Reflexiones sobre la Participación Ciudadana necesaria
Se dice que la Participación Ciudadana es el encuentro entre instituciones del Estado por una parte y los movimientos, asociaciones y organizaciones sociales que representan y expresan los intereses de los ciudadanos; esto implica un proceso constante de interacción social entre grupos con poder formal y los que carecen de él. La participación ciudadana significa que en el proceso de formulación, definición y ejecución de polÃticas públicas, el Estado y las instituciones deben renunciar al monopolio del poder polÃtico y administrativo.
Ahora bien, esto significa que la participación ciudadana no se debe presentar en un marco de anomia (ausencia de normas) pues la participación ciudadana siempre va a requerir de algún grado de institucionalización y regulación jurÃdica, sólo asà las autoridades locales concertarán con las organizaciones ciudadanas. No se trata de poner una camisa de fuerza jurÃdica a la participación ciudadana, se trata sólo de fundamentarla legalmente.
Incentivar y atender las propuestas, demandas, iniciativas y denuncias ciudadanas es una labor urgente que deben asumir todas y cada una de las instituciones, dada la crónica existencia de conflictos que se van incrementando diariamente al aumentar el divorcio entre las entidades públicas y las necesidades ciudadanas. Pero para canalizar las propuestas y sugerencias cÃvicas que presentan los ciudadanos, la administración pública tiene el deber inexcusable de crear canales y espacios reales que atiendan y respalden las aportaciones ofrecidas por los vecinos y ciudadanos.
Observando la realidad diaria, debemos afirmar que existen demasiados grandes proyectos que en nada benefician al conjunto de los ciudadanos, contribuyendo a la consolidación de una deuda pública insostenible. Este tipo de iniciativas grandilocuentes favorecen el malestar en numerosos sectores de la población, impidiendo el desarrollo y progreso humano desde una perspectiva sostenible, terrenal y plural.
Los habitantes de las grandes ciudades padecen numerosas conflictos y situaciones carenciales, patológicas: contaminación, desempleo, carencia de equipamientos públicos deportivos, culturales, educativos, vivienda precaria...
La falta de residencias para ancianos, enfermos crónicos... La visible y escandalosa carencia de redes organizadas públicas para atender a las personas con patologÃas sociales, mentales, laborales... es un tema muy preocupante y grave.
Todas las carencias y problemáticas que pretenden ocultar, que pretenden sepultar los actuales polÃticos con esa innecesaria e intolerable realización y defensa de proyectos arquitectónicos y museÃsticos desaforados, se van incrementando y enquistando en todas las clases y colectivos que conforman la sociedad. En paralelo crece vertiginosamente un descontento social, acompañado de un aislamiento ciudadano que ve al polÃtico, al gestor como un peligroso enemigo, como un simple personaje sin conciencia ni escrúpulos, que se dedica a medrar y a realizar todo tipo de mezquinos negocios, actividades mercantiles ajenos al logro del bienestar general.
De nada sirve las campañas de manipulación, intoxicación y enmascaramiento desarrollado y ejecutado por las instituciones para ocultar las penosas realidades que se producen en el seno de la vida urbana y rural, pues crece de manera vertiginosa la desconfianza, el malestar, el divorcio entre los vecinos y sus representantes, siendo visible ya la total falta de respeto que tienen los gestores actuales hacia el votante.
El ciudadano va organizándose en nuevas redes, espacios ajenos a los movimientos tradicionales y lejos de la nefasta influencia que ejercen las organizaciones polÃticas convencionales, en aras a evitar sufrir las agresiones y aberraciones polÃticas, culturales, laborales, educativas, informativas, económicas... que ejecutan los "usurpadores" de la voluntad popular.
Aprendemos a ser ciudadanos cada vez que expresamos nuestra opinión, proponemos actuaciones que logren el bienestar general y denunciamos los comportamientos corruptos y supuestamente delictivos de nuestros representantes.
No somos simples electores ni contribuyentes, teniendo el deber inaplazable de participar en todos y cada uno de los asuntos públicos, asumiendo un comportamiento de control permanente de todas y cada una de las actuaciones que se pretendan aplicar y desarrollar en el seno de nuestras instituciones públicas.
Antonio MarÃn Segovia
Cercle Obert de Benicalap
Benicalap - Valencia, a 16 de noviembre de 2004
DENUNCIA PRESENTADA ANTE LA FISCAL�A ANTICORRUPCIÓN
Para la entidad cÃvica y cultural Cercle Obert de Benicalap, existen demasiados e indudables indicios que evidencian que las autoridades valencianas -tanto locales, autonómicas y provinciales-, tienen demasiadas "obsesiones" preocupantes con el sector urbanÃstico, dado que conceden total y exclusiva prioridad a temas inmobiliarios, mientras la ciudad y la comunidad valenciana se desangra y se desatiende...
El incremento de la pobreza, el aumento vertiginoso de indigentes y transeúntes... la degradación permanente de barrios enteros, la falta de polÃticas preventivas en áreas de salud mental, la carencia de una integral red de equipamientos educativos, la consolidación de la precariedad laboral, la visible inseguridad a que estamos sometidos todos... son hechos conflictivos que no son abordados ni atendidos por los actuales gestores y responsables polÃticos de la Comunidad Valenciana.
Cercle Obert de Benicalap quiere invitar a las autoridades locales, autonómicas y provinciales, para que dejen de trabajar a favor de ciertos elitistas grupos inmobiliarios, activando ya un Plan de Choque urgente que ayude a paliar y resolver las numerosas situaciones de exclusión social, violencia e inseguridad que sufren numerosos colectivos sociales en nuestra Comunidad.
Igualmente, la entidad cÃvica y cultural de Benicalap, solicita a los representantes polÃticos valencianos que dejen de "obsesionarse" y "preocuparse" con temas ajenos a la realidad diaria y aprendan a escuchar, ver y conocer las demandas y peticiones ciudadanas.
La activación de programas destinados a canalizar y promover los Derechos cÃvicos y la participación activa en los asuntos locales, debe ser una prioridad esencial de la actual alcaldesa de Valencia y del presidente de la Generalitat, pues los barrios periféricos seguimos sufriendo el abandono, la desidia y el desprecio de nuestros supuestos "representantes".
Urge que las instituciones públicas, procedan a pisar tierra y abandonen sus obsesiones morbosas por emular a los faraones y jugar a los barquitos.
Por ello, Cercle Obert de Benicalap, solicita la intervención urgente de la FiscalÃa Anticorrupción, SÃndic de Greuges de la Comunitat Valenciana, Congreso de los Diputados y de todos los organismos internacionales competentes, para asà esclarecer y determinar las conexiones y vÃnculos que mantienen nuestros gestores con determinados grupos empresariales.
Detener el expolio que padecemos en nuestro entorno inmediato, en nuestros barrios, en nuestro patrimonio natural... es una necesidad urgente. Igualmente, estimamos prioritario la adopción de polÃticas sociales, educativas y participativas que permitan la implicación social de todas las personas y colectivos que intentamos vivir y crear una ciudad con alma, con sentimientos... Queremos seguir viviendo en una ciudad viva, en una ciudad que pueda ser parte de nuestro cuerpo, que pueda soñar con nuestros ojos...
Apoyar o diseñar grandes proyectos "intergalácticos", carece de sentido mientras no se atiendan y resuelvan las justas demandas y legÃtimas peticiones que numerosos colectivos ciudadanos y muchas personas anónimas reclamamos con argumentos racionales y lógicos.
Las personas somos siempre mucho más importantes que las obsesiones enfermizas que tienen algunos gestores públicos, polÃticos que viven siempre de espaldas a los ciudadanos, lejos de la tierra y de nuestra Valencia, de la Valencia real, esa que nada tiene que ver con la propaganda y las mentiras oficiales.
Exigir y depurar responsabilidades judiciales a todos aquellos que han generado y contribuido a que la ciudad de Valencia y toda la Comunidad Valenciana, tenga una de las mayores e "injustificadas" deudas públicas de toda España, es un deber ineludible y urgente que deben acometer y realizar con rigor nuestras autoridades judiciales.
Esa deuda no ha servido ni sirve para beneficiar y lograr el bienestar de los ciudadanos. Los problemas y los conflictos emergen con mayor virulencia, gracias a que las autoridades públicas han renunciado a canalizar y atender las demandas y peticiones cÃvicas.
Esperamos que los organismos competentes procedan, con esmero y ecuanimidad, a iniciar todo tipo de investigaciones y procesos judiciales, en aras a que los culpables intelectuales y materiales del visible desastre financiero, cultural, ambiental, urbanÃstico, económico... paguen por tanta irresponsabilidad y falta de respeto que sufrimos, diariamente, todos los ciudadanos y personas que habitamos en la Comunidad Valenciana.
Adjuntamos diversa documentación, solicitando la intervención de la FiscalÃa Anticorrupción, Congreso de los Diputados, Ministerio de Cultura, Presidencia del Gobierno de España, SÃndic de Greuges y organismos internacionales, a fin de que emprenda una investigación rigurosa y completa sobre las supuestas implicaciones que puedan tener nuestros gestores públicos con ciertos grupos inmobiliarios.
Benicalap - Valencia, a 16 de noviembre de 2004
Antonio MarÃn Segovia
Cercle Obert de Benicalap
Iniciativas Sociales y Culturales de Futuro
A la FiscalÃa Especial para la Represión de los Delitos Económicos relacionados con la Corrupción
Paseo Castellana 147 – 5ª PLANTA - 28046 MADRID.-
LAS PERSONAS SIEMPRE PRIMERO Y LAS TORRES INTERGAL�CTICAS CUANDO LA COMUNIDAD VALENCIANA DEJE DE SER LA M�S ENDEUDADA DE ESPAÑA
Valencia tiene suficientes referentes y elementos destacados y gigantescos que la definen y la hacen singular, irrepetible. Son tan valiosos que muchos permanecen desconocidos para casi todos, incluso para los que dicen representarnos y ocupan las poltronas oficiales de la administración pública.
A mi entender lo que sà debe hacerse con urgencia, es un monumento enorme, para que todos podamos conocer las obscenas deudas que tanta fatuidad, superficialidad y banalidad han logrado crear algunos conocidos y destacados desaprensivos, agazapados en lujosos despachos institucionales.
Hablando ahora en serio, si realmente queremos hacer algo sobresaliente y maravilloso por y para Valencia, debemos trabajar para permitir una convivencia plural, solidaria, responsable y reflexiva, huyendo de aquellas obsesiones patológicas e inoportunas que han supuesto que seamos la Comunidad con mayor nivel de deuda y caos administrativo-financiero de toda España.
No entiendo esa manÃa, esa perturbada e inadecuada insistencia en crear supuestos referentes gigantescos en una ciudad que tiene el mayor centro histórico de toda Europa en ruinas. Una medida estimulante para incrementar el flujo turÃstico seria recuperar el casco histórico, dotándolo de vecinos y favoreciendo el pequeño comercio, la artesania…
No entiendo ni puedo aceptar que se hable insistente e irracionalmente de construir cuatro enormes torres en una zona tan saturada y problemática, mientras el valioso patrimonio cultural y natural valenciano se degrada ante la indolencia y pasividad de las autoridades autonómicas, locales, provinciales…
Repito: no entiendo ni puedo asumir que se pretenda invertir en actividades urbanÃsticas gigantescas y desproporcionadas, mientras los ciudadanos valencianos padecemos los mayores niveles de contaminación acústica, atmosférica y lumÃnica de toda España… Y mientras sufrimos en silencio la degradación de nuestro entorno habitual, contemplamos impertérritos la ausencia de iniciativas institucionales que procedan a paliar los efectos de tanta contaminación y caos circulatorio.
Antes de crear pirámides y ocultar asà las deudas enormes, las insoportables deudas generadas por unos comportamientos polÃticos irresponsables, los ciudadanos valencianos exigimos y necesitamos que las necesidades básicas y fundamentales: asistencia sanitaria, educación, empleo, respeto por nuestro medio ambiente, recuperación de nuestra memoria histórica y cultural… se asuman como objetivos prioritarios de aquellos que dicen ser nuestros gestores.
Y para finalizar la presente reflexión, debo insistir que no nos hacen falta torres ni debemos emular nunca a los faraones si realmente queremos evitar que alguna vez la deuda financiera se contenga. El presente, el dÃa a dÃa no precisa de torres o de nuevas atrocidades urbanÃsticas para poder existir con cierta calidad y serena pasión.
Y si me permiten, debo recordar a nuestros gestores y representantes públicos que los valencianos tenemos muchos inimitables y envidiados referentes históricos y naturales, pero no sabemos ni queremos apreciarlos y amarlos: La Lonja, los poblados marÃtimos del Cabañal, las alquerÃas de Benicalap, el Mercado Central, la huerta…
Benicalap – Valencia, a 11 de noviembre de 2004
Antonio MarÃn Segovia
Cercle Obert de Benicalap
Iniciativas Sociales y Culturales de Futuro
ASSOCIACIÓ DE VE�NS I CULTURAL
“CERCLE OBERT� DE BENICALAP
INICIATIVAS SOCIALES Y CULTURALES DE FUTURO
46015 BENICALAP DE L´HORTA - VALÈNCIA - ESPAÑA
Telèfon.: 645.75.95.91 - 96.323.43.53
Entitat inscrita en el Registre d´ Associacions de la Generalitat Valenciana amb el número 1.047 de la Secció Primera del Registre Provincial de València |