espiar a sus propios ciudadanos y a asegurar de que cuando los estudiantes realicen bÃºsquedas por Internet de expresiones como â��masacre de Tiananmenâ�? o, incluso, â��democraciaâ�?, no aparezca ningÃºn resultado en pantalla. â��La creaciÃ³n de la sociedad de mercado actual no fue consecuencia de una secuencia de hechos espontÃ¡neosâ�? escribe Wang Hui, â��sino de la interferencia y la violencia estatalesâ�?. [La sociedad capitalista totalitaria neoliberal actual no es consecuencia de una secuencia de hechos espontÃ¡neos sino de una conspiraciÃ³n entre burÃ³cratas, economistas degenerados y los especuladores mÃ¡s estafadores como muy bien demuestra el muy valiente y Ãºtil libro de Naomi Klein, â��La doctrina del SHOCK, Ed. Paidos. AquÃ he copiado de la pag. 248 a la 256. Si eres cÃ³mplice por un cambio de todo esto tu responsabilidad es ayudar a difundir textos que nos ayuden a desenmascarar y combatir a esta gentuza de ladrones y criminales] Yo entiendo al Dalai Lama y admiro y respeto su pacifismo extremista aunque difÃcil de compartir totalmente. Entiendo tambiÃ©n sus gestos de recabar apoyos de incluso un presidente degenerado como George W. Bush (que otro dÃa explicarÃ©). Pero con independencia de coincidencias o no, de lo que no cabe duda es que la China maoÃsta invadiÃ³ y se apropiÃ³ de la tierra tibetana y ahora con represiÃ³n sangrienta e invasiones y desplazamientos masivos de emigrantes chinos estÃ¡n cometiendo un holocausto cultural y humano contra el pueblo tibetano que es extremadamente pacÃfico. AsÃ que ya sabes cuando compres una camiseta de las Olimpiadas o algÃºn producto con el logo OlÃmpico Chino a quienes estas financiando y consintiendo. Por la Causa del Tibet libre, por la Causa de una China social y democrÃ¡tica, por todas las Causas de los pueblos y de la humanidad que aspira un mundo en PAZ y algo mÃ¡s decente y justo. Son solo casi 4.800 palabras, no es tanto, espero que lo puedas leer todo y ayudar a su difusiÃ³n total y/o parcial segÃºn tu mism@ valores... El siguiente capÃtulo es descubrir como a pesar de ser esta mafia neocons kissingueriana la que ha montado este inmenso negocio y conspiraciÃ³n con China son a la vez los que estÃ¡n preparando una guerra con China para volver a la dinÃ¡mica de la Guerra frÃa que tanto les beneficiÃ³. No hay mÃ¡s que leer prensa kissingueriana y supuestos think tanks necons como "Foreing Afair". La razÃ³n es muy clara ademÃ¡s de todo lo que aporta N.Klein porque son mafias que al final se comen unos con otros... pero no podemos dejar que continÃºen robando nuestros sueÃ±os y nuestro bienestar. Otro mundo es posible e inevitable. afc euroimmersion.com 29Mrz8
Mira també: http://usuarios.lycos.es/euroim/china-neocons.htm
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Comentaris

Re: China la gran conspiración neocons [TOP-SECRET]
per sdf	29 mar 2008
seguint la mateixa línea aquí tenim els Xavier Casas,Hereu, Mallol, Saura, Narvaez, Carles Martí Chacón, etc... nou rics, especuladors, neolliberals amb màscara de polítics d'esquerres,... jajajajajaja.

Re: China la gran conspiración neocons [TOP-SECRET]
per Anarquista	29 mar 2008
¿Alguien habia pensado que en China no había capitalismo?

Re: China la gran conspiración neocons [TOP-SECRET]
per Eduard	30 mar 2008
XINA SÂ´HA CONVERTIT EN EL PAIS MES CAPITALISTA DEL MÃ�N I EVIDENTMENT ESTANT ENVAÃ?NT TOTS ELS MERCATS OCCIDENTALS AMB ELS SEUS PRODUCTES DE MALA CALITAT I A BAIX COST PROVOCANT LA RUÃ?NA DEL COMERÃ� EUROPEU I NACIONAL. XINA ES UN PAIS COMPLETAMENT CAPITALISTA PERTO QUE DE COMUNISTA NOMÃ�S CONSERVA LA SIMBOLOGIA I ELS SEUS METODES OPRESSORS MASSIUS CONTRA TOT EL SEU PAIS.O SIGUE QUE SON UNA COMUNISMO-CAPITALISME, O COM ELLS MATEIXOS ES DESCRIUEN " SOM UNA ECONOMÃ?A SOCIALISTA DE MERCAT ". EMBOLICA QUE FA FORT.

Re: China la gran conspiración neocons [TOP-SECRET]
per top-secret??	15 abr 2008
pues no sé, para ser TOP-SECRET le has dado una propaganda al documento que para qué...