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Notícies :: criminalització i repressió |
En España, hoy: Lupiañez: «Me violaron con un palo y me sometieron a 50 sesiones de bolsa al dÃa»
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per Gorka Lupiañez Correu-e: info ARROBA behatokia.inf (verificat) |
21 des 2007
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Este es el relato íntegro de torturas sufridas por el joven vasco Gorka Lupiñez, detenido recientemente por la Guardia Civil. Tras 5 días incomunicado en dependencias policiales, fue enviado a prisión incomunicada por otros 8 días más. Tras 13 días, la familia y defensa pudieron por fin ir a Soto del Real, y oír el trato que sufrió durante esos 5 días. |
Manifestaciones de GORKA LUPIAÑEZ MINTEGI.
En Soto del Real, el dÃa 19.12.07.
Estas manifestaciones están completadas con la entrevista mantenida en la misma prisión el 17.12.07.
Para esta entrevista le obligaron a Gorka a entrar en unos determinados locutorios, por lo que es posible que la misma haya sido grabada.
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- Me detuvieron el dÃa 6 de diciembre hacÃa las 6 o 6:30 horas, de la tarde. Iba caminando por la carretera cerca de Berriz, y pararon dos Patrol de la Guardia Civil, que me pidieron la documentación y después de hacer comprobaciones durante cerca de una hora y al revisar la riñonera que llevaba, me detuvieron.
- Me tiraron al suelo, y me quitaron los pantalones, dejándome con la malla que llevaba debajo. Me ataron las manos a la espalda. Me dieron patadas, muchas patadas. Uno decÃa a los otros que me soltasen, para que huyera y poder hacer dos a uno, con referencia a Capbretón. Al final me metieron en el Patrol, me pusieron con la cara pegada al cristal y con un Cetme apoyado en la sien, y asà me condujeron, según dijeron, a La Salve en Bilbao. Me prohibieron abrir los ojos
- En La Salve me bajaron a la carrera del vehÃculo, y me metieron en un cuarto. Me pusieron una capucha más o menos hasta el labio superior, y pude ver algo y oÃr las voces de los que estaban allÃ. HabÃa cuatro personas, dos de paisano y dos de uniforme. Me dieron una paliza. Sobre todo golpes en los testÃculos. Me empezaron a hacer preguntas sobre muchos temas, queriendo que diese nombres. Entre continuos gritos y golpes, uno de ellos montó la pistola, y me la puso en la cabeza. Me llevaron a otro cuarto, y me comunicaron que estaba incomunicado.
- Me sacaron de allà corriendo y me metieron a un coche. Al de unas tres horas, salimos hacia Madrid. Lo dijeron ellos. Me dijeron que allÃ, en Madrid, me iba a enterar. En el coche iban dos delante, y dos a mi lado detrás. El de mi izquierda me chillaba y golpeaba con la mano abierta. El de la derecha me puso una bolsa de plástico en la cabeza. Cada rato, la cerraba con las manos en el cuello, y me provocaba asfixia.
- Pararon el coche al pasar un peaje, porque uno de ellos, que habÃa estado celebrando el dÃa de la constitución, habÃa bebido estando de juerga, y estaba borracho y necesitaba orinar. Ese Guardia Civil me dijo que nadie sabÃa que estaba detenido, y que me podÃa pegar un tiro. Me dijo que ellos sólo se dedicaban a torturar e interrogar, que tenÃan turnos de cuatro meses, y que por eso tenÃa que estar allÃ, aunque no estaba bien. Hasta llegar a Madrid, continuaron los golpes y la colocación de la bolsa en la cabeza. Cuando llegamos a Madrid, me dijeron que estabamos en la Dirección General o algo similar.
- En cuanto entré en un edificio, me llevaron a un cuarto, me desnudaron y me pusieron un antifaz, con el que estuve hasta ser trasladado al Juzgado. Me mandaron hacer flexiones. Me pincharon tres veces en el cuello, en la columna, entre los omoplatos o un poco más arriba. El tercer pinchazo me provocó un dolor muy fuerte, que me bajó por toda la columna. Esto se lo conté a la que se presentó como Médico Forense, y ella me dijo que tenÃa unos puntitos rojos en esa zona. No sé lo que pondrÃa en sus informes. También me tocaron con algo, que me pareció un papel. Dijeron que era todo ello para calcular cómo podÃan ponerme los electrodos.
- Por lo que me manifestó la Médico Forense, sobre la hora de la primera visita que me hizo, creo que puedo afirmar que me visitó todos los dÃas. El primer dÃa me dijo que era viernes a la una del mediodÃa. Yo pensaba para ese momento que llevaba ya dÃas detenido.
- En dÃa y medio me habÃan obligado a realizar miles de flexiones. A la vez me golpeaban en la cabeza, a los lados y arriba, con algo que podrÃa ser como un listÃn, o con una porra de algún material como goma. Con los golpes con ese “listÃnâ€?, veÃa como luces. Me ponÃan una bolsa en la cabeza, y me metÃan dentro de ella humo de tabaco. Me la cerraban hasta provocarme asfixia.
- Los interrogatorios eran continuos. Casi no pisé el calabozo el tiempo que estuve allÃ. Salvo unas horas el último dÃa. Constantemente me estaban preguntando cosas. Los interrogadores se cansaban y, cada cierto tiempo, podrÃa ser una hora, se cambiaban por otros. Los distinguÃa por las voces. Ellos dijeron que cambiaban cada hora. Eran habitualmente cuatro, en cada grupo, por las voces.
- HabÃa momentos en los que contestaba a las preguntas con cosas incoherentes, y no sabÃa razonar ni terminar las frases. Pienso que era por la falta de aire. Cuando desvariaba mucho, me dejaban descansar un poco.
- Me ponÃan una manta doblada sobre el cuerpo, y me daban puñetazos a través de ella.
- A partir de lo que considero un dÃa y medio desde la detención, me empezaron a hacer la bañera además de las cosas que ya me venÃan haciendo. Me ataron en un colchón de espuma, y me metieron la cabeza en agua helada.
- Luego empezaron a hacerme lo que ellos llamaban “aguaparkâ€?. DecÃan que se lo habÃan enseñado los israelitas. El “aguaparkâ€?, consistÃa en que me tumbaban en un colchón, me sujetaban los pies, los brazos y la cabeza, y me echaban agua con una manguera, en la boca y en la nariz. Cuando ya no podÃa aguantar, tenÃa que respirar. En ese momento, me tiraban un balde de agua a la cara, y me ahogaba. En algún momento y en esa situación debà de arañar a alguien al revolverme. A partir de ese momento me ataban con “celoâ€? en los tobillos, y en las muñecas me ponÃan unas protecciones y me ataban también con “celoâ€?.
- Estando desnudo me obligaban a ponerme con los brazos abiertos. Me tiraban baldes de agua muy frÃa por encima. Como temblaba, decÃan que era el “ángel nerviosoâ€?.
- Aproximadamente cuando serÃa el segundo dÃa y medio, entre hacerme el “aguaparkâ€? y el “ángel nerviosoâ€?, me pusieron a cuatro patas en el suelo, y trataron de meterme un palo por el culo. Como no pudieron hacerlo, me tumbaron en el suelo boca arriba, me sujetaron, me levantaron las piernas, y en esa posición me metieron el palo por el culo.
- En algún momento me pusieron atado en un colchón, me sujetaban un cable en el dedo gordo del pie izquierdo, y otro en la mano derecha atado con “celoâ€?. OÃa el ruido de descargas eléctricas, pero no sentÃa nada.
- La Médico me veÃa todos los dÃas, pero cuando me preguntó por el trato recibido y por como estaba, no le conté nada. TenÃa miedo a lo que pudiera ocurrir. Le dije que se lo dirÃa en la Audiencia Nacional. Me mandó dormir, pero le dije que no me dejaban. Para ir ante la Médico, me ponÃan unas mallas y una camiseta. Me conducÃan ante la puerta de una habitación, me quitaban el antifaz y me miraban los ojos, al parecer porque llevaba mucho tiempo con ellos tapados. Cuando salÃa de la habitación, de nuevo me ponÃan el antifaz y me desnudaban. Me preguntaban qué habÃa dicho a la Médico, mientas me daban porrazos.
- En los dÃas que estuve detenido, me pudieron hacer más de 50 sesiones con la bolsa por dÃa. Hice más de 10.000 flexiones. Dos (2) veces me hicieron lo de la bañera. Muchas veces lo de la manguera. Lo de la simulación de electrodos lo hicieron dos (2) veces. Porrazos y golpes sin lÃmite.
- Como no querÃa comer, en una ocasión me metieron un sobado en la boca a la fuerza. Echaron “colacaoâ€? al suelo, y me obligaron a chuparlo en el suelo.
- Me tiraron numerosas veces del pelo. Tanto de la cabeza como del pubis. Me arrancaron mucho pelo del lado izquierdo de la cabeza.
- Los interrogatorios fueron permanentes y los gritos constantes. Me dijeron que iban a actuar contra mi padre. Que mi madre habÃa muerto de un infarto. Que estaban detenidos mi hermano y su mujer. Y que a mi sobrino, al hijo de ellos, le habÃan violado con un palo.
- Hice tres declaraciones ante la Guardia Civil. Estaban preparadas. Me dijeron que no tuviera problemas. Que si se me olvidaba algo, el instructor de la declaración me lo recordarÃa. Y asà lo hizo en todas las declaraciones. Me decÃa lo que se me estaba olvidando, de lo que estaba preparado. Me dijeron que iba a tener un Abogado, pero que no le podÃa mirar. No sé si estuvo presente algún Abogado en esas declaraciones. Las declaraciones creo que las hice el sábado, el domingo y el lunes. Era a la noche en todos los casos, y ellos decÃan la hora al iniciarse la declaración.
- Cuando termino la tercera de las declaraciones, me llevaron al calabozo, y me dijeron que me iban a dejar descansar. No habÃan pasado ni unos quince minutos, un tiempo corto, me llevaron de nuevo a un cuarto donde estaba alguien que no habÃa intervenido en los interrogatorios de los dÃas anteriores. Lo noté por su voz. Me dijo que él tenÃa una función. Que era sacarme algo que no hubiera dicho con anterioridad. Me empezó a dar bofetadas en la cara, en los dos lados, y me provocó muchas llagas en el interior de la boca. Me ató los testÃculos y el pene con una cuerda, y se puso a estirar. También me estiraba con la mano. En un momento empecé a sangrar del pene.
- A la forense se lo dije esto y tomó nota. Le dije que tenÃa los testÃculos morados y lo vio. Todo esto fue poco antes de ir a la Audiencia. Cuando me iban a llevar a la Audiencia, el Instructor de las diligencias policiales me dijo que tenÃa que decir al Juez lo mismo que habÃa dicho allÃ. Que de lo contrario me iba a enterar. Me limpiaron, sobre todo la cabeza, y me vistieron para ir ante el Juez.
- Cuando llegué a la Audiencia me hicieron declarar con Abogado de Oficio. Me negué a declarar ante el Juez, y sà le conté los malos tratos recibidos.
- Cuando me llevaron a la prisión, le dije al médico de la cárcel que tenÃa varias lesiones en la boca. Me dijo que estaba bien. Le dije que cómo podÃa decir esto sin mirarme. Y me contestó que estaba bien y que no iba a mirar nada.. No sé lo que habrá puesto en los informes pero no me miró.
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Notas.- Estando incomunicado Gorka Lupiañez, y fechado el dÃa 12 de diciembre se remitió un escrito al Juzgado, en el que se le requerÃa para que, en el plazo de 24 horas, se hicieran análisis de sangre y de orina a Gorka. Dado que la causa está secreta, desconocemos en este momento si se dio curso al escrito. Gorka ha manifestado que no se le ha realizado ninguna de esas pruebas.
Permaneció incomunicado hasta el viernes dÃa 14 en la prisión en la que se encuentra en este momento.
Es su voluntad presentar una denuncia por lo ocurrido. |
Mira també:
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Comentaris
Re: En España, hoy: Lupiañez: «Me violaron con un palo y me sometieron a 50 sesiones de bolsa al dÃa»
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per company |
21 des 2007
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aquesa és la democràcia espanyola. |
Re: En España, hoy: Lupiañez: «Me violaron con un palo y me sometieron a 50 sesiones de bolsa al dÃa»
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per pipol |
21 des 2007
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A ejpana no es tortura? però nomes a alguns als que ens volem anar de un estat opresor, posfranquista i antidemocratic, que tracta la santa constitució com si fos la biblia.
S'aplica el mateix per els de extrema dreta?, que van matan, posant cocteles molotof, pallizes, insultan, etc...?
Per ells la llei antiterrorista també o per ningú!!!! |
Re: En España, hoy: Lupiañez: «Me violaron con un palo y me sometieron a 50 sesiones de bolsa al dÃa»
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per Un |
21 des 2007
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Espanya fa pudor. Un paus on es tortura per sistema a les persones pel simple fet de ser vasques, magrebis, catalans o gàllecs, i que alhora sempre empara i protegeix a l'ultradreta no és una democràcia sols és el petit regne de taïfes dels hereus de Franco: Joan Carles I, Bono, Aznar, Zapatero, Garzon, Grande-Marlaska... |
Re: En España, hoy: Lupiañez: «Me violaron con un palo y me sometieron a 50 sesiones de bolsa al dÃa»
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per -- |
21 des 2007
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puta guardia civil, esos si que son una banda de terroristas y no la gente que lucha por su pueblo. |
Re: En España, hoy: Lupiañez: «Me violaron con un palo y me sometieron a 50 sesiones de bolsa al dÃa»
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per ^¨ |
21 des 2007
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Verguenza de Guardia Civil, aunque luego sean honrados como heroes cuando mueren, mientras obreros y trabajadoras en general mueren sin ningún tipo de apoyo. Que basura que debe ser este país para que honremos a su muerte, a militares y policias.
Puta España y puta guardia civil! |
Re: En España, hoy: Lupiañez: «Me violaron con un palo y me sometieron a 50 sesiones de bolsa al dÃa»
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per Guardia Civil |
22 des 2007
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Pues espero que, almenos, disfrutases con tu empalamiento anal, porque seguro que eres un maricón hijo de la gran puta patria vasca. Estoy convencido de que chillaste como una nena, llegando exhausto al orgasmo. Ni las gordas pollas de los béstias negratas que bien seguro que te follas, te habrían excitado tanto. Si yo hubiese estado allý, contigo, después de meterte el palo (a ser posible astillado) por todo el intestino hasta el estómago, te hubiese obligado a lamerlo. Así saborearías el gusto de tu propia mierda impregnada en el gran consolador de madera, ¡¡¡rojo separatista asqueroso!!! |
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