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El País afirma que el PSOE mantiene 9 puntos de ventaja sobre el PP y La Razón lo reduce a 5
per Jo Mateix	26 set 2004
Encuestas del Instituto OPINA (El País) y de CELESTE-TEL (La Razón)
domingo, 26 de septiembre 2004 EL PA�S AFIRMA QUE EL PSOE MANTIENE 9 PUNTOS DE VENTAJA SOBRE EL PP Y LA RAZÓN DICE QUE SÓLO HABR�A 5 ESCAÑOS DE DIFERENCIA SI LAS ELECCIONES SE HICIERAN HOY Hay un viejo y acertado aforismo según el cual "la vida es del color del cristal con que se mira". Pronto habrá que acuñar otro, una versión moderna y mediática del anterior, aseverando que "las encuestas son del tono político de la empresa periodítica que las encarga". Buena prueba de esto último es lo que aparece este domingo en los quioscos. El diario El País, cuya contribución al ascenso de Rodriguez Zapatero a La Moncloa nadie discute, afirma con titular en primera que el PSOE mantiene una ventaja de 9 puntos sobre el PP y que el 46% de los ciudadanos entrevistados por el Instituto Opina "declara directamente que votaría al PSOE si se celebrasen ahora unas elecciones generales, un porcentaje muy alto que contrasta con el 37% para el Partido Popular, que aparece estabilizado en ese nivel". El diario La Razón, cuyas afinidades populares están fuera de toda dura, titula en portada El PP se coloca a 5 escaños del PSOE seis meses después de las elecciones y añade: "El PSOE pierde más de medio millón de votos seis meses después de las elecciones del 14-M". Por su interés y sin entrar a valorar estás llamativas discrepancias, adjuntamos los artículos y enfoques de ambos periódicos. EL PA�S LOS SOCIALISTAS (46%) SUPERAN A LOS POPULARES (37%) EN INTENCIÓN DE VOTO TRAS CINCO MESES DE GOBIERNO EL PSOE MANTIENE LA VENTAJA SOBRE EL PP El PSOE aventajaría al Partido Popular en nueve puntos (46% frente al 37%) en intención directa de voto -la que manifiestan expresamente los encuestados- si hoy se celebrasen elecciones generales en España. Así se desprende de una encuesta de Opina para EL PA�S hecha los días 21 y 22 de este mes. Cinco meses después de las elecciones celebradas el 14 de marzo, la diferencia a favor del partido del Gobierno parece incrementarse. En aquella ocasión, el PSOE venció por un 42,64% de los votos, frente al 37,64% del PP. Además, la encuesta señala que Mariano Rajoy es considerado como el mejor líder del PP por un 42,2% de los ciudadanos y por un 51,7% de los votantes de su partido. Un 46% de los ciudadanos entrevistados declara directamente que votaría al PSOE si se celebrasen ahora unas elecciones generales, un porcentaje muy alto que contrasta con el 37% para el Partido Popular, que aparece estabilizado en ese nivel. Los autores de la encuesta destacan el alto porcentaje de ciudadanos que ha declarado abiertamente su voto, algo inusual en este tipo de sondeos y que parece indicar una fuerte implicación en el acontecer político. Además, un 63,8% de los entrevistados sigue pensando que España necesitaba un cambio de partido en el Gobierno y eso se corresponde con el 5,66 que le otorgan a los socialistas, a la hora de valorarlos (con puntuaciones entre 0 y 10), y el 4,65 para el PP, que no alcanza el aprobado. A la hora de calificar la actuación del Gobierno y la de los populares en la oposición, el Ejecutivo mantiene su ventaja, con un 5,39, mientras suspenden la actuación del PP, con un 4,15. Curiosamente, tanto Gobierno como oposición descienden en la estimación de los ciudadanos, ya que el primero conseguía en mayo pasado un 6,01 y el PP, un 4,42. La caída es más acentuada para la labor del Ejecutivo. Algo parecido sucede a la hora de valorar la situación política: en mayo se la calificaba con un 5,71 y en este momento, desciende hasta el 5,23. En el plano personal, el presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, sigue encabezando la lista, con una puntuación del 5,80, aunque en mayo pasado se acercaba al notable con un 6,49. Su oponente, Mariano Rajoy, se queda en el 4,72 y pierde el aprobado (5,19) que conseguía hace cuatro meses por parte de los ciudadanos. Resulta llamativa la valoración de los encuestados respecto a la situación económica española. Mientras en el mes de mayo la aprobaban con bastante holgura (6,15), en la actualidad se advierte un descenso en la valoración (5,74). Pero eso sólo ocurre respecto a la situación económica general, porque cuando se pregunta por la de cada uno de los encuestados la nota obtenida (5,72) mejora significativamente respecto a la que se obtenía hace cuatro meses, con un 5,39. La encuesta ha indagado sobre las mayores preocupaciones de la ciudadanía, es decir, sobre los problemas que considera más importantes. El empleo y su correlato, el paro, siguen encabezando esta lista con el 52,2%, lo que muestra una ligera caída respecto a mayo (54,3%). Se advierte, en cambio, un fuerte descenso en la preocupación por el terrorismo. Sigue siendo la segunda preocupación de los españoles pero en abril pasado se encaramaba al primer puesto (60,9%), sin duda por la proximidad de los atentados del 11 de marzo en Madrid, y descendía hasta el 45,8% en mayo, ya por debajo del paro. Ahora el terrorismo es visto como problema importante por un 35,6%, con lo que aventaja por sólo cinco puntos al tercer asunto entre las inquietudes ciudadanas: la inmigración, que es mencionada por un 30,7%. Parece destacable que hace cuatro meses la inmigración sólo la mencionaba un 15% de los entrevistados. La encuesta ha incluido específicamente entre los problemas que se planteaban a los entrevistados el terrorismo islamista, que se sitúa como cuarta preocupación con un 29,1% de respuestas. La situación económica se sitúa como quinto problema para el 20,1%, mientras que en mayo la mencionaba un 16%. Son los votantes de Izquierda Unida, con un 29%, los que muestran más preocupación en este terreno, en tanto que los del PSOE (19,9%) y los del Partido Popular (21,2%) se acercan mucho en su apreciación. LA RAZÓN LOS SOCIALISTAS PIERDEN M�S DE 500.000 VOTOS DESDE EL 14-M EL PP SE COLOCA a 5 ESCAÑOS DEL PSOE SEIS MESES DESPUÉS DE LAS ELECCIONES Tan sólo cinco diputados separarían al PP del PSOE si las elecciones generales se celebrasen en estos momentos. Según una encuesta realizada por Celeste-Tel para LA RAZÓN, de ser ahora llamados los electores españoles a las urnas, la formación que lidera Mariano Rajoy incrementaría su representación parlamentaria de 148 a 152 o 153 diputados, mientras que los socialistas perderían entre cinco o seis de los 164 parlamentarios que tienen. Aunque ambos partidos perderían votos, el Partido Popular, sin embargo, incrementaría su porcentaje de votantes de un 38,31 por ciento a un 39,28, debido a que la abstención haría perder a los de Zapatero más de 500.000 votos y a los populares poco más de 30.000. El PP acorta distancias. Si en las elecciones generales de marzo los socialistas ganaron con un 43,27 por ciento de los votos, que se tradujeron en 164 escaños frente a los 148 que le otorgaron al PP el 38,31 por ciento de los sufragios, tan sólo seis meses después los 16 diputados de diferencia que existen en este momento entre ambos partidos se han reducido a cinco. Según una encuesta realizada por Celeste-Tel para LA RAZÓN, si se convocasen elecciones en este momento, el partido que lidera Mariano Rajoy conseguiría entre 152 y 153 diputados, cuatro o cinco más de los que tiene en la actualidad, frente a los 158 o 159 del PSOE, que vería así mermada su representación en cinco o seis escaños. La causa de este ligero vuelco electoral sería el trasvase de diputados de una formación a otra, toda vez que el resto de partidos con representación en el Congreso de los Diputados conservarían el mismo número de escaños que tienen en la actualidad. La única excepción sería CiU, que podría incrementar su representación con un diputado más, merced a los 12.073 nuevos sufragios que conseguiría, «robando» al PSOE, en el peor de los casos, el sexto representante que perderían los de José Luis Rodríguez Zapatero. Los de Duran Lleida y ERC serían los únicos partidos que mejorarían sus resultados respecto a marzo, puesto que el partido que lidera José Luis Carod-Rovira conseguiría 3.648 votos más. Paradójicamente, el intercambio de diputados entre PP y PSOE no tiene su origen en el incremento de votos de uno y el descenso de otro –de hecho, el trasvase de sufragios entre ambos partidos es casi idéntico: del PP pasaría al PSOE 230.555 electores, mientras que 232.972 seguirían el camino contrario–, sino en la mayor pérdida de votos de los socialistas. Ambas formaciones, según la encuesta, tendrían menos votantes que en marzo. Pero mientras que los socialistas se dejarían en el camino 501.038 sufragios, los populares sólo perderían 30.591. Este bajón de votos de los dos grandes partidos hay que buscarlo en la abstención, que según el sondeo crecería en 725.000 electores con respecto a los comicios del 14 de marzo. Este factor castigaría mucho más al PSOE que al PP. Zapatero conservaría al 88 por ciento de los electores que le respaldaron en la consulta de marzo. Sin embargo, del 12 por ciento restante que no le apoyarían, un ocho por ciento se abstendrían, mientras que otros dos darían su apoyo al PP. El partido de Rajoy sale mejor parado en este aspecto, puesto que conservaría el 96 por ciento de los votantes de las últimas elecciones generales, perdería a otro dos por ciento en favor del PSOE y sólo un porcentaje similar que se abstendrían. A consecuencia de esta circunstancia, el porcentaje de votos de los populares pasaría del 38,31 por ciento al 39,28, mientras que los socialistas bajarían del 43,27 por ciento al 42,48. De este modo, el PP recortaría su distancia con el PSOE en 1,7 puntos, dejándola en poco más de tres.
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