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Notícies :: immigració |
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Militars volien assaltar un CIE
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per lector |
28 set 2006
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Incidente entre policías y militares en un centro canario tras un desalojo frustrado de 190 africanos
Incidente entre policías y militares en un centro canario tras un desalojo frustrado de 190 africanos
ERENA CALVO
SANTA CRUZ. «Ya se habían producido muchos roces, pero no de este calibre». El que habla es Agustín Brito, responsable regional de la Confederación Española de Policía (CEP) en Canarias, que ayer por la tarde informaba en declaraciones a este periódico de un «gravísimo conflicto» que se produjo este martes en el centro de internamiento de Las Raíces -un antiguo acuartelamiento militar situado cerca de la capital tinerfeña- «entre miembros del Cuerpo Nacional de Policía y del estamento militar». Conflicto del que daba cuenta por la mañana, a través de un comunicado, también el Sindicato Unificado de la Policía.
Según relataron desde esta última organización, sobre las dos de la tarde del martes «se presentó en Las Raíces -donde actualmente permanecen internados unos 3.000 «sin papeles»- un general con cien soldados, que bajaron de unos camiones, armados, a desalojar a unos 190 inmigrantes que están acogidos en una nave abandonada del complejo».
«Acompañados de una ambulancia»
Para Brito la actuación es «inadmisible»; llegaron, cuenta, «en varios vehículos, con indumentaria bélica, cascos y armas largas; se hicieron acompañar también de una ambulancia, suponemos que por lo que pudiera pasar». Los agentes que custodian a los inmigrantes en el acuartelamiento, continúan desde el SUP, «constituyeron un cordón policial» al entender que el recinto es ahora un centro de internamiento autorizado por el Gobierno, «cuya vigilancia corresponde al Cuerpo Nacional de Policía, destinado a labores humanitarias en el fenómeno de la inmigración».
Después de largas negociaciones, «en las que intervino el jefe superior de la Policía en Canarias, Narciso Ortega, el responsable del continegente militar comunicó la desactivación del operativo». Desde el Mando de Canarias, sin embargo, comunicaron a este periódico no conocer en qué se basan ambos sindicatos policiales para realizar dichas afirmaciones.
Para la CEP, en cambio, el asunto está claro y los culpables del roce entre policías y militares, señalan, «son la Delegación del Gobierno en Canarias y el Ministerio del Interior». El acuartelamiento militar de Las Raíces, en desuso desde hacía años, se habilitó como centro de internamiento tras la primera crisis de los cayucos de este año, en marzo.
En un primer momento tuvo capacidad para unos mil inmigrantes, aunque desde entonces ya ha experimentado seis ampliaciones hasta disponer de las más de 3.000 plazas con las que cuenta actualmente. El mecanismo es sencillo, sólo hace falta montar más tiendas de campaña en función de las necesidades del momento.
Sin embargo, explica Brito, «el fiscal general, Cándido Conde-Pumpido, ha ordenado la inspección de los centros canarios y el de Las Raíces no es una excepción». Para Brito, ante el inminente control, «la Delegación del Gobierno habría podido ordenar que algunos de los inmigrantes fuesen distribuidos en los pabellones que emplean los militares del servicio de guardia para pernoctar sin su permiso». Orden que, a su vez, «intuimos que habría provocado la reacción del general». Con los inmigrantes «escondidos» en las naves, afirma, «quieren dar una imagen del centro que no es la real». |
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