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Escribo sobre lo que no sé...
04 mai 2005
Llegit a madrid-indymedia.http://acp.sindominio.net/ Salut
Escribo sobre lo que no sé...
Por anónimo

o, aquí en las webs, casi por norma sólo escribo sobre lo que no sé. Lo que sé es tan poco y son tantos que aparentan saber mucho, que poco puedo añadir.
Por eso en general he de reconocer que escribo sobre lo que no sé o apenas sé. Pero lo hago con la intención y la esperanza de construir ideas lógicas que aplaquen la inseguridad psicológica resultante de saberse uno sometido a la mentira y a la manipulación instituídas. Pues la mentira y la manipulación son los rasgos sociopolíticos que distinguen a estas sociedades cien por cien metalizadas por encima de toda otra consideración. Sobre todo la república que arrastra al resto del mundo y cuyas estructuras se levantan sobre cimientos podridos de imposturas. Esa donde los medios, desde sus comienzos, no sólo las divulgan: también son sus propulsores. Esa democracia artificial, falsa por sus imposibles proporciones demográficas; esa ramera; ésa, la “democracia mediática� por antonomasia...

Así pues, desde la plataforma de las meras impresiones, desde la desconfianza, desde la sospecha, desde la certeza de que detrás de lo que conocemos o creemos conocer porque nos han hecho el “don� de permitirnos conocer se esconde siempre otra realidad, empieza mi prospección mental. La realidad oficial, la externa, la cáscara, el envoltorio de los sucesos en un sistema donde la prestidigitación manejando la mentira es el arma principal del poderoso para hacerse uno de sus dueños, apenas me interesa. Lo que sé es que la “verdad� es siempre la otra; la trama que demandan el sentido común y la lógica del intelecto cuando, como en las novelas policíacas, no encajan en la cabeza del investigador las coartadas de todos los villanos de la obra.

Sabemos que la verdadera verdad se esconde siempre detrás de la envuelta en celofán, no es nada nuevo. Siempre fue así...

Pero esto no ocurre sólo en los asuntos graves del día a día, de la información social, de la política, de la economía... También en los asuntos de la Ciencia, de la Historia, de la Medicina, de la Farmacopea, de la Física o de la Astronomía. Es decir, en el saber todo. Todo lo que nos es revelado ha debido pasar antes por el filtro de lo que "conviene" y lo que "no conviene" que sepamos. Se nos da cuenta de las cosas por lo que conviene, no por cómo son. Los censores y los autocensores son incontables, y legiones quienes sostienen la carpa del circo. Los mismos libros de texto están elaborados con similares ingredientes y el mismo espíritu escamoteador. Por eso a nadie extrañe que uno acabe absolutamente radical. En política y en todo...

No sé si será cuestión de edad, pero recuerdo perfectamente este mismo recelo con veinte años menos. Pero esa permanente desconfianza que, sin pretenderlo, nos han inoculado los resortes de todos los Poderes es clave para lo que quiero significar aquí. Pues reconstruir para uno mismo, antes, y hoy publicando en las webs la realidad, mi realidad, a base del cálculo de probabilidades de cada cosa es lo que hace del acto de escribir una tarea apasionante en ocasiones y exasperante en otras. Incluso me atrevo a decir que también la desconfianza ciega —como otrora fue el trasunto de la virginidad femenina y más tarde la fidelidad— es motor y leit motiv a un tiempo para quien se dedica a la literatura convencional en Occidente. Pues todos los sentimientos y los enredos gracias a cuya pericia literaria nos mantiene enfrascados en su libro el autor, tienen mucho que ver con la urdimbre de los engaños y con la lucha permanente entre las gentes de buena fe y las que abusan de ella. Raro es el crimen que no va precedido de una impostura grave y sostenida. Rara vez urdida con fineza; casi siempre burda y carente de la lógica más elemental. Pero a todos los responsables, en cada ámbito de su competencia, les da igual. El material con que se trabaja es, en la inmensa mayoría de los casos, el esparto.

En las dictaduras todo se oculta, todo es opaco, nada se sabe. Apenas algún rumor. Pero en las democracias mediáticas, pareciendo que se sabe todo, todo es mentira, confusión, ruido, contradicción, aturdimiento deliberado para que no nos enteremos de nada. ¿Cómo, si no, mintiendo al pueblo, puede uno imaginar que un país civilizado lleve a otros países guerras tan moralmente injustificadas e ignominiosas? Se nos cuenta ahora que en Vietnam, a lo largo de cinco años. murieron 3 millones de sus habitantes y 58.000 soldados invasores estadounidense. ¿Cuántos iraquíes han muerto en esta ocupación infame al lado de los 1.500 “propios�? Nadie lo sabe... Se habla de más de cien mil. Yo creo que son varios centenares de miles. Pero para publicar la cifra de los muertos “enemigos� en Vietnam, el mundo ha tenido que esperar treinta años. ¿Tendrán que pasar otros tantos para conocer la vergüenza, es decir, la cifra real de los muertos en Irak y en Afganistán?

Pero en todo caso, la mejor manera de despejar lo nebuloso, lo vidrioso, los confuso es ordenar por separado los componentes del conglomerado situado en el pensamiento propiamente dicho sobre la cuestión que se nos ofrezca. Porque el conglomerado, a su vez, está compuesto a menudo de ideas contrapuestas. Ellos, Poder y medios, fabrican siempre sus tesis. Como no confiamos en absoluto en ellos porque estamos ya hartos y escarmentados, nosotros nos vemos obligados luego a fabricar nuestras antítesis. Y desde aquí, llegamos a la síntesis. Nos atrae la intriga, y la incertidumbre nos divierte manteniéndonos a la expectativa. Pero no por mucho tiempo. Pronto la pura intuición nos facilita la conjetura más correcta: hay muy pocas variantes en lo que sucede en la sociedad y en lo que en ella cada cosa es. Pues a las verdades de la sociedad se llega muy pronto: se repiten una y otra vez. A las de la Naturaleza nunca enteramente, pues la Naturaleza sorprende por sistema. La desconfianza hacia los pronunciamientos de las Ciencias simplemente nos hace mantenernos precavidos y escépticos frente a ellos. Y tratándose de la Medicina o de la Farmacopea, lo que hace nuestro recelo es reforzar la resolución de acudir al médico sólo en ambulancia....

Además, por si fuera poco, está muy claro que los "descubrimientos" oficiales nos los dosifican. La difusión viene ya desde el principio planificada. Así es que a nosotros lo único que nos cabe hacer es desmenuzar, despiezar lo dado; adivinar la secuencia de lo que vamos observando y sacar nuestra propia consecuencia. Y esto es lo que puede ser una prueba excitante para los que escribimos sin otro fin que el escribir en sí mismo. Para los que escribimos como quien pinta un cuadro o compone una pieza musical —guste o no guste a los demás— por el mero placer de pintarlo o de componerla; para quienes escribimos pensando que si nuestro escrito ayuda a pensar un poco a alguien, será sólo un efecto "colateral", pues lo principal era lograr, siquiera parcialmente, un cierto orden mental sobre los hechos y despejar lo que suscitó en nosotros los interrogantes. Para eso iniciamos la hazaña de escribirlo...

En suma, hacer un planteamiento de lo detectado como problema, hacer problema de lo no detectado como problema por los demás, o intentar resolver personalmente el problema después de planteado, es la cuestión que cada día nos acucia. Y todo desde la libertad de pensamiento plena. Téngase además en cuenta que la resolución de un problema empieza con un buen planteamiento; del mismo modo que la curación posible de una enfermedad empieza a partir del diagnóstico acertado. A "planteamientos" simplemente me dedico. Muy poco, a juicios de valor.

En cambio, escribir sobre lo que sabemos realmente tiene una bien distinta finalidad. Quien escribe sobre lo que "sabe", lo hace para informar, para enseñar o para adiestrar. Aunque también, de nuevo —lo siento—, para engañar...

Pero el asunto pedagógico es un jardín en el que en este momento no me meto. Es muy peliagudo y exige tratamiento aparte. Los criterios, sistemas y concepciones del cómo transmitir conocimientos llenan bibliotecas enteras.

Lo que quiero dejar bien sentado aquí es que yo no pretendo, ni jamás he pretendido, hacer pedagogía. Ni siquiera con mi larga prole. Pues en este asunto he creído siempre que sería suficiente dar ejemplo. He creído que de un buen ejemplo es de donde se obtienen las mejores referencias y los mejores resultados. Y puedo decir que, en mi caso el método ha funcionado a satisfacción, pues ni yo ni mis descendientes vivimos infelices (salvo por la percepción del desvencijamiento de esta sociedad y de la Naturaleza, sobre los que con tristeza o irritación escribo). Y yo, nunca pretendí otra cosa que evitarles, y evitar en general, la infelicidad sin tener que perder para ello la consciencia ni renunciar a una robusta personalidad...
Mira també:
http://acp.sindominio.net/article.pl?sid=05/05/01/1428238&mode=thread&threshold=0

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Comentaris

Re: Escribo sobre lo que no sé... I a mi que
04 mai 2005
A mi no em sembla un texte especialment interessant. Tot el que diu son obvietats, coses ben sencilles dites per molts amb molta retòrica.
Sembla que l'autor busqui la seva propia estrella reflexionant aparentment sobre "lo que no sabe" i em sembla per part seva -en cas que sigui com dic- un acte de chuleria madrileña pedant i ridícula.

No se, suposo que és inevitable trobarse gent així. Si en una discoteca per exemple ..hom es fàcil que trobi vacilons de guapos i en un gimnàs vacilons de forts i en un curru vacilons de experts i de super bons treballadors (pilotes del jefe) dons en un forum on la gent escriu ..es molt fàcil trobar vacilons d'intelectuals o de analistes crítics, tant plens d'hipocresia ideològica com de falsa modèstia en les formes amb les que s'expresen.
Re: Escribo sobre lo que no sé...
04 mai 2005
Excelente texto, todo un ejemplo a seguir por ciertos iluminados, de esos pedantes niñatos, tan chulos y ridiculos, que han convertido Indymedia en un zulo de estupidez y banalidad masturbatoria
Re: Escribo sobre lo que no sé...
04 mai 2005
El amateur sigue igual de idiota que siempre, tan chulo y analfabeto como siempre... y parece que es el único que tiene derecho a saberlo todo... qué pena de niñatos puebla la presente página... No tenemos remedio con la caspa y los niñatos que se dedican a repartir sus miasmas y detritus, rechanzando y denigrando todo aquello que es realmente valioso, sincero, comprometido e interesante...

Amateur: hazte un favor y deja de ser tan chulo y tan descerebrado, que das asco de lo que te repites, so mamarracho...
Re: Escribo sobre lo que no sé...
04 mai 2005
al d arriba: necesitas insultar para expresar tu pensamiento? d verdad q hay gente q ve demasiada tele y se ha contagiado d programas basura a la hora d debatir.
Re: Escribo sobre lo que no sé...
05 mai 2005
Sou els millors ,si sense cap mena de dubte sou increiblement supercultes, quin nivell .vull ser com vosaltres
Sindicato Sindicat