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Notícies :: sexualitats |
el matrimonio homosexual normalizará la situación legal de miles de niños
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per Shan Gay |
01 oct 2004
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Viernes, 1 de octubre de 2004
PAREJAS HOMOSEXUALES | LA REFORMA LEGISLATIVA
La patria potestad compartida beneficiará a los menores en el supuesto de que faltara uno de los cónyuges.
RodrÃguez Zapatero defiende la reforma para que gais y lesbianas «dejen de ser ciudadanos de segunda»
ARANTXA PRÃ?DANOS /COLPISA. MADRID |
Junto a los gais y lesbianas españoles -en torno al 10% de la población, según estimaciones aproximadas- los principales beneficiarios de la legalización del matrimonio entre parejas del mismo sexo serán miles de niños que ya viven en hogares homosexuales sin la cobertura legal de una patria potestad compartida que salvaguarde sus derechos cuando falte uno de los cónyuges. El anteproyecto de ley que aprobará hoy el Consejo de Ministros consagrará la patria potestad compartida de los menores y la adopción conjunta por parte de ambos padres o madres.
No hay cifras porque se desconoce el número real de parejas homosexuales que hay en España y a ningún adoptante soltero se le pregunta por su orientación sexual, pero se cifran en millares los niños que crecen educados en hogares 'homo'. Gais y lesbianas adoptan a título individual desde 1987; miles de parejas homosexuales conviven con los hijos de anteriores uniones heterosexuales, y miles de lesbianas también han recurrido a la fecundación 'in vitro' para tener a sus hijos en el seno de su relación con otra mujer.
En este contexto, el anteproyecto del ley del Gobierno vendrá a dar carta de naturaleza legal a una realidad que «ya existe, es un hecho desde hace muchos años», recalcó Pedro Zerolo, secretario de Movimientos Sociales del PSOE. La ley «hará aflorar la visibilidad de las familias homosexuales y va a representar, de entrada, un beneficio objetivo para los menores que -insistió- ya están a nuestro cargo».
El texto del Gobierno modifica el artículo 154 del Código Civil y establece que «los hijos no emancipados quedarán bajo la patria potestad de los padres», en lugar del «padre y la madre» de la redacción actual. Este cambio redoblará la protección jurídica de los menores en todo lo relativo a guarda y tutela legal, al quedar a cargo por igual de ambos cónyuges, y no de uno sólo como ocurre hoy en las parejas homosexuales con hijos.
LA ADOPCIÓN, SIN CAMBIOS
La Ley del Matrimonio Homosexual no modificará el Código Civil en los puntos relativos a la adopción porque no es necesario. El derecho les será inherente a los cónyuges gais y lesbianas como el resto de las prerrogativas asociadas al matrimonio legal, pensión, herencia, legítima, residencia, nacionalidad, permisos laborales y de maternidad/paternidad, fiscalidad, etcétera. Se trata, simplemente, de cambiar la mención 'marido' y 'mujer' por el término 'cónyuge' en los artículos correspondientes del Código Civil y de otras leyes afectadas por la propuesta del Ministerio de Justicia.
El reconocimiento legal al derecho de adopción 'a dos' de los homosexuales tendrá, sin embargo, su 'cruz'. Del mismo modo que abre puertas para la adopción nacional -apenas un 20% y muy limitada por el reducido número de niños y las largas listas de espera, de hasta cinco años-, va a cerrar muchas otras en la adopción internacional, a la que recurre el 80% de los adoptantes españoles. Cada país establece sus propios requisitos para los solicitantes y la mayoría permite la adopción a título individual sin indagar en la orientación sexual del candidato, salvo China, pero casi ninguno -a excepción de Sudáfrica- entrega niños a matrimonios homosexuales.
«Ése es un problema. Tendremos que estudiarlo», admitió ayer José Luis Rodríguez Zapatero en un encuentro organizado por el Grupo Vocento.
Para la mayoría de los colectivos de gays y lesbianas, se trata de un efecto indeseable pero no debe obstaculizar su equiparación legal. «Que China y otros países no permitan la adopción por los homosexuales no debe restringir el reconocimiento de nuestros derechos», subrayó Zerolo antes de manifestar su intención de casarse «y adoptar».
Con la legalización del matrimonio homosexual y la adopción plena España entrará en el grupo de vanguardia europea y mundial, junto a Holanda y Bélgica. Esta singularidad también podría crear problemas a las parejas de gays y lesbianas para obtener visados de residencia si uno de los cónyuges se traslada por motivos laborales a otro país que no reconozca estos matrimonios.
ESTATUS PARA LOS NIÑOS
La plena equiparación de derechos de los homosexuales es una cuestión de justicia social, una deuda de la sociedad española con ciudadanos considerados hasta ahora «de segunda» que hasta la derecha «acabará por aceptar». Así ve José Luis Rodríguez Zapatero una reforma que -dijo- cuenta ya con un respaldo social mayoritario. «Hay una mayoría muy amplia favorable a erradicar la discriminación de las personas homosexuales. Todos los conocemos, son nuestros parientes, nuestros amigos... les imponemos obligaciones y les regateamos derechos. Tienen que dejar de ser ciudadanos de segunda y poder formar una familia en igualdad de condiciones», aseguró el presidente del Gobierno, invitado ayer del Foro 'ABC'-Grupo Vocento.
Zapatero recordó que la 'paternidad' de las parejas homosexuales es ya un hecho consolidado por la práctica en España desde que en 1987 se autorizara la adopción a título individual, y recalcó que todos los estudios conocidos - «uno encargado por el señor Alberto Ruiz Gallardón»- niegan que haya diferencias entre los niños de hogares convencionales y los criados en familias homosexuales. «Lo importante -continuó- es que crezcan en buenas familias». |
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