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Notícies :: criminalització i repressió : pobles i cultures vs poder i estats : guerra
Policia Española aborta a pelotazos el "orain bakea"-"ahora paz"-
per yo	27 mar 2005
calles cortadas | decenas de dotaciones y efectivos policiales impidieron a los manifestantes llegar a las inmediaciones de los cines golem, donde iba a arrancar la marcha de Batasuna Porrazos, pelotazos, empujones y patadas abortaron ayer la manifestación convocada por Batasuna en Iruñea con motivo del Aberri Eguna. Decenas de dotaciones policiales ocuparon los alrededores de los cines Golem, punto de partida de la movilización. La marcha pudo arrancar y recorrer unos metros. Luego la pancarta «Orain herria, orain bakea» acabó en un furgón, y los manifestantes, dispersados y contusionados. (gara)
Por vez primera en muchos años, la Policía impidió con cargas y porrazos la celebración del Aberri Eguna por parte de la izquierda abertzale, que históricamente ha escogido Iruñea para esta conmemoración. Cinco minutos antes de la hora prevista para el inicio de la manifestación, prohibida por la Delegación del Gobierno español, los cientos de policías que habían tomado los alrededores de los Golem recibieron la orden de ponerse los cascos. Eran las 16.55. Casi al unísono Arnaldo Otegi, Joseba Permach, Pernando Barrena, Imanol Iparragirre y Ainara Armendariz, entre otros muchos manifestantes, intentaron llegar al punto de partida previsto. Tan pronto como empezaron a andar, decenas de agentes fueron directamente hacia ellos cortándoles el paso. «Tengo derecho a la libre circulación y voy a ir», remarcó Barrena cara a cara ante el cordón. Ni sus quejas ni las de Otegi hicieron cambiar de parecer a los poli-cías, que les dejaron bien claro que «por aquí no se pasa» y les desviaron hacia la calle Martin Azpilikueta. «¿Qué pasa con la libertad de expresión?», preguntaba un manifestante ante semejante estampa. Tras el obligado rodeo, los miembros de Batasuna pudieron desplegar lapancarta «Orain herria, orain bakea» en la Avenida de Baiona y dar inicio a la marcha al grito unánime de «Independentzia». No fueron muchos los pasos andados, ya que se toparon con numerosos furgones que venían de frente. Los que habían dejado atrás también se sumaron a estos últimos. La gente respondió levantando los brazos y reclamando «Independentzia» y «Euskal Herria askatu». Minutos después, la pancarta acabó pisoteada y en un furgón, y los manifestantes, dispersados. Las cargas posterior llegaron incluso hasta Alde Zaharra. Varios contusionados y Kiroga, a Urgencias Fueron numerosas las personas que recibieron porrazos, patadas y empujones. Nada más empezar la carga, un manifestante quedó tendido en el suelo quejándose del muslo. Se incor- poró cojeando. El ex parlamentario Shanti Kiroga, que estaba entre quienes llevaban la pancarta, corrió peor suerte:fue a parar a Urgencias debido a un porrazo en la cabeza que le hizo sangrar en abundancia. Se le aplicaron cinco puntos de sutura. Desalojados de las terrazas y esquinas «¿Adónde quiere que me vaya? A Castejón, a Zaragoza...», espetó una manifestante a un agente ante la orden de «¡circule!». «No puedes ni ir para allá ni para aquí ni quedarte quieta. Entonces, ¿qué hago, salgo volando?», subrayó otra persona. Previamente, antes de que dieran las 17.00, quienes estaban en las terrazas colindantes a los cines Golem fueron obligados a entrar al interior de los bares por los uniformados. Irrintzis espontáneos, aplausos y denuncias Tras las cargas y porrazos, la gente se fue reagrupando en esquinas, aunque enseguida recibían la orden de desalojar el lugar. «Esta democracia no varía mucho de lo de Franco. Yo no lo quería, pero al menos ya sabíamos lo que era», «Están pegando a gente mayor, con problemas en la espalda», fueron algunos de los comentarios que se escuchaban. También se oyeron improvisados irrintzis como respuesta a las cargas. Ocupación policial en Iruñea y controles La presencia policial ya era más que evidente para las 16.00 en los alrededores de los cines Golem, pero ni empezó ni acabó ahí. Horas después que fuera disuelta la manifestación, proseguía la ocupación policial en el centro de la ciudad, donde cada cierto tiempo se podían ver amagos de carga por parte de la Policía. Además, en las carreteras de acceso a Iruñea fueron numerosos los controles de la Guardia Civil.
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