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Notícies :: globalització neoliberal |
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Borrador de Declaración de la Asamblea de MMSS subsiguiente al FSMed
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per (penjat per) Antoni Ferret |
18 abr 2005
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Propuesta egipcia, para Barcelona, junio de 2005 |
Borrador de declaración final de la Asamblea de Movimientos Sociales - Barcelona, junio de 2005
Sherif Hetata - Egipto
Los movimientos sociales que se encuentran aquí, en el marco del Foro Social Mediterráneo, declaran que, junto con otros movimientos sociales, organizaciones y asociaciones de la sociedad civil que, a base de un intercambio libre y democrático de ideas, buscan desarrollar acciones de masas no violentas conjuntamente en los países del Mediterráneo del norte y del sur, para transformar estas tierras, que han sido y siguen siendo el asiento de ricas y diversas estructuras sociales, historias y culturas, en una región de la paz, la democracia y la justicia social para todos los hombres y mujeres.
Declaran que el Mediterráneo, que se asienta en la confluencia de tres continentes, debe convertirse y puede convertirse en «un mar de derechos» en vez del teatro de las políticas neoliberales impuestas por gobiernos nacionales al servicio de los intereses corporativos del capitalismo, basados en los Estados Unidos, en Europa y en Japón. Como parte integral del movimiento globalizador alternativo popular cada vez mayor, los países del Mediterráneo son testigos de cómo tales políticas están causando una extensa destrucción social y miseria, cómo los neoimperialistas están imponiendo la dominación de intereses multinacionales y saqueando a la gente de esta área, reforzando el estrangulamiento del Norte sobre el Sur, los dictados de deudas internacionales y los sistemas llamados del «libre mercado», los cuales están conduciendo a mayores y mayores desigualdades entre los ricos y los pobres, a la marginación de poblaciones extensas y a la erosión de la Seguridad Social, a una regresión en los derechos democráticos y humanos, y a la consolidación de regímenes autocráticos y dictatoriales, en un intento de romper la resistencia de la gente.
Es para imponer estas políticas neoliberales que las corporaciones capitalistas necesitan la guerra, necesitan el fundamentalismo, necesitan el racismo, necesitan la discriminación de género, necesitan dividir a la gente de diversas maneras, necesitan encarcelar las mentes de hombres y de mujeres, embotando y destruyendo su consciencia a través de los medios, de los sistemas educativos y de una cultura de consumidor.
Como resultado de las guerras en Iraq y en Palestina, de las futuras guerras planeadas contra Irán o Siria, o contra Corea del norte, de la militarización corporativa acelerada dirigida por los Estados Unidos, hunden a la gente del Mediterráneo del sur y del norte más y más en las profundidades del horror, de la violencia, del terror de Estado y del no Estado. El Mediterráneo se ha convertido en un arsenal enorme de armas de destrucción masiva, de bombas y de cohetes nucleares y otros, en una región con una red cada vez mayor de bases militares, en una zona de conflicto y de inseguridad.
El problema de la guerra y de la ocupación militar extranjera en Iraq y Palestina, de la agresión neoimperialista americana, británica e israelí crece más seriamente cada día, y nuevas guerras están amenazando. Las llamadas armas tácticas nucleares nuevas y las bombas «inteligentes» de una tonelada (o más) existen, o se están desarrollando. Las bases militares en los países del Mediterráneo del norte y del sur se están estableciendo, extendiendo, o reforzando. Una fuerza militar de intervención rápida de 35.000 o más tropas está en curso y más pueden seguir. La Organización del Tratado de Atlántico Norte se está ampliando a ambas orillas del Mediterráneo. Todo esto está ocurriendo en nombre del combate contra el terror, de proteger a los regímenes democráticos y los derechos de las mujeres y los derechos humanos, mientras que todos los sistemas de decisión implicados, tanto en los países agresores neoimperialistas como en los países neocolonizados del Mediterráneo del sur están colaborando en este proceso económico-militar neoliberal corporativo, reprimiendo a sus propias poblaciones, tanto hombres como mujeres, con medidas autocráticas e incluso terroristas y cerrando la puerta a todo progreso económico, social o cultural, causando el incremento de los conflictos, las contiendas, la violencia, el empobrecimiento y la miseria, y oprimiendo a los pueblos y religiones minoritarias.
La guerra y las políticas de la guerra son un pivote en las estrategias usadas por las corporaciones multinacionales para continuar y para agravar su continuada explotación y opresión contra la gente del Mediterráneo.
Es por eso que los movimientos sociales en esta asamblea invitan a todos los grupos sociales, a los movimientos de la juventud y de mujeres, a los sindicatos, a las cooperativas, a los grupos culturales, sociales y de derechos humanos a considerar la lucha contra guerra, la militarización, las bases militares y las armas de destrucción masiva, contra la ocupación israelí de Palestina y su negativa a alcanzar una paz justa y respetar los derechos territoriales palestinos, contra la agresión americana y británica y la ocupación militar en Iraq como crucial para los derechos y la vida de toda la gente en la región mediterránea. Los llamamos a trabajar en nuevas y creativas formas masivas de resistencia a la guerra, por la paz, a la lucha por un final a toda agresión militar, por la abolición de bases militares en la región y su transformación en una zona libre de armas nucleares donde no existan nunca más armas de destrucción masiva.
Los movimientos sociales en esta asamblea, junto con otros, intentarán desarrollar formas más y más eficaces de resistencia a las políticas neoliberales, a los acuerdos de libre cambio, por la abolición de la deuda externa internacional, para desarrollar alternativas a estas políticas construidas desde la participación democrática de la gente. Lucharán por la abolición de todas las formas de discriminación y de desigualdad por raza, género, religión y clase, por la destrucción de todos los muros, tanto de cemento como el muro israelí en Palestina, o de los muros socioeconómicos y culturales, que dividen el Mediterráneo en zonas donde las poblaciones están marginadas o sufren diversos grados de apartheid. Harán esfuerzos pacientes y obstinados para abrir nuevas perspectivas para la paz y el respeto de la vida humana, los derechos de la persona y de los pueblos, para construir una región mediterránea como un espacio para la vida, y de abrir un intercambio entre los hombres y las mujeres que viven en él, un espacio en el cual la libertad de circulación no se limite al capital y a las mercancías.
Como programa para la acción, los movimientos sociales en esta asamblea consideran que deben contribuir con lo mejor de su capacidad a:
1) Reforzar el Foro Social Mediterráneo como espacio para el intercambio libre de ideas y de experiencias y del desarrollo de iniciativas en la lucha contra las políticas corporativas neoliberales, por la paz, la justicia y la democracia en los países mediterráneos.
2) Desarrollar nuevas y diversas acciones masivas contra guerra, la militarización y las bases militares, y para la reducción de los presupuestos militares.
3) Fomentar políticas y acciones que ayuden a contener y a reducir al mínimo la extensión del fundamentalismo religioso, del racismo y del terror de Estado o del no Estado en la región.
4) Desarrollar ideas, políticas y acciones conducentes al refuerzo y a la extensión del movimiento de mujeres, particularmente importante en la lucha por la paz, la democracia y la justicia social.
5) Hacer esfuerzos especiales para desarrollar medios alternativos y luchar contra las barreras que evitan que la globalización alternativa encuentre su expresión en los medios corporativos.
6) Adherirse a acciones comunes contra los derechos de propiedad intelectual (TRIPS) y reducir el precio de los medicamentos.
7) Desenmascar las políticas que tienen como objetivo la privatización de los recursos de agua y de su distribución y sugerir acciones contra tales políticas.
8) Combatir las políticas relacionadas con los subsidios agrícolas y adherirse a las acciones que aseguren una apropiada distribución de la cosecha y la seguridad alimentaria para la gente del Mediterráneo y proteger a los pequeños granjeros y campesinos.
9) Adherirse a acciones contra el asalto neoliberal a la salud, la Seguridad Social, la educación, la vivienda pública, el transporte, la electricidad barata, etc.
10) Defender los derechos de poblaciones migrantes, luchar por la libre circulación de las personas y desarrollar la acción común entre diversos grupos sociales en los países del Mediterráneo del norte y del sur. |
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