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Petición a Michael Moore
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per Haroldo Romero Pérez, Trabajadores |
01 set 2004
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Petición a Michael Moore
Haroldo Romero Pérez, Trabajadores
http://www.antiterroristas.cu/index.php?tpl=noticia/anew¬iciaid=1699&
Estimado Michael:
Decidà escribirte, y hacerte una petición, cuando este 25 de agosto, la presidenta de la República de Panamá, Mireya Moscoso, en contubernio con el gobierno de EE.UU. y con la mafia cubanoamericana de Miami, violando la legislación panameña e instrumentos jurÃdicos internacionales, indultó a cuatro terroristas de origen cubano detenidos, enjuiciados y condenados en el Istmo por planificar un atentado contra el Presidente Fidel Castro en noviembre del 2000, el cual habrÃa ocasionado, además, la muerte de centenares de panameños.
El dÃa 26, tres de los terroristas fueron ruidosamente recibidos en Miami. La prensa no reportó todavÃa la llegada a esa ciudad del jefe del grupo, Luis Posada Carriles, responsable directo, entre otros desmanes, de la destrucción en pleno vuelo de un avión civil cubano frente a las costas de Barbados, en 1976, que causó la muerte de 73 personas inocentes, delito por el cual es todavÃa prófugo de la justicia venezolana.
Para él también, sin embargo, no habrá otro lugar más seguro. Por las calles de Miami se pasean libremente otros connotados terroristas de origen cubano, como Orlando Bosch Ã?vila, igualmente responsable directo, junto a Posada Carriles, del mencionado crimen de Barbados. Bosch fue perdonado de sus crÃmenes en 1990 por el entonces presidente George Bush (padre), aunque para ello el mandatario tuvo que desautorizar una orden expresa dictada el año anterior por el Fiscal General (adjunto) de EE.UU., en la que este ordenó expulsar del paÃs a Bosch, por considerarlo el más peligroso terrorista del continente.
El viejo Bush tomó esa decisión a solicitud de su hijo Jeb, el ahora gobernador de la Florida, quien buscaba a cambio de su gestión obtener el favor de los extremistas cubanoamericanos, en su aspiración a ser electo gobernador de ese estado, cargo que en alianza con estos elementos al fin conquistó y todavÃa disfruta. Es tradición de plena actualidad en la familia de los Bush proteger a esos terroristas porque la apoyan en sus pretensiones polÃticas.
De haber podido tener el privilegio de colaborar contigo en el guión de tu formidable testimonio Fahrenheit 9/11, donde tan estupendamente desenmascaras la ³guerra antiterrorista² de George W. Bush, me habrÃa atrevido a sugerirte que mencionaras también que en diciembre del 2001, y en los propios Estados Unidos, el gobierno de este otro hijo de Papá Bush logró imponer contra cinco hombres, dos de ellos ciudadanos estadounidenses, cuatro cadenas perpetuas y 75 años de prisión, expresamente ¡por luchar contra el terrorismo protegido por la Casa Blanca!
Seguramente, esa ausencia en el documental se debe a que desconocÃas de este insólito fraude judicial realizado en Miami. IncreÃblemente, en las sentencias de los estadounidenses la jueza consignó:
"Como condición adicional especial de la libertad supervisada, se le prohÃbe al acusado asociarse con o visitar lugares especÃficos donde se sabe que están o frecuentan individuos o grupos tales como terroristas..."
Sé que esta prohibición confunde, cuando ninguno de los acusados fue juzgado o sancionado por delito alguno relacionado con el terrorismo. El asunto es que se dictó para proteger a terroristas financiados y organizados durante años por agencias del gobierno norteamericano y cuyos planes criminales trataban de conocer los cinco hombres.
A René González Sehwerert y a Antonio Guerrero RodrÃguez (nacidos en Chicago y Miami, respectivamente, hijos de emigrados cubanos), la jueza les impuso la mencionada restricción porque al ser ciudadanos estadounidenses (además de cubanos), no pueden ser expulsados de EE.UU. el dÃa en que recuperen su libertad.
En cuanto a Fernando González Llort (que vale la pena apuntar monitoreaba al citado terrorista Bosch Ã?vila), Gerardo Hernández Nordelo, y Ramón Labañino Salazar, como sólo ostentan la ciudadanÃa cubana y puede expulsarlos, el Gobierno no necesita de la prohibición.
Porque debo informarte, Michael, que fue la FiscalÃa (es decir, el Gobierno), la que pidió a la jueza que expresamente prohibiera a tus compatriotas René y Antonio combatir el terrorismo en los mismos EE.UU. (te recuerdo que esto ocurrió ¡tres meses después del 11 de septiembre!); y que además el Gobierno no encarcela a esos terroristas, a pesar de que sabe dónde están, como admite la jueza.
Aunque es nuevo este método para proteger a los terroristas de origen cubano que operan contra nuestro paÃs desde el sur de la Florida, la práctica de otorgar impunidad a sus tropelÃas es muy vieja. En aras de la brevedad y por existir suficiente información pública, no te expondré antecedentes sobre este asunto, como tampoco, y por similares razones, sobre el cúmulo de sucesos inauditos ocurridos en el mencionado proceso judicial, ahora en fase de apelación ante la Corte del Onceno Circuito, en Atlanta, cuyos jueces con toda seguridad están sometidos a fuertes presiones para que avalen la injusticia.
No obstante, vale señalar que con esta inédita condena de antiterroristas que informaban a la Isla sobre planes criminales, el Gobierno de EE.UU. pretende consagrar ³legalmente² la impunidad para un terrorismo que no es sólo anticubano, sino también antinorteamericano. En este sentido debo decirte que, en su larga guerra contra Cuba, esos elementos han ejecutado también cientos de actos de terrorismo en tu propio paÃs, de los cuales 186 han afectado intereses norteamericanos y extranjeros, y causado la muerte de decenas de personas, incluyendo estadounidenses.
No es de sorprender de quienes aparecen involucrados en escándalos como el asesinato del presidente John F. Kennedy, en el Watergate, el Irán-contras, y en el fraude electoral que en la Florida otorgó la presidencia a W. Bush; de quienes, con el apoyo de que aún disfrutan en EE.UU., conducen al descrédito a las autoridades de otros paÃses, al convertirlas igualmente en cómplices y protectoras del terrorismo, como ahora sucede con Mireya Moscoso.
Mi petición, si lees este mensaje, es que anuncies haberlo leÃdo, lo cual serÃa de hecho una advertencia a quienes pretenden perpetuar el injusto encierro en EE.UU. de los cinco luchadores antiterroristas cubanos, sobre cuyo caso, extrañamente, no se pronuncia la gran prensa norteamericana. Aunque más allá de eso, los cubanos, que admiramos tu aguda denuncia plasmada en Fahrenheit 9/11, compartimos la aspiración expresada el dÃa de la presentación de tu documental en la televisión cubana por el Presidente de nuestro Parlamento, Ricardo Alarcón, de que este tema atraiga tu interés investigativo y crees con él otra obra demoledora contra la doblez, el crimen y la injusticia. |
This work is in the public domain |
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Re: Petición a Michael Moore
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per -------- |
01 set 2004
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stop brutality police!
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Al costat de totes les persones que es manifesten contra Bush a Nova York.
Amb tots i totes les persones que voldrien estar a les Manifestacions contra l'assassí Bush...Estem amb vosaltres !!! Endavant !!! |
