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Cine activista en la SEMINCI de Valladolid.
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per ISM
Correu-e: ism_catalunya@yahoo.es (no verificat!)
Adreça: ism_catalunya@yahoo.es |
25 oct 2005
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Sinopsis: El Movimiento de Solidaridad Internacional, ISM está formado por voluntarios de diversos países que acuden a los territorios ocupados en Palestina para ayudar a sus habitantes a ejercer una resistencia pacífica contra las tropas israelíes. En diversas acciones, los miembros del grupo consiguen, cuando menos retardar la brutalidad militar. |
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TIERRA CERCADA
Alberto Arce (izquierda) y Saif Abukeshek (derecha) con una imagen de Palestina, ayer en Valladolid. / G. VILLAMIL
‘Internacionales en palestina’
Nacionalidad: España/Palestina.
Dirección: Alberto Arce y María Moreno.
Fomato: DV.
Duración: 54 minutos.
Sinopsis: El Movimiento de Solidaridad Internacional, ISM está formado por voluntarios de diversos países que acuden a los territorios ocupados en Palestina para ayudar a sus habitantes a ejercer una resistencia pacífica contra las tropas israelíes. En diversas acciones, los miembros del grupo consiguen, cuando menos retardar la brutalidad militar.
El joven director Alberto Arce relata la experiencia de la grabación en tierras árabes de ‘Internacionales en Palestina’, acompañado de Saif, una de las voces del documental
JORGE RESINA
«La intención que tenemos con este documental es que a la gente de aquí le llegue la realidad tal y como es. Justo aquella que no se cuenta en los telediarios». Quien así se expresa es Alberto Arce, un joven director cuyo trabajo, 'Internacionales en Palestina', da testimonio del día a día en el país árabe, «es impresionante la presión brutal que los soldados israelíes ejercen sobre los habitantes de este pueblo», asegura.
Acompañado de la voz principal del documental, el palestino Saif Abukeshek, Arce participó ayer en un coloquio con el público de Valladolid tras la proyección de la película, que ha participado fuera de concurso en la sección Tiempo de Historia. «El punto de vista que queremos expresar es el de un español que decide tomar una cámara de poco más de quinientos euros y marcharse a Cisjordania para enseñar lo que ocurre allí».
Las imágenes que se muestran durante los 54 minutos que dura la cinta muestran «el trabajo de casi cuatro años en Palestina». El documental pretende enseñar los conflictos que ocurren «todos los días» entre el Movimiento de Solidaridad Internacional, grupo de apoyo a la resistencia palestina formado por extranjeros en el 2001, y los soldados israelíes.
«La experiencia allí es la que te enseña que nuestra presencia es imprescindible para los palestinos. Necesitan de nosotros, igual que nosotros necesitamos en 1936 de jóvenes voluntarios que vinieron desde todos los puntos de Europa para luchar contra el fascismo». Arce cree que la sola presencia de extranjeros en territorio palestino amplía el campo de acción y las posibilidades de movilidad a sus habitantes, «porque contra nosotros no se atreven a disparar. Basta con ponerse en medio para colaborar con ellos».
El joven director lamenta la situación actual que se vive en Palestina, «sobre todo porque hemos llegado a un punto en el que te das cuenta que a los soldados israelíes les da absolutamente igual la vida de los palestinos. Si tienen que disparar o tirar una casa lo hacen sin ningún remordimiento». A pesar de la crudeza de esta situación -que tanto Arce como Abukeshek califican de «extrema»- la palabra miedo no tiene cabida para los cooperantes desplazados en Cisjordania.
«Cuando llevas varios días allí, tienes de todo menos miedo. Es terrible darte un paseo por las calles y escuchar historias de gentes humildes que han perdido su casa, sus tierras o sus negocios por una incursión israelí», relata con indignación Arce, quien recalca que el principal sentimiento con el que ha regresado es el de rabia.
«Un holocausto»
Si Arce se encontró con dificultades para desplazarse por Cisjordania, mayores son los problemas para Abukeshek. Nacido en Nablús, su vida, como la otros miles de palestinos, es una lucha constante por «no dejarnos asfixiar, porque están convirtiendo esto en un verdadero holocausto». La construcción de un muro que separe Israel de Palestina «es una trampa para cercar pequeños pueblos y cerrar todos los pasos». Esta frontera -que en algunos enclaves llega a alcanzar 12 metros de altura- fue declarada ilegal por el Tribunal Internacional en el 2004.
A pesar de la distancia, ni Arce ni Abukeshek pierden el contacto con lo que sucede en Palestina. Para ellos Internet se ha convertido en un aliado -un ordenador portátil acompaña al palestino, quien consulta constantemente durante la entrevista las páginas de información de agencias árabes-. Aseguran que los problemas no dejan de sucederse -de hecho, ayer por la mañana daban por heridos a varios ciudadanos palestinos e incluso algún muerto- y que procurarán volver pronto. Aún cuando el ejército israelí ha prohibido la entrada de ambos por 'culpa' del documental. |
Mira també:
http://www.palsolidarity.org
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