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Notícies :: globalització neoliberal |
humanitarisme
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per dUBUFET |
17 ago 2005
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A lo largo del siglo XX, desde la Modernidad, la relación entre vida y política ha modelado la matriz de los discursos... Què penseu? |
A lo largo del siglo XX, desde la Modernidad, la relación entre vida y polÃtica ha modelado la matriz de los discursos. Puede decirse, incluso, que ha sido el fermento, en especial del discurso (o del cuento) humanitarista. Aquel que moviliza las buenas voluntades (que <<hacen algo por cambiar el mundo>>), devuelve la buena conciencia y culpabiliza, paradójicamente, a las propias victimas. De echo es el discurso más extendido: el del poder en sus diferentes caras... Ya sea ésta la más dura, el correlato a la reacción neoliberal de los años ochenta (la <<mano dura>> de Thatcher o de Reagan) o la más blanda de las miles de ONG´s –vamos a decir, bienintencionadas– que hoy velan por preservar la vida allà donde se vea amenazada; herramientas <<parlanchinas>> la una y la otra del consenso, y despolitizadoras: capaces de igualar, en una misma operación mistificadora, desastres naturales y guerras. Con la pistola –claro está– de los derechos humanos y de la democracia bien cargada y en la boca.
La ayuda solidaria se anuncia salvación del <<otro>>, el problema es que contempla a la vÃctima como vida natural (zoé), es decir, el simple echo de vivir común a todos los vivientes: animales, hombres, plantas, dioses etc. La victima, habiendo sido brutalmente desarraigada de su contexto, deviene pura existencia biológica (nuda vida): anónima, intercambiable y –como es norma– homogeneizada. Se habla de salvar la vida, en general. Asà la victima responde a la imagen de la homogenización que el capitalismo realiza globalmente.
Con esto, y atendiendo a la identificación del <<secreto>> de la mercancÃa, en el que el producto de trabajo, al desdoblarse en un valor de uso y un valor de cambio, se transforma en una “fantasmagorÃa… que a la vez se muestra y no se muestra a los sentidosâ€? (Marx), podemos afirmar que hoy la vida es –de echo– una mercancÃa más entre muchas.
Las polÃticas intervencionistas que articulan las diferentes agencias del Estado espectacular integrado (Debord) encauzan al mundo –y muy especialmente a ese <<tercero>>– hacia un mismo objetivo: ser tierra abonada y pasto de (y para) las transnacionales. Más a la derecha, al margen de la carretera que conduce al corredor de la muerte de la prisión de Livington (Tejas), el discurso humanitarista escribe: <<el aborto detiene un corazón vivo>>… El cinismo es sin duda uno de esos afectos –por decirlo al modo de Spinoza– que el dispositivo de producción de orden despliega con menor sigilo.
La vida, en los labios del poder, no es hoy más que un espectro: ese espejismo (pura existencia biológica) o ese fulano –que somos todos– encargados de levantar horizontes de sentido, basculando eterna y estúpidamente de derecha a izquierda, dentro de un desierto circular y asfixiante: la realidad.
Hoy la vida no es el abismo creador de las diferencias (el fuego de Heráclito) o la potencia creadora de Plotino. En el mejor de los casos, el de un pensamiento que se hunde y se articula en la sed, el zumbido o el asco de, por ejemplo, la poesÃa de Gonzalo Rojas o de Octavio Paz, la vida –en toda su indefinición conceptual– es el centro alrededor del cual gravitan todos los análisis polÃticos, filosóficos y económicos que abarcan la cuestión del biopoder… Concepto que introdujera Foucault (en Vigilar y castigar) describiendo la actuación del poder sobre el cuerpo, los gestos etc. |
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Re: humanitarisme
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per jo |
17 ago 2005
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parece que algunas palabras no se ven : ) |
Re: humanitarisme
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per Blasfemos |
18 ago 2005
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Nuestro Señor Altísimo el Capital es Omniponente, Omnipresente y Omnisciente. Alabado sea su espíritu y el de los Foros Sociales y todos los santos mártires diplomatiques.
Amén
A bordo del AWACS.
Joseph de la Fe
Köln |