|
Notícies :: antifeixisme |
Mamá, quiero ser antifranquista
|
|
per Pablo Molina |
27 nov 2005
|
|
Dice la Vicepresidenta del Congreso de los Diputados, que recuerda perfectamente cómo el dÃa en que murió Franco, en su casa se brindó con cava. Ella se sumarÃa a la fiesta con dos cucharadas extra de pelargón, pues por entonces contaba con cuatro años, edad en la que los actuales dirigentes del socialismo español ya tienen forjada una sólida conciencia polÃtica, fruto sin duda de abundantes lecturas sobre dialéctica marxista.
En cambio yo, que el 20 de noviembre de 1975 contaba ocho años (el doble que doña Carme), por más que lo intento no consigo evocar ninguna acción subversiva. Al contrario, lo único que recuerdo es que, al anunciarse el cierre de los colegios por tres dÃas, algunos corrÃamos por las calles gritando “¡Viva Franco!â€?, y además, he de confesarlo, sin que ningún sicario del régimen nos obligara a esta pintoresca exteriorización de fervor franquista; era sólo una expresión de alegrÃa por esas esas minivacaciones inesperadas… o eso creo.
Lo más sorprendente de la terrible lucha por la libertad y la democracia sostenida por los que hoy se declaran “antifranquistas de toda la vida�, es el sigilo con que llevaban a cabo esta furiosa acción subversiva. Su habilidad para el camuflaje era tal, que durante décadas consiguieron hacerse pasar por respetables franquistas sin levantar la menor sospecha. La televisión franquista, la prensa del movimiento, la radio, incluso el cine, hoy lo sabemos gracias a su testimonio, estaban absolutamente infiltrados por esta legión audaz de luchadores, cuya incansable labor de zapa “desde dentro� hubiera hecho implosionar el régimen de forma irremediable, si Franco no hubiera estirado la pata tan pronto (hasta en eso fue cruel el dictador).
Hay multitud de ejemplos que entonces no eran bien entendidos, pero que vistos a través del relato que hoy hacen sus protagonistas lo demuestran de forma incontestable. Vean si no el caso de Concha Velasco, socialista de toda la vida, que en los sesenta protagonizaba arriesgadÃsimas pelÃculas como la legendaria “Pero ¿En qué paÃs vivimosâ€?? (el tÃtulo ya lo dice todo), dirigida por Sáenz de Heredia, conocido bolchevique, que según el rumor, oculta abundantes mensajes revolucionarios, sólo accesibles en la edición de vÃdeo si la cinta se escucha al revés.
Es conmovedor saber que mientras el régimen fascista oprimÃa a un pueblo entero, un tropel de luchadores comprometidos (algunos con chupete) defendÃa la democracia y la libertad, venciendo el asco que les producÃa el tener que fingir que disfrutaban compartiendo los oropeles del poder, el dinero, el lujo y la fama.
Y mientras, yo, merendando pan con pringue y viendo Los Chiripitifláuticos. Qué vergüenza. |
This work is in the public domain |
¿La vice tiene 34 años?
|
per uno |
27 nov 2005
|
pues sí que se conserva mal esta señora.
Si como dices tenía 4 años seguro qyue ese cava la jodió mucho.
Estos rojos, bueno rosas, que emborrachan a os pequeñines son mu mu malos |
Re: Mamá, quiero ser antifranquista
|
per e tu |
27 nov 2005
|
se refiere a la chacon |
Re: Mamá, quiero ser antifranquista
|
per Natxete |
28 nov 2005
|
100% de acuerdo con el articulo. Muy bueno.Gracias! |
Re: Mamá, quiero ser antifranquista
|
per yonskrot |
23 des 2005
|
yo no lo e sido toda la vida |