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El "Bestmotivny" se suicida
per bestmotivny Correu-e: bestmotivny@hotmail.com (no verificat!)	12 mar 2006
Tras año y medio de polémica vida, duras críticas, elogios y cariños, momentos buenos y malos, el "Bestmo" se suicida con un 7º y último número (que tan sólo consta de un artículo) que trata de explicar y resumir los 6 anteriores. Sin más, salud y destrucción
La última aclaración     Este es el último artículo del Bestmotivny, y en él se va a intentar aclarar fundamentalmente qué carajo hemos querido decir con esta publicación que se suicida. Nos hemos dado cuenta de que poca gente ha entendido qué hemos querido expresar en estos 7 números y más de 1 año de vida. Ha gustado a alguna gente y ha disgustado a una muchedumbre, de la cual la mayoría no ha entendido un pimiento de lo que aquí se ha dicho (a quienes sí lo han entendido y aun así tampoco les ha gustado, nada hemos de decir).     Bien, la publicación ha intentado difundir una serie de ideas y sentimientos, tal vez polémicos, de destrucción ciega de todo lo establecido, de ningún proyecto ni alternativa, de acabar con el orden, con la sociedad, de ser libres y salvajes, de propagar el caos, de destruir aquí y ahora y no cuando seamos X o en el momento Y o tras haber hecho Z o sentado unas bases previas (qué se le va a hacer, las matemáticas nunca se nos dieron bien). Pero somos conscientes, y esa es nuestra mayor autocrítica, que hemos sido profundamente auto-referenciales, y que desde estas líneas también nos hemos defendido (y hemos defendido a otr@s compañer@s afines) de los ataques de los que han/hemos sido objeto.     Así pues vamos a pasar con las aclaraciones a ver si se nos entiende, y luego nos callaremos definitivamente, pues ya no hay nada más que decir. Si se nos entiende y no se comparte lo que decimos, sol@s nos quedaremos, no pasa nada, hay costumbre; si después de esta se nos sigue sin entender pues mayor motivo para callarnos, eso sí en este último caso os podéis ir tod@s a la mierda o haceroslo mirar.     1.- Al principio la publicación no se define como nihilista aunque se siente gran simpatía por el nihilismo, sin embargo algun@s "compañer@s" nos definen, a nosotr@s y a nuestro entorno, como "nihilistas", porque aducen que no tenemos teoría, que no queremos construir nada, que no tenemos proyecto (algo no exactamente cierto, al menos no todo y no en un primer momento), y sobre todo, porque lo negamos todo (fundamentalmente dos dogmas al parecer indiscutibles: la clase obrera, y la revolución). También se nos define como "suicidas" porque seguimos defendiendo en todo momento el ataque total a las personas y estructuras que sustentan el dominio aquí y ahora, y se aduce a tal efecto que no se dan las circunstancias apropiadas para ello, al menos ahora y al menos así, y que para eso primero hay que sentar unas bases de crecimiento cuantitativo y de construcción de redes, bases y demás (algo que no siempre desechamos pero que no vemos prioritario, pues para nosotr@s lo prioritario es recuperar nuestra vida ya, y no vamos a esperar a nadie ni a crear nada que nos lastre). En la definición de suicida entra el hecho de que ni queramos ni tengamos estrategia (no tenerla no es lo mismo que ser un descerebrado), pues vemos que nuestro comportamiento estaría siempre determinado por la estrategia a seguir, pese a que se pueda variar ésta, y eso es algo a lo que no estamos dispuest@s. Parece que por tener estrategia vamos a ganar y además sin caid@s ni entalegad@s, lo que nos parece de cuento de hadas. Si tenemos que acabar en el maco, acabaremos, y si hay gente fuera que continúa la lucha y además nos apoya (hablamos de a l@s insurgentes en general) pues mejor, pero el acabar dentro sin nadie en la calle no nos asusta, porque es lo que hay y no queremos que nos retenga este factor. La lucha sí continuará, porque mientras haya dominio habrá rebeldes, otra cosa es que no continúe a renglón seguido o en los mismos términos, o que haya parones o cortes o ciclos, pero lucha habrá y las distintas aportaciones de l@s insurgentes quedarán ahí para otra gente. Es por ello que a fuerza de tener que defender el ataque visceral a nuestras posiciones acabamos asumiendo la etiqueta de nihilistas (pues nos hizo indagar más sobre el nihilismo y enamorarnos de él, al menos bajo nuestra subjetiva y alocada interpretación) y suicidas (en el sentido en que no esperamos a nadie, ni a nada). Por eso a partir del número 2 la publicación pasa a definirse como nihilista suicida, y bien orgullos@s.     2.- Ahondando en estos factores y argumentos vamos publicando cada vez más cosas sobre el nihilismo, y a consecuencia de nuestras vivencias y nuestro desarrollo en el plano de las ideas, la deriva lógica de ello supone llegar a negarlo todo, desde el poder en su aspecto material hasta en su aspecto algo más intangible, criticando y atacando por ello no sólo los clásicos trabajo, Estado, Capital, mercancía,... sino también los menos clásicos civilización, sociedad (de cualquier tipo, no sólo esta u otra), orden, asamblea, etc, Poder en general, Autoridad en esencia, y no únicamente sus manifestaciones actuales. Rematamos una tarea ya empezada años atrás, a partir de la crítica a la clase obrera o proletariado, a la democracia directa (y de cualquier forma) y a la asamblea, como formas alienantes y entes opresivos... el resto fue sólo un desenlace cantado una vez en harina, y de ese desenlace salió el Bestmotivny, y anteriormente como paso intermedio otras publicaciones ("hermanas mayores" como el Venganza y otras anteriores).     3.- También y por el mismo motivo ahondamos en el suicidio (ya que somos suicidas, ¿no?). Con lo del suicidio queríamos expresar el hecho de romper los límites, de que muchas veces el miedo, la estrategia y la mal llamada prudencia nos hacen imponernos unos límites aun más estrechos que los impuestos por el propio sistema, y por ahí no estamos dispuestos a pasar. Queríamos provocar un poco irónicamente, en el sentido de que si la gente ve como un suicidio tratar de romper con todo y traspasar los límites pues somos un@s suicidas, y comenzamos a meter imágenes de gente suicidándose (y no sólo, también de gente luchando en solitario contra el mundo, que no se olvide nunca ésto) y a hacer referencias al suicidio (e incluso artículos en los últimos números, interesad@s también por este tema a fuerza de asumir sarcásticamente la etiqueta), para tratar de hacer ver que "suicida" o "suicidio" son palabras que no se pueden tomar a la ligera y aplicar así como así, y lo decimos por experiencia. Nosotr@s nunca hemos tomado la definición suicida sin reflexionar y a chiste fácil. Cierto es que algun@s de quienes hacemos esta publicación hemos podido bromear con ello, y puede que a veces en la publicación se haya dado esa impresión (lo cual no se corresponde exactamente con la realidad), pero eso no ha sido así por falta de reflexión o porque nos importe un pimiento o por ser aficionad@s al humor negro, si no por tomárnoslo en serio y querer superarlo a través del humor, el sarcasmo y la ironía. Algun@s de nosotr@s sabemos lo que es intentar suicidarse (y por suerte o por desgracia, nunca se sabe, fallar, como es evidente). Lo que se ha intentado con el tema del suicidio es por un lado tratar de hacer ver que hay que romper con los límites, y por otro adentrarnos en un tema no ajeno al mundo en que vivimos para analizarlo, para superarlo y sobre todo para que no se tome a la ligera o a pitorreo fácil. Nunca se ha hecho apología de él, sino que se ha dicho que la inmolación es una salida tan respetable y una forma de lucha tan viable como cualquier otra y debe ser respetada y tomada en su justa consideración. Así mismo nunca hemos dicho a la gente que se vaya para casa o que se suicide. Se ha dicho, en relación a la derrota, algo que hemos remarcado mucho asociado al suicidio, que tal y como está el tema todo está perdido, pero que aun así hay que seguir adelante porque no hay otra opción y que quien luche únicamente para ganar (pues de ser así no lucharía, así está el tema de la mentalidad militarista y capitalista del triunfador) que mejor lo deje y se ahorre el mal trago. Decimos que nos da igual si es posible o no ganar, que no vemos una posible victoria, pero que eso nos da igual, que hemos de seguir adelante aunque supiéramos a ciencia cierta y sin dudas que vamos a ser derrotados dramáticamente (lo cual no está, al menos ahora, muy alejado de la realidad, y si no, no hay más que mirar alrededor). Hemos de luchar porque ya no hay vuelta atrás, y si ganamos pues mejor, y si no, pues la acción por la acción y la lucha por la lucha nos habrá llenado y caeremos con la cabeza bien alta, sabiendo que hemos sido libres y consecuentes.     4.- Hemos sido conscientes en todo momento de que estábamos básicamente sol@s en nuestra lucha concreta y en nuestros planteamientos (no sol@s en la lucha por la anarquía en general, o solos físicamente, sino sin a penas afinidades, eso sí, las pocas que hay, hasta el final): nos importa un pimiento. Haremos lo que tengamos que hacer y asumiremos las consecuencias y no nos escudaremos en la estrategia, las condiciones objetivas, en incidir en la sociedad a costa de pararnos a esperar (es más, a lo mejor ni queremos incidir en ella, que narices, algun@s de nosotr@s no tenemos ninguna intención de incidir en ella, lo que queremos es cargárnosla y punto, y al que se ponga por delante, pues también).     5.- No lo dejamos por las críticas, que han sido en aluvión y tremendamente cobardes. Sólo unas pocas personas nos han dicho a la puta cara lo que pensaban, el resto se ha limitado a despotricar por ahí, a cuchichear o a ponernos a parir por la espalda. Al correo electrónico no ha llegado ni una sola crítica (si muchos ánimos y peticiones, sugerencias, intercambios, etc). A la gente que ha hablado por detrás pero que nada nos ha dicho a la cara (o al correo) solo deciros que os podéis ir a la mierda, hatajo de miserables. A quienes nos han criticado a la cara, nuestro respeto, esta disensión no supone algo negativo, suerte y sin duda nos veremos en el camino. A quienes nos han apoyado, un fuerte beso cómplice: nos veremos en el caos, en el exilio o en una celda. Quede claro que lo dejamos porque vemos que se dice mucho pero a grandes rasgos no se hace (casi)nada (o al menos no todo lo que se debería). No queremos tener nuestra publicacioncilla auto-referencial en la que despotricar para que lo lean l@s 4 del guetto y dar que hablar por ahí en el viciado y miserable ambiente anarquista. No hay un clima en el que una publicación o unas ideas resorden en las conciencias, den lugar a debates, críticas y contracríticas sanas y sobre todo contribuyan a la revuelta. Sacar algo hoy día solo sirve para que cada pequeña iglesia tenga su capillita y edite sus salmos. A la mierda, cuando las calles ardan, la gente se deje de historias y se hagan cosas y se constate, cuando se levanten barricadas, hablaremos si tenemos algo que decir, mientras tanto preferimos el suicidio nihilista.     Y no hay más, esto han sido los 7 números, y ahora tranquilamente esta publicación se pega un tiro en la cabeza, se raja las venas, se ahorca, abre el gas y enciende una cerilla, o mejor aun, entra en el banco de España y tras aniquilar a tod@s cae acribillada por las balas de los defensores del orden. Esperamos que esta basura haya servido de algo. Por el caos, por la anarquía, por la detrucción de todo, viva el desmadre, viva el nihilismo suicida.
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