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Notícies :: antifeixisme |
La derecha histérica amenaza de nuevo
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per & |
24 nov 2004
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Artículo de Pío Moa publicado en el libelo electrónico de Jiménez Lossantos |
Carta abierta a Anasagasti
Pío Moa
Ha propuesto usted "cancelar" el Valle de los Caídos y trasladar los restos mortales de Franco a un cementerio particular. Porque, dice usted, "en el siglo XXI " no debería existir un monumento "a una de las partes de la contienda" donde está enterrado "el máximo responsable de aquella barbarie", "un general golpista" que ocasionó "centenares de miles de muertos, heridos, exiliados y encarcelados por el único delito de defender la legalidad constitucional vigente". Y compara usted a Franco con Hitler y Mussolini.
Estas frases suenan por lo menos extrañas en un representante del PNV. Porque, usted, como sabiniano típico, recordará que una parte de su partido se alineó directamente con el "responsable de la barbarie". Desde luego, la parte mayor prefirió al bando que, según usted, defendía la legalidad. Pero, como usted también sabe perfectamente, el PNV procedió bien pronto a traicionar a ese bando entendiéndose a espaldas de él con Mussolini y con Franco. Usted, señor Anasagasti, sabe que su partido entregó intacta a aquellos "bárbaros" la industria pesada y de armamentos de Vizcaya impidiendo los intentos de sus aliados izquierdistas de destruirla. Una industria, que sirvió de modo extraordinario al esfuerzo de guerra de los causantes –dice usted– de "centenares de miles de muertos, heridos, exiliados y encarcelados". Y no olvidará nadie, porque está ampliamente escrito y descrito, cómo su partido, no contento con hacer tal servicio al mayor responsable de la barbarie, le ofreció la mejor vía de ataque para destruir a los "defensores de la legalidad", vía que de paso dejaba oculta la traición del propio PNV.
Esto no son opiniones, señor Anasagasti, sino hechos plenamente demostrados, entre otros por testimonios de los propios nacionalistas, como el padre Onaindía. No se explica bien cómo un partido que saboteó en tal grado a los "defensores de la legalidad" y favoreció en igual medida a los equivalentes de Hitler, como usted los define, puede venir ahora con semejantes letanías. ¿Es caradura insuperable, o acaso chifladura? ¿O cree usted que casi setenta años después, "en el siglo XXI", resulta aceptable cambiar la historia por una historieta? Extraña filosofía, aunque no del todo incoherente con la conducta del PNV entonces. Una traición pretende tapar a otra.
Por otra parte hacer de Franco "el máximo responsable de aquella barbarie" exige un poco más de análisis. Usted sabe que en octubre de 1934 se rebelaron casi todas las izquierdas contra la legalidad republicana, contra un gobierno legítimo y democrático. Trataban deliberadamente de iniciar la guerra civil, y la iniciaron, y en esa rebelión desempeñó el PNV un papel por lo menos turbio. Ha olvidado usted este suceso trascendental, con 1.400 muertos en dos semanas y bastante incidencia en las Vascongadas. Como ha olvidado que en aquella ocasión Franco defendió la legalidad constitucional y ayudó a frustrar la intentona.
¿Qué pasó, pues, para que, en 1936, las derechas que defendieron la legalidad en el 34 se rebelaran a su vez? Pues pasó que tras las elecciones de febrero del 36 la legalidad y las reglas del juego democrático se vinieron abajo, conculcadas sistemáticamente por las izquierdas desde el poder y desde la calle. No lo ignoraba el órgano del PNV, Euzkadi cuando clamaba: "Nos alcanza en todas partes la descomposición del Estado español, estrago inmenso de su organización social, batida por la inmoralidad y la anarquía"; o hablaba de "las convulsiones epilépticas de un pueblo moribundo" (el español), en "momentos históricos de gravedad no igualada". El PNV sabía bien lo que ocurría y quiénes eran los responsables: los mismos que se habían alzado contra la "legalidad vigente" en 1934 y que año y medio después, dueños del estado y de la calle, volvían a hacerla trizas.
¿Por qué, entonces, terminó aliándose su partido, señor Anasagasti, con los responsables evidentes de aquella situación; por qué, siendo católico, apoyó a quienes exterminaban sangrientamente a la Iglesia, mostró tal insolidaridad con las víctimas y rechazó las ofertas de las derechas sublevadas? Sólo encuentro una explicación, y está en las ideas de Sabino Arana, el Maestro de su partido, tan imbuidas en sus adeptos. Ideas como ésta: "Si a esta nación latina (España) la viéramos despedazada por una conflagración interna o una guerra internacional, nosotros lo celebraríamos con fruición y verdadero júbilo, así como pesaría sobre nosotros como la mayor de las desdichas el que España prosperara y se engrandeciera". Sólo concepciones tales explican la alianza de ustedes con los revolucionarios y bajo la protección de Stalin, y también explican que los traicionaran en cuanto vieron que no triunfarían.
¿No tenemos derecho a sorprendernos, señor Anasagasti, de que exalte usted a los supuestos "defensores de la legalidad" en el pasado mientras en el presente su partido está volcado en una campaña contra la Constitución? ¿Pueden pretender una reforma razonable de la Constitución partidos como el suyo, que ha reducido a tan poco la democracia en las Vascongadas, donde buena parte de la oposición tiene que ir protegida contra asesinos nacionalistas, donde la policía autonómica no casi persigue al terrorismo, donde tantas normas constitucionales, empezando por símbolos como la bandera nacional, son conculcados cada día por su partido…? Sus propuestas tienen todo el aire de una provocación.
Y hay otra falsedad en su argumento señor Anasagasti: el Valle de los Caídos no está dedicado sólo a uno de los bandos. Fue concebido para conmemorar la victoria sobre la revolución (¿o cree usted que no hubo revolución?) y como emblema de reconciliación: allí no descansan los restos de soldados de una sola parte, sino de las dos. Descansan, es cierto, bajo una gran cruz, y esa reconciliación no podía ser aceptada por quienes detestaban la cruz y veían en la Iglesia una institución y unas personas a exterminar, y que siguen intentando erradicarla de la vida y la cultura españolas. Usted se está sumando a ellos, señor Anasagasti, y con su sectarismo, provocación y falsificación de la historia, está conjurando otra vez los fantasmas del pasado.
Desde luego, tiene usted derecho a pensar y expresarse como lo hace: se lo garantiza la democracia española que su partido está arruinando en las Vascongadas, donde expresarse puede resultar muy peligroso. Yo quisiera que los asuntos mencionados en esta carta no tuvieran a estas alturas más tratamiento que el académico y no afectaran a la política actual. Pero usted, como otros, se obstina en el revanchismo, echando por tierra el acuerdo de no utilizar el pasado como arma arrojadiza en la política de ahora. Acuerdo que permitió una transición bastante calmada a las libertades políticas, cuyos frutos están ustedes poniendo en riesgo ahora. Pero el mismo derecho que tiene usted a expresarse, lo tenemos los demás, y a poner en evidencia sus argucias. También con la esperanza, aunque cada vez más remota, de hacerles a ustedes conscientes de su responsabilidad en la escabrosa senda que han emprendido. |
Mira també:
http://www.libertaddigital.com/opiniones/opi_desa_21698.html |
This work is in the public domain |
Comentaris
Re: La derecha histérica amenaza de nuevo
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per favorsito |
24 nov 2004
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deixeu de penjar les cojonades del Moa!
El que vulgui lleure-les que s'en vagi a libertaddigital |
Re: La derecha histérica amenaza de nuevo
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per Jonatan |
24 nov 2004
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Je je je.
Si, on salinean els de dretres de les nacionailtats perifèriques?CIU, PNV?
Amb la dreta central, quin problema hi ha Pio Pio Moa?Es lo més normal. No has descobert la sopa d'all.
L'esglèsia...quin problema hi ha en destapar la seva farsa?Tens algun problema en destapar la seva farsa, la més gran mai establerta al mon?
Jo la destapo.Jo no cremaré esglesies, pero aboliré el règim eclesiàstic, ple de mentires, falses historietes, escrites com història, carregades de lleis, pecats, mortificacions ,vots i mentides.
L'Esglèsia que predica igualtat, justicia dels pobres, pero comulga amb el ric i fa les lleis com ells...les mateixes, pero en lo no-terrenal...no terrenal?Parlem de la riquessa de l'esglèsia...molt podiem parlar-ne.
Parlem dels bisbes, de tots els corruptes, els que s'aliniaben amb Franco, Mussolini, i d'altres...
Quin es el vertader rostre de la Esglèsia...jo ho se...el de la Bèstia assassina, el de Satan, el de la mentida, el del genocidi inquisitorial, el depredador alienigena que actua de genocida i manipulador en mans del poder...tot això i moltísssim més es el reflexe de l'esglèsia dels pobres...
Salut REvolució, no crermaren esglèsies, però les abolirem...i els bisbes i demès a les ETTS a demanar una feina com cal...sense demanar almoines. |
Re: La derecha histérica amenaza de nuevo
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per & |
24 nov 2004
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Anasagasti se ha limitado a formular una exigencia que cualquier gobierno democrático y civilizado habría cumplido hace ya muchos años: la retirada de los monumentos que exaltan el fascismo.
Pío Moa, gran defensor de la verdad, las libertades y los derechos humanos, se opone y contraataca:
Su demagogia burda y carente de escrúpulos de ningún tipo le permite acusar al PNV ¡al mismo tiempo! de colaboración y resistencia al alzamiento franquista: colaboración cuando se trata de negar el historial demócrata del PNV, y resistencia cuando se trata de responsabilizarle de 'los males' que obligaron a Franco y a sus chicos a "salvar España".
Así trabaja este 'historiador': escoge las fuentes que mejor le convienen para cada caso (casi siempre memorias de personajes relativamente relevantes) y las interpreta 'libremente', es decir: "ahora dicen blanco y ahora dicen negro".
Aprovecha, como no, para culpar al PNV de la situación e Euskadi, y también para insistir en su estúpida tesis que asegura que la guerra civil comenzó en 1934, con la revolución de Asturias. ¿Y por qué no con el alzamiento de Sanjurjo?
En fin, las mamonadas de este hombre se caen por su propio peso y pronto todos esos lectores que necesitan morbo se aburrirán de él y cambiarán de disco. Lo que nos interesa es su papel como doberman de la derecha: el que, supuestamente legitimado por su condición de pseudohistoriador, profiere las amenazas y los oscuros augurios que tienen como fin calentar a unos y atemorizar al resto.
"Usted se está sumando a ellos, señor Anasagasti, y con su sectarismo, provocación y falsificación de la historia, está conjurando otra vez los fantasmas del pasado."
(dicen que los que acusan e insultan cargados de odio en realidad se acusan a sí mismos inconscientemente, y esta frase de arriba podría aplicarse perfectamente al propio Moa)
"¿Pueden pretender una reforma razonable de la Constitución partidos como el suyo, que ha reducido a tan poco la democracia en las Vascongadas, donde buena parte de la oposición tiene que ir protegida contra asesinos nacionalistas, donde la policía autonómica no casi persigue al terrorismo, donde tantas normas constitucionales, empezando por símbolos como la bandera nacional, son conculcados cada día por su partido…? Sus propuestas tienen todo el aire de una provocación."
Pero, como siempre, la amenaza más histérica de todas viene en el colofón:
"Yo quisiera que los asuntos mencionados en esta carta no tuvieran a estas alturas más tratamiento que el académico y no afectaran a la política actual. Pero usted, como otros, se obstina en el revanchismo, echando por tierra el acuerdo de no utilizar el pasado como arma arrojadiza en la política de ahora. Acuerdo que permitió una transición bastante calmada a las libertades políticas, cuyos frutos están ustedes poniendo en riesgo ahora. Pero el mismo derecho que tiene usted a expresarse, lo tenemos los demás, y a poner en evidencia sus argucias. También con la esperanza, aunque cada vez más remota, de hacerles a ustedes conscientes de su responsabilidad en la escabrosa senda que han emprendido."
Atentxs a la primera frase de esta última cita, una clara excusatio non petita: "Yo quisiera que los asuntos mencionados en esta carta no tuvieran a estas alturas más tratamiento que el académico y no afectaran a la política actual."
Es decir: que su intención es precisamente afectar a la política actual.
Y la traca final:
"poner en evidencia sus argucias (...) con la esperanza, aunque cada vez más remota, de hacerles a ustedes conscientes de su responsabilidad en la escabrosa senda que han emprendido"
¿A quién quieres asustar, Moa? ¿Acaso te has creído tus propias mamonadas y crees de verdad que la España de hoy tiene algo que ver con la del 36? Eso te gustaría a ti a tus patronos, pero al final tendréis que comprender que muy pronto, en cuanto pase el morbo, el único efecto real de vuestros chillidos histéricos será una carcajada colectiva.
Por lo pronto, vuestros mayores fans son los dinosaurios de la extrema derecha, y eso no parece un buen augurio. |
Re: La derecha histérica amenaza de nuevo
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per cigro |
24 nov 2004
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Aixo ho ha posat un espanyolista |
Re: La derecha histérica amenaza de nuevo
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per & |
24 nov 2004
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espanyolista?
simplemente se hace uso de la sección "manipulación de los media" para analizar y desmontar el discurso golpista de Pío Moa
por cierto, en el editorial de LD de hoy defienden la actitud del PP ante el golpe anti-chávez del 2002
no fue un golpe, dicen |
Re: La derecha histérica amenaza de nuevo
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per no pudo serlo |
25 nov 2004
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No pudo serlo. Lo abortó el pueblo. ke vayan temblando los oligarcas! Y los putos yankis, son o se creen los amos del mundo, pero ya les crecen los enanos por todas partes!! |
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